LOS HIJOS DEL OPUS: LA SOCIALIZACIÓN
DE LAS SEGUNDAS GENERACIONES DEL OPUS DEI
Autora: Esther Fernández Mostaza
Editorial: Mediterrania
INTRODUCCIÓN
El primer contacto que tuve con el Opus Dei fue de manera
indirecta, por vía académica. Fue durante el
último curso de mis estudios de licenciatura en Sociología
cuando, gracias a una beca del Institute for the Study of
Economic Culture, de la Universidad de Boston, participé
como ayudante de investigación en el estudio de Joan
Estruch sobre el Opus Dei [Joan Estruch. L'Opus
Dei i les seves paradoxes. Un estudi sociològic,
(Barcelona: Edicions 62, 1993)]. Durante más de
una año -desde abril de 1990 hasta el verano de 1991-
me dediqué a buscar, leer y analizar, no toda, pero
sí gran parte de la obra publicada hasta entonces sobre
el Opus Dei y su fundador. Muchas horas, por tanto, de lectura
y estudio que, en vez de hacer decaer mi interés por
el tema, me hizo entender la fascinación y el reto
que para un sociólogo representa esta organización.
Por eso, cuando comencé a cursar el doctorado, ya
sabía hacia donde apuntaba el tema de lo que habría
de ser mi tesis doctoral. Su concreción surgió
de un comentario hecho en el libro citado, L'Opus
Dei i les seves paradoxes, al final del capítulo
sobre la expansión del Opus Dei (en los años
cincuenta, cuando la Obra todavía era un Instituto
Secular): "[...] la admisión al Opus Dei de personas
casadas suscitará pronto un problema que hasta ahora
no se había planteado: la socialización de la
segunda generación, la educación de los hijos
de los miembros del Opus Dei". Efectivamente, es en la
década de los años cincuenta -más de
veinte años después de lo que se presenta como
fecha oficial de la fundación (2 de octubre de 1928)-,
cuando surge la posibilidad de incorporar al Opus Dei personas
casadas. Eso sí, siempre como miembros supernumerarios
quienes, a diferencia de los numerarios -solteros-, no ocupan
cargos de dirección; y es que hasta entonces el Opus
Dei sólo lo integraban personas célibes. Sin
embargo, con el transcurso de los años, cuantitativamente
serán cada vez más una minoría los miembros
solteros, numerarios (estado mayor), ante la creciente mayoría
de no-numerarios, casados (clase de tropa). De forma simultánea
a esta inversión numérica, es cuando empieza
a surgir el problema de la socialización de la segunda
generación.
Así, decidí que el tema central de mi estudio
giraría alrededor de la socialización de los
hijos de aquellos miembros del Opus Dei que se habían
afiliado adultos. Una generación -esta segunda- que,
a diferencia de sus padres, está formada, socializada,
dentro de la organización desde que nacen. De esta
manera, si durante los años iniciales del Opus Dei
los primeros miembros se dedicaban a aquello que siguiendo
el lenguaje católico tradicional se denomina "apostolado
de penetración", cuando el grupo incorpora personas
casadas que tienen hijos, empieza a plantearse la necesidad
de educar a los nuevos miembros, que ya no hay que buscar
necesariamente fuera de la organización.
La socialización de estos miembros nacidos dentro
de la organización es, desde la sociología,
un tema doblemente atractivo. Primero porque se trata, en
palabras de Berger i Luckmann, de la situación que
surge cuando se empieza a sospechar que "la memoria biográfica
de los primeros miembros ya no es suficiente" [Peter
L. Berger & Thomas Luckmann. La construcción social
de la realidad. (Barcelona: Herder, 1988), 93]. A partir
de ese momento es necesario transmitir una tradición.
Y, segundo, porque ilustra cómo el pasado puede ser
reinterpretado, adaptándolo a las circunstancias y
a los intereses del presente.
Este libro recoge, por tanto, el trabajo que presenté
y defendí para obtener el grado de doctora en Sociología.
Sin embargo, he querido que el lector no tuviera la sensación
de estar leyendo una tesis doctoral. Por eso he aligerado
el estilo y he reducido notablemente la parte dedicada a la
metodología utilizada.
Si este libro es deudor del trabajo que presenté como
tesis doctoral, su realización no hubiera sido posible
sin, por un lado, la ayuda económica que durante dos
años recibí de la Fundació Jaume Bofill,
y, por otro, el apoyo de mi director de tesis, Joan Estruch;
interlocutor siempre atento que, con su inestimable capacidad
comprensiva, me guió y acompañó en el
largo y solitario camino que toda investigación requiere.
1. Preguntas iniciales y creación del objeto del
estudio
Este trabajo comienza con una pregunta que de entrada puede
parecer banal: "¿De qué hablamos cuando
hablamos del Opus Dei?" Se trata, sin embargo, de
una pregunta obligada porque son muchos los estudios que,
sin dudarlo, sitúan al Opus Dei dentro de la categoría
de secta. Nuestro propósito se centra en este aspecto
en buscar las diferentes definiciones de secta (según
el origen etimológico, desde el lenguaje común,
desde la tradición cristiana, etc.) y comprobar si
son o no adecuadas para describir el Opus Dei. Desde la sociología,
resituaremos el concepto secta como elemento de una dicotomía
(siendo iglesia su contrario), categoría, por otro
lado, que en su tradición sociológica no lleva
incorporada ninguna intención condenatoria. Partiendo
de esta base nos percatamos de que una dicotomía como
la de secta-iglesia (estática por definición)
es de imposible aplicación a un movimiento de estructura
tan cambiante como el Opus Dei, a pesar de ser un movimiento
de creación relativamente reciente. Así, responder
a la pregunta de qué es el Opus Dei si no es una secta,
será el punto de partida de este trabajo.
Una segunda cuestión es: ¿A qué nos
referimos cuando hablamos de las segundas generaciones?
Su pertinencia es evidente, pues nuestro trabajo tiene a las
segundas generaciones como principales protagonistas. Pero,
para poder hablar de segundas generaciones, primero tenemos
que referirnos a la primera. ¿Quiénes son? Usando
la terminología religiosa, diríamos que son
aquellos individuos que, siendo adultos, han experimentado
un proceso de conversión. Pero nosotros, para restar
contenido religioso al concepto, utilizaremos la expresión
bergeriana de alternación que supone poder hablar
de la posibilidad de que todo individuo pueda alternar entre
sistemas de significación lógicamente contradictorios.
"Cada vez que se adopta uno, éste le proporciona
una interpretación de su existencia y de su mundo,
así como una explicación del sistema de significación
que previamente ha abandonado". [Peter L. Berger,
Invitación a la sociología. Una perspectiva
humanística. (Barcelona: Herder, 1986), 70]. Son
las situaciones donde el individuo siente que "cambia
de mundo".
Así, hablaremos de primera generación al referirnos
a los individuos que han experimentado un proceso de alternación.
En el caso de que estos individuos tengan hijos, éstos
serán socializados desde que nacen dentro de la estructura
de realidad adoptada por sus padres. Con el concepto
de segunda generación nos queremos referir precisamente
a aquellos individuos que asimilan desde su nacimiento una
estructura de realidad adoptada como si fuera la única
posible. Asimilación e interiorización que se
lleva a cabo mediante los procesos de socialización.
Finalmente, no podemos hablar de socialización sin
hacer referencia a sus agentes, entendiendo por agentes de
socialización al "actor o institución social
que con su acción contribuye a la transmisión
de los modelos sociales para conseguir que los individuos
a los que se dirige se integren en la sociedad a la que pertenecen".
[Diccionari de sociologia (Barcelona: Fundació Barcelona;
Termcat, Centre de terminologia, 1992), 18-19]. El agente
de socialización alrededor del cual gira esta investigación
es la familia, añadiéndose las relaciones que
la familia establece con los otros agentes socializadores,
entre los que destacamos: la escuela, la televisión
(como medio de comunicación más importante)
y el grupo de amigos.
En resumen, podemos decir que el objetivo de este trabajo
es estudiar los procesos de socialización de las
segundas generaciones dentro del Opus Dei, caracterizando
las relaciones que se establecen dentro de la familia, entendiendo
las funciones de la familia en el doble sentido de institución
y agente. Además, estableceremos las relaciones que
la familia -primer y principal agente socializador- establece
con otros agentes.
2. Estructura del estudio
En cuanto al esquema de estudio, la investigación
se estructura alrededor de las cuestiones presentadas anteriormente,
las cuales corresponden a las tres partes del trabajo. Para
responder a la pregunta de qué es el Opus Dei el lector
encontrará un recorrido terminológico, primero,
y sobre la dicotomía secta-iglesia desde la perspectiva
sociológica, después, que permitirá constatar
la no pertinencia del concepto aplicado a esta organización
(cap. I). Los capítulos segundo y tercero intentan
crear una definición del Opus Dei desde dos perspectivas
diferentes: centrándonos en el tipo de relaciones que
la organización establece con sus miembros (cap. II),
y respecto de la estructura caracterológica de las
personas que voluntariamente se afilian a este grupo (cap.
III).
La segunda parte está dedicada al tema central de
la investigación: la socialización de las segundas
generaciones. En primer lugar, presentamos una reflexión
sobre los protagonistas, los mecanismos y los estadios que
todo proceso socializador conlleva. De esta manera podemos
asociar al concepto segundas generaciones el proceso
socializador que tiene la familia como espacio más
importante (cap. IV). Por otro lado, no podemos hablar de
segundas generaciones sin antes haberlo hecho de la primera.
El proceso resocializador que toda alternación lleva
implícito será la llave para entender por qué
razón hablamos de los miembros casados del Opus Dei
como de la primera generación (cap. V).
La tercera parte del libro la forma el estudio del caso.
El objetivo es caracterizar un modelo opusiano de familia.
Presentamos primero una definición de matrimonio y
familia desde la perspectiva opusdeística (cap. VI)
para después centrarnos en lo que consideramos los
vértices de este modelo de familia que queremos caracterizar:
a) el sistema de relaciones dentro de la esfera familiar:
conyugales, por un lado, y entre padres e hijos, por el otro
(cap. VII); b) el ejercicio de roles dentro del ámbito
familiar y las diferencias que según los roles se establecen
respecto del uso del espacio y del valor del tiempo (cap.
VIII); y, c) las relaciones que la familia, primer y principal
agente socializador, establece con los otros agentes: medios
de comunicación, escuela y grupo de amigos (cap. IX).
Alguien podría objetar la dificultad de hacer un ejercicio
como éste sin pertenecer a la organización.
Sin embargo, nosotros creemos que es justamente el hecho de
no haber sido miembro lo que nos permite alcanzar la máxima
objetividad posible a la hora de realizar el estudio y análisis
posterior; eso sí, siendo conscientes de que nuestras
opciones ideológicas lucharán por interferir
en esta comprensión. Nos distanciamos así de
otros estudios sobre el Opus Dei realizados por gente de "fuera"
(tanto de aquellos que fueron miembros como de otros que nunca
lo han sido) quienes esconden ataques, a veces feroces, contra
la organización. Nuestro estudio huye de la ferocidad
y no ataca, sino que critica; es un estudio realizado desde
el convencimiento de que sólo la comprensión
con espíritu crítico nos permite apreciar todos
los elementos que confluyen en el hecho de pertenecer al Opus
Dei.
3. La metodología de la investigación
a) Las fuentes
Las fuentes principales de investigación de este trabajo
son: entrevistas y documentación escrita. En cuanto
a las entrevistas, éstas se han efectuado tanto a personas
casadas que han sido miembros de la organización, como
a aquellas que lo son en el momento de hacer la entrevista
(bien por afiliación o por nacimiento); además,
han sido también entrevistadas personas que, sin pertenecer
a la organización, participan o hacen participar a
sus hijos en algunas de las actividades que el Opus Dei ofrece:
escuelas, actividades en clubs juveniles, cursillos, viajes,
etc. Teniendo en consideración la importancia de las
entrevistas, esta investigación tiene como fuente esencial
la documentación escrita. De entre todo el material
publicado por el Opus Dei (es decir: por editoriales que publican
libros sobre el Opus Dei en tono de alabanza, donde escriben
autores que pertenecen a la organización, y dirigidas
a sus miembros), nuestra investigación se ha centrado
especialmente en los libros que forman la colección
"Hacer Familia".
["Hacer Familia" es una serie de volúmenes
que se venden en librerías del Opus Dei (es decir:
librerías donde se vende toda la literatura publicada
sobre el Opus Dei o de autores miembros de la Obra en estas
librerías también se venden los libros de texto
de los colegios del Opus Dei). Por un lado, los diferentes
volúmenes de la serie "Educar por edades"
se hacen servir como material didáctico en los clubs
del Opus; y las guías de trabajo de libros de otras
series, como el volumen titulado Las relaciones padres-colegio,
constituyen parte del material que se utiliza en los diferentes
cursos organizados por los colegios y dirigidos a los padres.
Añadir que, aunque no son frecuentes, en la mayoría
de los volúmenes encontramos alguna referencia a Camino
o a comentarios pronunciados por Escrivá de Balaguer.]
Las razones que hacen de esta colección una fuente
adecuada para nuestro estudio son, principalmente, dos: a)
el grupo al que va dirigida, y b) el objetivo que la inspira.
En uno de los catálogos de la editorial (Ediciones
Palabra) que publica la colección, ésta se anuncia
como un conjunto de libros dirigidos a padres y madres de
familia interesados en mejorar su tarea de educadores. Buena
muestra de este propósito de convertirse en una publicación
dirigida a la familia son algunos de los títulos que
la integran, como: Preparar a los hijos para la vida; Hacer
familia hoy; El desarrollo total del niño; Deporte
y familia, Familia y televisión, etc. No es menos
importante la función orientadora que inspira la colección,
pues la mayor parte de los libros incluyen "Guías
de trabajo" y "Planes de acción" con
la finalidad de que tanto los padres como los hijos pongan
en práctica algunas de las acciones descritas a lo
largo de los capítulos. Los libros también se
sirven de material en algunas de las actividades que la organización
ofrece a los padres (como por ejemplo las Escuelas-Familia
o los cursillos que los diferentes clubs organizan trimestralmente).
De hecho, las guías de lectura que acompañan
la mayoría de los volúmenes presentan dos opciones:
una para trabajo individual y otra para trabajo en grupo.
Por otro lado, de los libros orientados al grupo familiar,
encontramos dentro de la colección volúmenes
dirigidos a los padres en su calidad de cónyuges, como:
Matrimonio para un tiempo nuevo; Los novios; Los misterios
de la afectividad; Planificación familiar natural,
o La realización de los cónyuges. Estos
libros nos ayudarán a contrarrestar la hipótesis
según la cual el proceso socializador de las segundas
generaciones no actúa sólo de manera unívoca
(padres-hijos), sino que también lo hace como un proceso
en el que los padres, tras haber experimentado un proceso
resocializador, se transforman de agentes socializadores a
sujetos socializados. Se trata, en definitiva, de un material
que nos permitirá construir un modelo de familia útil
para llegar a comprender el tipo de relaciones que establecen
dentro del ámbito familiar los miembros casados que
pertenecen al Opus Dei, tanto en su papel de cónyuges
como en el de padres de familia. Este modelo pretende ser
una herramienta interpretativa, por tanto no lo calificaremos
en ningún momento como el modelo de familia opusiano,
sino que, haciendo servir el concepto weberiano de tipo ideal,
lo entenderemos como construcción teórica síntesis
de elementos particulares.
b) Las técnicas: el análisis del contenido
"Es necesario explicar qué se ha hecho, para
que otros puedan comprobarlo, revisarlo, criticarlo y complementarlo".
[C. Wright Mills, La imaginació sociològica
(Barcelona: Herder, 1987), 156].
En este estudio las técnicas de investigación
utilizadas han sido, por un lado, entrevistas en profundidad
y, por el otro, el análisis de contenido. Las entrevistas
han servido para orientar y corregir hipótesis e interpretaciones
de las fuentes escritas. Respecto al análisis de contenido,
hay que interpretarlo como un conjunto de instrumentos metodológicos
aplicados a discursos (contenidos y continentes) extremadamente
diversificados. El elemento común entre las múltiples
técnicas es una hermenéutica controlada, basada
en la deducción: la inferencia. Cuando analizamos mensajes,
añadimos a la lectura del profano una segunda lectura
con intención desenmascaradora; se trata de convertirse
en agente doble, detective, espía... Pero, además
de esta intención desenmascaradora, el análisis
de contenido nos tiene que permitir alargar el tiempo de latencia
entre las intuiciones o hipótesis de partida y las
interpretaciones definitivas; ejecuta perfectamente el papel
de "técnica de ruptura" ante la intuición
fácil y azarosa.
La técnica del análisis de contenido nos tiene
que permitir la elaboración del modelo de familia-tipo
opusiana. Tres son los elementos que guían este análisis:
a) El tipo de relaciones en el ámbito familiar; b)
El ejercicio de roles dentro de la estructura familiar, y
c) La relación entre la familia y otros agentes de
socialización.
En cuanto al primer tema, hemos querido reflejar una de las
paradojas del Opus Dei: la combinación de modernidad
y tradicionalismo, en este caso dentro de la esfera familiar.
En cuanto a la segunda categoría de análisis,
la intención ha sido mostrar que el ejercicio de diferentes
roles dentro la esfera familiar se encuentra claramente diferenciado
en función del sexo. Finalmente, el tercer eje vertebrador
que guía nuestro análisis tiene relación
con los agentes más importantes del proceso socializador:
la familia, televisión, escuela y grupo de amigos,
y las relaciones que se establecen entre ellos.
4. Observaciones finales.
Antes de concluir esta introducción, creemos necesario
realizar dos matices respecto al estudio de caso que configura
la tercera parte de este libro. El primer matiz está
relacionado con la formulación weberiana del tipo ideal;
el segundo, con el uso de textos escritos como base del análisis.
a) La formulación del tipo ideal.
Al caracterizar el modelo de familia atribuible al conjunto
de personas casadas que pertenecen al Opus Dei, es necesario
diferenciar entre conceptos descriptivos y tipos ideales.
Se trata de una distinción obligada, pues los conceptos
que utilizamos en las ciencias sociales no pueden proceder
directamente de la realidad sin intromisión de presupuestos
valorativos. De hecho, los mismos problemas que definen los
objetivos de intereses dependen, a su vez, de estos presupuestos.
Para interpretar y poder explicar una configuración
social, es necesario construir conceptos específicamente
diseñados con este fin y que, como en el caso de los
objetivos de nuestro análisis, sean reflejo de propiedades
esenciales de toda la realidad.
Los tipos descriptivos ejercen una función importante
y necesaria en muchas ramas de las ciencias sociales, pero
estos se limitan a describir los rasgos comunes de agrupaciones
de fenómenos; así, el resultado es la síntesis,
por abstracción, de aquello que es común
a diferentes fenómenos concretos. En sentido opuesto,
un tipo ideal puede incluir la acentuación unilateral
de uno o más puntos de vista, pero resulta imposible
encontrar empíricamente este cuadro de ideas del tipo
ideal, debido a su pureza conceptual. (De hecho, cualquier
concepto descriptivo puede transformarse en un tipo ideal
por medio de la abstracción y de la nueva combinación
de ciertos elementos).
Para Weber el tipo ideal es un cuadro mental [Max Weber,
Sobre una teoría de las ciencias sociales (Barcelona:
Península, 1971), 65] : No es la realidad histórica,
ni mucho menos, la realidad auténtica, como tampoco
es una especie de esquema en el que incluir la realidad como
ejemplar. Más bien tiene el significado de un concepto
límite puramente ideal, con el que medir la realidad
para esclarecer determinados elementos importantes del contenido
empírico con los que se compara. Estos conceptos son
formaciones dentro de los que construimos unas relaciones
utilizando categorías que el propio investigador juzgará
adecuadas para tal fin.
Así, al hablar de modelo de familia, deberíamos
tener presente que éste es un tipo ideal que construiremos
mediante la abstracción y la combinación de
un número definido de elementos que, aunque encontremos
en la realidad, pocas veces o casi nunca se presentarán
de esta forma específica. Este tipo ideal ("ideal"
es sentido normativo, no tiene que connotar superioridad o
que su realización es lo deseable) no será ni
una descripción de un aspecto concreto de la realidad
ni una hipótesis, pero nos ayudará tanto para
la descripción del fenómeno como para su comprensión.
b) La investigación sobre textos escritos.
Por haber construido el modelo de familia a partir de textos
escritos, en nuestro análisis y posterior construcción
de un modelo (ideal) de familia quedará reflejada una
imagen que no corresponderá al conjunto de miembros
de la Obra, sino a la imagen que de la familia tienen los
autores de aquellos libros. Aquel grupo de escritores participará
en la intención de crear o transmitir la ideología
del Opus Dei, lo que obligará a publicar unos escritos
unívocos, poco plurales, sin matices, en la búsqueda
de una coherencia que, por ser pretendida, será ficticia.
Además, si tenemos en cuenta el carácter prescriptivo
de muchos de los libros, parece lógico pensar que las
publicaciones son un reflejo no de lo que es, sino de lo que
la institución querría que fuera.
Por otro lado, y en relación con el hecho de que los
contenidos y las acciones se presentan de forma prescriptiva,
este hecho no nos tiene que llevar a afirmar que los lectores
asimilan y ponen en práctica de manera exacta las acciones
sobre las que los libros aleccionan. No nos cabe la menor
duda de que las formas de asimilar el modelo de familia reflejado
en estos volúmenes serán muy diferentes según
las distintas familias. Unos lo harán "al pie
de la letra", mientras que otros leerán alguno
de los volúmenes quizá por obligación,
o estableciendo una barrera entre lo que leen y lo que piensan
o hacen. Entre un extremo y otro encontraremos infinidad de
maneras de leer, creerse y poner en práctica lo que
en forma de planes de acción se presenta en cada libro.
Pero, insistimos, lo que nosotros presentamos es el modelo
ideal de familia (en su doble sentido de imaginario y perfecto)
que se desprende de los libros de la colección, no
una realidad a la que todos los miembros casados del Opus
Dei se adhieren.
Un ejemplo de lo que decimos, lo encontraríamos expresado
en las maneras bien distintas de dar respuesta a las guías
de trabajo que, ya sea como trabajo individual o en grupo,
aparecen al final de muchos de los libros que forman la colección.
[Curiosamente estas guías de trabajo sólo aparecen
en los libros publicados a partir de 1994 o en las últimas
ediciones de los libros publicados antes de ese año].
Estas guías son pautas de lectura, en el sentido de
que invitan al lector a realizar una segunda lectura bajo
el pretexto de responder a unas preguntas formuladas de manera
elemental y con una gran cantidad de respuestas posibles.
Es evidente que las diferentes maneras de participar en el
juego de responder a aquellas preguntas irán desde
el interés hasta la indiferencia; algunos se lo tomarán
muy en serio, siguiendo todos los puntos de cada una de las
cuestiones; otros, de manera rápida y poco consciente,
"por cumplir"; y quien, "obligado" a comprarse
el libro, leerá sólo las cinco o seis páginas
del apéndice donde, bajo el título de "orientaciones
pedagógicas", se ofrece un resumen en unos diez
puntos de los temas centrales del libro en cuestión.
De esta diversidad de hacer y de pensar, determinada por los
diferentes intereses que motivan a unas personas a actuar
de una manera determinada, nuestro estudio no informará.
Arriba
Anterior - Siguiente
Volver
a Libros silenciados
Ir a la página
principal
|