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Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

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CORRESPONDENCIA

 

15-3-2004

(Reanudamos la correspondencia donde nos quedamos: con los emails que llegaron la noche del 10 al 11 de marzo y siguientes hasta hoy día 15. No colocamos los que habéis enviado de apoyo y solidaridad con los orejas madrileños y españoles, porque son tantos que llenaríamos muchas páginas. Os damos las gracias de corazón.)


(De Palo) Nuestros hijos

Queridos amigos:

Después de días sin leeros (aquí me tenéis, haciendo horas extras para ponerme la día) veo una carta que, como madre, me ha tocado el corazón. Un padre (no recuerdo bien su nombre, pero creo que era mexicano) nos escribe preocupado porque ve un posible "acoso y pitaje" de su retoño). Algunos de los que estamos aquí hemos pasado por esta situación, yo ya os conté mi experiencia con el acoso a mi hijo (está en la correspondencia pero son se poner en enlace, torpe que es una). Como os dije en su momento tras presentarnos en el club acompaños de un agustino tutor en el colegio de mi hijo, y montar allí un número de cuidado, con amenazas por nuestra parte de denuncias ante el Defensor del Menor, nos han medio-dejado en paz. El club delegó en el compañero de mi hijo para hacer la labor, pero avisada la madre muy directamente de que no estábamos por la labor y de que estábamos dispuestos a "meterles un paquete que te cagas" creo que nos han dejado por imposibles (eso si, hemos sido "avisados" de que nos vamos a condenar, mira que bien, incluso se va a condenar el pobre agustino (y su prior sin enterarse, por Dios).

Resumiendo, que a veces mas vale ponerse una vez verde que diez colorado... si creemos que nuestros hijos deben comer verduras se las damos aunque no les gusten... si creemos que nuestros hijos no deben estar en una secta les hacemos frente aunque sea con una dosis de mala educación.

Un beso a todo y gracias por hacerme ver que, pese a las amenazas, a lo mejor no me condeno.

Os quiero.

Palo


(De Curiosa) Estoy buscando un libro

ZIGZAGXPETICION

Estoy interesada en leer el libro de Jesús Ynfante, "ASI EN EL CIELO COMO EN LA TIERRA", pero está fuera de orbita. ¿Podría alguien echarme una mano para conseguirlo?

Gracias,

Curiosa


(De 30marzo)

para Fede

Fede, la verdad es que aunque no estoy de acuerdo en algunos de tus razonamientos veo, sinceramente, que la formación que recibiste en tu tiempo dentro del Opus Dei no deja nada que desear... admiro la profundidad de tu pensamiento!

He visto que un tu "carta de dimisión" haces referencia a D J. B, sacerdote que, he de decirte, tengo el honor de conocer. Me encantaría que me contases cuáles fueron tus experiencias con él, cómo le conociste... aunq estoy seguro de que siempre te brindó su ayuda, me equivoco? A ver si me cuentas algo... es curiosidad para no llevarme a engaño.

30marzo


(De Cooper) Nos ven como grupo organizado

Observando los tics de los que suelen escribir en desacuerdo con las opiniones de estas páginas, se aprecia una tendencia a tratarnos como un grupo organizado, con fines comunes, además de perversas intenciones contra el Opus y la Iglesia.

Lo que más me choca de esto, es que nos vean como grupo, porque aparte de los Orejas que mantienen la página; no privandose de su derecho a opinar cuando les parece bien; el resto me imagino que somos gente aislada que ha encontrado una página donde le apetece decir “la suya”, cada uno por sus razones personales, que por cierto, no habrá consultado con nadie.

Mi caso puede ser paradigmático. Encontré esta página a través de Odan y después de mas de 30 años de lejanía de la Cosa y sus circunstancias, pero claro, como muy bien explica E.B.E , el haber sido de la Cosa imprime un cierto carácter y me tragué las páginas de cabo a rabo. Reí, lloré y me emocioné decenas de veces, pero no paré hasta que me lo leí todo. Vi que la historia se repetía, que cosas que yo había pensado a medias, aquí estaban claritas claritas, Que mi sospecha de que en la Cosa se usa el anzuelo de la “santidad en medio del mundo” para acercarte tempranamente a una “vocación” forzada y que una vez dentro todo se transforma en una anulación
de la persona que queda reducida a un ente anónimo totalmente disponible según los intereses de la organización, se repetían tanto, que no era solo mi caso, ni mi problema. Que la observación de hechos moralmente erróneos, que yo había presenciado, no eran casos aislados, sino que también pasaban en otros sitios y a otras personas. Que con la idea de que se perseguía el Bien, se mentía, se atropellaban personas, se, de alguna manera, forzaban cosas para mi intocables, como el sigilo sacramental, y mas sencillamente la confianza de las personas y su buena fe. Que mis sospechas de que el culto a la personalidad del Marques de Peralta, no era evangélico ni llevaba a nada bueno, se había convertido con el paso de los años en un autentico esperpento.

En fin. ¿Para qué seguir? Aun me quedan cosas dentro, que supongo que encontraran eco en experiencias de otros, como ha pasado con las que he mencionado y me harán pensar de nuevo, o me ayudarán a poner mis pensamientos en perspectiva.

Pero claro, cuando uno pasa de lo particular a la experiencia colectiva, se produce una transformación. Yo ya no estaba pensando en mi problema, me había dado cuenta de que había Problemas; así, con mayúsculas, y entonces me entraron ganas de ayudar.

De que la poca o mucha experiencia que uno pueda tener, sirviese para aliviar
las dudas que se tienen en el momento de irse. Momento especialmente duro como se puede ver cada día con los correos que llegan. Momento además que hay que lidiar solo, casi siempre, porque los que te deberían ayudar, tus directores, o tus compañeros, están todos en bloque haciendote las cosas más difíciles.

Pues sí. Es un momento torero. Ahí está uno solo, con su conciencia y en presencia de Dios tomando, contra todos los que le rodean, una decisión que le va a apartar de la vida, tal como la entendía hasta ese momento. Cualquier cosa que podamos hacer para dar confianza a los que pasan por ese momento tiene que ser buena. El explicarles que de condenación nada, o todo lo más, igual que para los que la profetizan. Que de infelicidad, o de sufrimiento el que toque, pero que esa decisión, no modifica sustancialmente las relaciones que uno tenga con Dios. Y que si me apurais Dios que nos ha puesto esa prueba va a estar encantado que la resolvamos en conciencia, pese a quien pese. Y que si nos equivocamos, pues como otras veces, a empezar de nuevo. Y que además el tiempo siempre pasa y que aquella decisión tan difícil, dejará de ser algo mas que una anécdota en la vida de uno.

Además, es la Cosa la causante de toda esa tensión, es su visión cicatera de la entrega (Ha de ser como yo lo digo) la que crea esos problemas, es su falta de visión cristiana la que hace las cosas difíciles. Es su abandono de los que se alejan de ella, la causa de malestar dentro y fuera. Y no voy a entrar en el detalle de las explicaciones para uso interno, sobre los motivos de los que se van, solo diré que en todos los casos que viví cuando estaba dentro se insinuaron cosas sobre los que se marchaban, que parecía que se había levantado la veda. Y eso empezando por los de arriba. Es también la Cosa la que ha creado malestar usando testamentos, incluso de gente que la ha dejado y ha muerto sin anularlos.

Mención especial, por la repugnancia que me produce, son las visitas de curas, ¡De dos en dos! que se han empleado en casos como los Maria Angustias o el que ha aparecido mencionado hace poco de Miguel Fisac, para, generalmente, producir daño o para ahondar en él. ¿Alguien tiene una explicación evangélica para esto? ¡Porque no se puede negar!

Pero es que sin llegar a estos extremos, la política de persecución profesional de la Cosa con los que se van, está bien acreditada. Como también, el aprovechar las desgracias que el destino reparte a todos, para relacionarlas gratuitamente con el “abandono” de la vocación. ¿Habrá alguien que la explique alguna vez? ¿Cómo algo de inspiración divina?

Volviendo al tema central. En el proceso de poner mi experiencia y mis pensamientos en la red, no influyó nadie. Puedo decir que además no conozco a nadie personalmente entre los Orejas, ni entre los que escriben. Los años pasan y hacen esas cosas. Lo hago porque quiero y me gustaría ayudar a alguien en un momento en que parece que todo se le viene encima.

Ahora bien, me encuentro con que contando mi experiencia y mis ideas en la red, ahora, según los de siempre, vuelvo a estar metido en un club de malvados. Lleno de rabia, rencor y odio. Con ganas de fastidiar y haciendo daño a la Iglesia. No quiero extenderme en lo improbable de una conspiración de este calibre, a este paso, pronto volveremos a la confabulación judeo-masónica-bolchevique, que empleaba Franco para explicar sus dificultades. Tampoco me extenderé sobre mi relación con la Iglesia, es la mía y ya no está abierta a inquisidores, ni a jueces aficionados. En cuanto al odio, rencor y rabia, paso también, en este caso dejo que mis palabras me juzguen. Además no estoy acostumbrado a escribir tanto rato en primera persona; aunque esta vez el tema lo mereciese; y me estoy cansando de hacerlo. Así que me podeis creer o no; desde luego quien traga sin pestañear el numerito de las parejas de curas, puede que trague cualquier cosa, pero una cosa quiero dejar clara.

Voy a estar aquí, voy a escribir lo que me parezca y paso de las interpretaciones de los sepulcros blanqueados que se escandalizan de las ventosidades del marques y no de algunas de las actividades de sus curas, a los que imagino teledirigidos, que se contaban en la misma página.

Con cariño.
Cooper


(De ÑamÑam) Para Yoha -benditos agregados-

Durante una buena parte de mis años en el Opus Dei fui subdirector de un centro de agregados. De hecho era yo el director, ya que el director “oficial” lo era a la vez de otro centro “múltiple” de San Miguel, de San Gabriel y de San Rafael (él era el director común, y los otros cargos eran distintos en cada consejo local). De hecho, lo que hacía el director oficial era “firmar” (es un decir) lo que el secretario y yo le presentábamos.

Mis recuerdos son agridulces:

- De las personas que eran agregados entonces guardo, sin excepción, un recuerdo excelente. Siempre me parecieron personas “de una pieza”, enteros, de fiar, nada caprichosos ni complicados, al menos comparados con los numerarios y san rafaeles-numeraritos.

La verdad es que creo que les atendí bastante bien, con no poco sacrificio, pero siempre lo hice muy a gusto. Y también es cierto que en general, me sentía correspondido y querido. Después de años fuera del Opus Dei les sigo recordando con cariño y con gusto volvería a verlos, cosa que no puedo decir de casi nigún numerario.

Siempre tuve muchísimo cuidado en que no sufrieran menoscabo respecto a los numerarios, ni en la celebración de las fiestas de casa, ni en sus cumpleaños, ni en la atención por parte de los sacerdotes. A este respecto tuve que atajar la manía de que a los agregados les atendieran sacerdotes de “segunda” (sacerdotes de la SSS+, con mucho ánimo y ganas, pero poco conocimiento de la Obra). Nunca tuve problemas con falta de tiempo para atenderles, pues siempre puse en primer lugar atenderlos a ellos. Alguna bronca me costó, eso sí... En muchas ocasiones reflexionaba yo en que eran mucho más ejemplares estos agregados que muchos de los “adscritos numerarios”. Y me parecía que eran realmente el Opus Dei que me había atraído.

- La parte dura de la labor con ellos fue que era dificilísimo que “cuajara” ninguna labor. Emprendimos innumerables montajes, nos rompimos la cabeza y no lográbamos nada. O sea, que ni pitaba prácticamente nadie, ni siquiera se conectaba casi nadie.

Ahí fue donde me empecé a dar cuenta del doble juego de los directores de Delegación, que no paraban de animarnos a emprender labores con audacia, nos aprobaban las ideas y luego nos las cercenaban, no nos enviaban curas, o –sin más explicaciones- nos cerraban la labor que habíamos montado durante duros meses. Aún recuerdo una actividad que montamos con gente del campo, que fue muy aplaudida por los de Delegación y puesta como ejemplo en cursos anuales y convivencias. De repente llegó una nota que decía sencillamente “Desmontad inmediatamente el----------------- y decid a los de casa que procuren obedecer con ejemplaridad y sin comentarios. Informad del cumplimiento de esta indicación a vuelta de correo”. (los que habéis estado en consejos locales de centros del Opus Dei podéis entender lo que esto supone, para uno mismo y para los agregados) Con el paso del tiempo me dí cuenta que eso pudo deberse a conflictos burocráticos internos: en la Delegación te animan, para engrosar su nómina de labores y sin tener en cuenta que a lo mejor, llevados de esa "codicia", estaban contraviniendo una indicación de la Comisión Regional. Cuando en Comisión se percatan, dan el palo, para que a su vez no les riñan a ellos desde Roma. En todo este proceso, lo que queda machacado son las personas que están en la base.

Y uno de mis recuerdos más dolorosos también se debe a esos años, aunque no precisamente a los agregados. Lo relato en “las inmoralidades del Opus Dei” de 28- XI - 2003

En resumen: mis mejores recuerdos del Opus Dei para los agregados.

Ñamñam


(De ÑamÑam) Opuslibros peligra

Parece cada vez más clara que hay una ofensiva de miembros, pseudo-exmiembros, simpatizantes y apologetas de la Opus, para boicotear esta página. Vuelvo a repetir (Orejas ¡oíiiddd!) que he pasado por dos foros de ex-miembros antes de este y veo que seguimos el mismo camino. Empiezan a ser frecuentes intervenciones laudatorias y exculpatorias hacia la Opus, a la vez que ponen más o menos mal a los que escribimos aquí con sangre, nuestra experiencia, no se paran a leernos ni mucho menos a dialogar, sino solo a acusarnos de odiadores y a amenazarnos con el infierno. A eso ya ha llegado Pablo, con cierta chulería también muy típica. Vendrán más y luego serán multitud.

Con permiso de los Orejas, me atrevo a iniciar una campaña de salvación de esta web. Escribamos a los simpáticos y laboriosos orejas para convencerles de que atajen esto. Y os pido, Orejas, que expreséis públicamente vuestra actitud respecto a este tema que está provocando mucha inquietud.

Ñamñam

(Cuando la web llevaba pocos meses funcionando, hicimos una pequeña encuesta preguntando qué hacíamos con los correos que llegaban apoyando al opus y nos dejaban por mentirosos y por cosas peores. Se decidió publicarlos y no censurarlos. Al ir creciendo la web y tener cada vez más visitas, es normal que también vayan entrando quienes "por casualidad y sin quererlo" se topan con opuslibros. A veces, esos correos han suscitado muy interesantes respuestas por parte de quienes escribís y todos nos hemos beneficiado de ellas. Y determinados correos, los que están cortados por el mismo patrón, esos que nos acusan de odio, rencor e ir contra la Iglesia, sirven de muestra para ver la cerrazón de quienes los escriben, y no le hacen ningún favor al opus, todo lo contrario. Pero si en algún momento viéramos que se trata de una invasión, de algo orquestado y planificado, no dudaríamos en no publicarlos.)


(De Fede) Tres comentarios breves y contradictorios a mensajes recientes (no consigo hacer una "síntesis superadora" de lo que respondo a Anti-crítico y a E.B.E.; otro día lo intentaré).

Antí-crítico (8.03.2004): me sumo a la oferta de Crítico constructivo (10.03.2004) en caso de que en algún momento quieras dialogar. Creo que tu carta es para agradecerla, en el mismo sentido en que lo son otras de alguien que acaba de hacer mutis por el foro. No digo que sea sencillo asimilar vuestras posiciones; de hecho, a veces provocan indigestión y reacciones eméticas en no pocos, y tienen cierto efecto revulsivo (pero positivo) incluso en quienes intentamos aprovechar lo que decís. Creo que todos podríamos salir ganando de esa relación, aunque a primera vista no lo parezca o muchos no lo vean (o lo vean y luego dejen de verlo). Ahora, si sólo gustas de hacer enroques (RAE: "En el juego del ajedrez, movimiento defensivo en que el rey y la torre del mismo bando cambian simultáneamente su posición"), vale que no te veamos más el pelo: sólo se puede enrocar una vez por partida y eso ya lo hiciste con José Carlos (que espero, pese a todo, que tampoco dé la partida por terminada). En serio, si alguna vez quieres escribir, aunque sea con otro nombre, por favor no dejes de hacerlo.

E.B.E. (10.03.2004): redonda tu explicación sobre el tema, tono e inexistente línea editorial de este sitio. Y los dos pasajes finales que resumirían el espíritu que mueve a esta web, chapó. Espero que esto ayude a más de uno a entender la elevada motivación ética que a algunos nos puede mover a escribir aquí, que es también cumplir ese mandato evangélico (Mt. 18, 15-17). Eso, por si quien se empeña en no escuchar ni pedir perdón aún no se ha enterado de que peca contra el Espíritu Santo (y si decir esto es no ser ecuánime y perder la "objetividad", pues entonces, esas tenemos). Muchísimas gracias también por "La formación de la identidad en el Opus Dei", porque es un escrito incisivo y perspicaz: entra hondo y permite ver qué hay detrás de muchas cosas que hemos vivido "voluntariamente".

Antrax (10.03.2004): gracias por ser tan claro y ponernos delante a todos, a quienes tienen ante sí un 19 de marzo asociado a "renovación" y a quienes sólo tenemos a San José (y a Pepes, Pepas, Joselitos y homónimos que felicitar), la imagen de "todos nosotros retornando de verdad al mundo con todas sus consecuencias". El "sé libre, carajo", ¡qué necesario incluso para quienes llevamos fuera ya algunos años pero aún seguimos con tantas mediaciones! (quien ha cambiado de ciudad o país lo tiene más fácil para "cortar"; otros, a diario nos cruzamos con las mismas personas que nos cruzábamos cuando éramos de la Obra, caminamos por las mismas calles que recorríamos entonces, seguimos recibiendo "regalos contra reembolso" de libros sobre labores apostólicas en las que participamos o insinuaciones bienintencionadas de proponer nuestra candidatura como cooperadores... ¡Hay que reconocer que así es más difícil espantar de una vez los "fantasmas de la vida pasada"!).

fede


(De Antrax)

«Lasciate ogne speranza, voi ch'intrate ».
Queste parole di colore oscuro
vid'io scritte al sommo d'una porta…


(Breve cita pedantesco-dantesca introductoria)

Sorprendente Señor Pablo:

Si no entiendo mal, le aliviaría que no creyesen en Dios las personas que escriben en estas páginas, puesto que de esa manera podrían irse al infierno sin que ello alterase en un adarme su paz espiritual de usted. Supongo que la idea puede resumirse en el popular y caritativo dicho aquel: “El que no crea en Dios que le den por…”

El planteamiento encaja perfectamente con el ideario opusiano, así que, estimado señor, permítame que le felicite. Va usted perfectamente encaminado (de “Camino”).

No obstante, y dado su perfecto dominio de la Infernología, creo que haría bien en aclarar en cuál de los círculos del averno nos corresponderá padecer eternamente a los que discrepamos de la impecable ejecutoria moral y espiritual del Opus Dei, más que nada por si en el momento de adentrarnos en la Estigia no encontramos por allí a Virgilio y la oscuridad del lugar nos impide consultar adecuadamente la Guía Michelin.

Debo añadir que la pesada cantinela recurrente del “odio”, tanto como la presuposición de intenciones (no me leerán) comienza a sonar a consigna.

Por último, ¿No le parece que eso de “je, je, hay Infierno” sí que suena bastante a venganza, odio o cosa similar? ¿O sólo es candor infantil de colegio de monjas?

Un atento saludo

Antrax


(De Fer)

Hola a todos.
Sólo quería hacer unos comentarios al correo de ayer de Pablo.

"Toda una vida odiando"
Si por algo entregamos toda nuestra vida en el Opus Dei fue, precisamente, por amor. Si algo nos caracterizaba a todos era la gran capacidad de amar para dar nuestra vida, negándonos a nosotros mismos.
- Poniendo el corazón como alfombra para que los demás pisaran blando.
- "Pon amor donde no hay amor y recibirás amor" (cfr. "Camino").
- "Corazones partidos yo no los quiero y si yo doy el mío lo doy entero".
- "Tengo el derecho de no tener ya nunca ningún derecho". (Muy fuerte).

Esa capacidad de amar no se pierde, créeme. Pero también tenemos que querernos nosotros. Decía Santa Teresa que "la caridad empieza por uno mismo", y antes están las personas individuales que una institución, los "veintiún gramos" de cada uno. (Por cierto, que si no habéis visto la peli, vedla).

"eso quiere decir que, o realmente no creéis en Dios (entonces me alivia y no me afecta tanto"
No debería aliviarte que no creyéramos en Dios. "De cien almas nos interesan las cien", y no lo digo en sentido proselitista, sino "animas Christi lucrifacere quaeramus", en "ganar almas para Cristo", misión cristiana.

Saludos

Fer


(De Máquina Reparadora) Moscas cojoneras

Pablo: Alfonso el Chilango ya te ha contestado y lo ha hecho con sumo respeto y dirigiéndose a ti como si fueras un ser racional capaz de entender lo que te dice de que "quien esté libre de culpa, que tire la primera piedra". Eso es algo que no suele entenderse bien antes de haber cumplido añitos batallando con el "cuerpo de muerte" y de asumir realmente el barro de que estamos hechos. Podría seguir contestándote en su misma y educada línea, pero no lo voy a hacer, porque me parece inútil y porque no me da la gana. "Yo fui, y salí": qué gusto entonces que captes las razones tan sobrenaturales que por aquí estilamos, porque así no necesitaremos expresiones alternativas más contundentes para entendernos.

Ahora, donde las dan, las toman. Con la misma falta de respeto con que te diriges a quienes te hemos leído, te pregunto yo a ti: ¿eres tonto o te lo haces? Tranqui, chico, no te esfuerces pensando, que es una pregunta retórica, porque salta a la vista que no das para más. Díselo a mamá, sí, que Máquina Reparadora te ha llamado tonto. Podría disculparte la edad, pero más te valdría ir ejercitándote desde ya en el difícil arte de la prudencia o acabarás como uno que tengo muy cerquita, que cada vez que abre la boca, mete la pata. Te aseguro que luego cuesta sacarla y no siempre se consigue. Es un consejo que, aunque ahora no lo valores, vale su peso en oro (aunque quizá sólo merezcas que te den dos duros... o un euro como el de Trillo, por listillo).

En las últimas semanas hemos tenido varias "visitas casuales" al sitio que se han saldado con gestos despreciativos, admoniciones y amenazas, tras presuponer odios, llenarse de pena por nosotros o hablarnos "en conciencia" (para salvar su propia alma; las nuestras, qué cristiano, las dan por perdidas). Pero, macho, entre todas las visitas casuales ("palabrita que no me han alentado a escribir en la charla-que-no-hago"), la tuya es un sinsentido sin pies ni cabeza. Pura fanfarronería exhibicionista (otras dudas que tengo: ¿cuántos puntos os dan por cartita al sitio? ¿Sirven para aprobar aunque no te sepas los mejores formatos para comprimir gráficos?). Igual que has dado a leer tu cartita a los coleguis, espero que les des a leer las respuestas.... A ver si entre todos conseguís entenderlas.

Me parece que eres tú quien no sólo no se atreve a leer ni mucho ni poco ni nada del sitio, sino quien no sabe de qué va esto (en capacidad de odiar, de insultar y de juzgar sin voluntad de comprender, sin embargo, eres alumno aventajado de tus maestros). No sabes ni quién es Dios, ni qué es el infierno, ni qué es el Opus Dei, ni qué es la conciencia, ni quiénes somos nosotros, ni quién eres tú. Pero, claro, tampoco te hace falta saber nada de esto, porque para ti el mundo se acaba en el Tajamar y, si no, en todo caso aquí decimos cosas y tratamos temas muy difíciles de entender para ti y para mocosos o advenedizos en general.

Habrá que resignarse: en cuanto uno empuja las puertas, sale a campo abierto y grita libertad a cielos, montes y montañas, aparecen las inespantables y nada gratas moscas cojoneras.

Máquina Reparadora


Queridos Lydia y E.B.E:

Escribes (8.3.04) refiriéndote al escrito de E.B.E "la formación de la identidad" que "solo no estoy de acuerdo en el final, no tenemos que volver a entrar para salir. Sí tenemos que ir (...) con la cabeza fría (...)". Como ninguno de los dos dais detalles de lo que estabais pensando cuando lo redactais, no se puede saber cual es la discrepancia. Me gustaría que explicaseis en qué consiste las dos operaciones: qué tipo de introspección, ejercicio, función teatral (sin ironía) o lo que fuera os referiais. Y si el ejercicio es puramente mental ¿cómo se puede hacer si los parámetros o referencias son los heredados?.

Un beso y un abrazo respectivamente

Salvador



E.B.E tiene la virtud de tratar perpendicularmente hechos neurálgicos. Lo que suscita permite repensar. Me sucedió anteriormente con el tema de la barca y ahora con la lectura de la web.

Cuando descubrí la web me sobresaltó su lema y una frase de su presentación, que más o menos, viene a decir que habrá web mientras haya Opus. Para mí eran los síntomas de entrar en contacto con una causa, una militancia belicosa (normalmente quien lleva como estandarte el nombre de Dios se bate en los campos de batalla). Y me incomodó que los promotores dijesen que era "sobre" cuando sus propias formulaciones eran "contra".

Por apresuramiento y por no haber superado los penosos déficits de educación emocional no fui capaz de "escuchar" realmente la intención y lo que había detrás. Había dectectado la rabia pero se me escapaba la intención y el foco emocional que la provocaba: el dolor. Hace algun un tiempo que lo había detectado. Esa intención profunda (de reconocimiento y de desvelamiento total de la Obra) y el posicionamiento desde el que se hace, el del dolor, es lo que nos recuerda y subraya E.B.E. Me gustaría que me disculpaseis aquellos que, por no haber comprendido yo esto en todo su alcance, mis intervenciones les hayan sonado extemporaneas y poco empáticas. En esencia me parece que he formulado bien lo que quería decir, solo lamento no haber comprendido suficientemente la posición de muchos destinatarios para haber dicho más y, por tanto, decirl de manera que hubiera sonado diferente.

Pero el que E.B.E haya formulado tan bien la intención positiva de los promotores de la web (intención última) me permite recordar un hecho que he experimentado y me parece, por otra parte irrebatible, y es que toda conducta, todo comportamiento, en algún nivel, tiene una intención positiva (o alguna vez la tuvo). Incluso los aparentemente negativos o negativos de hecho han sido calificados de apropiados por la persona/s que los realiza atendiendo al contexto, a su paradigma y a sus creencias.

Es más productivo tener en cuenta la intención de la persona/s antes que su comportamiento problemático o formulación. Esta es la cuestión de saber escuchar.

Es más productivo analizar, comprender ese contexto, ese paradigma y esas creencias que centrarse en los mecanismos del comportamiento o en sus resultados.

A mi me parece que la Obra, tal como ella misma dice, no tiene nada propio. No tiene capital teológico, ni filosófico, ni espiritual, ni político. La Obra es una modalización, un peculiar ensamblaje de valores, creencias, paradigmas y praxis ajenas. Y entre ellos aparecen evidentes el integrismo, el fundamentalismo y otros. Podría aportar páginas de Hanna Arendt hablando del totalitarismo y de los fascismos y de la vida del espíritu y E.B.E las firmaría pensando que describe la Obra. O páginas de Martin Buber sobre las concepciones antropológicas o literarias de Kafka y se firmarían pensando que hablan de la Obra. Lo cuestionable de la Obra no es ella misma si no esas zonas erroneas que hace suyas. Pero no se puede olvidar que incluso esas zonas erroneas profundas también eran respuestas con una intención positiva. Normalmente mis intervenciones partían de ese presupuesto.

Yo no estoy en esa causa, que popularmente podemos decir guerra, que tan bien ha descrito E.B.E en su correo. En ese sentido del "deber" de repetir y lograr un reconocimiento que es la finalidad del pasaje evangélico de Mt, 18, 15-17 que cita E.B.E. Sí cuestiono esas zonas erroneas, creencias, paradigmas más que la Obra en sí mismas. También porque existencialmente se me hace difícil, o no se cómo conjugar, el haber pertenecido o participar en algo y después rechazarlo de plano. De alguna manera es tirarse piedras contra el propio tejado. No defiendo "la integridad de mis creencias", porque mayoritariamente estas estan muy alejadas de las que sostiene la Obra, pero el impulso espiritual, que es la base misma de la Obra, yo lo comparto, no su contenido ni su plasmación claro, y por eso se me hace difícil conciliar según qué críticas y especialmente la manera de hacerlas. Soy consciente que mi posición es singular y que requeriría un mejor esclarecimiento, pero también es verdad que no dispongo de tiempo y tampoco, quizás, de motivación suficente.

Con este correo anuncio mi progresiva despedida de la página. Muy afectuosamente y con una solidaridad sentida, cordialmente

Salvador


(De Alfredo)

Querid@s tod@s:

Se nota en muchos mensajes que se apróxima el 19 de marzo. Yo tampoco quiero dejar pasar esta fecha tan importante para decenas de millares de fieles de la Prelatura, es decir la gran mayoría de los supernumerari@s, y muchos agregad@s y numerari@s jovenes.

Propongo, a quien quierra unirse a mi novena, pedir a Dios para que cada persona que va a renovar ese día lo haga realmente a conciencia, porque lo quiere y no por miedo o bajo presión cualquiera. De la misma manera, que cada persona que no va a renovar ese día lo haga también en conciencia, frente a Dios.

Profusión de besos y abrazos a tod@s y especialmente a los que están dudando de lo que van a hacer dentro de nueve días. Que sepan que aquí encontrarán ayuda para seguir adelante en su vida.

Alfredo


(De José Antonio) La mala memoria. Para Pablo.

Querido Pablo:

Yo creo en Dios.

Gracias por juzgarnos.

Es muy cristiano, como tú sabes.

¡Qué peso le has quitado a tu conciencia!.

Vamos a hacer un poco de memoria de libros sagrados... A ver cómo era aquello:

“ Juzga a tus hermanos, pero lávate bien las manos...”

No, no era asín, Pablo. Vamos a ver, si me acuerdo... A ver cómo era aquello:

“Júzgalos lo primero, pero que no se te vea el plumero...”

No, tampoco era asín. Me cachis en la mar. Vamos a ver si hago un esfuerzo mental, que estoy un poco torpe ésta tarde... A ver si me viene el pensamiento:

“ Júzgalos con esmero, pero sálvate tú el primero...”

Pues tampoco era asín. ¡Debe ser la vejez!, ¡la falta de riego!

Voy a tener que desistir. Esta tarde no estoy inspirado en materia judicial. Lo siento. Pero puedes buscarlo tú mismo, que en el Evangelio lo pone.

Sin embargo me acabo de acordar, y esto sí que es textual total, palabrita de Dios, que en algún sitio de las Sagradas Escrituras se dice lo siguiente:

“Ganarás el pan con el sudor del de enfrente”.

¿O no era asín?

Definitivamente ésta tarde no me asiste la memoria.

Voy a releerme el correo que ayer escribió E.B.E., a ver si entre los cadáveres empiezo a recordar cosas.

José Antonio.


(De Rubén) Ayuda

¡Hola!

Yo estoy metido en un colegio de la obra tengo 15 años y, aparte de querer consejos de como evitar que ''te coman el tarro'' querria que me ayudaseis en un tema:

Yo entre por que quise en Altair un centro educativo de la obra pero sin saber exactamente como era aquello, bien, mis padres al yo decirle que queria entrar en el centro se pusieron contentos, ya que ellos piensan (cosa que estoy en desacuerdo por parte) de que alli me hare un hombre de provecho, que sacare los estudios, que llegare a trabajar seguro... y en eso le veo sentido por que es un centro educativo un poco mas duro que los demas pero... ¿¿¿todos los que trabajan estuvieron estudiando en un centro del opus???
Eso es lo que le digo a mis padres y se enfadan.

Otras cosas que no me gustan del centro es el ambiente todos somos varones no hay sexo femenino (solo en Formacion Profesional pero yo haré bachiller) hay clases por las tardes cosa que no te sienta nada bien despues de comer... y no estoy a gusto alli y me quiero quitar por que me esperan 2 años de lo mismo en bachiller, pero mis padres tienen eso metido en la cabeza no me quieren quitar, pero tambien fue decision mia entrar y la de quitarme tambien deberia ser mia ¿no? bueno aver si me podeis dar consejos para ''comerles a ellos el coco'' ya que estuvisteis en la fundacion

un saludo

Rubén


(De JP de Argentina)

Para Carmen Charo (15/02/04): gracias por el cariño que ponés en tu respuesta a mi mail del 14/02/04 ("¿Dónde estuvimos..."). (Como ves, yo no soy tan expresivo, pero vale también.........).

Para R (26/02/04): el dolor que sentís ahora, pasará, como en el fondo sabés. La felicidad profunda al sentirte libre y responsable de tu vida, no pasará jamás. Porque los hombre somos felices cuando se respeta nuestra naturaleza, nuestra esencia. Cuando vivimos usando nuestra inteligencia, nuestro corazón y nuestra libertad. Aún en medio de angustias, sufrimientos, errores personales......... Parece una contradicción, pero no: es una paradoja más que nos depara la vida.

Gustavo (26/02/04): yo también estuve en ese mismo centro de estudios. Me pasé horas y horas limpiándolo para hacerlo habitable cuando terminaron de construirlo. Para mi también fue la colimba (la mili, para los españoles).

Salutti a tutti

JP de Argentina



NOTA: cuando el oreja que está de guardia contesta a alguno de los correos, su comentario va en cursiva y es la opinión personal del oreja que contesta. Lo hace expresando su opinión como uno más de los que escribís, no como línea editorial de la web. Sus opiniones son igual de personales -y criticables y respetables- como las opiniones que se vierten en los correos que se reciben.


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