Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

La prodigiosa aventura del Opus Dei. Génesis y desarrollo de la Santa Mafia
Santa Mafia
Autor: Jesús Ynfante
Índice
Presentación
I. EL FUNDADOR DEL OPUS DEI
II. LAS BASES DE RECLUTAMIENTO
III. EL OPUS DEI Y LA IGLESIA CATÓLICA
Notas sobre "Camino", el manual del perfecto clerical-autoritario
FIN DEL LIBRO
 
NUESTRA WEB:
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados

Documentos internos del Opus Dei

Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links

LA PRODIGIOSA AVENTURA EL OPUS DEI.
GÉNESIS Y DESARROLLO DE LA SANTA MAFIA

Jesús Ynfante

CAPÍTULO III
3. Las relaciones con el Vaticano

"Para mí, después de la Trinidad Santísima y de nuestra Madre la Virgen, en la jerarquía del amor, viene el Papa", reconoció en la entrevista a "Le Figaro" el fundador del Opus Dei. En la persona del Papa, no se olvide, siguen concentrados todos los poderes.

Las relaciones que Escrivá afirma haber mantenido con los papas no han sido, sin embargo, muy cordiales. La muerte de Pío XII significó un golpe duro para la Obra de Dios, que encontró en su sucesor, Juan XXIII, una cierta desconfianza. El actual pontífice, en cambio, ha reconocido explícitamente la presencia de tan pujante organización católica aunque su situación jurídica siga siendo extraordinariamente inestable. Según fuentes dignas de crédito, el Opus Dei ha conseguido "de hecho" una libertad de movimiento como no ha poseído hasta ahora ninguna otra organización dentro de la Iglesia y, según estas mismas informaciones, una décima parte del personal de la curia romana puede decirse que sigue hoy las directivas del Opus Dei.

El propio Escrivá pudo aprovechar la ocasión que le deparó la visita de Pablo VI a un centro para obreros regentado por el Opus Dei en los arrabales de Roma para señalar la postura que observa la Obra de Dios dentro de la Iglesia: "El Opus Dei quiere servir a la Iglesia como la Iglesia quiere ser servida."

A mediados de mayo de 1962, Hildebrando Antoniutti dejó de ser nuncio apostólico en España. Antoniutti, que fue enviado a España en tiempos de la guerra civil, ha sido el jerarca de la Iglesia más "comprensivo" que pudieron tener el Opus Dei y la dictadura de Franco. Sus lazos con el Opus Dei fueron tan estrechos que no se puede olvidar a este prelado si se quiere analizar la influencia del Opus Dei en la curia vaticana. El hoy cardenal Antoniutti es prefecto de la Sagrada Congregación de Religiosos e Institutos seculares.

Otros cardenales de la Iglesia que apoyan decididamente al Opus Dei son Kónig, Pizzardo, Marella y Rugambwa. Entre los españoles se señalan Quiroga Palacios y Arriba y Castro. Otros jerarcas como Morcillo, arzobispo de Madrid Cantero, arzobispo de Zaragoza, Marcelo González, arzobispo de Barcelona; López Ortiz, obispo de Tuy; Muñoyerro, obispo de Sión y vicario general castrense Narciso Jubany, obispo de Gerona, han mostrado su simpatía activa por la Obra de Dios. Miembros del Opus Dei como Ignacio Orbegozo o Sánchez-Moreno son hoy obispo de Yauyos y obispo de Chiclayos respectivamente. Guruceaga, otro miembro del Opus Dei, que recibió la ordenación sacerdotal en Madrid el 4 de agosto de 1960, siendo además alumno de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Navarra, ha sido nombrado en 1967 obispo titular de Villa Regio y auxiliar de Ciudad Bolívar, en Venezuela. Pero señalemos que el Opus Dei no ha logrado todavía para sus miembros ninguna birreta cardenalicia.

4. El Opus Dei y la jerarquía católica española
5. El estatuto jurídico del Opus Dei: los textos pontificios
6. La fictio juris

 

Arriba

Anterior - Siguiente

Volver a Libros Silenciados

Ir a la página pincipal

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?