CORRESPONDENCIA
Del 29 de septiembre al 3 de octubre de
2003
3-10-2003
Queridos Orejas:
Cuando hablamos de la Obra, ¿no creéis mejor,
que lo que se debe de hacer es buscar la verdad del asunto,
y no tanto ir en contra o a favor?. Pienso que es una tarea
complicada, y nos encontraremos cosas muy buenas, que no hay
que desvirtuar, y cosas muy malas que hay que combatir con
toda energía. Yo soy de la Obra y busco la verdad,
y vosotros no sois de la Obra y creo que buscáis también
la verdad, y estoy seguro, que no lo hacéis de manera
equivocada, os lo aseguro. Como podéis ver, ni me escandalizo,
ni me rasgo las vestiduras de los comentarios de esta WEB,
porque son verdad. Aunque algunos no lo fueran, por mi experiencia,
he podido comprobar y he cohabitado (vivir junto) con testimonios
muy similares, uno de ellos es el de mi mujer. La solución
a los problemas es muy difícil, ya que en la Obra,
los numerarios y agregados sobretodo están muy ciegos
o obcecados, y les planteas cosas, que existe esta WEB, que
hay problemas de falsas vocaciones, que hay dolor de hermanos
que están dentro y FUERA, y se escandalizan y ponen
el grito en el cielo, y se dan "una dosis extra de flagelación,
por tu alma corrupta" (esto es broma, supongo). Cuando
uno se le cae el velo, fuere por lo que fuere, vienen los
"¡madres mías!". No hay más
ciego que el que no quiere ver, ni más sordo que el
que no quiere oir, y eso pasa con la mayoría de numerarios
y agregados "felices". Hay otro pequeño número
de numerarios y agregados "felices", que ven estas
cosas y se ven atados, se callan, o lo hablan muy discretamente,
o les planteas cosas "raras" y te responden la postura
oficial con la "boca pequeña", diciéndose
a sí mismos, "eso es lo que tengo que decir".
Otros viven "felices" porque no entienden nada y
obedecen y no se preguntan nada. Hay otro número de
numerarios y agregados "infelices", que ven estas
cosas y se ven atados, no se callan, y "saltan"
a la calle. Hay numerarios y agregados, que les falta el aire,
necesitan más, y también "saltan",
"en mejor plan", por lo general.
En definitiva, sabores, olores y colores para todos los gustos.
¿Qué pasa aquí?. En cambio, los supernumerarios,
por suerte estamos en la calle, tenemos contacto con la realidad,
aquella llamada "es lo que hay", tenemos otros intereses
aparte de la Obra (nuestro trabajo que no es corporativo,
nuestros esposas e hijos, amistades de todo tipo, relaciones
sociales, pagos,.) y sólo nos "pasamos" una
vez o dos veces por semana por el centro y ya está.
Se nos "pega" poco la presión numeril. En
general pensamos por nuestra cuenta... En mi caso concreto,
separo mi vida espiritual del resto (sin ser incoherentes),
yo sólo cuento mi vida espiritual, mis problemas no
espirituales me los resuelvo yo. En mi cama sólo estamos
mi mujer y yo, y ahí tomamos un montón de decisiones
importantes... Y si tengo una amistad personal con el director,
pues le cuento cosas más personales, de amigo a amigo.
Y por ahora, no me han fallado en confidencia, ni yo tampoco,
ya que la confianza y sinceridad debe ser mutua. ¡Vamos!,
cuando le cuento cosas a un amigo, éste se debe de
mojar también. Los directores que son amigos también,
en mi caso, suelen ser personas de mentalidad abierta, de
los de la boca pequeña. Creo que muchos supernumerarios
vivimos el espíritu de la Obra tal como lo vivo yo.
O yo lo vivo tal como ellos. No sé, tenemos dinero
en el bolsillo (gracias a Dios) y no tenemos que dar cuentas,
podemos ir a todos los sitios sin hacer cosas raras (cines,
bares...), tenemos esposas, podemos hacer todo lo que nos
plazca con sentido común y sin dar explicaciones a
nadie (yo sólo a mi mujer). En definitiva gozamos de
más libertad y poder de decisión. Y si un numerario
o numeraria se quiere meter en mi cama (en sentido figurado),
le pego un tiro, además, no cabe ahí, ya que
es biplaza. Sólo mi mujer y yo. Anécdota: Invité
un numerario a comer a mi casa, y me criticó que tenía
los cuadros torcidos porque estaban clavados con un solo clavo,
y que no veía ni patos, ni burros... menudas chorradas...
qué profundo. Enseguida le dije que cada uno, tiene
la casa como quiere o puede. Lo tuve que llevar a la bañera
de mi hijo a enseñarle los patos.
Creo que tenéis que poner de forma visible en la web,
como lo de "gracias a Dios que nos fuimos".
"Hay que saber decir que no", "No caigas en
el primer error, el primer silencio"; son dos máximas
para poner en grande, con esto se puede evitar muchos males.
Jaime
Vaya revuelo que se ha montado en la página!!!. Yo
creo que todo se ha sacado de madre. Esta página es
lo que nosotros queramos que sea. Cada vez es más popular
y cada vez más gente del Opus o pro-Opus viene a ella.
Yo creo que no es malo contrastar todo tipo de opiniones:
INCLUIDAS LAS DE OREJAS por supuesto.
Quien está dispuesto a cortar orejas?... Orejas? O
son más bien lenguas? Lo que se quiere cortar?. Creo
que la lengua ya nos la comió una vez el gato
Opusmiau para que ahora nos mutilemos en la web por
una tontería.
En todo el tiempo que vengo siguiendo la web y leo
todos los días la correspondencia en sustitución
a la lectura espiritual- nunca he visto una salida de madre
de ningún oreja.
Creo que la labor de los orejas es necesaria para el buen
funcionamiento de la página por su papel de moderador
y de comentarista. Suscribo totalmente la opinión de
Fulcro.
No olvidemos que los orejas nos brindan a todos la oportunidad
de hablar y de expresarnos sin tener en cuenta el contenido
de nuestra opinión- ¿por qué deberíamos
nosotros censurarlos a ellos?.
Oreja habla ,expresa, di, cuenta, bromea, comenta pues antes
que nuestra esta página fue tuya. Si nosotros podemos
hablar es gracias a tu valentía por ese empuje y NO
TEMER A DECIR TU OPINIÓN aunque no guste... Y
si no gusta ¿qué importa? Y si gusta ¿qué
pasa? Nada.
Además, suscribo con ese amigo que dice por
un perro que maté mataperros me llamaron
Los orejas son personas como nosotros y pueden opinar y algunos
estaremos en contra y otros a favor. Pero no se nos debe olvidar
que son personas valientes y generosas. Valientes porque se
atrevieron a romper el silencio creando la web y generosas
porque ofrecen su tiempo y su oro para que la web funcione.
Mi abrazo y afecto a todos vosotros, orejas.
SAM
Un beso a todos y todo mi afecto y agradecimiento. Y al oreja
que haya escrito eso: animo!!! que no es para tanto y NO TE
CALLES POR QUE HAYA CHOCADO LO QUE DICES. NADIE TIENE DERECHO
A DECIRTE QUE TE CALLES.
(Amiga, ¡que va a parecer que nos hemos escrito
nosotros este correo!. Que conste que nos da pudor colocar
mensajes donde nos dicen lo bien que lo hacemos pero, en vista
de que aquí no censuramos ningún correo, lo
colocamos. Seguro que lo ha enviado desde un cyber un oreja
que acaba de salir diciendo que iba a por tabaco)
Queridos Orejas:
Yo soy una visitante asídua, de hecho, diaria, a esta
web, pero en 6 meses solo os mandé un correo. El hecho
es que yo tampoco tengo mucho que decir al respecto de la
obra, porque yo solo pasé por un colegio y universidad
pertenecientes a esta "santa organización"
sin mayores consecuencias. Sin embargo, en mi familia hay
diversos contactos con el opus: un tío mío es
sacerdote de la obra, y mi madre simpatiza bastante. Debido
a ello tuve que asistir al dichoso colegio ese, el cual resultó
ser una timada, total y absoluta. Mi expediente fué
brillante, terminé el C.O.U. con sobresalientes...
pero qué pasó cuando me presenté a la
selectividad....??? efectivamente, me caí con todo
el equipo, y había estudiado como una energúmena...
pero me enfrenté a preguntas de las que no había
oído hablar en mi vida, y gente que asistió
a humildes institutos públicos, no tuvo ningún
problema. Y mi familia dejándose la piel para pagar
una educación que le habían vendido como la
mejor, personalizada, humana, etc etc.. y una mierda!!
Después vino la Universidad made in Opus, que yo creía
iba a ser distinto... pero oh sorpresa! Más de lo mismo....
Desde luego no era lo mismo que el colegio, donde va a parar...
pero pagar lo que se paga por algunas clases impartidas por
auténticos vejestorios, dinosaurios pertenecientes
a la "institución", es un crimen.
Y ahora me centro en el verdadero motivo que me ha llevado
a escribiros de nuevo: me niego a quedarme impávida
ante las acusaciones al Oreja, y sus sucesivas respuestas
teniendo que justificarse. Entiendo que esta es una página
en la que la libre expresión es una de las características
más importantes no? Pues bien, por eso mismo, lo que
no entiendo es a que viene el rasgarse las vestiduras a propósito
de las replicas del Oreja... las formas? Por qué? yo
no veo malas formas. En las respuestas a Jose Carlos y a Antonio
hubo comentarios irónicos, si.... Y qué? Por
una contestación que no gusta ni a los susodichos,
ni al resto del personal el orejas tiene que disculparse?
No me convence... es lo que digo, libertad de expresión,
si quiere utilizar ironías que las utilice! que analice
y conteste a los mensajes como le venga en gana! Que a fin
de cuentas es uno de los que está haciendo posible
esta web, en la que tanta gente se desahoga, y estoy segura,
está ayudando a muchos, y que tiene la paciencia de
sentarse, leer, contestar y colgar los correos para que nosotros
los leamos! Que escriba sin restricciones, con espontaneidad...
y si a alguien no le gusta pues que le conteste como crea
oportuno, que para eso está la web, para hablar, intercambiar
opiniones, vivencias, etc.... De verdad que me daría
mucha pena dejar de leerle "en su salsa".
Ánimo Orejas! Y que os vaya bonito!
Sara
Me gustaría que la oreja de guardia
se llamara Paco o Pepe o Carmen o algo así y quiza
me resultaría menos impersonal escribir este correo.
Me ha sorprendido muy gratamente encontra esta página,
aunque he de decir que tecleé Opus dei para saber si
ayer era o no el 75 aniversario de la fundación o no.
Pero sólo para dar la respuesta correcta a mi madre
en caso de pregunta.
Hace ahora algo más de un año que dejé
la Obra y todavía hoy me parece que ni siquiera está
bien que escriba esto. Pero en fin... El caso es que me fui
y me alegro mucho porque me he sentido más libre en
este año que en los 27 de mi vida.
No creas que llevo 27 años en la obra, aunque se podrí
decir que sí porque desde que tengo uso de razón
el opus dei está dando vueltas alrededor de mi vida.
Mis padres son supernumerarios y prefiero no imaginar el disgusto
de mi madre si alguna vez se enterara de que escribo esto.
No quisiera extenderme mucho, solo daros las gracias por
la página y por la posibilidad de leer las experiencias
de tantas personas con las que inevitablemente te sientes
identificada y a las que comprendes. Yo sigo pensando que
los que llegamos al opus dei lo hicimos buscando aquellos
ideales maravillosos que nos contaban, pero luego la realidad
es bastante diferente, sobre todo cuando empiezan a contarte
poco o poco las cosas. Desde que descubrí la página
ayer tengo que decir que estoy enganchada, y también
sorprendida. No dejo de alegrarme de haberme empeñado
en ser supernumeraria y no numeraria o agregada como ellas
veían tan claro. Pero lo que más me asusta es
la cantidad de cosas sobre numerarios y agregados que he sabido
con toda claridad leyendo los testimonios. Nada me coge de
sorpresa porque muchas cosas las intuía, pero casi
nunca pregunté porque nadie estaba dispuesto a contestarme.
Lo que más me preocupa de todo ésto es que
todavía tengo tres hermanas en la obra. Nosotros somos
8 hermanos y de los 5 que pitamos 2 estamos fuera. Sobre todo
una de mis hermanas está mal y casualmente es la que
no ocupa ningún cargo directivo, yo la veo mal pero
ya sabéis lo dificil que es sacar el tema, sin que
te acusen de resentida y de querer llevar a los demás
por el mismo camino equivocado que tu llevas. La verdad es
que ha cambiado mucho desde que pitó y lo hizo mucho
antes que yo creo que tendría 16 años. No se
qué hacer, supongo que tendré que seguir esperando
a que sea capaz de salir ella sola. Te preguntarás
porque no me preocupan las otras dos y te diré que
las veo bien, como siempre, siguen siendo en esencia las mismas.
Sin embargo la que me preocupa a cambiado de carácter
y no es ni mucho menos la hermana guasona y alegre que yo
conocí.
No quiero alargarme demasiado. Cuando consiga ordenar mi
cabeza y asimilar toda la información que me va llegando
ahora prometo volver a escribir y contar mi historia enterita
de cabo a rabo.
Si se os ocurre qué podría hacer con mi hermana
os agradecería que me escribiérais, yo mientras
intentaré manejar la culpa que me acosa cuando pienso
en que quizá yo no soy nadie para meterme en la vida
de mi hermana.
Gracias por escucharme.
María
Mi experiencia personal
Hola Orejas,
Encuentro que este site es extraordinario. Se os podrá
criticar tu posicionamiento en torno a la Obra, pero los testimonios
de Carmen Tapia o Moncada no los puede negar nadie. Además
se puede estar más o menos de acuerdo con la Obra,
se pueden tener amigos dentro de ella y respetarlos hasta
el punto de no atacar la Institución, pero lo que no
me como ni en broma es el tema de la santidad de Escrivá.
Que este site demuestre que su proceso de beatificación
no fue del todo transparente no es criticar a la Iglesia,
es criticar al Opus Dei. A fin de cuentas, si la Obra no tiene
nada que esconder acerca de la santificación no entiendo
como se pusieron tantos clavos a las ruedas que giraban en
otra dirección. Recuerdo un detalle que me sorprendió
cuando me hablaron en un círculo sobre la incorrupción
de Escrivá. Como era de esperar nadie vio el cadáver
salvo los del Opus y pocos más, el argumento era que
no era una pieza de museo que todos pudieran ver.
En resumidas cuentas este site enseña aquello que
otros tratan de esconder. El principal enemigo de la Obra
está dentro, Son ellos mismos. La falta de espíritu
autocrítico les impide evolucionar. Se han quedado
en la España de los años 60 y 70 con sus pros
y sus contras. Que la Obra tiene cosas buenas nadie lo duda,
porque dentro hay personas buenas, pero no implica a que los
errores deban perdonarse o minimizarse. Quizás estamos
haciéndoles un favor al mostrarles sus miserias si
tuvieran ganas de rectificar.
Sobre mi experiencia personal, os diré que conocía
la Obra mucho antes de pedir la admisión. Practicaba
las reglas de piedad, hacía apostolado y los defendía
con uñas y dientes. Quizás no me admitieron
porque a mi eso de ser numerario no me iba y fui directo a
decirles que mi vocación era casarme, tener niños
y, en definitiva ser supernumerario. Tampoco les debió
gustar que no destacaba especialmente en los estudios o que
no tuviera el pedigrí necesario. No lo sé, pero
ahora ya no me importa. Sólo sé que el funcionamiento
muy interno de la Obra no lo llegué a conocer y ahora
he podido descubrir con las lecturas de Tapia muchas cosas.
Sólo sé que el no ser admitido en aquel momento
me hizo daño. Afortunadamente no he necesitado de asistencia
psicológica para superarlo. He visto como fruto de
mi apostolado había empujado a otras personas a la
Obra y sin embargo a mi no me hacían el más
mínimo caso. Eso sí, el dinero que les deba
era muy bien recibido. En definitiva, me utilizaron en cuanto
les resultaba útil.
Conseguí superar el estado recobrando la autoestima
que anulas en beneficio de la Obra. La autoestima que "Camino"
intenta anular por completo. No entro en detalles porque ahora
estoy en el trabajo y debería estar "santificándome".
Dice José Carlos
que la Obra es buena y Escrivá es santo porque la Iglesia
lo dice, Pues bien, gracias a la Obra y a algunas decisiones
vaticanas cada día estoy más lejos de la Santa
Casa de Pedro. Quizás con el tiempo la Obra y la Iglesia
estarán tan peligrosamente unidas que llegarán
a confundirse, pero lo que me ha enseñado mi formación
y mi experiencia personal es que para estar con Dios no hacen
falta intermediarios y menos de la calaña de la Obra.
Crocus
"sobre forma y fondo"
Queridos Orejas:
Dos cosas por delante, visto lo que se ha liado al respecto:
1. Mi mensaje no pretendía
en absoluto disuadir a nadie de que dejase los comentarios
editoriales, aunque alguno lo haya interpretado en esa línea.
El comentario a José Carlos,
en privado, a través de vosotros, de que "Sé
positivamente que los orejas se están planteando dejar
de hacer comentarios, etc.", transcribía literalmente
una respuesta vuestra a mi mensaje dirigido en su día
a Ramiro E. Nada más. Me parece muy bien que hagáis
comentarios y, efectivamente, creo que es cuestión
de cuidar la forma en las respuestas y no, básicamente,
de fondo.
2. Aunque en el caso de los comentarios editoriales el asunto
sea de forma, creo que Manuel F.
se está pasando tanto en la forma como en el fondo
con sus referencias personales a José
Carlos y a su mujer. No sé si decir que es
de mala educación o de mal gusto, porque va más
allá de la simple falta de tacto y no tiene nada de
chistoso. En ese aspecto, si los Orejas son moderadores del
sitio, no veo cómo se compagina su declarada buena
voluntad de evitar ellos descalificaciones o comentarios inapropiados
con dar cabida a la ordinariez vertida en las alusiones de
Manuel F. a la mujer de José
Carlos. No tengo palabras para expresar mi repulsa ante lo
ocurrido.
En otras circunstancias, sabéis que os he dado la
opción, a vuestra entera discreción, de escribir
directamente a la persona afectada (sin publicar nada en la
web) o de que, dentro de vuestra exclusiva facultad de publicar
o no lo que os parezca, se publicase mi mensaje en la web.
En este caso, porque me parece que la nota de atención
a Manuel F. puede hacerse extensiva
a alguna otra persona que "apunta maneras", os rogaría
que publicáseis mi mensaje.
Si queréis que cambie o matice algo, me lo decís,
pues no es para nada mi intención generar malestar,
sino todo lo contrario, y me temo que, si las personas -digamos-
"más sensibles" nos abstenemos en esta cuestión,
el tono podría degenerar hasta hacer que algunos dejen
de pasarse por aquí, lo que lamentaría profundamente.
Por lo demás, y como siempre, muchísimas gracias
por vuestra labor al sacar adelante este sitio.
Un fuerte abrazo,
fede
(Amigo, M.F. ha escrito más
abajo de este correo contestando sobre lo mismo que tú
censuras de su correo. Sinceramente, no creemos que sea para
tanto porque el que se obstina en escribir y nombrar una y
otra vez a su mujer es el propio José Carlos. Sería
mejor -creemos- que la mujer de José Carlos hablara
por sí misma si quiere hacerlo y no se viera aludida
una y otra vez por su marido (¿qué ha hecho
ella para merecer eso?). Este oreja también le ha contestado
al respecto al nuevo correo de
José Carlos en donde también vuelve a hablar
una y otra vez de su mujer. Si de verdad existe la mujer de
José Carlos, que escriba ella o que le diga a su marido
que la deje tranquila, que ya dirá ella lo que tenga
que decir, aunque sea mandarnos a paseo.)
Sugerencias sobre los mensajes
¡Menuda se ha montado a partir del correo de José
Carlos! Si se me permite la opinión, yo veo
muy legítimo -y a veces necesario- que el Oreja de
guardia comente algunos correos. Al fin y al cabo, bastante
hacéis con dedicarle tiempo a la web y permitirnos
publicar nuestros comentarios con tan alto grado de pluralismo
y sin censurarlos. Aprovecho la ocasión para daros
las gracias porque esto es un lujo.
Lo que creo es que los mensajes que enviamos los navegantes
deben ser muy respetuosos con las personas (no con las ideas).
Las personas me merecen todo el respeto del mundo aunque piensen
de forma diferente a mí; las ideas no, y por eso considero
legítimo rebatirlas.
Dentro del respeto a las personas considero que no caben
las siguientes actitudes que a veces se ven en algunos mensajes:
- Dudar de la veracidad de lo que otros dicen: si mi experiencia
no es igual a la que tú cuentas será porque
tú mientes.
- Dudar de la buena fe del que escribe: como no piensas igual
que yo debes ser un infiltrado.
- Ridiculizar la postura o experiencia vital del que escribe:
todo lo que se ha comentado sobre la esposa de José
Carlos me parece lamentable por su tono peyorativo e irrespetuoso.
Y no me sirve decir que es broma, porque hay cosas sobre las
que no se debe bromear. Que un comentario sea gracioso no
significa que sea correcto ni justo.
- Aconsejar en tono frívolo lo que uno debe hacer
de su vida: pide la admisión como supernumerario o
cosas así.
En fin, son algunas ideas que sugiero se tengan en cuenta.
De esa forma el debate será mucho más rico y
agradable. Y nadie tiene por qué sentirse molesto por
el hecho de que uno tenga una experiencia distinta a la suya
o piense de manera diversa.
Un saludo a todos,
Ramiro E.
(Amigo, si nos encorsetamos, ésto va a parecer
una tertulia con el prelado. De acuerdo en que cuidemos las
formas o lo intentemos, pero lo mismo que nos dan caña
a los orejas de este lado de la pantalla, alguno que otro
también se la puede llevar no ya por el oreja de turno
-que no creo porque está haciendo un cursillo de buenas
maneras- sino por el resto de quienes leen y opinan. Y detalle
importante: la inmensa mayoría que escribe en esta
web y los orejas que la creamos no guardamos buen recuerdo
del Opus, de ahí que cuando nos dicen o nos quieren
hacer creer que el Opus es otra cosa muy diferente y nada
que ver a la que hemos vivido, -con las secuelas, desgarros,
cicatrices que cada uno lleva-, no es fácil ser tan
condescendientes como tú pides.)
Idas y vueltas
Amigos:
Veo que las sensibilidades están un poco despiertas.
Me parece prudente no caerle a nadie con malas manera, pero,
sinceramente, hasta ahora no he leído que ningún
Oreja conteste de modo intempestivo, por lo menos de acuerdo
a los usos de mi tierra.
Como ya se ha dicho somos todos mayorcitos, y, con toda franqueza,
me alegro que a José Carlos
todo le vaya tan lindo, pero a mí la experiencia de
la Obra no me fue de ninguna utilidad, en rigor me fue perjudicial
en grado sumo. El hecho de que cada uno de nosotros, los ex,
trate de encontrar aspectos positivos, o aún los encuentre
legítimamente, en su vida en la Obra, me parece algo
lógico y de supervivencia elemental.
Nuestra vida en el Opus Dei estuvo marcada por la convicción
y la entrega a una institución que resultó ser
negativa para nosotros, en el mismo sentido en que podría
haber sido negativa para cualquier otra persona, pues lo que
aquí se ventila no son experiencias vitales individuales
difíciles, que todo ser humano tiene, sino las consecuencias
y características de una institución, aprobada
por la Iglesia católica, pero que actúa contra
la dignidad de las personas, los mandamientos de la Ley de
Dios, y los preceptos evangélicos, lo cual acentúa,
a mi entender, la envergadura del problema. Con todo, me parece
muy reduccionista plantear estas cuestiones en términos
de Bien- Mal.
El buen Santo Tomás enseña que nuestras elecciones
son realizadas bajo la especie de lo bueno, y que es la falla
del entendimiento o la falta de rectitud de la voluntad las
que nos conducen a obrar contra la verdad y el bien, por lo
cual aún lo erróneo es realizado bajo la razón
de bien, lo que viene a querer decir que ser malo, malo absolutamente,
es sustantivamente raro, pero no lo es, la confusión
entre lo bueno y lo malo, o la utilización de medio
malos, so capa de fines buenos.
Decir que el Opus Dei es intrínsecamente malo sería
una afirmación burda, pues en el orden de lo humano
nos encontramos con una tarea más compleja que la de
andar detectando "males absolutos", a saber: la
de discernir en nuestra vida, en este mundo, con nuestras
determinaciones y nuestra historia, qué cosas o situaciones
nos llevan a lo bueno y lo verdadero, y cuáles no.
Las notas esenciales de la institución Opus Dei conllevan
el debilitamiento, la manipulación y aún la
negación de esta capacidad y obligación humana
del discernimiento en libertad, con las consecuencias ya sabidas.
Yo no niego en sí que existan personas que puedan
haber obtenido vivencias positivas del Opus Dei, en principio
todos habremos experimentado alguna circunstancia de este
estilo en nuestra vida allí, pero el asunto es si el
Opus Dei en términos estructurales, de modo regular,
en su dimensión identitaria, aporta a lo que es bueno
y verdadero en las personas o no, pues en eso consiste integralmente
la santidad: en llevar a la perfección la naturaleza
que Dios nos ha donado en la creación. Mi evaluación
de esta institución, que veo ampliamente confirmada
y expuesta con claridad por muchos aquí, indica que
el Opus Dei no aporta, estructuralmente, integralmente, al
bien de las personas, más bien las perjudica.
En estos días, en los que la Obra cumple 75 años
de existencia, entiendo que mucha agua ha pasado bajo el puente
en la historia de la Iglesia, y que veremos de qué
va la cosa para el Opus Dei en el futuro, lo cual no nos libra
de tomar nuestra palabra ahora "que estamos vivos",
como dice la Sagrada Escritura.
Lo que se viene exponiendo en esta WEB, lo que podemos contar
muchos desde nuestra experiencia permanece y nos plantea una
opción, que quizás en otro momento, cuando no
había un vehículo de expresión como éste
no teníamos: poder hablar sobre el Opus Dei, cuando
la tónica siempre fue el silencio, poder cuestionar
al Opus Dei desde su identidad, cuando hasta ahora la interdicción
caía sobre la los ex (sin mediar ninguna autocrítica
por parte de la institución), poder informar, compartir,
acompañar; y para los que permanecemos en el seno de
la Iglesia Católica, poder señalar que el Opus
Dei contradice aspectos sustanciales de nuestra fe, asunto
que ya he argumentado, pero que jamás me cansaré
de repetir, por amor a la misma Iglesia, y con esperanza en
la Verdad.
Reitero: nos encontramos hoy con opciones que no habíamos
tenido antes de este modo, y cualquiera que haya salido del
Opus Dei en estos años, lo sabe; por lo cual, para
José Luis, o para quién sea: que por lo menos
a mí, y veo que a unos cuantos, no nos vengan a contar
un cuento de hadas acerca de la Obra, pues allí no
hay hadas, y este tema no es meramente personal, tiene consecuencias
más amplias, desgraciadamente.
Si San Josemaría es o no "San", es asunto
de todos los católicos, pero fundamentalmente de quienes
han llevado el proceso de canonización adelante, que
responderán, como cualquiera, ante Dios. Para algunos
de nosotros esta circunstancia será dolorosa, pero
la verdad, más allá del Opus Dei, e inclusive,
más allá de nosotros, es indestructible. Eso
sí, El que nos ha hecho cuenta con nosotros, y nadie
puede negar la responsabilidad de cada uno respecto de sus
experiencias y sus decisiones, a lo sumo puede eludirlas,
pero eso no afecta el núcleo de los problemas. Es bueno
recordar lo que dice el Salmo: Initium sapientiae timor Domini:
inicio de la sabiduría es el temor del Señor...
Les dejo un abrazo, y la invitación, para los que
quieran, a rezar por la Iglesia y por el Santo Padre, en estos
momentos tan particulares.
Flavia
Gracias a Dios que los Orejas han recapacitado y van a seguir
con sus comentarios!. La WEB no sería la misma sin
ellos.
Quiero hacer un sincero homenaje a todos los Orejas: al sensato"
y que también " es buena persona" y al "resentido"
o "el de la mala leche" (según Antonio
y sus amigos). Sean como sean, son como nosotros: personas
de carne y hueso, apasionados por lo que hacen y dispuestos
a dedicar mucho tiempo para mantener esto que nos permite
a todos comunicarnos, opinar, disentir, acalorarnos, emocionarnos,
reencontrarnos con otros y con nosotros mismos y vaya uno
a saber cuántas cosas más.
Hay que estar un día y otro al pie del cañón!!!!
Chapeaux.
Un gran saludo para todos
Lux
Sigan adelante y contesten siempre, que hacen muy bien!!!
Queridos orejas: que se ofenda quien quiera, pero LA VERDAD
NO OFENDE. Hoy 2 de octubre se me ocurre una reflexión.
La Obra será fantástica, pero a mi me arruinó
la vida. Me lastimó psicológicamente y lo que
es peor, arruinó mi relación con Dios. No sé
cómo empezar de nuevo...
Si algunos le deben algo, que le agradezcan. Yo creo que a
mi más bien me deben muchas cosas; me conformaría
con una disculpa.
Felicitaciones para todos los Orejas. No saben cómo
me gustaría ayudarles si estuviera más cerca.
Vivo cruzando el charco.
Un abrazo
L.G.
para Ramiro
Leo, y releo lo que he escrito a
Jose Carlos y, la verdad,
no veo por ningún lado que personalice y vaya a por
él. Quizás te falte un pelín de buen
humor; pienso que él -J.C. o Fulcro-
sabrá ver ese guiño desenfadado y pícaro
(pues su escrito está muy trabajado y se le ve un tipo
listo). Pero que muy listo.
La coña que hago con su mujer es poque él lo
escribe sin rubor ninguno (lo "de preguntárselo
a ella", Ramiro, hijo mío, no deja de ser chocante-);
aunque ya sabemos de otros de la web lo que pesan sus mujeres
y, por lo que cuentan, hay de todo. Y nos parece muy bien.
¡¡¡Vivan las gordas!!!, ¡¡¡Vivan
las flacas!!!, ¡¡¡Vivan las que hay que
preguntar!!! (por cierto, que escriba: la necesitamos)
La otra alusión personal que puedo hacer es a lo que
Jose Carlos dice de que
no es del Opus Dei -lo escribe él- y yo aclaro, sin
personalizar, porque es verdad, que cuando un numerario con
añitos abandona el corral tarda bastantes años
en poder volver a pitar. A mi me dijeron que a los 60, y tengo
45 tacos. Y hago una chanza, broma o gracieta -que no todos
tienen que entender, ni aceptar- con lo de la nueva subdirección...
¡pero, Ramiro!: ¡¡¡Que no pasa nadaaaaaaa,
colegui!!!. ¡¡¡ BUEN ROLLITO!!!
M.F.
Queridos todos:
¡Bueno, la que se ha armado! Qué pena, yo que
creía que había logrado mi primer objetivo de
silenciar a los Orejas por siempre jamás, he visto
que mi triunfo sólo ha durado un día. No, ahora
en serio, que vaya por delante mi más tajante afirmación
que siempre todo lo que escribo me sale del alma, lo he hecho
por mi mismísima cuenta, y aquí no hay "infiltraciones"
ni nada por el estilo - a mí eso no me va.
He de decir que después del editorial del Orejas de
guardia sobre mi testimonio me sentí, además
de herido y desengañado del sitio, muy tentado por
salir al ruedo enseguida (porque como dice Manuel
F. soy un "Mihura"), pero preferí
esperar un poco a ver qué más decía la
peña y no ponerme a escribir cuando todavía
estaba caliente (consejo muy sabio de mi mujer en lo que a
usar el email se refiere). Y creo que me ha servido, porque
he podido entablar contacto con algunos que respetan a los
demás (aunque no estén de acuerdo en todo),
que te tratan con dignidad, que no juzgan sin conocimiento
de causa, que ven que la experiencia de cada uno es única
e insustituíble, y que no te descalifican por sistema
para mantener una "ortodoxia" o un punto de vista
sesgado.
Al Orejas de turno de aquel día (¡espero que
no me toque el mismo!), te diré lo siguiente:
1. Sí me hirió que te burlases (como hacen
otros) de mi profunda convicción de que la estupenda
mujer que ahora tengo me la mandó la providencia. Se
lo agradezco a Dios todos los días, y no sé
por qué ha de ser motivo de chistes baratos.
2. Tú no sabes, porque no estabas ahí, si me
sentí libre a los quince años o no; si lo hablé
con mis padres o no; si entendí que la incorporación
a la Obra era paulatina o no; si supe, cada vez que renové,
que podía no hacerlo; y si entendí lo que significaba
hacer la fidelidad.
3. No sé por qué implicas que "yo fui tonto
y me fui", descontando con un insulto y pasando por alto
que alguien pueda irse aún queriendo a la Obra, sin
ser tonto.
4. Nunca dije, en mi texto, que me dabais pena vosotros, en
plan condescendiente; está bien claro en lo que escribí
que me daba pena el dolor, la amargura, el sufrimiento, etc.
5. Y realmente me desengañó la "expulsión"
de vuestro sitio ("esta web no es para ti"), que
dejó bien claro que si no acatas la postura oficial,
tu experiencia no vale. Parece ser que otros no están
de acuerdo contigo.
Agradezco de todo corazón
las respuestas de Fede,
Ramiro, e incluso la de Manuel
F. porque creo que lo dice con cariño: mi mujer
y yo nos reímos a carcajada limpia con lo de llamar
a Telefónica preguntando por "la mujer de José
Carlos" o buscarla en Google (como también lo
hicimos con el anecdotón del que va a un curso de retiro
por primera vez). "Pelín fantasma"... no
eres el primero en decírmelo.
A Fulcro: no me pongas en una
dicotomía falsa, creo que hay más opciones que
la a) y b) que comentas. Podría ser c) alguien que
está sinceramente agradecido a lo que la Obra le ha
enseñado (vale ya de forjas), que recuerda muchos buenos
momentos, que cree haber pasado muchos años en el Opus
Dei -lo mejor de mi juventud- llevado por el deseo de servir
a Dios y hacer el bien por los demás... pero llega
un momento en que hay cosas que no encajan con las circunstancias
que uno vive, y después de reflexionarlo todo muy bien,
en la presencia de Dios, siente la libertad preciosa que siempre
ha tenido; y siendo consciente de ella (pues Dios la defiende
celosamente), ve que puede seguir otro camino porque Dios
que trasciende nuestras estructuras humanas ofrece por ahí
otra oportunidad de santificarse. De "pecador",
"penitente", "renegado" "miserable"...
ni Dios ni ellos me lo han hecho sentir.
A Jorge, que cree que soy "infeliz"
o "dependiente" o necesito ayuda psicológica:
tengo un buen trabajo, que me gusta; me acabo de comprar casa;
tengo una mujer sensacional y una familia que me quiere; muchos
amigos, dentro y fuera de la Obra; intento vivir una vida
cristiana... ¿dónde está la infelicidad?
Oye, y que conste que a mi mujer no le gusta cocinar (es profesional
como yo), pero sí comer, así que el que cocina
y plancha es yo, y además me encanta hacerlo, entre
otras cosas porque echo de menos una buena tortilla de patata,
y servir a las personas que quiero para mí es fuente
de alegría, y eso también lo aprendí
en la Obra.
Qué queréis que os diga: resulta que sigo viviendo
aspectos del espíritu del Opus Dei, que en realidad
es una forma de poner en práctica la ascética
cristiana: que rece, que frecuente los sacramentos, que trate
de santificar mi trabajo, que me esfuerce por ser alegre y
servir a los que me rodean, que piense en acercar a mis amigos
a Dios intentando ser Cristo para ellos, que quiera vivir
el don de sí de que habla el Papa, empezando con mi
mujer... pues sí, lo aprendí dentro, y lo agradezco
horrores. Y fue siendo numerario, estudiando y preparando
charlas y oyendo a lo que decían otros, donde se me
expusieron una serie de conceptos y virtudes que me han servido
mucho en mi vida matrimonial.
A los Orejas, haced lo que os parezca con vuestro sitio,
y perdonad que haya pretendido que se me pusiera entre "Tus
Escritos": es verdad que lo podía haber sugerido
de otra forma, y a fin de cuentas el sitio es vuestro. Pero
atentos: nadie quiere ser carne de cañón, y
si haber estado en la Obra no es razón suficiente para
ofrecer una experiencia personal; si el sincerarse lleva a
juicios generalizados sin conocimiento de causa; si hay que
atenerse a criterios preconcebidos, o si sólo se le
escucha a uno o se le sube a un sitio permanente mientras
se cierna a la ortodoxia reinante en este sitio... pues habrá
muchos como yo, para los que vuestro sitio no tiene acogida.
Si eso es lo que queréis, pues decidlo así y
no deis la impresión de que esto es un foro para un
libre cambio de opiniones y experiencias.
Un saludo muy cordial a todos,
José Carlos
(Amigo, pues sí, te ha tocado el mismo oreja de
turno que te contestó
la otra vez, ¿mala suerte, buena suerte?. Después
de los castigos que me impusieron -leer "Surco"
y a Pilar Urbano- no respondo de mí aunque haré
un esfuerzo por lo que me han dicho, que cuide las formas.
Ahí voy.
a) No me burlé de tu mujer porque nunca me he burlado
de nadie y menos de alguien que no ha aparecido por aquí.
Me hizo gracia tu expresión de "que te cayó
del cielo", dando a entender que todo en tu vida ha sido
milagroso: conocer el opus, pedir la admisión, hacer
la oblación, la fidelidad, "tu mujer te cayó
del cielo"... etc., etc.
b) Yo creo que ni tú ni nadie se siente libre a los
15 años para entregar su vida a nadie ni a nada. No
imagino a un chico de 15 años que decida casarse -en
la civilización occidental a la que imagino que perteneces-
y que sus padres estén de acuerdo.
c) Cuando dije y entrecomillé "todo era perfecto,
maravilloso, fabuloso, genial, pero yo fui tonto y me fui",
no me refería a ti, me refería a que curiosamente,
el Opus no aceptó ni adjuntó testimonios diferentes
al tuyo en la Causa de Beatificación de Escrivá,
que sí tenían más cosas que decir o al
menos, otras diferentes -las luces y las sombras-. Porque
no sé si tú conociste a Escrivá o conviviste
con él o le sufriste de primera mano como algunos de
nosotros, a los que se les vetó en ese juicio que la
historia y los documentos existentes al respecto han demostrado
que fue una pantomima.
d) Esta web no se ha hecho para alabar al Opus (quito el Dei
a propósito porque hay un mandamiento que dice "No
tomarás el nombre de Dios en vano"). Desgraciadamente
y por lo que hemos vivido dentro, no hay nada que alabar.
Sobre la manipulación, la coacción y la violación
de la confidencia y de la confesión ¿tú
ves algo alabable? ¿Eso no lo vivieron contigo o tú
no lo practicaste con otros? Y sobre lo de aprender cosas
yo creo -y lo pongo como ejemplo, no lo pusiste tú,
lo pongo yo ahora sobre lo que se podía aprender en
el Opus- que aprender a comer una naranja con cuchillo
y tenedor, en mi caso lo aprendí en casa de mis padres
-cosa por lo demás que no me hace ser mejor o superior
que el resto de los que disfrutan de una buena naranja comiéndosela
con las manos-. Ese tipo de cosas que aprendimos, como bien
dices, se aprenden o se pueden aprender fuera.
e) Esta web no va a cambiar de opinión respecto a los
testimonios que coloca en la sección Tus escritos.
De ahí que te dijera que te sentirías más
cómodo leyendo (que no participando, porque no lo permiten)
en las webs oficiales y en las que se dicen "personales
o particulares". Si conoces alguna donde haya intercambio
de pareceres y libertad de expresión, dínosla
rápidamente para participar en ellas. El Opus que viviste
tú yo creo que no existe. Pero puedes escribir siempre
que quieras porque tus correos los verás y los verán
y leerán aquí todo el que entre a esta web,
escribas lo que escribas.
P.D. Si no hablaras tanto de tu mujer
en tus correos no darías pie a que surgieran comentarios
al respecto. Yo tuve una tía abuela que se llamaba
Melchora, que no me cayó del cielo porque ya estaba
en la tierra cuando nací, que me dejó en herencia
una humilde casa en un pueblo de Castilla y no por ello la
saco a colación continuamente. Me fui del Opus a tiempo
antes de que se quedaran con ella (con la casa). Si estuviera
todo el rato refiriéndome a mi tía Melchora,
ten por seguro que más de una broma me caería).
Otro tirón de orejas:
¡Hala, pa que no falte!, os han dado palos por contestar
el correo de un mundo feliz de José
Carlos y yo me atrevo, cariñosamente a daros
otro tirón de orejas. Parece que ya no vais a contestar
oficialmente y libremente, como os de la gana, a las opiniones
(¿propaganda?) que se publica en esta WEB.
Me parece que al final con esto de respetar la libertad
nos la vamos a coger con papel de fumar. Se hizo un debate
sobre la conveniencia o no de poner en esta WEB ciertos correos
pro-opus, a pesar de que fuera posible que se colara propaganda
oficial o saboteadores, algunos con serias dudas apostamos
por la libertad y que era mejor la libertad y no censurar,
pero de ahí a que os autocensuréis vosotros,
me parece una pasada. Si alguien traga con el relato de José
Carlos, pues bien mejor para él, pero no por
ello se debe criticar al oreja de guardia que decide contestarle.
Se ha comentado que se pasó, pues bien, yo opino que
no llegó, por que es cierto que en la Obra hicimos
muchas risas de muchos asuntos, pero no me digan que eso ni
era alegría ni era felicidad.
La alegría que yo viví era la propia de una
edad inmadura, de un niño inconsciente, que encima
se cree que está salvando el mundo, con una inconciencia
y desconocimiento de los abusos que se cometen en nombre de
Dios y si que probablemente cometimos en el nombre de Dios.
San Jose Maria probablemente esté en el cielo, nunca
diré de ninguna persona que no lo esté, porque
yo no me atrevería a condenar a nadie, y la misericordia
de Dios es infinita, pero de ahí a ser un modelo de
Santidad, pues no para mi no lo es, tampoco lo es San Alejo,
que según aprendí en la Obra se paso su vida
debajo de una escalera, o de San Jorge, cuya existencia histórica
es más que dudosa. (Mil perdones a Catalanes y Aragoneses).
No metamos al Espíritu Santo en esto, que la infabilidad
del Papa y los dogmas de fe son contados. No se donde queda
aquello de servir a la Iglesia sin servirse de la Iglesia,
por que por lo menos de escudo si que les sirven, y van a
conseguir abollarla a base de escudarse tanto en ella.
En fin que me he ido a contestar, cuando lo que quería
era reprocharos que decidáis no contestar oficialmente,
a mi me gusta que lo hagáis, y que lo hagáis
con plena libertad, no faltaría más después
de dejaros las pestañas en esta WEB en la que a algunos
no nos dejáis ni arrimar el hombro económicamente.
Por otro lado si decidís contestar como un participante
más os van a acusar de que los correos los dirigís
vosotros mismos y que retroalimentáis (jo que palabra)
los temas de esta Web fraudulentamente. (Esa táctica
la aprendí en mi encargo de AOP) . Veo más honesto
que lo que sea opinión propia de los propietarios de
la WEB figure como tal, y si es aceptada pues bien y si es
criticada pues también bien, y solo para el caso de
que una determinada opinión no sea comúnmente
compartida por los demás orejas, entonces se haga como
aportación personal.
¡Ala! animo, que cada vez que os meten un palo os
desanimáis, que no es para tanto, que esto nos esta
haciendo mucho bien a muchos.
Con mucho cariño
J.C.
Sí, no hemos cambiado, antes nos escandalizaba un
beso en un película y ahora nos escandaliza la sincera
opinión de Jose Carlos.
Y me duele, me duele que el Oreja haya ridiculizado un corazón
abierto, me duele que no queramos admitir que lo que diga
sea la verdad de su vida.
Debemos profundizar más, la Obra es suficientemente
compleja como para despacharla como quien insulta al guardia
de tráfico en un atasco.
Orejas, volved a vuestra ecuanimidad, dejad para otros, por
favor, la ironia fácil y la incompresión, seguid
llenando estas páginas de detalles alegres e ironías
cariñosas. Que no pague nadie vuestra indegestión
de setas, o una tarde movida con la "parienta",
porque en esta web muchos han encontrado compresión
a su sufrir y no se tratra de añadir más dolor
a la herida sino de ayudar a su cura.
Uno de los vuestros (antes C.V o C.U.)
Queridos orejas: Por lo que leo y compruebo es muy difícil
salir de una institución dictatorial y dejar detrás
los viejos esquemas, las ideas perversas origen de tanto sufrimiento.
Debe costar muchos años. Percibo en algunos orejas
antiguas resonancias: las cosas buenas aprendidas, la aceptación
del Opus Dei por parte de la Iglesia católica, un respeto
tan exquisito como frustante del derecho ajeno (Hitler aún
estaría hablando), etc.
Y, mientras, la Obra de Dios (?), vulnera los derechos fundamentales,
convierte el apostolado en proselitismo, fuerza la conciencia
de menores de edad, redirecciona la web a páginas porno,
lleva a juicio nuestro dominio, silencia al resto de la Iglesia,
nos obliga a escribir en el anonimato porque provocan miedo,
enjuician con intolerancia las vidas ajenas, cargan pesados
fardos a las gentes, buscan el poder por encima de todo.
Somos tan respetuosos que acabamos silenciando a los orejas
de guardia con sus acertados comentarios en la gran mayoría
de los casos. Si se equivocan, algo muy humano por otra parte,
tenemos derecho libre de réplica. También ellos
pueden rectificar. Y no pasa nada. Tampoco podemos buscar
la perfección absoluta en quienes llevan la pesada
carga de hacer viable día a día la página.
Perderemos mucho si dejan de opinar: la fina ironía,
el sentido del humor (elementos necesarios para que tantos
puedan salir adelante), aclaraciones puntuales a cuestiones
concretas y una línea editorial bien definida. En ella
se ve reflejada a diario la sustancia de la página,
su hilo conductor.
Aquí escriben quienes sufrieron las consecuencias
de una institución malsana e intentan salir adelante.
No es -dicen los orejas de guardia respetuosamente- una página
contra la Iglesia, sino "sobre" el Opus Dei. Yo
añadiría: y también para quienes estamos
"contra" el Opus Dei por considerarlo una interpretación
falsa del cristianismo y un integrismo caduco.
Quienes estén de acuerdo con el Opus Dei, o lleven
la marca "Mihura" en las costillas, tienen miles
de páginas oficiales para dirigirse a ellas. A nosotros
que nos dejen en paz en este foro de libertad.
Si silenciamos a los orejas de guardia acabarán por
hacerlo con todos nosotros. Y no podemos permitirnos ese lujo.
Hay demasiada gente sufriendo.
Hasta otra, saludos a todos
Jerónimo
2-10-2003
(Amigos, hemos tenido el día entero para 'reflexionar'
y hemos visto la cosa -respecto a ayer- según sigue:
que lo que le ha fallado a algún oreja a la hora
de contestar ha sido la FORMA de hacerlo, no tanto el FONDO.
Se ha podido herir a alguien por la forma de expresarse
cuando lo mismo lo podía haber dicho de otra manera
sin que le doliera a quien iba dirigido o a otros que leen
la web. Intentaremos cuidar ese aspecto pero no podemos
estar callados si se ataca a la web, a su finalidad u otros
aspectos colaterales. Ejemplos: cuando dicen que no conocemos
al Opus Dei, cuando nos acusan de que nos metemos con la
Iglesia, cuando afirman que censuramos los emails, cuando
nos llaman cobardes por no firmar con nombres y apellidos,
o llega uno y nos dice que -por lo testimonios-estamos amargados,
etc. Resumiendo: que vamos a intentar no faltar al respeto
a nadie si nadie nos lo falta a nosotros ni a juzgar o a
descalificar, pero callados como muertos o como tontos o
como indiferentes, es imposible.)
Queridos amigos:
No me voy a presentar como un ex-miembro del "Opus Dei",
ni como miembro de la "Secta", ni como cooperador,
ni como ex-cooperador, ni como chico de San Rafael, ni como
de San Gabriel, ni como de San Miguel, ni de San Juan, ni
de San Pedro, ni de San lo que queráis. Me voy a presentar
como persona. Como persona que ha tenido o tiene relación
con el Opus Dei. En este aspecto no me quiero definir, ya
que ante todo estamos entre personas. He ido leyendo testimonios,
todos muy sinceros y personales, me los creo, me los creo
todos. Una cosa es cierta, cualquier persona, sea o no del
Opus, no ha vivido en su totalidad el Opus Dei. Aunque unos
más que otros. Por lo tanto, ha contado, en su testimonio,
cómo le fue o cómo le va. Tal como ha dicho
Carlos, en el Opus Dei, no hay una ausencia de bien, ni una
totalidad de mal, ni una totalidad de bien, ni una ausencia
de mal. Depende de lo que nos encontremos, podremos testimoniar
hacia un sentido o hacia otro, por lo tanto todos los testimonios
sinceros de lo vivido son VÁLIDOS. Pero tampoco hemos
de totalizar, nuestras vivencias hacia la dirección
que nos tocó vivir. A veces han sido fruto de circunstancias
del momento, de las personas encontradas, de malas directrices,
buenas directrices ... Esto es aplicable en lo bueno y en
lo malo.
Lo que sí que he visto en esta página, es que
si uno testimonia a favor se lo comen vivo y si va en contra
salen los del Opus a hacer lo mismo. Y no es eso lo que buscamos.
Lo que buscamos es esclarecer lo que pasa, el por qué
del dolor, qué pasa con la libertad personal, cuáles
son los errores, cómo los podemos solucionar (tanto
los que están dentro como los que están fuera)
Lo que sí he visto, que el Opus Dei no deja indiferente.
Hay errores, pues se buscan soluciones, cueste lo que cueste,
pero lo que no podemos es quedarnos en la simple dialéctica
barata. Y si damos con una solución se la presentamos
a "Javi", y así creo, que haremos lo que
tenemos que hacer, que por nosotros no sea.
Por favor Orejas, no quites tu comentario. Por una vez que
matas un perro, ya te llaman mataperros.
J.U.
(Amigo, voy a contar el chiste del mataperros, no se vaya
a creer alguno que también mato perros y nunca más
lejos porque los adoro. Eso sí, advierto de que hay
una palabra mal sonante al final del chiste y como últimamente
estoy atravesando una fase de reconversión hacia el
bien y las buenas formas, espero que nadie me lo tenga en
cuenta ni el oreja mandón me envíe otra vez
a releer "Surco" de castigo porque con lo de ayer
ya tuve suficiente. El chiste dice así: Van dos amigos
charlando y le dice uno a otro: -"Pues yo, por una vez
que maté a un perro... me llamaron mataperros".
Y dice el otro: "pues yo, por una vez que maté
a un gato..." Y sin dejarle terminar, añade el
primero: "¡te llamarían matagatos!"...
Y contesta el otro, "pues no, ¡me llamaron hijoputa!".
Y ahora, tras esta palabrota o palabro, me voy yo por mí
mismo a leer como castigo, el último libro de Pilar
Urbano.
Vuelvo a repetir (lo he dicho en una contestación posterior
a esta en el día de hoy), pido perdón a todos
los que se sintieron ofendidos o heridos por los comentarios
de este oreja de guardia a sus correos.)
Reconsideradlo por favor
Hola, soy F.J., el que ha escrito algunas cosas con fechas
muy anteriores a 1-10-2003 y como veo que es fácil
que nos confundamos con las iniciales, me adhiero a la idea
bien acogida por vuestra parte, queridos Orejas, y voy a adjudicarme
a partir de ahora el seudónimo de Fulcro.
Aunque en una primera aproximación, la crítica
de fede hacia la contestación
del Oreja de guardia (a propósito del correo de José
Carlos) pueda parecer precisa, bien fundamentada,
e impulsora del repliegue de la opinión de los orejas
a posiciones simplemente personales, creo que hay que considerar
algunos aspectos que a mi me parecen importantes, como los
cuatro siguientes:
1.- El valor de un sitio de encuentro como este no solo se
lo dan los correos como los nuestros, sino las legítimas
opiniones oficiales o institucionales ;-)
de nuestros queridos Orejas, que además a mi
siempre me han parecido un estupendo acicate para mantener
vivos los diálogos. La orientación de los contenidos
de estas páginas, a mi entender muy necesaria, está
y debe estar en sus manos ¿y qué mejor modo
de hacerlo, que expresándose libremente como grupo,
aunque su representación vaya recayendo sobre personas
distintas con diferencias en el entender y en el expresarse?.
2.- De la misma manera que cada uno de nosotros tenemos derecho
a equivocarnos, la agrupación que mantiene esta Web
también lo tiene sin que pase nada por ello. Precisamente
esto sería una postura radicalmente opuesta a la que
criticamos del opus, que encubre sus propios errores recurriendo
tantas veces a la retirada y al silencio; además, si
se cometen errores, se reconocen y ya está; no solo
sigue sin pasar nada sino que, en cualquier caso, diría
mucho de la gran calidad de la agrupación como tal.
3.- Si los Orejas intervienen a partir de ahora a título
personal, creo que corremos el riesgo de ir derivando los
contenidos hacia sitios no deseados sin que nadie los modere.
En definitiva, el que cualquier iniciativa humana colectiva
tenga una personalidad que la caracterice y se distinga de
las demás no es caprichosa, sino que, a mi juicio,
constituye su esencia. Por eso entiendo, queridos Orejas,
que no debéis renunciar a dar vuestra opinión
oficial (creo que la mayoría sabemos que
no habláis ex cátedra), pero vuestro
esfuerzo común en la contrastación o confrontación
de ideas, que al final se plasman, de alguna manera, en un
comentario oportuno del Oreja de guardia, para mi tiene un
gran valor, sobre todo si se intenta hacer crítica
analítica como es mi caso.
4.- Por otra parte también creo que casi todos los
que dialogamos con nuestros correos ya somos mayorcitos y
deberíamos digerir y leer entre líneas
(como alguna persona aquí ha aconsejado sabiamente).
La crítica tiene muchas veces el lado doloroso, sobre
todo si es uno el que la padece; pero para eso estamos aquí,
para discutir los aspectos que nos parecen negativos o equivocados;
de lo bueno, de lo maravilloso, si tal cosa fuera posible,
solo se pueden esperar actitudes laudatorias, y para ello
el material que ofrecen los sitios oficiales del opus es abrumador.
Dicho lo anterior, a mi no me parece que la contestación
del Oreja de guardia a José
Carlos sea exagerada ni salida de madre; pudiera estar
equivocada, pero es excelente y una entre las posibles; porque
si se analiza el texto de José Carlos, a mi modo de
ver, salen dos interpretaciones claras pero de índole
muy diferente entre si, que serían las siguientes:
a) Lo que dice es verdad y lo dice un hombre sincero: En
efecto, puede ocurrir que uno que se marcha se sienta objetiva
y profundamente agradecido a la obra por la prolija enumeración
de bienes recibidos de ella que José Carlos narra.
Ese fue mi caso precisamente (salvo lo del aprendizaje del
trato con las mujeres que muy bien y con mucha gracia describe
nuestro amigo y admirado M.F.). Entonces,
lo que dijo el Oreja de guardia: ...aunque hayas salido,
continúas dentro es rigurosamente cierto y exacto.
En esa situación no se cuestiona a la obra, se la
considera santa, y el pobre pecador que se ha ido debe reorganizar
su vida penitentemente a partir de todo lo aprendido, al no
haber dado la talla de los campeones en religión que
se quedan dentro. Más aún, se creerá
en la obligación de defender a la institución
con un empeño aun mayor, tal vez en un intento de redimir
su miserable condición, parecida a la de un renegado.
Naturalmente, esa es la postura que le interesa al Opus Dei
para sus exmiembros, además de que puede ser el billete
de vuelta para recuperarlos como super numerarios. Mientras
tanto la vida sigue y, sobre todo si se llega a tener hijos
y con ellos los problemas típicos de su educación,
o si se ve enfermar a personas queridas que siguen dentro,
uno empieza a sospechar que algo no funciona y que algunas
de las cosas antaño aprendidas deben desaprenderse
si no se quiere ir sembrando tragedias por doquier. Es entonces,
como en mi caso, cuando uno empieza a estudiar a las personas,
a la obra y a su fundador, y llega a percatarse de las contradicciones
institucionales indigeribles que son las que, en el fondo,
originan todas las experiencias negativas vertidas en esta
Web.
Solo he podido conocer a través de los correos de
esta Web un caso (muy sospechoso por cierto) en el que uno
se va de la organización sin que pase nada: a
otra cosa mariposa como diría el refrán,
pero tal vez pudieran darse casos así. Lo normal, como
reconoce José Carlos,
es que uno salga tocado (bueno, el dice forjado).
b) José Carlos podría ser perfectamente un
hombre astuto del opus que de una manera inteligente, ponderada,
aparentemente amistosa y bastante convincente, vierte en su
escrito con mucha exactitud y precisión, lo que la
institución desea de sus exmiembros pero, sobre todo,
lo que desea que crea todo el mundo (en especial la Iglesia),
como un hecho normal y ejemplar (no más traumático
que en cualquier otra agrupación religiosa) que viven
o debieran vivir todos los que se van, ya que los frutos de
una fundación divina deben ser excelentes, hasta los
que se caen del árbol. Si hay frutos amargos sería
por las culpas personales exclusivamente; en absoluto por
otras causas que pongan en entredicho la perfección
fundacional.
Y este es el mensaje de fondo y explícito de José
Carlos, aunque muy bien pensado para ser asimilado acríticamente.
Si os dais cuenta, no deja el más mínimo resquicio
para la duda en las cuestiones fundacionales, y recurre también
al manido y clerical argumento del amparo en la autoridad
de la Iglesia: Santificado Josemaría queda fuera de
toda discusión y, de rebote, también su obra.
Es muy comprensible que si el Oreja de guardia ha intuido
esta segunda posibilidad, se habrá dado cuenta de que
se nos estaría utilizando, una vez más, a nosotros
y a la Web para hacer proselitismo a favor del opus, mientras
a nosotros se nos arrincona subliminalmente como una panda
de resentidos y resabiados. Si esto ha sido así, si
José Carlos ha pretendido manipular y manipularnos,
toda la respuesta de nuestro Oreja de guardia sería
un ejemplo de ponderación y prudencia ante lo que podría
ser uno de los intentos más inteligentes y efectivos
por parte del opus para neutralizar nuestra página.
Si la segunda interpretación que he denominado (b)
no se correspondiera con la realidad y José Carlos
no tuviera la intencionalidad de sabotaje que
he señalado, le pido disculpas por adelantado. Pero
es sospechoso su interés por mostrarse como ejemplo
positivo en Tus Escritos, como lo son también
algunas de sus expresiones y su interés por contactar
personalmente. No obstante, hay que insistir en que la actitud
(b) solo se diferencia de la actitud (a) en la doblez de intención,
diferencia nada pequeña, dicho sea de paso. A mi no
me resulta muy difícil entender esto porque, como ya
he dicho, en mis tiempos fui un caso (a).
Ya ves Ramiro E., las cosas
pueden ser más complejas de lo que a primera vista
parece.
No se si estas apresuradas reflexiones contribuirán
a que cambie vuestra decisión de no manifestar posturas
oficiales, queridos Orejas, pero si os retiráis
del diálogo como colectivo os echaré mucho de
menos. Finalmente, aprovecho para agradeceros vuestras contestaciones
oficiales a mis correos; no se ha dado el caso,
pero aunque me hubiera escocido alguna os lo agradecería
igualmente, por el gran valor que tiene para mí el
poder forjar (como diría José Carlos)
mi propia ponderación a través de opiniones
distintas a las mías, por muy duro que pueda resultar
a veces. Un fuerte abrazo.
Fulcro
(Amigo, no nos retiramos porque hemos tenido todo el día
para recapacitar y acabamos de colocar otra nota al principio
de los correos de hoy. Sólamente vamos a intentar contestar
sin que nadie se sienta ofendido, razonando. Es decir, no
es cuestión de fondo, sino de forma. Se pueden decir
las cosas, como por ejemplo has hecho tú ahora o hace
Claudia y tantos otros, sin que quien reciba la crítica
o el comentario se sienta herido. Y no queremos que nadie
deje de escribir a la web por miedo a la contestación
del oreja de guardia.)
El gurú que visitó a Pablo VI era un patricar
ortodoxo
El amigo M.F. en su correo del 1-IX-2003,
habla de una visita al Papa Pablo VI, por parte de un gurú
maloliente. Quiero que sepan que la anécdota es verídica,
aunque no se trató de un guru, sino de un Patriarca
Ortodoxo -posiblemente Atenágoras-, que no tenia mucho
"olor a santo". Pablo VI, en un gesto de exquisita
caridad lo trataba de "santidad", siguiendo la costumbre
de las Iglesias Orientales.
En el video que menciona MF, san
Josemaría parece criticar la actitud del Papa. ¿Cómo
se interpreta este acto del santo? Se me ocurren dos posibles
lecturas: una, benigna, consiste en suponer que Escrivá
pretendió dejar en claro que el Papa Pablo VI estaba
mal aconsejado...; otra, menos benigna, es que se trató
de una muestra más del mal genio de Escrivá,
y de una falta a la caridad, cosa que no tendría por
qué sorprendernos, pues todos los santos -incluído
san Josemaría- tenían defectos y pecaban...
Cada uno interpretará el hecho como prefiera.
Un gran saludo a todos,
Critico Constructivo
Oye, Manuel (ó M.F.), apúntate
un 10 por la carta a José
Carlos. Lo de la subdirección de "Pies
para qué os quiero" bajo el patrocinio de San
Marcos, no tiene precio. Tu escrito
sobre los colegios es también muy bueno. Yo
estuve unos años dando clase en uno de esos colegios
y es verdad todo lo que dices. Pero si -encima- lo cuentas
con ese sentido del humor tan estupendo, nos haces pasar un
rato muy agradable.
Lo realmente bueno de esta web es que se puede opinar sin
caer en absolutismos ni descalificaciones (algo, por cierto,
muy fácil desde le anonimato). Algún amigo que
lee esta página me ha comentado que pasan por alto
las "cartas extremistas" tanto las que atacan sin
piedad, como las de los "prelaturators". De igual
forma que una crítica despiadada a la Obra huele a
extremismo, una alabanza sin fisuras sugiere algo de fanatismo
y sumisión gratuita.
Hacen bien las Orejas en recordar de vez en cuando que este
foro es para gente que ha sido de la Obra y quiere contar
libremente su experiencia. Nada más. La inmensa mayoría
lo han pasado mal, y aquí pueden hallar -como yo- el
apoyo que no encontró en la Obra.
Alfonso
Para José
Carlos
Aunque ya ayer apareció un mensaje mío acerca
del que había publicado José Carlos, hoy me
gustaría darle públicamente mi apoyo a la vista
de la contestación que le dirigió M.F.
El mensaje de MF tiene cosas muy interesantes que comparto
y que leo con mucha atención, pero cuando deja las
ideas para meterse en el terreno personal, lo estropea. Los
argumentos "ad hominem" dicen muy poco a favor de
quien los usa porque al descalificar a la persona se está
demostrando no ser capaz de descalificar sus ideas. O sea:
"como no tengo respuesta mato al mensajero". Y eso
es lo que hace MF en su mensaje. La verdad es que no tenía
ninguna necesidad de hacerlo porque sus anteriores escritos
demuestran que tiene argumentos sobrados para debatir sin
entrar en lo personal pero en este caso lo ha hecho y lo lamento.
Saludos,
Ramiro E.
Hola Orejas amigas, una respuesta para
José Carlos
Después de leer tu mensaje, creo sinceramente que deberías
adjuntarlo a tu solicitud de admisión al Opus Dei como
socio Supernumerario. Hoy 2 de octubre sería un día
excelente para hacerlo ¿No te parece?
Tienes las características ideales para unirte de
nuevo a esa organización de la que posiblemente nunca
debiste de haberte ido: sigues hablando y pensando como ellos,
extrañas sus métodos, admiras a su fundador,
justificas sus acciones y crees sinceramente que la amistad
y el apostolado son sinónimos. Inclusive sigues respondiendo
con sonrisas a las confidencias y luchas de otros
y no logras explicarte cómo los directores del Opus
Dei pueden ser capaces de causar dolor. Creo que inclusive
justificas con argumentos religiosos sus acciones sadomasoquistas.
Si el Opus Dei no te acepta nuevamente como socio Supernumerario,
permíteme recomendarte que busques de inmediato ayuda
psicológica profesional. Añoras profundamente
el pasado y me das la impresión de ser profundamente
infeliz con tu vida actual.
No te sientas mal por ello. Hay personas José Carlos
que disfrutan la dependencia porque se acostumbraron a ella
o no tienen las destrezas para pensar y vivir por su cuenta.
Es posible que por eso te hayas casado con la primera novia
que tuviste, precisamente para que asumiese las labores que
detestabas: buscar un piso, manejar tu dinero, lavar la ropa
y cocinar. No hay duda que ella te cayó del cielo,
pero me parece que extrañas mucho a la otra, me refiero
a la obra de Escrivá. Ella también nos decía
dónde vivir, nos manejaban el dinero, lavaba la ropa
y hasta nos cocinaba ¿Te recuerdas? Inclusive nos decía
qué leer, revisaba nuestra correspondencia y, como
muy bien lo dices, nos forjaba la personalidad.
Me imagino que esa es la libertad que añoras.
La Obra que
yo conocí fue diferente. Mi concepto de la
felicidad, de la libertad y de la amistad es también
diferente al tuyo. Por eso no envío mis mensajes a
Crónica ni añoro el Opus Dei.
Un abrazo,
Jorge
Una de las cosas que quería comentarles, que supongo
dependerá de las numerarias con las que trates, es
que a mí sí me habían contado lo de las
duchas con agua fría, la disciplina y el cilicio y
algunas otras cosas, antes de pedir la admisión (cosa
que no llegué a hacer). Esto se los cuento porque he
leído muchos testimonios de personas a las que no les
contaron cómo eran las cosas antes de pedir la admisión
y luego se encontraron con todo esto (y mucho más,
seguro). Con respecto a las normas, yo las cumplía
(y la verdad es que sigo haciéndolo, solo que no me
importa retrasar alguna norma o saltear alguna no me trae
problemas de conciencia!) y tenía un plan de vida similar
a las numerarias sin serlo. Esto parece que ha sido la excepción
y no la norma (que me contaran de antemano muchas cosas que
luego formarían supuestamente parte de mi vida diaria)
y supongo que esto se debería a la calidad humana de
estas numerarias que conocí y de las que tengo un gratísimo
recuerdo. Supe que algunas (creo que la mayoría) ya
no pertenecen a la obra.
Bueno, sigan adelante ayudando a tanta gente y estaremos en
contacto.
Dios los bendiga.
P. I.
si te vas ......
Que la Oreja también opine!!!! Con el trabajo que tiene
la Oreja creo que puede opinar como todos .... que tanto !!!!!
¿Cómo se va a tapar la boca esa Oreja de Guardia?
Pero es que José Carlos
no nos ha contado en su relato como es esa esposa que cayó
del cielo. Mira que aquí en nuestra querida página
hubo amigos que en la generosidad de su relato han presentado
de modo virtual a sus mujeres. Es más, se armó
una suerte de discusión acalorada sobre la belleza
de mujer el 21-8-2003.
CF contó que su esposa no supera los 45 kilos y quedó
incumplida la amenaza predictiva del opus dei de que "si
te vas vas a ser infeliz, vas a condenarte, y si te casas
tu mujer va a ser gorda y bigotuda".
Por su parte, SS contestó presentando a su mujer de
93 kilos y concluyó "esto sí que es una
mujer"
Y tu mujer ¿cómo es? Porque es diferente que
te caigan del cielo 45 o 90 kilos. Oreja, pidamos a estos
hombres retratos de sus mujeres y a la página como
están los nuestros !!!!!
Recordé alguna de las amenazas de las plagas que recibiríamos
al salir del opus dei, recuerdo la anécdota verdadera
que contaba un sacerdote que decía que un día
tocó el timbre del centro pidiendo por él una
familia en estado alterado, el hombre había sido numerario
y la mujer estaba en medio de un brote psicótico, acompañaban
la escena uno o dos niños, y la mujer a los gritos
pedía "exorcismo". Un cuadro dantesco -almodovariano
que el relatante se ocupaba de adornar con lujo de detalles
morbosos durante largos minutos de la meditación a
oscuras.
El mismo sacerdote ejemplificaba en sus meditaciones sobre
la verdadera familia von Trapp, la de la novicia rebelde..
El sacerdote nos contaba que la verdadera foto mostraba una
familia de gordos que nada tenía que ver con la fantasía
cinematográfica. El clásico musical estaba en
la lista de las películas que no se podían ver
para la sección femenina. No fuera cosa que a alguien
le inspirara pedir la dimisión para ir a casarse con
Christopher Plummer !!!!!!!.
Al salir del opus dei a los 28 años y luego de estar
trece no encontré ninguna de las plagas con las que
nos amenazaban. Sí encontré una vida diferente.
Con los problemas y situaciones normales de una vida que no
había siquiera sospechado. La primera vez que un hombre
me invitó a salir al cine, llamé a una amiga
que había pasado poco tiempo por el opus dei para preguntarle
si la película "Hanna y sus hermanas" se
podía ver, si Woddy Allen estaba "permitido"
y si no iba a tener escenas de sexo que me incomodaran. Salir
del opus dei fue como salir de una prisión con un sistema
endogámico especial y luego, afuera .... es otra cosa.
No me interesa si el opus dei va a cambiar o no, sí
me interesa que los que estamos afuera pongamos este fantasma
del opus dei a la luz del día, así desaparece
como fantasma. Sí me interesa hacer esta pequeña
movida para que se ventile un poco que es lo que vivimos adentro.
Para que se escuche esta campana.
Voy a cambiar de seudónimo porque Rulo Loco parece
masculino de modo que paso a llamarme a partir de ahora Pepa
Broma, recuerden "nunca habrá mujeres ni de broma
en el opus dei" de modo que: no existíamos.
Cariños a todos y un feliz 2 de octubre visto desde
afuera !!!!!
Pepa Broma
Soy Antonio y escribo por tercera vez
a vuestra web para comentaros brevemente una pequeña
cuestion:
No sabeis cómo siento que hayais decidido no responder
publicamente a algunas cartas: de hecho es de las cosas que
mas me gustan de la página, los certeros y agudos comentarios,
pero tengo que puntualizar que gustándome casi todas
vuestras respuestas prefiero con diferencia al Oreja que mis
amigos y yo llamamos "el sensato" y tambien "el
que es buena persona". No busco ofender al otro, no es
mi intención, sobre todo sabiendo cómo se las
gasta cuando la carta no le agrada o cuando se comenta por
descuido que el que lo manda es de Sevilla, terrible pecado,
ya se sabe cómo somos de chistosos, enteraos, superiores,
señoritos, etc, y tengo que admitir que de vez en cuando
me divierten pero normalmente sus respuestas son para arrendar
sillas, las del que llamamos "el resentido" o "el
de la mala leche". (Así le llamamos, lo siento,
por algo será).
Recuerdo que en mi primera
carta su respuesta
me dejó con las patas colgando, además de ironizar
sobre mi ciudad, cosa que no le he visto hacer con nadie más,
me vapuleó a gusto, como ha hecho con el pobre José
Carlos, que no creo que tenga huevos para escribiros
otra vez, criatura. Sin embargo la segunda carta me fue respondida
de una manera suave, comedida, amigable, por el ..."sensato".
En fin, no busco, insisto, putear, ni crear polémica,
ni que me odieis de por vida, solo comento un hecho que algunos
seguidores de vuestra web comentamos con frecuencia, y que
la airada y ofensiva respuesta a José
Carlos me ha decidido a echarle valor y enfrentarme
a una respuesta del... digamos del que da la sensación
de ser el mas resentido de los Orejas. Que también
tiene derecho a ser como le de la gana, pero que a lo mejor
debería tener cuidadín con almas atormentadas
que escriben buscando otra cosa distintas a respuestas gratuitamente
airadas. Me la he jugado, lo se, pero alguien le tiene que
parar los pies a ese corazón lleno de rencor. Rezaré
por tí, y no me odies, ya sabes cómo somos los
sevillanos.
Con el mismo cariño y agradecimiento que el primer
día en que gracias a Dios os descubrí os mando
un abrazo
Antonio
(Amigo, no fue para tanto, que
los andaluces sois un pelín exageraos y perdona si
nombro tu región con buena voluntad y sin ánimo
de meterme y con todo el respeto. (¿Ves cómo
he cambiado?). Hablé de tu ciudad porque la conozco
y me gusta el jamón 5 jotas y un buen y fresquito fino
Quinta. Yo soy el oreja de la mala leche, quizá el
amargado como tú dices pero si nunca tuve sensación
de arremeter contra alguien fue contigo. Pudiera ser que intentara
hacerme el gracioso pero no hacerte daño, y las gracietas
a veces no se transmiten bien. No creo tener el corazón
lleno de rencor pero si eso es lo que yo he transmitido cuando
me ha tocado contestar a mí, pido perdón a ti
y a quienes le haya molestado o herido. ¿Hacemos las
paces?. Un saludo)
Hola amigos
llevo tiempo siguiendo vuestra pagina y me habia decidido
a escribirles. Sin embargo, he observado que algunos e-mails
eran contestados sistematica y negativamente por la oreja
de guardia. A la buena intención y libre opinion de
algunos se les respondia con cierta contundencia, a veces
con ironia.... no me parecio correcto en absoluto. Celebro
que hayais tomado la decision de no respoderlos y hacer constar
vuestra opinion a traves de mails personales. Como bien apunta
fede la pagina gana enteros en
credibilidad y autentica libertad de opinion. Entonces si,
les escribire en breve. un saludo.
A.V.
Lo unico que quiero subrayar, màs allà de que
el Oreja de guardia haya acertado o no con sus comentarios,
es que en este sitio han sido publicados todos las emails
y cada cual ha podido argumentar el acierto o el no acierto
del comentario mismo.
En los sitios criticos se encuentran pareceres en pro o en
contra del argumento y -justamente porque por formaciòn
reactiva, nos encontramos muy sensibles a las argumentaciones
de autoridad- no dejemos de criticar ni al Oreja (y le estimamos
y queremos) si no estamos de acuerdo con él. Esto nunca
va a pasar en un sitio en que se hable istitucionalmente del
opus.
Si el Oreja se equivoca, él mismo va a publicar los
pareceres criticos, y en esto acierta mucho màs que
si hubiera acertado el comentario origen de todo el mareo
este.
Gracias a todos los Orejas -los de guardia y los que descansan-
por el trabajo que hacen cada dìa por los que aquì
nos encontramos, y que sepan ver también en nuestras
criticas el esfuerzo comùn para estar de guardia y
para no caer en los errores que criticamos.
Un saludo para todos
Aquilina
[He acogido la sugerencia de asignar con un nickname, que
por cierto nos ayudarà a identificarnos mejor. Soy
L.E. de Italia, y he escogido este nick desde que ya no soy
ave de corral ;-)]
Hola a todos!
He visto las criticas a algunas respuestas de los orejas
a los que se mantienen medio a favor del opus dei o a los
que, aunque digan que se fueron, siguen con la mentalidad,
que es lo mismo que seguir dentro... me gustaria decir que
a mi me encantan todas las réplicas que han hecho y
considero que deberian seguir con ellas.
Cuando lees algunos mensajes, como el de jose
carlos, me indigna ver que hay gente que aun piensa
así, gente que por muy buena experiencia que (dudo)
dicen que tuvieron, pueda expresarse en nuestra web como si
nada! si no hay replicas, empezaran a invadirnos los miembros
del opus dei aprovechándose de nuestra "buena
fe". Vamos a acabar dándoles propaganda si dejamos
que nos cuenten lo bien que "se está" en
el opus!!! eso, que lo expliquen en sus páginas, no
creéis?
Dejarles hablar sí! pero con nuestro punto de vista
a continuación. tal y como se hacía hasta ahora.
es mi opinión. no debemos ser transigentes con la intransigencia.
no todo en el opus era malo... hay aspectos de la vida en
que,
desgraciadmante, hemos de ser como ellos.
ana_bcn
1-10-2003
(Amigos, llevábamos un tiempo pensando (a
veces pensamos) sobre la conveniencia o no de que el oreja
de guardia de turno, conteste directamente en la web a los
correos que enviais. Tras la respuesta de ayer a José
Carlos, nos han dado palos por casi todos los lados y el
oreja que le contestó lleva varias horas leyendo
"Surco", de castigo. Así que los orejas
de este otro lado de la pantalla hemos acordado que no se
contestará o replicará o sermoneará
o apabullará a nadie "oficialmente", y
que si alguno de nosotros quiere hacerlo -que sí
que queremos porque la asepsia aún no se ha apoderado
de nosotros-, lo hará a título personal a
través de un correo publicado en la web, como hacéis
los demás.)
He leído con atención
el mensaje de José Carlos
sobre seguir queriendo a la Obra. La verdad es que me pareció
un testimonio sincero, respetuoso, sereno y en gran parte
lo suscribo. En cambio me sorprendió muy negativamente
el "comentario editorial" del Oreja de Guardia.
Desde luego, esa forma de responder a quien no piensa igual
que uno no favorece en absoluto la credibilidad de la web.
Ya sé que no tenéis ninguna obligación
de publicar el correo de José Carlos (ni éste
que os escribo) y que tenéis todo el derecho del mundo
a criticar a quien no piense de determinada manera, pero entonces
dejadlo claro desde el principio. Advertid con claridad que
en la web no se pretende ofrecer la verdad sobre el Opus sino
sólo las opiniones negativas. Quien os dice esto ha
escrito en otras ocasiones comentarios críticos hacia
el Opus, y a las pruebas me remito. Pero pienso que la mejor
garantía de credibilidad de los comentarios críticos
es su contraste con las opiniones distintas. Confiemos en
la madurez de las personas. ¿Quién soy yo o
el oreja de guardia para juzgar la vida de José Carlos?
El, que la vive en primera persona, es el más autorizado
al respecto. Y su testimonio -en lo que se refiere a su experiencia-
es insustituible e inatacable.
Os agradeceré me mandéis la dirección
electrónica de José Carlos para escribirle.
Saludos
Ramiro E.
Yo tampoco quiero que la web se convierta
en un sitio de alabanzas a la Obra y por la misma razón
que vosotros: no tengo nada que alabar. Lo que es diferente
de reconocer que pueda haber aspectos, patrimonio de todos
los hombres o al menos de los cristianos, que están
presentes en la Obra y que, pese a ella misma, tienden a hacer
el bien en quien participa de ellos. Una cosa es alabar y
otra reconocer. No creo que la Obra sea el Anticristo o, como
dice alguno, "la suma de todos los males posibles sin
mezcla de bien alguno". Negar que tenga, aunque sea "per
accidens", aspectos positivos, me parece un error moral
e intelectual. Que la mayoría de quienes escriben no
hagan hincapié en ellos, es señal, en mi opinión,
de que dan por supuesto que algo bueno o positivo tiene, porque
si no ningún atractivo habría ejercido sobre
ellos y, en ese caso, tonto el que pitó en su día.
Pero también es señal de que saben que lo bueno
o positivo es en gran medida accidental, y por eso tratan
de lo negativo, para contrarrestar en lo posible la imagen
que pretende dar la Obra, a toda costa y por encima de todos
los que no fuimos, de ser todo lo contrario: "la suma
de todos los bienes posibles sin mezcla de mal alguno".
Desde luego que la Obra tiene muchísimos elementos
que la hacen algo más cercano a "la suma de todos
los males" que a "la suma de todos los bienes",
pero eso no obsta para que algunos hayan experimentado también
lo bueno y quieran hacerlo constar, al margen del juicio que
pueda merecerle al orejas de guardia o a los demás
que visitan la página su nostalgia, su pena, etc.,
que por lo demás considero sinceras (lo que no tiene
de suyo más valor que ese y no tiene por qué
corresponderse objetivamente con un referente de bondad real;
sólo percibido por él). Negar que su testimonio
sea sincero y responda a su vivencia personal como miembro
y ex-miembro de la Obra, negarle "autenticidad"
y ver complós de infiltración del Opus, creo
que es pecar de poseedores de "la auténtica verdad
sobre la Obra". Aunque sólo fuese por respeto
a las personas cuya visión difiere de la vuestra, sin
por eso ser radicalmente contraria (él en ningún
momento dice que la Obra sólo tuviese cosas buenas,
y de hecho deja claro que tenía muchas negativas que
le movieron a dejarla), creo que el comentario del orejas
de guardia no estuvo nada acertado y que, más bien,
si algo puede parecer, y más aún para los que
no formaron parte de la Obra, es sectario, en el sentido de
no querer ver lo que de verdadero pueda tener el otro o su
parte de razón, aunque sólo sea en cuanto vivencia
subjetiva, que no otra cosa es su testimonio.
Quiero hacer constar explícitamente que no comparto
su punto de vista sobre las "excelencias de la Obra".
Yo a eso no lo llamo excelencias, sino aspectos positivos,
e, insisto, cualquier bondad sería accidental, derivada
de la bondad de algunas o muchas de las personas que la integran,
no de la institución o su aparato en cuanto tal. No
hay que predicar en casa del cura: creo que todos los que
nos fuimos lo sabemos, lo sepamos expresar mejor o peor en
cada momento.
Si comento el comentario del orejas de guardia, es porque
lo considero desacertado e hiriente, además de intransigente,
sectario, sin tacto, etc. Así como él tiene
libertad para decir lo que estime oportuno, los demás
tenemos derecho a disentir de esa opinión, sin por
ello correr el riesgo de exponernos a ser objeto de anatema
y ser aleccionados para abrir otra web con otro tono. El tono
de la vuestra, en general, es óptimo, y muy difícilmente
superable. Lo que no quita para que ocasionalmente alguien,
como yo, pueda encontrar objetable alguna respuesta del orejas
de guardia. Es infantil pensar que, sólo por eso, quien
disiente pasa a ser "pro-opus" o partidarios de
"infiltraciones". Pensando lo que piensa José
Carlos de la Obra se fue de la institución, precisamente
porque lo malo predominó sobre lo bueno, y eso no tiene
nada de "extraño". Sé (por el trato
con otras personas que se fueron de la Obra) que su caso no
es único, y por eso puede él también
legítimamente aspirar a que alguien se reconozca en
su testimonio, por muy minoritario que pueda ser el universo
de quienes así vean las cosas, como él mismo
admite.
Entiendo hasta cierto punto vuestro punto de vista sobre
la web, pero flaco servicio hacéis a vuestro propósito,
en mi opinión, con respuestas salidas de madre y poco
ponderadas, como creo que ha sido ésta y como fue -aunque
en menor grado- la dada en su día a Ramiro. Entiendo
que se pueden decir las cosas sin necesidad de descalificar
radicalmente y herir a quien os escribe.
Obviamente, sólo vosotros tenéis la clave del
tono oficial del sitio y está en vuestra mano darle
el que queráis. Pero despreciar la opinión de
quien escribe sin mala voluntad y expone un testimonio tan
real como muchos otros mucho más negativos, no me parece
de recibo. Lo negro sin contraste no deja ver nada: se requiere
un mínimo de claroscuro, porque así es la naturaleza
de las cosas: que no son entera y radicalmente malas, sino
que tienen algo de bien, aunque sea accidental en el sentido
que ya he mencionado. El sitio es en verdad excelente, pero
creo que a veces a algún orejas se le va la mano y
que eso puede ir en detrimento del fin mismo que persigue
el sitio.
Un fuerte abrazo, de
fede
para José Carlos
José Carlos, vaya por delante que
yo también te deseo verdadera felicidad y paz. Soy
Manuel (el M.F. de
las contradicciones en los colegios...). Tu escrito
me ha conmovido, pero -aunque sea por alusiones, pues soy
de los que parece se toma a broma la santidad de San Josemaría,
costumbres de la obra y alguna cosa más, quiero hacer
alguna reflexión en voz alta- que diría Felipe
Gonzalez.
Recordarás una "penícula" de una
tertulia con sacerdotes, que se vio en todas las convivencias,
de San Josemaría en latinoamerica; creo, no es seguro,
era en Venezuela; lo que sí es cierto es que allí
se permite bromear sobre la figura de Pablo VI, entonces Papa,
porque había recibido a no se sabe quién, una
especie de gurú (decía Escrivá) que olía
fatal... aún recuerdo, entre las risas de los curas,
como se giraba y le preguntaba a don Álvaro "¡Álvaro,¿es
verdad o no?, te lo contó uno que estaba allí..."
(el pobre Álvarete,¿qué iba a hacer?,
pues decir que sí); y continuaba el santo "si
tuvieron que abrir las ventanas cuando se fue el santón"
-así le llamó). Y añadió: "¡qué
pena nos da este Papa!".
Y en esa misma "penícula", Jose Carlos,
pone en boca de un obispo italiano - estrategia muy farisaica
eso de poner en boca de otro la opinión de uno - "no
lo digo yo..., ¡lejos de mí!, lo decía
el obispo- que "está claro que el Espíritu
Santo actúa en la Iglesia, pero que a ese obispo de
allá, o al de más acá, lo haya suscitado
el Espíritu Santo... y Escrivá hacía
un gesto muy significativo porque, todo hay que decirlo, era
un buen comediante.
No sufras porque se trate con falta de respeto a Escrivá,
o que su santidad sea puesta en duda. Él también
lo hacía en vida (y podría contarte cosas más
fuertes; por ejemplo, yo asistí a dos tertulias de
un sacerdote, decano entonces de una prestigiosa Facultad
de Teología, de cuatro horas de duración cada
una donde nos contó anécdotas del Concilio -era
consultor-, y de charlas que tenía Escrivá con
los pocos consultores que asistían y que eran de la
Obra; pues, entre otras pasadas que les debió comentar
el Santo sobre la Jerarquía de la Iglesia un día,
hablando de Fellini (Secretario de Estado, Cardenal y Obispo-
la reberza, José Carlos- lo definió, a gritos,
de sifilítico. Como lo lees, José Carlos). Y
no me hagas recordar más de aquellas tertulias.
Nadie dice que Juan Pablo II sea tonto, pero cuidadín
con mentar al Espíritu Santo como si le conocieras
de toda la vida, porque no. Porque, claro, Juan Pablo II sí,
pero si es Pablo VI, no: éste recibía a guarringuandones
y mala gente y, encima, con Fellini de amiguete.
Escribes una frase que me tiene confuso... "la Obra
me lo presentó de forma sistemática y constante
desde que era muy joven, en muchos momentos de manera muy
atractiva, y así se forjó la personalidad que
tengo ahora. En la Obra aprendí la maravillosa realidad
que es el matrimonio cristiano, desde la teología más
profunda de Juan Pablo II; aunque os parezca contradictorio,
mis muchos años de numerario me prepararon estupendamente
para mi vida matrimonial, y si no os lo creéis preguntádselo
a mi mujer". A ver, a ver, que esto es muy bueno: la
Obra te ha forjado esa personalidad que tienes ahora - debes
de estar muy contento con tu mismidad propia-, y te preparó
estupendamente en tus años de numerario para el matrimonio
(?) -y añades "preguntádselo a mi mujer".
Pero, bueno, José Carlos, una cosa es que tú
te veas muy bien, y que sea muy feliz... que estés
forjado, vamos; pero de allí a que tengas la osadía
de pretender que toda la web sepa quien es la "mujer
de José Carlos". O sea, que ahora voy llamo a
información de Telefónica y digo " con
la mujer de Jose Carlos, que le quiero preguntar que qué
tal", y van y me ponen; o que en Google escribo "mujer
de José Carlos" y, hala, me sale la dirección
de tu chica.... Jose Carlos, José Carlos, que me parece
que te has pasado.
Además, y esto entre nosotros, como decía Escrivá
en las tertulias -los demás no se enteran-: ya me gustaría
hablar con tu mujer sobre la forja de la que estás
hecho. Pelín fantasmas sí eres, y no te enfades,
campeón, que te lo digo con cariño.
Otra cosa; tú sabes que cuando dejas de ser numerario
de mayorcito (parece tu caso), no te dejan volver a incorporarte
como supernumerario en, por lo menos, 15 o 20 años.
Por eso no eres supernumerario, pero el tatuaje lo tienes:
un Mihura. Y creo que la obra hace bien en dejar tanto tiempo
porque, si no, si pitaran todos los exnumerarios mayores que
se van a la vuelta de un año como supernumerarios,
te aseguro que se monta una estampida de numerarios que haría
falta otra subdirección en todas las delegaciones:
Subdireccción de "Pies para qué os quiero",
que se encomendaría a San Marcos , el que dejó
a San Pablo más colgado que un fuet.
M.F.
felicitaciones
Soy un exnumerario mexicano. Entré a los 14 y medio
y salí a los 19. No estuve tan involucrado, no llegué
a hacer la oblación (o no sé que madres), de
hecho me daba mis escapadas al cine, a fiestas y alguna vez
tuve "contacto" con mujeres, por lo que enfrentarme
a la realidad no estuvo tan difícil, además
del apoyo incondicional de mis padres y hermanos.
Me ha gustado mucho su página, a pesar de no leerla
toda. De vez en cuando me reúno con ex numerarios contemporáneos
mios (mis hermanos también fueron numerarios) y platicamos
como amigos que somos.
Yo estuve muy resentido con los numerarios, porque solía
toparme con muchos de ellos en la universidad y ni siquiera
me miraban, ni un saludo ni nada, lo que más me molestaba
era el hecho de que hacía algunos años nos considerabamos
"hermanos" me respetaban y hasta cierto punto me
admiraban porque era de los adscritos "mayores".
Qué hipócritas, lo que demostraban entonces
era pura caca. Pero en fin, ya lo superé y en realidad
me importa muy poco, la mayoría me caía muy
mal y los que me caían bien ya se salieron.
Por otro lado, tengo una preocupación. Mi novia suele
ir a medios de formación, de hecho trabaja en un colegio
del Opus, por mí eso está bien, pero la preocupación
me surgió a raíz de saber que comentan las charlas,
no sé si también las confesiones con el cura.
Lo que realmente me importa es que le den "consejos"
sobre nuestra relación, que le mal influencien y que
hasta le hablen mal de mí, dada mi condición
de exnume.
Bueno, espero puedan responderme. Muchas gracias. Un saludo
y felicidades.
F.J.
30-9-2003
Hola Orejas,
Encontré vuestra página por casualidad, ya
que compré el libro de Isabel de Armas porque ojeándolo
en la libreria me gustó para que lo leyera mi mujer.
La verdad es que me he quedado enganchado a vuestro site.
El libro de Luis
Carandell ya lo había leído. Mi madre
cuando entramos en un colegio sello "obra corporativa"
lo compró para saber de qué iba el Opus Dei.
Lo divertido es que cuando lo comentó con el preceptor
de mi hermano le dijeron que no era un libro fiable y le remitieron
a toda la bibliografía "oficial"
Sobre el libro
de Maria del Carmen Tapia puedo decir que me ha encantado.
No me sorprende todo lo que leo y es una lástima que
no se encuentre en las librerías esta clase de literatura.
No sé qué tecnologías web utilizáis
ni vuestro conocimiento de HTML, pero si necesitáis
alguna ayuda sólo tienes que perdírmelo. Creo
que la incorporación de foros o formularios para contactar
con vosotros sería un punto. También os puedo
ayudar en el diseño de la página si lo estimáis
conveniente. En fin, os felicito por vuestro trabajo.
Os agradeceré que toda comunicación y suporte
sea de la manera más anónima posible
C.R.
A pesar de todo, se puede seguir
queriendo a la Obra
Queridos todos:
Me topé con vuestro portal una noche de guardia, y
he estado leyendo vuestros testimonios y vivencias. He de
decir que algunos me han arrancado la sonrisa, y con otros
me he reído abiertamente; todos me han dado mucho que
pensar. Pero si he de recalcar una sensación predominante,
debo deciros que sobre todo me embarga una profunda pena.
Y al final me he decidido a poner estas líneas, porque
creo que entre lo mucho escrito no se representa una vivencia
como la mía, que creo que muchos comparten pero no
la han contado.
Me da gran pena, en primer lugar, el dolor y la amargura
que en estas páginas se recuenta. Muchos hemos sufrido,
después de tomar decisiones generosas en plena juventud.
Lo que hemos pasado unos y otros, ahí queda, y las
lágrimas, zozobras, temores y angustias no se pueden
negar. Que personas buenas con tantos ideales hayan tenido
que pasar por tales trances para mí sigue siendo un
misterio que conoceremos en el Cielo.
También me da pena pensar que parte de ese sufrimiento
haya podido ser causado por otras personas, que nos quieren,
que han convivido con nosotros, que se esfuerzan por ser santos,
que en su inmensa mayoría tienen buenas intenciones,
y por lo que sea terminan causando dolor, muchas veces sin
querer.
Me entristece ver que en tantos testimonios parecen cobrar
mayor relieve los malos momentos, las incomprensiones, los
malentendidos, las injusticias; y que estos sentimientos negativos
dominen nuestro recuerdo, cuando tantos de nosotros hemos
vivido momentos realmente bonitos, hemos conocido a personas
estupendas, lo hemos pasado en grande, y hemos gastado años
felices entregándonos por los que teníamos alrededor
con alegría y tesón. Creo que para muchos de
nosotros no fueron todo sombras, pero las luces no se vislumbran
en estas páginas.
Me duele que, por encontrar la chispa o aligerar la carga
de nuestros recuerdos, a veces se deje que la ironía
o el sarcasmo tiña a prácticas que vivíamos
antes, y que en sí son buenas y meritorias. Yo aprendí
mucho de mis años en la Obra, y a la Obra he de agradecer
la disciplina personal, el orden, el saber tratar con delicadeza
a las mujeres, el poder comer de todo, el pensar en tener
detalles con los demás, haber aprendido a hacer oración,
el amor a la Eucaristía y a la Virgen, el conocimiento
de la doctrina católica, y el vivir la amistad y el
apostolado, que para mí siempre han sido sinónimos.
Es verdad que todo eso lo podía haber aprendido fuera:
pero la Obra me lo presentó de forma sistemática
y constante desde que era muy joven, en muchos momentos de
manera muy atractiva, y así se forjó la personalidad
que tengo ahora. En la Obra aprendí la maravillosa
realidad que es el matrimonio cristiano, desde la teología
más profunda de Juan Pablo II; aunque os parezca contradictorio,
mis muchos años de numerario me prepararon estupendamente
para mi vida matrimonial, y si no os lo creéis preguntádselo
a mi mujer.
Me apena que algunos se alegren de que el Opus Dei pueda
estar pasando momentos difíciles, y que no se reconozca
que el espíritu de la Obra ha dado sentido a las vidas
de muchas personas; que haya miles de cristianos que se esfuerzan,
día a día, por rezar, por ser mejores padres
y madres de familia, por difundir la doctrina de la Iglesia,
por servir a los demás con detalles de cariño
o con iniciativas de envergadura. Hay muchas obras buenas
suscitadas por este espíritu, y personas santas -a
algunas las conozco muy de cerca - que lo viven desde hace
muchos años y para quienes su vocación ha supuesto
una avalancha de bien que se ha extendido al ambiente que
les rodea.
Me parece duro que se hable del fundador de la Obra con poco
respeto, quizá porque no estoy acostumbrado a que su
figura se me presente de esa manera. Que tenía sus
defectos, como todos los tenemos, está claro, porque
sin defectos no hay lucha y sin lucha no hay santidad; y estoy
de acuerdo con que hubiera sido más realista que se
nos hubiera dado a conocer su persona en su totalidad, precisamente
porque eso edifica más. Pero también es cierto
que ahora pertenece al santoral de la Iglesia; ni este Papa
es tonto, ni se le engaña al Espíritu Santo,
así que a mí por lo menos me parece más
prudente ceder el juicio sobre el significado de su vida a
los que tienen el mandato de emitir esos pronunciamientos.
He de constatar que siempre me sentí libre en el Opus
Dei: libre cuando escribí mi primera carta al Padre,
apenas cumplidos los quince años; libre cada vez que
renové mi entrega; libre cuando hice la fidelidad;
libre también cuando años después llegó
el momento de crisis, y después de un proceso desgarrador,
de mucha oración y conversaciones interminables, decidí
salir y emprender una nueva vida con la ayuda de Dios. Una
nueva vida condicionada por lo que viví, y enriquecida
por ello. Una nueva vida que asume el pasado, agradece lo
bueno, pide perdón por lo malo -lo causado por mí,
y lo que haya sido causado por otros -y trata de no juzgar.
Y desde que salí, no me ha faltado la comprensión,
el apoyo, y la amistad de muchos numerarios que convivieron
conmigo, a muchos de los cuales todavía trato en persona
y por escrito.
Sé que mi experiencia no es la de todos: quizá
sea porque viví la mayor parte de mis años en
la Obra en un país en el que siempre se ha valorado
la libertad personal. Desde los cargos que he tenido he visto
a muchos salir, y creo que siempre nos esforzamos porque se
hicieran las cosas bien por ellos. Cuando me llegó
el turno a mí, aunque hubo momentos muy duros, gracias
a Dios salí adelante. Mi familia, que en su relación
con la Obra reúne toda la gama posible, me trató
con gran delicadeza y cariño. Pude encontrar piso,
ahorrar, aprender a lavar la ropa y a cocinar, y me casé
con la primera novia que tuve, que me cayó como enviada
del Cielo.
Pero aunque no sea la de todos, mi experiencia es tan real
como la de los demás: por eso creo que se debería
incluir entre "Tus Escritos", para que todos aquellos
que todavía guardan cariño hacia la Obra y aprecio
a los que siguen dentro puedan encontrar algo con qué
identificarse. Espero que "Orejas" dé lugar
a que se recoja un testimonio favorable, porque es sincero
y sentido (os aseguro que lo he escrito por mi cuenta, y sigo
sin pertenecer al Opus Dei); y no tengo inconveniente para
que les deis mi dirección electrónica al que
os la pida si quiere entablar una conversación privada
conmigo.
Con cariño verdadero por todos los que compartisteis
años en la Obra, deseándoos verdadera felicidad
y paz, un fuerte abrazo,
José Carlos
(Amigo, permítenos que decidamos
dónde tenemos que colocar los correos que nos llegan
y cuáles nos ofrecen credibilidad para colocarlos en
los Escritos. En esta web sabemos qué es la Obra, conocemos
la marañana de su fondo y trasfondo, vivimos la incoherencia
entre la teoría y la práctica, vimos y padecimos
cómo se viola el secreto confesional, negamos categóricamente
que un chico de 15 años tenga libertad para atarse
de por vida a una institución y sin conocimiento de
sus padres... Y así podríamos seguir enumerando
información para ilustrar tu deslumbramiento. Lo de
que la novia te cayó del cielo también es para
nota: ¿en paracaídas?
Añade tu experiencia a alguna web del Opus Dei donde
recogen testimonios de tu estilo, pero esta web no es para
ti. Curiosa coincidencia la tuya con los testimonios de ex
miembros que el Opus Dei incluyó en la causa de beatificación
de Escrivá. Algo así como "todo era perfecto,
maravilloso, fabuloso, genial, pero yo fui tonto y me fui"...
Si la personalidad que tienes ahora se forjó en la
obra, evidentemente sigues pensando como cuando estabas dentro
y si no encontraste nada que repudiara tu conciencia, aunque
hayas salido, continúas dentro. No sientas pena por
nosotros porque nosotros sí que, gracias a Dios, nos
fuimos.)
Supernumerarios
Estimado amigo B.S.
Soy el padre de Halma,
y como supernumerario que fui he guardado silencio durante
muchos años pero, a raíz de conocer esta pagina,
la estoy siguiendo de cerca y he de advertirte, si aún
no te han vaciado todavía la cartera o la cuenta, espabila.
Soy padre de seis hijos y todos queridos, ya te puedes suponer
cuántos números he hecho para mantenerla económicamente
y mi mujer y yo nos hemos privado de tantas cosas como cualquiera
de esa Obra. Pero no llegué a la estupidez de firmar
letras de 300.000 pesetas de hace 25 años como insistentemente
me pedía mi director espiritual. No porque fuera más
listo, sino porque desde que me casé tengo bien claro
que a lo primero que me comprometí con Dios es a cuidar
de ellos.
En un principio yo también creía en la bondad
y sinceridad que me rodeaba, pero en este mundo las peores
mentiras son las verdades a medias u ocultas. Lee atentamente
el escrito
de mi hija, y verás que no es que nos andáramos
listos en recuperarla, sino que como los conozco a todos ellos,
yo aunque me sonriera, sabía que mi 'Halma' estaba
triste.
Por mi podéis estar dentro o fuera, cada uno va por
la senda que mejor le parece, pero lo que no es de recibo
es que a los menores de edad se les diga que oculten esto
o lo otro a sus padres. También he de decirte que tiene
muy mal gusto el que metan tu nombre o el mío en el
Sagrario y empiecen a querer hacerte pitar. Ahora es cuando
estoy pitando de veras, al ver que sigue con las mismas tácticas
¿Por qué no critican ahora a los sacerdotes
que no llevan sotana como antes?
Podría escribir un libro de mis vivencias y de testimonios
presenciados. Eso de que te vas cuando quieres es una falacia,
te vas cuando te dejan. Y te preparan un acto humillante y
bochornoso parecido a un negación de tu fe ante testigos.
Yo pase por ese bochorno por tener un familiar muy próximo
y querido en la Obra. Te insisto, si quieres dentro, pues
nada. Tú mismo. Pero lo mismo que yo padezco la IGNOMINIA
de haber abandonado la Obra porque mi conciencia la rechaza
por su soberbia y doblez, vosotros tendréis que soportar
a los que no pensamos como vosotros.
En cuanto a la veneración del Santo Padre hacia la
Obra, supongo que no creeréis que sois los únicos
a quien estime y venere. Esto te lo digo sin acritud. Espero
que si tienes hijos, no pases por mi experiencia, deseándote
lo mejor para ti y los tuyos. Un saludo.
PEPE
Estoy con Claudia, que escribió
una de las mas bellas correspondencias de los ultimos dias,
com comprensión, argumentacion y caridad. Sus palabras
expresan muy bien el objectivo desta Web. Sirve también
para recordarnos que actuemos con autocrítica construtiva.
Tal vez nos sirva más a nosotros que a los de fuera,
pues es dificil que nos comprenda quienes no pasaron por expericiencias
similares. Gracias Claudia.
Mr.M
"LOS DE AHORA"
R.H.G. eres muy amable por explicar
un poco más sobre lo que significaba "LOS DE SIEMPRE"
(JESUITAS). Escuché del asunto en el último
curso anual al que asistí, y me llamó la atención.
Pero lo escuché porque el sacerdote estaba hablando
del peligro de hacer apostolado o aceptar gente que hubiera
tratado con los de "LOS DE AHORA", es decir, los
LEGIONARIOS DE CRISTO (grupo de religiosos y religiosas mexicanos,
cuyo fundador es el P. Maciel, aún vivo).
A lo que voy es que nuevamente salta a la luz el tema de
la "unidad de la Iglesia". Y lo que quiero decir
públicamente es que es muy importante que al interior
de la Obra aclaren sus sentimientos y formación sobre
el tema, ya que con lo que dicen algunos de sus miembros (precisamente
en contra de otros grupos al interior de la Iglesia), lo que
logran es confundir. Se infunde cierto resentimiento contra
esos grupos (baste con la críptica denominación
"los de siempre", "los de ahora", y con
la insinuación sospechosa de que son grupos que han
hecho daño a la Obra -sin especificar motivos-). Claro,
al final siempre añaden que de todas formas en casa
se quiere y respeta a todos y hay que velar por la unidad
de la Iglesia... ¡absurda contradicción!
Lo expuesto es sólo una sugerencia para que en el
Opus Dei revisen el tema y eviten la confusión que
causan en sus fieles respecto a qué pensar sobre otras
instituciones religiosas.
Atentamente,
Teresa
Reconocimiento
Acabo de descubriros al buscar otros remas en la red. Estoy
verdaderamente alucinado con lo que leo porque soy un pobre
sufridor de los de "Suegra Supernumeraria" a quién
San Josemaria hace innumerable milagros un día sí
y otro también.
Tengo que leeros con más detenimiento, hoy tengo prisa,
pero no quería dejar pasar ni un solo minuto para felicitaros
por tan esclarecedora web.
Enhorabuena porque gracias a Dios os fuísteis.
Un cordial saludo y espero que mantengais mi nombre en el
anonimato por si las "suegras".
A.V.
Contestación para Ana
Probablemente se trate de un sacerdote agregado o supernumerario
de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y Opus Dei. Éstos
son sacerdotes diocesanos (es decir que no son de ninguna
orden ni congregación) que se incorporan a al Opus
luego de ser sacerdotes, a diferencia de los sacerdotes numerarios
que primero son del Opus y luego, por pedido del Padre de
turno, se ordenan dentro de jurisdicción de la Prelatura
Personal.
Los sacerdotes agregados o supernumerarios (ignoro si éstos
últimos siguen existiendo) siguen dependiendo de su
obispo que es quien les asigna sus tareas pastorales (por
ejemplo, ser párroco) y reciben formación espiritual
del Opus: asisten a círculos, retiros, hacen la charla
fraterna, etc). Por lo que te dijo parece que no te mintió:
recibe formación espiritual pero en cuanto a la obediencia
depende de su obispo.
Espero que la aclaración te sirva.
Nasius
Para Ana, sobre la tipología
de los sacerdotes de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz
y los del Opus Dei
Es normal que tengas dudas porque el asunto tiene miga. Sin
entrar en las circunstancias que, como consecuencia del deseo
del fundador de tener sus propios sacerdotes, han llevado
a la organización actual, voy a intentar explicar como
es el asunto. Te puedes encontrar con las siguientes situaciones:
a) Sacerdotes numerarios del Opus Dei
Son los laicos numerarios del Opus Dei que se ordenan sacerdotes
por invitación del Prelado del Opus Dei. Al ordenarse
automáticamente pasan a formar parte también
de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, y siguen siendo
miembros del Opus Dei. . Quedan incardinados como sacerdotes
de la Prelatura, es decir, que su ordinario ("su jefe")
es al prelado del Opus Dei..
b) Sacerdotes agregados del Opus Dei
Igual que los anteriores, pero cuando entraron en el Opus
Dei lo hicieron como "agregados" en lugar de cómo
"numerarios".
Los dos grupos anteriores forman el "presbiterio de
la prelatura", o sea, el grupo de sacerdotes cuyo "jefe"
es el Prelado del Opus Dei. Todos los cargos de dirección
y de formación en el Opus Dei para los que se requiera
ser sacerdote están ocupados por sacerdotes de estos
grupos. Su trabajo está dedicado al cien por cien a
actividades del apostolado del Opus Dei.
(Como indicaba antes, forman parte automáticamente,
desde que se ordenan, de la Sociedad Sacerdotal de la Santa
Cruz. ¿Por qué? Pues porque la Sociedad Sacerdotal
de la Santa Cruz fue el mecanismo jurídico mediante
el cual M. Escrivá pudo tener sus propios sacerdotes
cuando el Opus Dei aún no era una prelatura personal.)
c) Sacerdotes agregados de la Sociedad Sacerdotal de la Santa
Cruz
Son aquellos que siendo sacerdotes diocesanos, deciden que
quieren colaborar con el Opus Dei. Los puedes encontrar en
los centros de la Obra, normalmente confesando, pero no ocupan
cargos de dirección. Digamos, que "echan una mano"
en las labores, e intentan vivir el espíritu de santificación
del trabajo ordinario en su profesión de sacerdotes
diocesanos. (Parece el caso que Ana indica en su correo es
de este tipo). En sentido estricto no pertenecen al Opus Dei,
pero sí a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz (que,
no olvidemos, son inseparables. Cuesta un poquito entenderlo,
pero...)
No forman parte del "presbiterio de la prelatura",
porque "su jefe" es el obispo de la diócesis
a la que pertenezcan. (No cabe duda, sin embargo, de que a
través de la dirección espiritual, charlas,
convivencias, etc. la influencia del Opus Dei sobre ellos
es muy fuerte).
En los centros, estos son los sacerdotes que suelen conocerse
como "agregados".
d) Sacerdotes supernumerarios de la Sociedad Sacerdotal de
la Santa Cruz
Esto ya es para nota. Son como los anteriores, caso c), sacerdotes
diocesanos, pero con imposibilidad de dedicarse a "echar
una mano" en las labores. Por ello no te los encontrarás
habitualmente en los centros. Pertenecen a la S.S. de la Santa
Cruz, pero no pertenecen al presbiterio del Opus Dei, y su
ordinario es el obispo diocesano.
Javier
29-9-2003
El complejo de infidelidad.
Después de respetar y aceptar escribe
a este propósito el P. César Vaca- la doctrina
moral sobre la responsabilidad que engendra la vocación
y la obligación moral de responder a llamamiento de
Dios, se exagera mucho, incluso en libros espirituales que
tratan del tema, sobre los peligros del abandono de la vida
religiosa, sin distinguir lo suficiente en los casos en los
que ese abandono es por voluntad propia y falta de fidelidad
a la gracia, de aquellos otros en los cuales la vocación
no se reveló con plena claridad...
(El correo compleo de 'Crítico Constructivo'
está en Tus escritos
y se titula "El
complejo de infidelidad")
Para la Hermana
Gloria
Estimada Hermana Gloria. Gracias por tu mensaje, sobre todo
porque recuerdas que lo que debe primar en la vida es la caridad.
Coincido contigo en eso. Ahora, en cuanto a los juicios que
realizas sobre lo escrito en la web, difiero un tanto.
No se trata sólo de presentar una visión "amarga,
sin amor y sin sentido". Quizá puedas verlo desde
otra óptica (como lo vemos muchos de los que participamos):
1. Compartimos experiencias reales, situaciones de vida que
"curiosamente" coinciden, independientemente de
la época, la edad, la nacionalidad. Por tanto, objetivas,
ciertas, fundadas en hechos. Pueden narrarse en distintos
tonos, pero no por ello son necesariamente "amargas"
como las calificas. Me parece que muchas de ellas reflejan
más bien el sufrimiento padecido en común. Si
lees bien, otros mensajes encierran también esperanza
y motivan a salir adelante, comunican alternativas, abren
paso a otra vida posible -fuera de la institución-
(y si se narran los hechos es para dejar constancia de que
al interior del Opus Dei hay cosas que dañan, pero
que se pueden superar).
2. ¿Puedes categóricamente juzgar que sin "amor"?
Hermana, sólo Dios mide los corazones. Creéme
que detrás de muchos escritos lo que existe es un profundo
deseo de ayudar (incluso, me atrevo a decir, el afán
de algunos exmiembros por comunicar -por este medio- al mismo
Opus Dei la pena que los embarga al confirmar errores a nivel
institucional, y la intención de que se den cuenta
de ellos) .
El simple hecho de compartir situaciones de vida -que al
leerse recuerdan la propia experiencia-, lo que hacen es ayudar
a quienes las padecieron a no sentirse bichos raros, casos
exclusivos, seres egoístas que "no supieron",
"no quisieron", "despreciaron", "fueron
soberbios" respecto su camino... creéme, esas
ideas son las que permanecen rondando la mente de muchos que
salen, porque así los hicieron sentirse (así
se les "culpó" al salir), y cuando uno se
da cuenta de que no era "uno", sino una "mentalidad
institucional" (porque lee la misma situación
en otras personas), revalora su propia persona, revalora su
propia conciencia, y encuentra nuevos motivos para continuar
adelante -conforme ve a otros que lo han logrado después
de su salida-.
3. ¿Sin sentido? Delatar el mal es un deber de justicia,
y ofrecer alternativas un deber de caridad. ¿Que hay
que aprender a hacerlo? ese es otro boleto, al que tenga
oídos, que oiga. Muchos testimonios lo hacen
con objetividad, incluso con caridad, con esperanza.
Además, algunos encuentran el "sentido"
justo después de "desahogarse", y no por
ello lo que dicen es infundado, ¡muy por el contrario!
No olvides que esos que son calificados como amargados
(por personas ajenas al modo del vida y conocimiento preciso
de la vida al interior del Opus Dei) son gente buena, que
entregó por años su vida a Dios, que ha luchado
y sigue luchando por ser coherente con su conciencia. Y que
entre las cosas que dicen se pueden encontrar elementos comunes
que llevan a comprobar aspectos viciados de ese camino
que finalmente no les correspondía.
Mira, hermana Gloria, si vas siguiendo a personas concretas
por algún tiempo (hay gente que escribe permanentemente),
te irás dando cuenta de su propio cambio, es genial.
El simple hecho de haber convertido esta página en
un espacio de diálogo, es ya muestra patente de su
propia evolución. De sólo contener "libros
silenciados" se ha convertido en un espacio en que concurre
cada vez más gente que busca la verdad. De una adecuada
participación dialógica dependen muchas cosas.
Sentido existe, y profundo. Ojalá la propia Iglesia,
las autoridades del Opus Dei, y la gente de buena voluntad
puedan desentrañar ese "sentido" que se desprende
de un clamor hondo de tantas almas que han pasado por la institución.
Hay documentos valiosísimos que pueden servir de líneas
rectoras para una transformación para bien... depende
de "su voluntad" para descifrar la riqueza antropológica
y espiritual que encierran. Me parece, en conclusión,
que lo que hace falta es la disposición de encontrar
errores reales, para cambiarlos (no basta con decir "miren,
una bola de amargados, sin nociones de amor, y que escriben
sin sentido, se han reunido..." lo interesante sería
mejor que se preguntaran ¿por qué una vez que
se ha abierto un espacio de libre expresión ha confluido
gente tan diversa, diciendo -de diferentes formas- lo mismo
respecto a situaciones muy concretas y dañinas?).
En cuanto a que el Opus Dei pueda servir a algunas personas
a alcanzar la santidad y a otras no, de acuerdo, aunque sinceramente
me parece que esa cuestión es más personal que
de "camino" (uno puede estar en un "camino"
siendo un sinvergüenza, o desaprovechando los medios
que ofrece -y vale de una vez recordar que el Opus Dei es
un medio y no un fin-). A mí en lo personal me ha ayudado
mucho, y le debo y agradezco varias cosas (incluidas las circunstancias
que me causaron y causan crisis, porque también de
ellas he podido aprender -sobre todo a no hacerlas-). Pero
eso no quita que existen prácticas concretas y objetivas
que producen serias consecuencias perjudiciales a nivel moral
y espiritual. En la historia de la Iglesia ha habido también
errores -que el mismo Santo Padre, con el valor y humildad
que lo caracterizan, ha reconocido, rectificado y hasta pedido
perdón-. ¿Por qué no puede ocurrir lo
mismo en el caso del Opus Dei?
Espero que puedas leer con más calma y profundidad
lo que se encierra en este espacio de confluencia, y encuentres
lo que realmente hay detrás de lo que has calificado
como "ataques" y "veneno".
Dios te bendiga hermana.
Claudia
Desde hace unos días, cuando se abre el apartado "Diario
de a Bordo" salta una página porno en inglés.
No me he quedado con la dirección porque algunas de
esas páginas se "enganchan" automáticamente
y cobran por entrar. Como el ordenador es del trabajo y los
gastos están "relativamente" controlados...
no la he abierto, pero salta siempre. Si hace falta saber
esa dirección me lo decís.
Un abrazo.
Alfonso
(Amigo, no podemos hacer nada ante los milagros de Escrivá
que tanto se prodigan por internet y especialmente contra
esta web. Ya no sólo, si se pierde la dentadura postiza,
se encuentra; ahora si se le reza mucho, redirecciona webs
a páginas pornográficas... La santidad hace
maravillas.)
hola orejas!
que tal? tengo una pregunta a ver si me la podeis contestar,
plis
un presbitero de una parroquia de barcelona al que le preguntaron
si era del opus dijo que era de la orden de la santa cruz.
eso implica ser del opus? porq el dice que recibe la direccion
espiritual del opus, pero que el no tiene nada que ver. puede
ser eso posible?
ana
(Amiga, a ver qué nos contestan los orejas porque
este oreja no lo sabe. El Opus Dei es en realidad "Sociedad
Sacerdotal de la Santa Cruz y Opus Dei", pero quizá
para abreviar, se han buscado un "nickname" más
corto o quizá haya una orden de la Santa Cruz o quizá
ahora se diga que uno pertenece a la "Santa Cruz"
en lugar de al Opus Dei o quizá ya funcione la Sociedad
Sacerdotal por una lado y el Opus Dei por otro, o quizá
el presbítero tiene amnesia pasajera.)
Los Jesuitas.
He leido que habían prohibido a un
jesuita hablar sobre el Opus Dei. Por favor, que alguien
le comente al General de los Jesuitas, que en el Opus Dei
se habla de ellos y muy mal por cierto.
Vamos a hacer un poco de memoria: Se nos daba una charla
titulada "LOS DE SIEMPRE", con un libro llamado
"Instrucciones" (escritos por san josemaría,
había uno específico para cada labor y otro
exclusivo para los directores, esos libros sólo los
podían utilizar algunos directores, no están
en todos los centros.)
En esa charla y siguiendo el texto de san Josemaría,
se nos contaba el tremendo daño que los jesuitas habían
causado a la Obra, lo mucho que había sufrido san Josem.
con ellos, lo prohibidísimo que estaba que un jesuita
entrase en un centro, la torpeza que significaba que un numerario
se le ocurriese hacer la tesis en la universidad de los Jesuitas
en Roma y la especial vigilancia a que quedaba sometido dicho
numerario por ese hecho, y otras barbaridades durante cuarenta
y cinco minutos que duró aquello.
Todo era descrito con un lenguaje amenazante y con mucho
miedo y sin demostrar nada. Se leían de vez en cuando
trozos de texto de san Josemaría de aquel libro.
Supongo que ese libro no lo habrán presentado al proceso
de canonización.
Uno salía de aquella charla perfectamente convencido
de que los jesuitas eran verdaderos demonios. Al final de
la charla el director comentaba que existía un nuevo
subgrupo de "LOS DE SIEMPRE" formado por los que
se habían ido de la Obra, insinuaba que habían
cometido graves pecados contra la pureza, y que no merecían
otra cosa que apartarse de ellos todo lo posible, los directores
habían hecho todo lo que habían podido para
salvar sus almas, pero ahora era todo inútil.
Por favor, que alguien se lo comente al Padre General de
los Jesuitas, para que hable con el S.E.R. Prelado del Opus
Dei (Besad donde él pise) para que ellos tampoco hablen
mal de ninguna institución de la Iglesia.
R.H.G.
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