Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
OPUS DEI: ¿un CAMINO a ninguna parte?

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CORRESPONDENCIA

Del 29 de septiembre al 3 de octubre de 2003

3-10-2003

Queridos Orejas:

Cuando hablamos de la Obra, ¿no creéis mejor, que lo que se debe de hacer es buscar la verdad del asunto, y no tanto ir en contra o a favor?. Pienso que es una tarea complicada, y nos encontraremos cosas muy buenas, que no hay que desvirtuar, y cosas muy malas que hay que combatir con toda energía. Yo soy de la Obra y busco la verdad, y vosotros no sois de la Obra y creo que buscáis también la verdad, y estoy seguro, que no lo hacéis de manera equivocada, os lo aseguro. Como podéis ver, ni me escandalizo, ni me rasgo las vestiduras de los comentarios de esta WEB, porque son verdad. Aunque algunos no lo fueran, por mi experiencia, he podido comprobar y he cohabitado (vivir junto) con testimonios muy similares, uno de ellos es el de mi mujer. La solución a los problemas es muy difícil, ya que en la Obra, los numerarios y agregados sobretodo están muy ciegos o obcecados, y les planteas cosas, que existe esta WEB, que hay problemas de falsas vocaciones, que hay dolor de hermanos que están dentro y FUERA, y se escandalizan y ponen el grito en el cielo, y se dan "una dosis extra de flagelación, por tu alma corrupta" (esto es broma, supongo). Cuando uno se le cae el velo, fuere por lo que fuere, vienen los "¡madres mías!". No hay más ciego que el que no quiere ver, ni más sordo que el que no quiere oir, y eso pasa con la mayoría de numerarios y agregados "felices". Hay otro pequeño número de numerarios y agregados "felices", que ven estas cosas y se ven atados, se callan, o lo hablan muy discretamente, o les planteas cosas "raras" y te responden la postura oficial con la "boca pequeña", diciéndose a sí mismos, "eso es lo que tengo que decir". Otros viven "felices" porque no entienden nada y obedecen y no se preguntan nada. Hay otro número de numerarios y agregados "infelices", que ven estas cosas y se ven atados, no se callan, y "saltan" a la calle. Hay numerarios y agregados, que les falta el aire, necesitan más, y también "saltan", "en mejor plan", por lo general.

En definitiva, sabores, olores y colores para todos los gustos. ¿Qué pasa aquí?. En cambio, los supernumerarios, por suerte estamos en la calle, tenemos contacto con la realidad, aquella llamada "es lo que hay", tenemos otros intereses aparte de la Obra (nuestro trabajo que no es corporativo, nuestros esposas e hijos, amistades de todo tipo, relaciones sociales, pagos,.) y sólo nos "pasamos" una vez o dos veces por semana por el centro y ya está. Se nos "pega" poco la presión numeril. En general pensamos por nuestra cuenta... En mi caso concreto, separo mi vida espiritual del resto (sin ser incoherentes), yo sólo cuento mi vida espiritual, mis problemas no espirituales me los resuelvo yo. En mi cama sólo estamos mi mujer y yo, y ahí tomamos un montón de decisiones importantes... Y si tengo una amistad personal con el director, pues le cuento cosas más personales, de amigo a amigo. Y por ahora, no me han fallado en confidencia, ni yo tampoco, ya que la confianza y sinceridad debe ser mutua. ¡Vamos!, cuando le cuento cosas a un amigo, éste se debe de mojar también. Los directores que son amigos también, en mi caso, suelen ser personas de mentalidad abierta, de los de la boca pequeña. Creo que muchos supernumerarios vivimos el espíritu de la Obra tal como lo vivo yo. O yo lo vivo tal como ellos. No sé, tenemos dinero en el bolsillo (gracias a Dios) y no tenemos que dar cuentas, podemos ir a todos los sitios sin hacer cosas raras (cines, bares...), tenemos esposas, podemos hacer todo lo que nos plazca con sentido común y sin dar explicaciones a nadie (yo sólo a mi mujer). En definitiva gozamos de más libertad y poder de decisión. Y si un numerario o numeraria se quiere meter en mi cama (en sentido figurado), le pego un tiro, además, no cabe ahí, ya que es biplaza. Sólo mi mujer y yo. Anécdota: Invité un numerario a comer a mi casa, y me criticó que tenía los cuadros torcidos porque estaban clavados con un solo clavo, y que no veía ni patos, ni burros... menudas chorradas... qué profundo. Enseguida le dije que cada uno, tiene la casa como quiere o puede. Lo tuve que llevar a la bañera de mi hijo a enseñarle los patos.

Creo que tenéis que poner de forma visible en la web, como lo de "gracias a Dios que nos fuimos".

"Hay que saber decir que no", "No caigas en el primer error, el primer silencio"; son dos máximas para poner en grande, con esto se puede evitar muchos males.

Jaime


Vaya revuelo que se ha montado en la página!!!. Yo creo que todo se ha sacado de madre. Esta página es lo que nosotros queramos que sea. Cada vez es más popular y cada vez más gente del Opus o pro-Opus viene a ella. Yo creo que no es malo contrastar todo tipo de opiniones: INCLUIDAS LAS DE OREJAS por supuesto.

Quien está dispuesto a cortar orejas?... Orejas? O son más bien lenguas? Lo que se quiere cortar?. Creo que la lengua ya nos la comió una vez “el gato Opusmiau” para que ahora nos mutilemos en la web por una tontería.

En todo el tiempo que vengo siguiendo la web –y leo todos los días la correspondencia en sustitución a la lectura espiritual- nunca he visto una salida de madre de ningún oreja.

Creo que la labor de los orejas es necesaria para el buen funcionamiento de la página por su papel de moderador y de comentarista. Suscribo totalmente la opinión de Fulcro.

No olvidemos que los orejas nos brindan a todos la oportunidad de hablar y de expresarnos –sin tener en cuenta el contenido de nuestra opinión- ¿por qué deberíamos nosotros censurarlos a ellos?.

Oreja habla ,expresa, di, cuenta, bromea, comenta pues antes que nuestra esta página fue tuya. Si nosotros podemos hablar es gracias a tu valentía por ese empuje y NO TEMER A DECIR TU OPINIÓN aunque no guste... “Y si no gusta ¿qué importa? Y si gusta ¿qué pasa? Nada.

Además, suscribo con ese amigo que dice “ por un perro que maté mataperros me llamaron”

Los orejas son personas como nosotros y pueden opinar y algunos estaremos en contra y otros a favor. Pero no se nos debe olvidar que son personas valientes y generosas. Valientes porque se atrevieron a romper el silencio creando la web y generosas porque ofrecen su tiempo y su oro para que la web funcione.

Mi abrazo y afecto a todos vosotros, orejas.
SAM

Un beso a todos y todo mi afecto y agradecimiento. Y al oreja que haya escrito eso: animo!!! que no es para tanto y NO TE CALLES POR QUE HAYA CHOCADO LO QUE DICES. NADIE TIENE DERECHO A DECIRTE QUE TE CALLES.

(Amiga, ¡que va a parecer que nos hemos escrito nosotros este correo!. Que conste que nos da pudor colocar mensajes donde nos dicen lo bien que lo hacemos pero, en vista de que aquí no censuramos ningún correo, lo colocamos. Seguro que lo ha enviado desde un cyber un oreja que acaba de salir diciendo que iba a por tabaco)


Queridos Orejas:

Yo soy una visitante asídua, de hecho, diaria, a esta web, pero en 6 meses solo os mandé un correo. El hecho es que yo tampoco tengo mucho que decir al respecto de la obra, porque yo solo pasé por un colegio y universidad pertenecientes a esta "santa organización" sin mayores consecuencias. Sin embargo, en mi familia hay diversos contactos con el opus: un tío mío es sacerdote de la obra, y mi madre simpatiza bastante. Debido a ello tuve que asistir al dichoso colegio ese, el cual resultó ser una timada, total y absoluta. Mi expediente fué brillante, terminé el C.O.U. con sobresalientes... pero qué pasó cuando me presenté a la selectividad....??? efectivamente, me caí con todo el equipo, y había estudiado como una energúmena... pero me enfrenté a preguntas de las que no había oído hablar en mi vida, y gente que asistió a humildes institutos públicos, no tuvo ningún problema. Y mi familia dejándose la piel para pagar una educación que le habían vendido como la mejor, personalizada, humana, etc etc.. y una mierda!!

Después vino la Universidad made in Opus, que yo creía iba a ser distinto... pero oh sorpresa! Más de lo mismo.... Desde luego no era lo mismo que el colegio, donde va a parar... pero pagar lo que se paga por algunas clases impartidas por auténticos vejestorios, dinosaurios pertenecientes a la "institución", es un crimen.

Y ahora me centro en el verdadero motivo que me ha llevado a escribiros de nuevo: me niego a quedarme impávida ante las acusaciones al Oreja, y sus sucesivas respuestas teniendo que justificarse. Entiendo que esta es una página en la que la libre expresión es una de las características más importantes no? Pues bien, por eso mismo, lo que no entiendo es a que viene el rasgarse las vestiduras a propósito de las replicas del Oreja... las formas? Por qué? yo no veo malas formas. En las respuestas a Jose Carlos y a Antonio hubo comentarios irónicos, si.... Y qué? Por una contestación que no gusta ni a los susodichos, ni al resto del personal el orejas tiene que disculparse? No me convence... es lo que digo, libertad de expresión, si quiere utilizar ironías que las utilice! que analice y conteste a los mensajes como le venga en gana! Que a fin de cuentas es uno de los que está haciendo posible esta web, en la que tanta gente se desahoga, y estoy segura, está ayudando a muchos, y que tiene la paciencia de sentarse, leer, contestar y colgar los correos para que nosotros los leamos! Que escriba sin restricciones, con espontaneidad... y si a alguien no le gusta pues que le conteste como crea oportuno, que para eso está la web, para hablar, intercambiar opiniones, vivencias, etc.... De verdad que me daría mucha pena dejar de leerle "en su salsa".

Ánimo Orejas! Y que os vaya bonito!
Sara


Me gustaría que la oreja de guardia se llamara Paco o Pepe o Carmen o algo así y quiza me resultaría menos impersonal escribir este correo. Me ha sorprendido muy gratamente encontra esta página, aunque he de decir que tecleé Opus dei para saber si ayer era o no el 75 aniversario de la fundación o no. Pero sólo para dar la respuesta correcta a mi madre en caso de pregunta.

Hace ahora algo más de un año que dejé la Obra y todavía hoy me parece que ni siquiera está bien que escriba esto. Pero en fin... El caso es que me fui y me alegro mucho porque me he sentido más libre en este año que en los 27 de mi vida.

No creas que llevo 27 años en la obra, aunque se podrí decir que sí porque desde que tengo uso de razón el opus dei está dando vueltas alrededor de mi vida. Mis padres son supernumerarios y prefiero no imaginar el disgusto de mi madre si alguna vez se enterara de que escribo esto.

No quisiera extenderme mucho, solo daros las gracias por la página y por la posibilidad de leer las experiencias de tantas personas con las que inevitablemente te sientes identificada y a las que comprendes. Yo sigo pensando que los que llegamos al opus dei lo hicimos buscando aquellos ideales maravillosos que nos contaban, pero luego la realidad es bastante diferente, sobre todo cuando empiezan a contarte poco o poco las cosas. Desde que descubrí la página ayer tengo que decir que estoy enganchada, y también sorprendida. No dejo de alegrarme de haberme empeñado en ser supernumeraria y no numeraria o agregada como ellas veían tan claro. Pero lo que más me asusta es la cantidad de cosas sobre numerarios y agregados que he sabido con toda claridad leyendo los testimonios. Nada me coge de sorpresa porque muchas cosas las intuía, pero casi nunca pregunté porque nadie estaba dispuesto a contestarme.

Lo que más me preocupa de todo ésto es que todavía tengo tres hermanas en la obra. Nosotros somos 8 hermanos y de los 5 que pitamos 2 estamos fuera. Sobre todo una de mis hermanas está mal y casualmente es la que no ocupa ningún cargo directivo, yo la veo mal pero ya sabéis lo dificil que es sacar el tema, sin que te acusen de resentida y de querer llevar a los demás por el mismo camino equivocado que tu llevas. La verdad es que ha cambiado mucho desde que pitó y lo hizo mucho antes que yo creo que tendría 16 años. No se qué hacer, supongo que tendré que seguir esperando a que sea capaz de salir ella sola. Te preguntarás porque no me preocupan las otras dos y te diré que las veo bien, como siempre, siguen siendo en esencia las mismas. Sin embargo la que me preocupa a cambiado de carácter y no es ni mucho menos la hermana guasona y alegre que yo conocí.

No quiero alargarme demasiado. Cuando consiga ordenar mi cabeza y asimilar toda la información que me va llegando ahora prometo volver a escribir y contar mi historia enterita de cabo a rabo.

Si se os ocurre qué podría hacer con mi hermana os agradecería que me escribiérais, yo mientras intentaré manejar la culpa que me acosa cuando pienso en que quizá yo no soy nadie para meterme en la vida de mi hermana.

Gracias por escucharme.
María


Mi experiencia personal

Hola Orejas,

Encuentro que este site es extraordinario. Se os podrá criticar tu posicionamiento en torno a la Obra, pero los testimonios de Carmen Tapia o Moncada no los puede negar nadie. Además se puede estar más o menos de acuerdo con la Obra, se pueden tener amigos dentro de ella y respetarlos hasta el punto de no atacar la Institución, pero lo que no me como ni en broma es el tema de la santidad de Escrivá. Que este site demuestre que su proceso de beatificación no fue del todo transparente no es criticar a la Iglesia, es criticar al Opus Dei. A fin de cuentas, si la Obra no tiene nada que esconder acerca de la santificación no entiendo como se pusieron tantos clavos a las ruedas que giraban en otra dirección. Recuerdo un detalle que me sorprendió cuando me hablaron en un círculo sobre la incorrupción de Escrivá. Como era de esperar nadie vio el cadáver salvo los del Opus y pocos más, el argumento era que no era una pieza de museo que todos pudieran ver.

En resumidas cuentas este site enseña aquello que otros tratan de esconder. El principal enemigo de la Obra está dentro, Son ellos mismos. La falta de espíritu autocrítico les impide evolucionar. Se han quedado en la España de los años 60 y 70 con sus pros y sus contras. Que la Obra tiene cosas buenas nadie lo duda, porque dentro hay personas buenas, pero no implica a que los errores deban perdonarse o minimizarse. Quizás estamos haciéndoles un favor al mostrarles sus miserias si tuvieran ganas de rectificar.

Sobre mi experiencia personal, os diré que conocía la Obra mucho antes de pedir la admisión. Practicaba las reglas de piedad, hacía apostolado y los defendía con uñas y dientes. Quizás no me admitieron porque a mi eso de ser numerario no me iba y fui directo a decirles que mi vocación era casarme, tener niños y, en definitiva ser supernumerario. Tampoco les debió gustar que no destacaba especialmente en los estudios o que no tuviera el pedigrí necesario. No lo sé, pero ahora ya no me importa. Sólo sé que el funcionamiento muy interno de la Obra no lo llegué a conocer y ahora he podido descubrir con las lecturas de Tapia muchas cosas. Sólo sé que el no ser admitido en aquel momento me hizo daño. Afortunadamente no he necesitado de asistencia psicológica para superarlo. He visto como fruto de mi apostolado había empujado a otras personas a la Obra y sin embargo a mi no me hacían el más mínimo caso. Eso sí, el dinero que les deba era muy bien recibido. En definitiva, me utilizaron en cuanto les resultaba útil.

Conseguí superar el estado recobrando la autoestima que anulas en beneficio de la Obra. La autoestima que "Camino" intenta anular por completo. No entro en detalles porque ahora estoy en el trabajo y debería estar "santificándome".

Dice José Carlos que la Obra es buena y Escrivá es santo porque la Iglesia lo dice, Pues bien, gracias a la Obra y a algunas decisiones vaticanas cada día estoy más lejos de la Santa Casa de Pedro. Quizás con el tiempo la Obra y la Iglesia estarán tan peligrosamente unidas que llegarán a confundirse, pero lo que me ha enseñado mi formación y mi experiencia personal es que para estar con Dios no hacen falta intermediarios y menos de la calaña de la Obra.

Crocus


"sobre forma y fondo"

Queridos Orejas:

Dos cosas por delante, visto lo que se ha liado al respecto:

1. Mi mensaje no pretendía en absoluto disuadir a nadie de que dejase los comentarios editoriales, aunque alguno lo haya interpretado en esa línea. El comentario a José Carlos, en privado, a través de vosotros, de que "Sé positivamente que los orejas se están planteando dejar de hacer comentarios, etc.", transcribía literalmente una respuesta vuestra a mi mensaje dirigido en su día a Ramiro E. Nada más. Me parece muy bien que hagáis comentarios y, efectivamente, creo que es cuestión de cuidar la forma en las respuestas y no, básicamente, de fondo.

2. Aunque en el caso de los comentarios editoriales el asunto sea de forma, creo que Manuel F. se está pasando tanto en la forma como en el fondo con sus referencias personales a José Carlos y a su mujer. No sé si decir que es de mala educación o de mal gusto, porque va más allá de la simple falta de tacto y no tiene nada de chistoso. En ese aspecto, si los Orejas son moderadores del sitio, no veo cómo se compagina su declarada buena voluntad de evitar ellos descalificaciones o comentarios inapropiados con dar cabida a la ordinariez vertida en las alusiones de Manuel F. a la mujer de José Carlos. No tengo palabras para expresar mi repulsa ante lo ocurrido.

En otras circunstancias, sabéis que os he dado la opción, a vuestra entera discreción, de escribir directamente a la persona afectada (sin publicar nada en la web) o de que, dentro de vuestra exclusiva facultad de publicar o no lo que os parezca, se publicase mi mensaje en la web.

En este caso, porque me parece que la nota de atención a Manuel F. puede hacerse extensiva a alguna otra persona que "apunta maneras", os rogaría que publicáseis mi mensaje.

Si queréis que cambie o matice algo, me lo decís, pues no es para nada mi intención generar malestar, sino todo lo contrario, y me temo que, si las personas -digamos- "más sensibles" nos abstenemos en esta cuestión, el tono podría degenerar hasta hacer que algunos dejen de pasarse por aquí, lo que lamentaría profundamente.

Por lo demás, y como siempre, muchísimas gracias por vuestra labor al sacar adelante este sitio.

Un fuerte abrazo,
fede

(Amigo, M.F. ha escrito más abajo de este correo contestando sobre lo mismo que tú censuras de su correo. Sinceramente, no creemos que sea para tanto porque el que se obstina en escribir y nombrar una y otra vez a su mujer es el propio José Carlos. Sería mejor -creemos- que la mujer de José Carlos hablara por sí misma si quiere hacerlo y no se viera aludida una y otra vez por su marido (¿qué ha hecho ella para merecer eso?). Este oreja también le ha contestado al respecto al nuevo correo de José Carlos en donde también vuelve a hablar una y otra vez de su mujer. Si de verdad existe la mujer de José Carlos, que escriba ella o que le diga a su marido que la deje tranquila, que ya dirá ella lo que tenga que decir, aunque sea mandarnos a paseo.)


Sugerencias sobre los mensajes

¡Menuda se ha montado a partir del correo de José Carlos! Si se me permite la opinión, yo veo muy legítimo -y a veces necesario- que el Oreja de guardia comente algunos correos. Al fin y al cabo, bastante hacéis con dedicarle tiempo a la web y permitirnos publicar nuestros comentarios con tan alto grado de pluralismo y sin censurarlos. Aprovecho la ocasión para daros las gracias porque esto es un lujo.

Lo que creo es que los mensajes que enviamos los navegantes deben ser muy respetuosos con las personas (no con las ideas). Las personas me merecen todo el respeto del mundo aunque piensen de forma diferente a mí; las ideas no, y por eso considero legítimo rebatirlas.

Dentro del respeto a las personas considero que no caben las siguientes actitudes que a veces se ven en algunos mensajes:

- Dudar de la veracidad de lo que otros dicen: si mi experiencia no es igual a la que tú cuentas será porque tú mientes.

- Dudar de la buena fe del que escribe: como no piensas igual que yo debes ser un infiltrado.

- Ridiculizar la postura o experiencia vital del que escribe: todo lo que se ha comentado sobre la esposa de José Carlos me parece lamentable por su tono peyorativo e irrespetuoso. Y no me sirve decir que es broma, porque hay cosas sobre las que no se debe bromear. Que un comentario sea gracioso no significa que sea correcto ni justo.

- Aconsejar en tono frívolo lo que uno debe hacer de su vida: pide la admisión como supernumerario o cosas así.

En fin, son algunas ideas que sugiero se tengan en cuenta. De esa forma el debate será mucho más rico y agradable. Y nadie tiene por qué sentirse molesto por el hecho de que uno tenga una experiencia distinta a la suya o piense de manera diversa.

Un saludo a todos,
Ramiro E.

(Amigo, si nos encorsetamos, ésto va a parecer una tertulia con el prelado. De acuerdo en que cuidemos las formas o lo intentemos, pero lo mismo que nos dan caña a los orejas de este lado de la pantalla, alguno que otro también se la puede llevar no ya por el oreja de turno -que no creo porque está haciendo un cursillo de buenas maneras- sino por el resto de quienes leen y opinan. Y detalle importante: la inmensa mayoría que escribe en esta web y los orejas que la creamos no guardamos buen recuerdo del Opus, de ahí que cuando nos dicen o nos quieren hacer creer que el Opus es otra cosa muy diferente y nada que ver a la que hemos vivido, -con las secuelas, desgarros, cicatrices que cada uno lleva-, no es fácil ser tan condescendientes como tú pides.)


Idas y vueltas

Amigos:

Veo que las sensibilidades están un poco despiertas. Me parece prudente no caerle a nadie con malas manera, pero, sinceramente, hasta ahora no he leído que ningún Oreja conteste de modo intempestivo, por lo menos de acuerdo a los usos de mi tierra.

Como ya se ha dicho somos todos mayorcitos, y, con toda franqueza, me alegro que a José Carlos todo le vaya tan lindo, pero a mí la experiencia de la Obra no me fue de ninguna utilidad, en rigor me fue perjudicial en grado sumo. El hecho de que cada uno de nosotros, los ex, trate de encontrar aspectos positivos, o aún los encuentre legítimamente, en su vida en la Obra, me parece algo lógico y de supervivencia elemental.

Nuestra vida en el Opus Dei estuvo marcada por la convicción y la entrega a una institución que resultó ser negativa para nosotros, en el mismo sentido en que podría haber sido negativa para cualquier otra persona, pues lo que aquí se ventila no son experiencias vitales individuales difíciles, que todo ser humano tiene, sino las consecuencias y características de una institución, aprobada por la Iglesia católica, pero que actúa contra la dignidad de las personas, los mandamientos de la Ley de Dios, y los preceptos evangélicos, lo cual acentúa, a mi entender, la envergadura del problema. Con todo, me parece muy reduccionista plantear estas cuestiones en términos de Bien- Mal.

El buen Santo Tomás enseña que nuestras elecciones son realizadas bajo la especie de lo bueno, y que es la falla del entendimiento o la falta de rectitud de la voluntad las que nos conducen a obrar contra la verdad y el bien, por lo cual aún lo erróneo es realizado bajo la razón de bien, lo que viene a querer decir que ser malo, malo absolutamente, es sustantivamente raro, pero no lo es, la confusión entre lo bueno y lo malo, o la utilización de medio malos, so capa de fines buenos.

Decir que el Opus Dei es intrínsecamente malo sería una afirmación burda, pues en el orden de lo humano nos encontramos con una tarea más compleja que la de andar detectando "males absolutos", a saber: la de discernir en nuestra vida, en este mundo, con nuestras determinaciones y nuestra historia, qué cosas o situaciones nos llevan a lo bueno y lo verdadero, y cuáles no. Las notas esenciales de la institución Opus Dei conllevan el debilitamiento, la manipulación y aún la negación de esta capacidad y obligación humana del discernimiento en libertad, con las consecuencias ya sabidas.

Yo no niego en sí que existan personas que puedan haber obtenido vivencias positivas del Opus Dei, en principio todos habremos experimentado alguna circunstancia de este estilo en nuestra vida allí, pero el asunto es si el Opus Dei en términos estructurales, de modo regular, en su dimensión identitaria, aporta a lo que es bueno y verdadero en las personas o no, pues en eso consiste integralmente la santidad: en llevar a la perfección la naturaleza que Dios nos ha donado en la creación. Mi evaluación de esta institución, que veo ampliamente confirmada y expuesta con claridad por muchos aquí, indica que el Opus Dei no aporta, estructuralmente, integralmente, al bien de las personas, más bien las perjudica.

En estos días, en los que la Obra cumple 75 años de existencia, entiendo que mucha agua ha pasado bajo el puente en la historia de la Iglesia, y que veremos de qué va la cosa para el Opus Dei en el futuro, lo cual no nos libra de tomar nuestra palabra ahora "que estamos vivos", como dice la Sagrada Escritura.

Lo que se viene exponiendo en esta WEB, lo que podemos contar muchos desde nuestra experiencia permanece y nos plantea una opción, que quizás en otro momento, cuando no había un vehículo de expresión como éste no teníamos: poder hablar sobre el Opus Dei, cuando la tónica siempre fue el silencio, poder cuestionar al Opus Dei desde su identidad, cuando hasta ahora la interdicción caía sobre la los ex (sin mediar ninguna autocrítica por parte de la institución), poder informar, compartir, acompañar; y para los que permanecemos en el seno de la Iglesia Católica, poder señalar que el Opus Dei contradice aspectos sustanciales de nuestra fe, asunto que ya he argumentado, pero que jamás me cansaré de repetir, por amor a la misma Iglesia, y con esperanza en la Verdad.

Reitero: nos encontramos hoy con opciones que no habíamos tenido antes de este modo, y cualquiera que haya salido del Opus Dei en estos años, lo sabe; por lo cual, para José Luis, o para quién sea: que por lo menos a mí, y veo que a unos cuantos, no nos vengan a contar un cuento de hadas acerca de la Obra, pues allí no hay hadas, y este tema no es meramente personal, tiene consecuencias más amplias, desgraciadamente.

Si San Josemaría es o no "San", es asunto de todos los católicos, pero fundamentalmente de quienes han llevado el proceso de canonización adelante, que responderán, como cualquiera, ante Dios. Para algunos de nosotros esta circunstancia será dolorosa, pero la verdad, más allá del Opus Dei, e inclusive, más allá de nosotros, es indestructible. Eso sí, El que nos ha hecho cuenta con nosotros, y nadie puede negar la responsabilidad de cada uno respecto de sus experiencias y sus decisiones, a lo sumo puede eludirlas, pero eso no afecta el núcleo de los problemas. Es bueno recordar lo que dice el Salmo: Initium sapientiae timor Domini: inicio de la sabiduría es el temor del Señor...

Les dejo un abrazo, y la invitación, para los que quieran, a rezar por la Iglesia y por el Santo Padre, en estos momentos tan particulares.

Flavia


Gracias a Dios que los Orejas han recapacitado y van a seguir con sus comentarios!. La WEB no sería la misma sin ellos.

Quiero hacer un sincero homenaje a todos los Orejas: al “sensato" y que también " es buena persona" y al "resentido" o "el de la mala leche" (según Antonio y sus amigos). Sean como sean, son como nosotros: personas de carne y hueso, apasionados por lo que hacen y dispuestos a dedicar mucho tiempo para mantener esto que nos permite a todos comunicarnos, opinar, disentir, acalorarnos, emocionarnos, reencontrarnos con otros y con nosotros mismos y vaya uno a saber cuántas cosas más.

Hay que estar un día y otro al pie del cañón!!!! Chapeaux.

Un gran saludo para todos
Lux


Sigan adelante y contesten siempre, que hacen muy bien!!!


Queridos orejas: que se ofenda quien quiera, pero LA VERDAD NO OFENDE. Hoy 2 de octubre se me ocurre una reflexión. La Obra será fantástica, pero a mi me arruinó la vida. Me lastimó psicológicamente y lo que es peor, arruinó mi relación con Dios. No sé cómo empezar de nuevo...
Si algunos le deben algo, que le agradezcan. Yo creo que a mi más bien me deben muchas cosas; me conformaría con una disculpa.
Felicitaciones para todos los Orejas. No saben cómo me gustaría ayudarles si estuviera más cerca. Vivo cruzando el charco.

Un abrazo
L.G.


para Ramiro

Leo, y releo lo que he escrito a Jose Carlos y, la verdad, no veo por ningún lado que personalice y vaya a por él. Quizás te falte un pelín de buen humor; pienso que él -J.C. o Fulcro- sabrá ver ese guiño desenfadado y pícaro (pues su escrito está muy trabajado y se le ve un tipo listo). Pero que muy listo.

La coña que hago con su mujer es poque él lo escribe sin rubor ninguno (lo "de preguntárselo a ella", Ramiro, hijo mío, no deja de ser chocante-); aunque ya sabemos de otros de la web lo que pesan sus mujeres y, por lo que cuentan, hay de todo. Y nos parece muy bien. ¡¡¡Vivan las gordas!!!, ¡¡¡Vivan las flacas!!!, ¡¡¡Vivan las que hay que preguntar!!! (por cierto, que escriba: la necesitamos)

La otra alusión personal que puedo hacer es a lo que Jose Carlos dice de que no es del Opus Dei -lo escribe él- y yo aclaro, sin personalizar, porque es verdad, que cuando un numerario con añitos abandona el corral tarda bastantes años en poder volver a pitar. A mi me dijeron que a los 60, y tengo 45 tacos. Y hago una chanza, broma o gracieta -que no todos tienen que entender, ni aceptar- con lo de la nueva subdirección... ¡pero, Ramiro!: ¡¡¡Que no pasa nadaaaaaaa, colegui!!!. ¡¡¡ BUEN ROLLITO!!!

M.F.


Queridos todos:

¡Bueno, la que se ha armado! Qué pena, yo que creía que había logrado mi primer objetivo de silenciar a los Orejas por siempre jamás, he visto que mi triunfo sólo ha durado un día. No, ahora en serio, que vaya por delante mi más tajante afirmación que siempre todo lo que escribo me sale del alma, lo he hecho por mi mismísima cuenta, y aquí no hay "infiltraciones" ni nada por el estilo - a mí eso no me va.

He de decir que después del editorial del Orejas de guardia sobre mi testimonio me sentí, además de herido y desengañado del sitio, muy tentado por salir al ruedo enseguida (porque como dice Manuel F. soy un "Mihura"), pero preferí esperar un poco a ver qué más decía la peña y no ponerme a escribir cuando todavía estaba caliente (consejo muy sabio de mi mujer en lo que a usar el email se refiere). Y creo que me ha servido, porque he podido entablar contacto con algunos que respetan a los demás (aunque no estén de acuerdo en todo), que te tratan con dignidad, que no juzgan sin conocimiento de causa, que ven que la experiencia de cada uno es única e insustituíble, y que no te descalifican por sistema para mantener una "ortodoxia" o un punto de vista sesgado.

Al Orejas de turno de aquel día (¡espero que no me toque el mismo!), te diré lo siguiente:

1. Sí me hirió que te burlases (como hacen otros) de mi profunda convicción de que la estupenda mujer que ahora tengo me la mandó la providencia. Se lo agradezco a Dios todos los días, y no sé por qué ha de ser motivo de chistes baratos.
2. Tú no sabes, porque no estabas ahí, si me sentí libre a los quince años o no; si lo hablé con mis padres o no; si entendí que la incorporación a la Obra era paulatina o no; si supe, cada vez que renové, que podía no hacerlo; y si entendí lo que significaba hacer la fidelidad.
3. No sé por qué implicas que "yo fui tonto y me fui", descontando con un insulto y pasando por alto que alguien pueda irse aún queriendo a la Obra, sin ser tonto.
4. Nunca dije, en mi texto, que me dabais pena vosotros, en plan condescendiente; está bien claro en lo que escribí que me daba pena el dolor, la amargura, el sufrimiento, etc.
5. Y realmente me desengañó la "expulsión" de vuestro sitio ("esta web no es para ti"), que dejó bien claro que si no acatas la postura oficial, tu experiencia no vale. Parece ser que otros no están de acuerdo contigo.

Agradezco de todo corazón las respuestas de Fede, Ramiro, e incluso la de Manuel F. porque creo que lo dice con cariño: mi mujer y yo nos reímos a carcajada limpia con lo de llamar a Telefónica preguntando por "la mujer de José Carlos" o buscarla en Google (como también lo hicimos con el anecdotón del que va a un curso de retiro por primera vez). "Pelín fantasma"... no eres el primero en decírmelo.

A Fulcro: no me pongas en una dicotomía falsa, creo que hay más opciones que la a) y b) que comentas. Podría ser c) alguien que está sinceramente agradecido a lo que la Obra le ha enseñado (vale ya de forjas), que recuerda muchos buenos momentos, que cree haber pasado muchos años en el Opus Dei -lo mejor de mi juventud- llevado por el deseo de servir a Dios y hacer el bien por los demás... pero llega un momento en que hay cosas que no encajan con las circunstancias que uno vive, y después de reflexionarlo todo muy bien, en la presencia de Dios, siente la libertad preciosa que siempre ha tenido; y siendo consciente de ella (pues Dios la defiende celosamente), ve que puede seguir otro camino porque Dios que trasciende nuestras estructuras humanas ofrece por ahí otra oportunidad de santificarse. De "pecador", "penitente", "renegado" "miserable"... ni Dios ni ellos me lo han hecho sentir.

A Jorge, que cree que soy "infeliz" o "dependiente" o necesito ayuda psicológica: tengo un buen trabajo, que me gusta; me acabo de comprar casa; tengo una mujer sensacional y una familia que me quiere; muchos amigos, dentro y fuera de la Obra; intento vivir una vida cristiana... ¿dónde está la infelicidad? Oye, y que conste que a mi mujer no le gusta cocinar (es profesional como yo), pero sí comer, así que el que cocina y plancha es yo, y además me encanta hacerlo, entre otras cosas porque echo de menos una buena tortilla de patata, y servir a las personas que quiero para mí es fuente de alegría, y eso también lo aprendí en la Obra.

Qué queréis que os diga: resulta que sigo viviendo aspectos del espíritu del Opus Dei, que en realidad es una forma de poner en práctica la ascética cristiana: que rece, que frecuente los sacramentos, que trate de santificar mi trabajo, que me esfuerce por ser alegre y servir a los que me rodean, que piense en acercar a mis amigos a Dios intentando ser Cristo para ellos, que quiera vivir el don de sí de que habla el Papa, empezando con mi mujer... pues sí, lo aprendí dentro, y lo agradezco horrores. Y fue siendo numerario, estudiando y preparando charlas y oyendo a lo que decían otros, donde se me expusieron una serie de conceptos y virtudes que me han servido mucho en mi vida matrimonial.

A los Orejas, haced lo que os parezca con vuestro sitio, y perdonad que haya pretendido que se me pusiera entre "Tus Escritos": es verdad que lo podía haber sugerido de otra forma, y a fin de cuentas el sitio es vuestro. Pero atentos: nadie quiere ser carne de cañón, y si haber estado en la Obra no es razón suficiente para ofrecer una experiencia personal; si el sincerarse lleva a juicios generalizados sin conocimiento de causa; si hay que atenerse a criterios preconcebidos, o si sólo se le escucha a uno o se le sube a un sitio permanente mientras se cierna a la ortodoxia reinante en este sitio... pues habrá muchos como yo, para los que vuestro sitio no tiene acogida. Si eso es lo que queréis, pues decidlo así y no deis la impresión de que esto es un foro para un libre cambio de opiniones y experiencias.

Un saludo muy cordial a todos,
José Carlos

(Amigo, pues sí, te ha tocado el mismo oreja de turno que te contestó la otra vez, ¿mala suerte, buena suerte?. Después de los castigos que me impusieron -leer "Surco" y a Pilar Urbano- no respondo de mí aunque haré un esfuerzo por lo que me han dicho, que cuide las formas. Ahí voy.
a) No me burlé de tu mujer porque nunca me he burlado de nadie y menos de alguien que no ha aparecido por aquí. Me hizo gracia tu expresión de "que te cayó del cielo", dando a entender que todo en tu vida ha sido milagroso: conocer el opus, pedir la admisión, hacer la oblación, la fidelidad, "tu mujer te cayó del cielo"... etc., etc.
b) Yo creo que ni tú ni nadie se siente libre a los 15 años para entregar su vida a nadie ni a nada. No imagino a un chico de 15 años que decida casarse -en la civilización occidental a la que imagino que perteneces- y que sus padres estén de acuerdo.
c) Cuando dije y entrecomillé "todo era perfecto, maravilloso, fabuloso, genial, pero yo fui tonto y me fui", no me refería a ti, me refería a que curiosamente, el Opus no aceptó ni adjuntó testimonios diferentes al tuyo en la Causa de Beatificación de Escrivá, que sí tenían más cosas que decir o al menos, otras diferentes -las luces y las sombras-. Porque no sé si tú conociste a Escrivá o conviviste con él o le sufriste de primera mano como algunos de nosotros, a los que se les vetó en ese juicio que la historia y los documentos existentes al respecto han demostrado que fue una pantomima.
d) Esta web no se ha hecho para alabar al Opus (quito el Dei a propósito porque hay un mandamiento que dice "No tomarás el nombre de Dios en vano"). Desgraciadamente y por lo que hemos vivido dentro, no hay nada que alabar. Sobre la manipulación, la coacción y la violación de la confidencia y de la confesión ¿tú ves algo alabable? ¿Eso no lo vivieron contigo o tú no lo practicaste con otros? Y sobre lo de aprender cosas yo creo -y lo pongo como ejemplo, no lo pusiste tú, lo pongo yo ahora sobre lo que se podía aprender en el Opus
- que aprender a comer una naranja con cuchillo y tenedor, en mi caso lo aprendí en casa de mis padres -cosa por lo demás que no me hace ser mejor o superior que el resto de los que disfrutan de una buena naranja comiéndosela con las manos-. Ese tipo de cosas que aprendimos, como bien dices, se aprenden o se pueden aprender fuera.
e) Esta web no va a cambiar de opinión respecto a los testimonios que coloca en la sección Tus escritos. De ahí que te dijera que te sentirías más cómodo leyendo (que no participando, porque no lo permiten) en las webs oficiales y en las que se dicen "personales o particulares". Si conoces alguna donde haya intercambio de pareceres y libertad de expresión, dínosla rápidamente para participar en ellas. El Opus que viviste tú yo creo que no existe. Pero puedes escribir siempre que quieras porque tus correos los verás y los verán y leerán aquí todo el que entre a esta web, escribas lo que escribas.
P.D. Si no hablaras tanto de tu mujer en tus correos no darías pie a que surgieran comentarios al respecto. Yo tuve una tía abuela que se llamaba Melchora, que no me cayó del cielo porque ya estaba en la tierra cuando nací, que me dejó en herencia una humilde casa en un pueblo de Castilla y no por ello la saco a colación continuamente. Me fui del Opus a tiempo antes de que se quedaran con ella (con la casa). Si estuviera todo el rato refiriéndome a mi tía Melchora, ten por seguro que más de una broma me caería).


Otro tirón de orejas:

¡Hala, pa que no falte!, os han dado palos por contestar el correo de un mundo feliz de José Carlos y yo me atrevo, cariñosamente a daros otro tirón de orejas. Parece que ya no vais a contestar oficialmente y libremente, como os de la gana, a las opiniones (¿propaganda?) que se publica en esta WEB.

Me parece que al final con esto de respetar la libertad nos la vamos a coger con papel de fumar. Se hizo un debate sobre la conveniencia o no de poner en esta WEB ciertos correos pro-opus, a pesar de que fuera posible que se colara propaganda oficial o saboteadores, algunos con serias dudas apostamos por la libertad y que era mejor la libertad y no censurar, pero de ahí a que os autocensuréis vosotros, me parece una pasada. Si alguien traga con el relato de José Carlos, pues bien mejor para él, pero no por ello se debe criticar al oreja de guardia que decide contestarle. Se ha comentado que se pasó, pues bien, yo opino que no llegó, por que es cierto que en la Obra hicimos muchas risas de muchos asuntos, pero no me digan que eso ni era alegría ni era felicidad.

La alegría que yo viví era la propia de una edad inmadura, de un niño inconsciente, que encima se cree que está salvando el mundo, con una inconciencia y desconocimiento de los abusos que se cometen en nombre de Dios y si que probablemente cometimos en el nombre de Dios. San Jose Maria probablemente esté en el cielo, nunca diré de ninguna persona que no lo esté, porque yo no me atrevería a condenar a nadie, y la misericordia de Dios es infinita, pero de ahí a ser un modelo de Santidad, pues no para mi no lo es, tampoco lo es San Alejo, que según aprendí en la Obra se paso su vida debajo de una escalera, o de San Jorge, cuya existencia histórica es más que dudosa. (Mil perdones a Catalanes y Aragoneses). No metamos al Espíritu Santo en esto, que la infabilidad del Papa y los dogmas de fe son contados. No se donde queda aquello de servir a la Iglesia sin servirse de la Iglesia, por que por lo menos de escudo si que les sirven, y van a conseguir abollarla a base de escudarse tanto en ella.

En fin que me he ido a contestar, cuando lo que quería era reprocharos que decidáis no contestar oficialmente, a mi me gusta que lo hagáis, y que lo hagáis con plena libertad, no faltaría más después de dejaros las pestañas en esta WEB en la que a algunos no nos dejáis ni arrimar el hombro económicamente. Por otro lado si decidís contestar como un participante más os van a acusar de que los correos los dirigís vosotros mismos y que retroalimentáis (jo que palabra) los temas de esta Web fraudulentamente. (Esa táctica la aprendí en mi encargo de AOP) . Veo más honesto que lo que sea opinión propia de los propietarios de la WEB figure como tal, y si es aceptada pues bien y si es criticada pues también bien, y solo para el caso de que una determinada opinión no sea comúnmente compartida por los demás orejas, entonces se haga como aportación personal.

¡Ala! animo, que cada vez que os meten un palo os desanimáis, que no es para tanto, que esto nos esta haciendo mucho bien a muchos.

Con mucho cariño
J.C.


Sí, no hemos cambiado, antes nos escandalizaba un beso en un película y ahora nos escandaliza la sincera opinión de Jose Carlos. Y me duele, me duele que el Oreja haya ridiculizado un corazón abierto, me duele que no queramos admitir que lo que diga sea la verdad de su vida.

Debemos profundizar más, la Obra es suficientemente compleja como para despacharla como quien insulta al guardia de tráfico en un atasco.

Orejas, volved a vuestra ecuanimidad, dejad para otros, por favor, la ironia fácil y la incompresión, seguid llenando estas páginas de detalles alegres e ironías cariñosas. Que no pague nadie vuestra indegestión de setas, o una tarde movida con la "parienta", porque en esta web muchos han encontrado compresión a su sufrir y no se tratra de añadir más dolor a la herida sino de ayudar a su cura.

Uno de los vuestros (antes C.V o C.U.)


Queridos orejas: Por lo que leo y compruebo es muy difícil salir de una institución dictatorial y dejar detrás los viejos esquemas, las ideas perversas origen de tanto sufrimiento. Debe costar muchos años. Percibo en algunos orejas antiguas resonancias: las cosas buenas aprendidas, la aceptación del Opus Dei por parte de la Iglesia católica, un respeto tan exquisito como frustante del derecho ajeno (Hitler aún estaría hablando), etc.

Y, mientras, la Obra de Dios (?), vulnera los derechos fundamentales, convierte el apostolado en proselitismo, fuerza la conciencia de menores de edad, redirecciona la web a páginas porno, lleva a juicio nuestro dominio, silencia al resto de la Iglesia, nos obliga a escribir en el anonimato porque provocan miedo, enjuician con intolerancia las vidas ajenas, cargan pesados fardos a las gentes, buscan el poder por encima de todo.

Somos tan respetuosos que acabamos silenciando a los orejas de guardia con sus acertados comentarios en la gran mayoría de los casos. Si se equivocan, algo muy humano por otra parte, tenemos derecho libre de réplica. También ellos pueden rectificar. Y no pasa nada. Tampoco podemos buscar la perfección absoluta en quienes llevan la pesada carga de hacer viable día a día la página. Perderemos mucho si dejan de opinar: la fina ironía, el sentido del humor (elementos necesarios para que tantos puedan salir adelante), aclaraciones puntuales a cuestiones concretas y una línea editorial bien definida. En ella se ve reflejada a diario la sustancia de la página, su hilo conductor.

Aquí escriben quienes sufrieron las consecuencias de una institución malsana e intentan salir adelante. No es -dicen los orejas de guardia respetuosamente- una página contra la Iglesia, sino "sobre" el Opus Dei. Yo añadiría: y también para quienes estamos "contra" el Opus Dei por considerarlo una interpretación falsa del cristianismo y un integrismo caduco.

Quienes estén de acuerdo con el Opus Dei, o lleven la marca "Mihura" en las costillas, tienen miles de páginas oficiales para dirigirse a ellas. A nosotros que nos dejen en paz en este foro de libertad.

Si silenciamos a los orejas de guardia acabarán por hacerlo con todos nosotros. Y no podemos permitirnos ese lujo. Hay demasiada gente sufriendo.

Hasta otra, saludos a todos
Jerónimo


2-10-2003

(Amigos, hemos tenido el día entero para 'reflexionar' y hemos visto la cosa -respecto a ayer- según sigue: que lo que le ha fallado a algún oreja a la hora de contestar ha sido la FORMA de hacerlo, no tanto el FONDO. Se ha podido herir a alguien por la forma de expresarse cuando lo mismo lo podía haber dicho de otra manera sin que le doliera a quien iba dirigido o a otros que leen la web. Intentaremos cuidar ese aspecto pero no podemos estar callados si se ataca a la web, a su finalidad u otros aspectos colaterales. Ejemplos: cuando dicen que no conocemos al Opus Dei, cuando nos acusan de que nos metemos con la Iglesia, cuando afirman que censuramos los emails, cuando nos llaman cobardes por no firmar con nombres y apellidos, o llega uno y nos dice que -por lo testimonios-estamos amargados, etc. Resumiendo: que vamos a intentar no faltar al respeto a nadie si nadie nos lo falta a nosotros ni a juzgar o a descalificar, pero callados como muertos o como tontos o como indiferentes, es imposible.)


Queridos amigos:

No me voy a presentar como un ex-miembro del "Opus Dei", ni como miembro de la "Secta", ni como cooperador, ni como ex-cooperador, ni como chico de San Rafael, ni como de San Gabriel, ni como de San Miguel, ni de San Juan, ni de San Pedro, ni de San lo que queráis. Me voy a presentar como persona. Como persona que ha tenido o tiene relación con el Opus Dei. En este aspecto no me quiero definir, ya que ante todo estamos entre personas. He ido leyendo testimonios, todos muy sinceros y personales, me los creo, me los creo todos. Una cosa es cierta, cualquier persona, sea o no del Opus, no ha vivido en su totalidad el Opus Dei. Aunque unos más que otros. Por lo tanto, ha contado, en su testimonio, cómo le fue o cómo le va. Tal como ha dicho Carlos, en el Opus Dei, no hay una ausencia de bien, ni una totalidad de mal, ni una totalidad de bien, ni una ausencia de mal. Depende de lo que nos encontremos, podremos testimoniar hacia un sentido o hacia otro, por lo tanto todos los testimonios sinceros de lo vivido son VÁLIDOS. Pero tampoco hemos de totalizar, nuestras vivencias hacia la dirección que nos tocó vivir. A veces han sido fruto de circunstancias del momento, de las personas encontradas, de malas directrices, buenas directrices ... Esto es aplicable en lo bueno y en lo malo.

Lo que sí que he visto en esta página, es que si uno testimonia a favor se lo comen vivo y si va en contra salen los del Opus a hacer lo mismo. Y no es eso lo que buscamos. Lo que buscamos es esclarecer lo que pasa, el por qué del dolor, qué pasa con la libertad personal, cuáles son los errores, cómo los podemos solucionar (tanto los que están dentro como los que están fuera)

Lo que sí he visto, que el Opus Dei no deja indiferente. Hay errores, pues se buscan soluciones, cueste lo que cueste, pero lo que no podemos es quedarnos en la simple dialéctica barata. Y si damos con una solución se la presentamos a "Javi", y así creo, que haremos lo que tenemos que hacer, que por nosotros no sea.

Por favor Orejas, no quites tu comentario. Por una vez que matas un perro, ya te llaman mataperros.

J.U.

(Amigo, voy a contar el chiste del mataperros, no se vaya a creer alguno que también mato perros y nunca más lejos porque los adoro. Eso sí, advierto de que hay una palabra mal sonante al final del chiste y como últimamente estoy atravesando una fase de reconversión hacia el bien y las buenas formas, espero que nadie me lo tenga en cuenta ni el oreja mandón me envíe otra vez a releer "Surco" de castigo porque con lo de ayer ya tuve suficiente. El chiste dice así: Van dos amigos charlando y le dice uno a otro: -"Pues yo, por una vez que maté a un perro... me llamaron mataperros". Y dice el otro: "pues yo, por una vez que maté a un gato..." Y sin dejarle terminar, añade el primero: "¡te llamarían matagatos!"... Y contesta el otro, "pues no, ¡me llamaron hijoputa!".
Y ahora, tras esta palabrota o palabro, me voy yo por mí mismo a leer como castigo, el último libro de Pilar Urbano.
Vuelvo a repetir (lo he dicho en una contestación posterior a esta en el día de hoy), pido perdón a todos los que se sintieron ofendidos o heridos por los comentarios de este oreja de guardia a sus correos.)


Reconsideradlo por favor

Hola, soy F.J., el que ha escrito algunas cosas con fechas muy anteriores a 1-10-2003 y como veo que es fácil que nos confundamos con las iniciales, me adhiero a la idea bien acogida por vuestra parte, queridos Orejas, y voy a adjudicarme a partir de ahora el seudónimo de “Fulcro”.

Aunque en una primera aproximación, la crítica de fede hacia la contestación del Oreja de guardia (a propósito del correo de José Carlos) pueda parecer precisa, bien fundamentada, e impulsora del repliegue de la opinión de los orejas a posiciones simplemente personales, creo que hay que considerar algunos aspectos que a mi me parecen importantes, como los cuatro siguientes:

1.- El valor de un sitio de encuentro como este no solo se lo dan los correos como los nuestros, sino las legítimas opiniones “oficiales” o “institucionales ;-) ” de nuestros queridos Orejas, que además a mi siempre me han parecido un estupendo acicate para mantener vivos los diálogos. La orientación de los contenidos de estas páginas, a mi entender muy necesaria, está y debe estar en sus manos ¿y qué mejor modo de hacerlo, que expresándose libremente como grupo, aunque su representación vaya recayendo sobre personas distintas con diferencias en el entender y en el expresarse?.

2.- De la misma manera que cada uno de nosotros tenemos derecho a equivocarnos, la agrupación que mantiene esta Web también lo tiene sin que pase nada por ello. Precisamente esto sería una postura radicalmente opuesta a la que criticamos del opus, que encubre sus propios errores recurriendo tantas veces a la retirada y al silencio; además, si se cometen errores, se reconocen y ya está; no solo sigue sin pasar nada sino que, en cualquier caso, diría mucho de la gran calidad de la agrupación como tal.

3.- Si los Orejas intervienen a partir de ahora a título personal, creo que corremos el riesgo de ir derivando los contenidos hacia sitios no deseados sin que nadie los modere. En definitiva, el que cualquier iniciativa humana colectiva tenga una personalidad que la caracterice y se distinga de las demás no es caprichosa, sino que, a mi juicio, constituye su esencia. Por eso entiendo, queridos Orejas, que no debéis renunciar a dar vuestra opinión “oficial” (creo que la mayoría sabemos que no habláis “ex cátedra”), pero vuestro esfuerzo común en la contrastación o confrontación de ideas, que al final se plasman, de alguna manera, en un comentario oportuno del Oreja de guardia, para mi tiene un gran valor, sobre todo si se intenta hacer crítica analítica como es mi caso.

4.- Por otra parte también creo que casi todos los que dialogamos con nuestros correos ya somos mayorcitos y deberíamos “digerir” y leer entre líneas (como alguna persona aquí ha aconsejado sabiamente). La crítica tiene muchas veces el lado doloroso, sobre todo si es uno el que la padece; pero para eso estamos aquí, para discutir los aspectos que nos parecen negativos o equivocados; de lo bueno, de lo maravilloso, si tal cosa fuera posible, solo se pueden esperar actitudes laudatorias, y para ello el material que ofrecen los sitios oficiales del opus es abrumador.

Dicho lo anterior, a mi no me parece que la contestación del Oreja de guardia a José Carlos sea exagerada ni salida de madre; pudiera estar equivocada, pero es excelente y una entre las posibles; porque si se analiza el texto de José Carlos, a mi modo de ver, salen dos interpretaciones claras pero de índole muy diferente entre si, que serían las siguientes:

a) Lo que dice es verdad y lo dice un hombre sincero: En efecto, puede ocurrir que uno que se marcha se sienta objetiva y profundamente agradecido a la obra por la prolija enumeración de bienes recibidos de ella que José Carlos narra. Ese fue mi caso precisamente (salvo lo del aprendizaje del trato con las mujeres que muy bien y con mucha gracia describe nuestro amigo y admirado M.F.). Entonces, lo que dijo el Oreja de guardia: “...aunque hayas salido, continúas dentro” es rigurosamente cierto y exacto.

En esa situación no se cuestiona a la obra, se la considera santa, y el pobre pecador que se ha ido debe reorganizar su vida penitentemente a partir de todo lo aprendido, al no haber dado la talla de los campeones en religión que se quedan dentro. Más aún, se creerá en la obligación de defender a la institución con un empeño aun mayor, tal vez en un intento de redimir su miserable condición, parecida a la de un renegado.

Naturalmente, esa es la postura que le interesa al Opus Dei para sus exmiembros, además de que puede ser el billete de vuelta para recuperarlos como super numerarios. Mientras tanto la vida sigue y, sobre todo si se llega a tener hijos y con ellos los problemas típicos de su educación, o si se ve enfermar a personas queridas que siguen dentro, uno empieza a sospechar que algo no funciona y que algunas de las cosas antaño aprendidas deben desaprenderse si no se quiere ir sembrando tragedias por doquier. Es entonces, como en mi caso, cuando uno empieza a estudiar a las personas, a la obra y a su fundador, y llega a percatarse de las contradicciones institucionales indigeribles que son las que, en el fondo, originan todas las experiencias negativas vertidas en esta Web.

Solo he podido conocer a través de los correos de esta Web un caso (muy sospechoso por cierto) en el que uno se va de la organización sin que pase nada: “a otra cosa mariposa” como diría el refrán, pero tal vez pudieran darse casos así. Lo normal, como reconoce José Carlos, es que uno salga tocado (bueno, el dice forjado).

b) José Carlos podría ser perfectamente un hombre astuto del opus que de una manera inteligente, ponderada, aparentemente amistosa y bastante convincente, vierte en su escrito con mucha exactitud y precisión, lo que la institución desea de sus exmiembros pero, sobre todo, lo que desea que crea todo el mundo (en especial la Iglesia), como un hecho normal y ejemplar (no más traumático que en cualquier otra agrupación religiosa) que viven o debieran vivir todos los que se van, ya que los frutos de una fundación divina deben ser excelentes, hasta los que se caen del árbol. Si hay frutos amargos sería por las culpas personales exclusivamente; en absoluto por otras causas que pongan en entredicho la perfección fundacional.

Y este es el mensaje de fondo y explícito de José Carlos, aunque muy bien pensado para ser asimilado acríticamente. Si os dais cuenta, no deja el más mínimo resquicio para la duda en las cuestiones fundacionales, y recurre también al manido y clerical argumento del amparo en la autoridad de la Iglesia: Santificado Josemaría queda fuera de toda discusión y, de rebote, también su obra.

Es muy comprensible que si el Oreja de guardia ha intuido esta segunda posibilidad, se habrá dado cuenta de que se nos estaría utilizando, una vez más, a nosotros y a la Web para hacer proselitismo a favor del opus, mientras a nosotros se nos arrincona subliminalmente como una panda de resentidos y resabiados. Si esto ha sido así, si José Carlos ha pretendido manipular y manipularnos, toda la respuesta de nuestro Oreja de guardia sería un ejemplo de ponderación y prudencia ante lo que podría ser uno de los intentos más inteligentes y efectivos por parte del opus para neutralizar nuestra página.

Si la segunda interpretación que he denominado (b) no se correspondiera con la realidad y José Carlos no tuviera la intencionalidad de “sabotaje” que he señalado, le pido disculpas por adelantado. Pero es sospechoso su interés por mostrarse como ejemplo positivo en “Tus Escritos”, como lo son también algunas de sus expresiones y su interés por contactar personalmente. No obstante, hay que insistir en que la actitud (b) solo se diferencia de la actitud (a) en la doblez de intención, diferencia nada pequeña, dicho sea de paso. A mi no me resulta muy difícil entender esto porque, como ya he dicho, en mis tiempos fui un caso (a).

Ya ves Ramiro E., las cosas pueden ser más complejas de lo que a primera vista parece.

No se si estas apresuradas reflexiones contribuirán a que cambie vuestra decisión de no manifestar posturas “oficiales”, queridos Orejas, pero si os retiráis del diálogo como colectivo os echaré mucho de menos. Finalmente, aprovecho para agradeceros vuestras contestaciones “oficiales” a mis correos; no se ha dado el caso, pero aunque me hubiera escocido alguna os lo agradecería igualmente, por el gran valor que tiene para mí el poder “forjar” (como diría José Carlos) mi propia ponderación a través de opiniones distintas a las mías, por muy duro que pueda resultar a veces. Un fuerte abrazo.

Fulcro

(Amigo, no nos retiramos porque hemos tenido todo el día para recapacitar y acabamos de colocar otra nota al principio de los correos de hoy. Sólamente vamos a intentar contestar sin que nadie se sienta ofendido, razonando. Es decir, no es cuestión de fondo, sino de forma. Se pueden decir las cosas, como por ejemplo has hecho tú ahora o hace Claudia y tantos otros, sin que quien reciba la crítica o el comentario se sienta herido. Y no queremos que nadie deje de escribir a la web por miedo a la contestación del oreja de guardia.)


El gurú que visitó a Pablo VI era un patricar ortodoxo

El amigo M.F. en su correo del 1-IX-2003, habla de una visita al Papa Pablo VI, por parte de un gurú maloliente. Quiero que sepan que la anécdota es verídica, aunque no se trató de un guru, sino de un Patriarca Ortodoxo -posiblemente Atenágoras-, que no tenia mucho "olor a santo". Pablo VI, en un gesto de exquisita caridad lo trataba de "santidad", siguiendo la costumbre de las Iglesias Orientales.

En el video que menciona MF, san Josemaría parece criticar la actitud del Papa. ¿Cómo se interpreta este acto del santo? Se me ocurren dos posibles lecturas: una, benigna, consiste en suponer que Escrivá pretendió dejar en claro que el Papa Pablo VI estaba mal aconsejado...; otra, menos benigna, es que se trató de una muestra más del mal genio de Escrivá, y de una falta a la caridad, cosa que no tendría por qué sorprendernos, pues todos los santos -incluído san Josemaría- tenían defectos y pecaban...

Cada uno interpretará el hecho como prefiera.

Un gran saludo a todos,
Critico Constructivo


Oye, Manuel (ó M.F.), apúntate un 10 por la carta a José Carlos. Lo de la subdirección de "Pies para qué os quiero" bajo el patrocinio de San Marcos, no tiene precio. Tu escrito sobre los colegios es también muy bueno. Yo estuve unos años dando clase en uno de esos colegios y es verdad todo lo que dices. Pero si -encima- lo cuentas con ese sentido del humor tan estupendo, nos haces pasar un rato muy agradable.

Lo realmente bueno de esta web es que se puede opinar sin caer en absolutismos ni descalificaciones (algo, por cierto, muy fácil desde le anonimato). Algún amigo que lee esta página me ha comentado que pasan por alto las "cartas extremistas" tanto las que atacan sin piedad, como las de los "prelaturators". De igual forma que una crítica despiadada a la Obra huele a extremismo, una alabanza sin fisuras sugiere algo de fanatismo y sumisión gratuita.

Hacen bien las Orejas en recordar de vez en cuando que este foro es para gente que ha sido de la Obra y quiere contar libremente su experiencia. Nada más. La inmensa mayoría lo han pasado mal, y aquí pueden hallar -como yo- el apoyo que no encontró en la Obra.

Alfonso


Para José Carlos

Aunque ya ayer apareció un mensaje mío acerca del que había publicado José Carlos, hoy me gustaría darle públicamente mi apoyo a la vista de la contestación que le dirigió M.F. El mensaje de MF tiene cosas muy interesantes que comparto y que leo con mucha atención, pero cuando deja las ideas para meterse en el terreno personal, lo estropea. Los argumentos "ad hominem" dicen muy poco a favor de quien los usa porque al descalificar a la persona se está demostrando no ser capaz de descalificar sus ideas. O sea: "como no tengo respuesta mato al mensajero". Y eso es lo que hace MF en su mensaje. La verdad es que no tenía ninguna necesidad de hacerlo porque sus anteriores escritos demuestran que tiene argumentos sobrados para debatir sin entrar en lo personal pero en este caso lo ha hecho y lo lamento.

Saludos,
Ramiro E.


Hola Orejas amigas, una respuesta para José Carlos

Después de leer tu mensaje, creo sinceramente que deberías adjuntarlo a tu solicitud de admisión al Opus Dei como socio Supernumerario. Hoy 2 de octubre sería un día excelente para hacerlo ¿No te parece?

Tienes las características ideales para unirte de nuevo a esa organización de la que posiblemente nunca debiste de haberte ido: sigues hablando y pensando como ellos, extrañas sus métodos, admiras a su fundador, justificas sus acciones y crees sinceramente que la amistad y el apostolado son sinónimos. Inclusive sigues respondiendo con “sonrisas” a las confidencias y luchas de otros y no logras explicarte cómo los directores del Opus Dei pueden ser capaces de causar dolor. Creo que inclusive justificas con argumentos religiosos sus acciones sadomasoquistas.

Si el Opus Dei no te acepta nuevamente como socio Supernumerario, permíteme recomendarte que busques de inmediato ayuda psicológica profesional. Añoras profundamente el pasado y me das la impresión de ser profundamente infeliz con tu vida actual.

No te sientas mal por ello. Hay personas José Carlos que disfrutan la dependencia porque se acostumbraron a ella o no tienen las destrezas para pensar y vivir por su cuenta. Es posible que por eso te hayas casado con la primera novia que tuviste, precisamente para que asumiese las labores que detestabas: buscar un piso, manejar tu dinero, lavar la ropa y cocinar. No hay duda que ella te cayó del cielo, pero me parece que extrañas mucho a la otra, me refiero a la obra de Escrivá. Ella también nos decía dónde vivir, nos manejaban el dinero, lavaba la ropa y hasta nos cocinaba ¿Te recuerdas? Inclusive nos decía qué leer, revisaba nuestra correspondencia y, como muy bien lo dices, nos “forjaba” la personalidad. Me imagino que esa es la “libertad” que añoras.

La Obra que yo conocí fue diferente. Mi concepto de la felicidad, de la libertad y de la amistad es también diferente al tuyo. Por eso no envío mis mensajes a Crónica ni añoro el Opus Dei.

Un abrazo,

Jorge


Una de las cosas que quería comentarles, que supongo dependerá de las numerarias con las que trates, es que a mí sí me habían contado lo de las duchas con agua fría, la disciplina y el cilicio y algunas otras cosas, antes de pedir la admisión (cosa que no llegué a hacer). Esto se los cuento porque he leído muchos testimonios de personas a las que no les contaron cómo eran las cosas antes de pedir la admisión y luego se encontraron con todo esto (y mucho más, seguro). Con respecto a las normas, yo las cumplía (y la verdad es que sigo haciéndolo, solo que no me importa retrasar alguna norma o saltear alguna no me trae problemas de conciencia!) y tenía un plan de vida similar a las numerarias sin serlo. Esto parece que ha sido la excepción y no la norma (que me contaran de antemano muchas cosas que luego formarían supuestamente parte de mi vida diaria) y supongo que esto se debería a la calidad humana de estas numerarias que conocí y de las que tengo un gratísimo recuerdo. Supe que algunas (creo que la mayoría) ya no pertenecen a la obra.
Bueno, sigan adelante ayudando a tanta gente y estaremos en contacto.
Dios los bendiga.

P. I.


si te vas ......

Que la Oreja también opine!!!! Con el trabajo que tiene la Oreja creo que puede opinar como todos .... que tanto !!!!! ¿Cómo se va a tapar la boca esa Oreja de Guardia?

Pero es que José Carlos no nos ha contado en su relato como es esa esposa que cayó del cielo. Mira que aquí en nuestra querida página hubo amigos que en la generosidad de su relato han presentado de modo virtual a sus mujeres. Es más, se armó una suerte de discusión acalorada sobre la belleza de mujer el 21-8-2003.

CF contó que su esposa no supera los 45 kilos y quedó incumplida la amenaza predictiva del opus dei de que "si te vas vas a ser infeliz, vas a condenarte, y si te casas tu mujer va a ser gorda y bigotuda".

Por su parte, SS contestó presentando a su mujer de 93 kilos y concluyó "esto sí que es una mujer"

Y tu mujer ¿cómo es? Porque es diferente que te caigan del cielo 45 o 90 kilos. Oreja, pidamos a estos hombres retratos de sus mujeres y a la página como están los nuestros !!!!!

Recordé alguna de las amenazas de las plagas que recibiríamos al salir del opus dei, recuerdo la anécdota verdadera que contaba un sacerdote que decía que un día tocó el timbre del centro pidiendo por él una familia en estado alterado, el hombre había sido numerario y la mujer estaba en medio de un brote psicótico, acompañaban la escena uno o dos niños, y la mujer a los gritos pedía "exorcismo". Un cuadro dantesco -almodovariano que el relatante se ocupaba de adornar con lujo de detalles morbosos durante largos minutos de la meditación a oscuras.

El mismo sacerdote ejemplificaba en sus meditaciones sobre la verdadera familia von Trapp, la de la novicia rebelde.. El sacerdote nos contaba que la verdadera foto mostraba una familia de gordos que nada tenía que ver con la fantasía cinematográfica. El clásico musical estaba en la lista de las películas que no se podían ver para la sección femenina. No fuera cosa que a alguien le inspirara pedir la dimisión para ir a casarse con Christopher Plummer !!!!!!!.

Al salir del opus dei a los 28 años y luego de estar trece no encontré ninguna de las plagas con las que nos amenazaban. Sí encontré una vida diferente. Con los problemas y situaciones normales de una vida que no había siquiera sospechado. La primera vez que un hombre me invitó a salir al cine, llamé a una amiga que había pasado poco tiempo por el opus dei para preguntarle si la película "Hanna y sus hermanas" se podía ver, si Woddy Allen estaba "permitido" y si no iba a tener escenas de sexo que me incomodaran. Salir del opus dei fue como salir de una prisión con un sistema endogámico especial y luego, afuera .... es otra cosa.

No me interesa si el opus dei va a cambiar o no, sí me interesa que los que estamos afuera pongamos este fantasma del opus dei a la luz del día, así desaparece como fantasma. Sí me interesa hacer esta pequeña movida para que se ventile un poco que es lo que vivimos adentro. Para que se escuche esta campana.

Voy a cambiar de seudónimo porque Rulo Loco parece masculino de modo que paso a llamarme a partir de ahora Pepa Broma, recuerden "nunca habrá mujeres ni de broma en el opus dei" de modo que: no existíamos.

Cariños a todos y un feliz 2 de octubre visto desde afuera !!!!!

Pepa Broma


Soy Antonio y escribo por tercera vez a vuestra web para comentaros brevemente una pequeña cuestion:

No sabeis cómo siento que hayais decidido no responder publicamente a algunas cartas: de hecho es de las cosas que mas me gustan de la página, los certeros y agudos comentarios, pero tengo que puntualizar que gustándome casi todas vuestras respuestas prefiero con diferencia al Oreja que mis amigos y yo llamamos "el sensato" y tambien "el que es buena persona". No busco ofender al otro, no es mi intención, sobre todo sabiendo cómo se las gasta cuando la carta no le agrada o cuando se comenta por descuido que el que lo manda es de Sevilla, terrible pecado, ya se sabe cómo somos de chistosos, enteraos, superiores, señoritos, etc, y tengo que admitir que de vez en cuando me divierten pero normalmente sus respuestas son para arrendar sillas, las del que llamamos "el resentido" o "el de la mala leche". (Así le llamamos, lo siento, por algo será).

Recuerdo que en mi primera carta su respuesta me dejó con las patas colgando, además de ironizar sobre mi ciudad, cosa que no le he visto hacer con nadie más, me vapuleó a gusto, como ha hecho con el pobre José Carlos, que no creo que tenga huevos para escribiros otra vez, criatura. Sin embargo la segunda carta me fue respondida de una manera suave, comedida, amigable, por el ..."sensato". En fin, no busco, insisto, putear, ni crear polémica, ni que me odieis de por vida, solo comento un hecho que algunos seguidores de vuestra web comentamos con frecuencia, y que la airada y ofensiva respuesta a José Carlos me ha decidido a echarle valor y enfrentarme a una respuesta del... digamos del que da la sensación de ser el mas resentido de los Orejas. Que también tiene derecho a ser como le de la gana, pero que a lo mejor debería tener cuidadín con almas atormentadas que escriben buscando otra cosa distintas a respuestas gratuitamente airadas. Me la he jugado, lo se, pero alguien le tiene que parar los pies a ese corazón lleno de rencor. Rezaré por tí, y no me odies, ya sabes cómo somos los sevillanos.

Con el mismo cariño y agradecimiento que el primer día en que gracias a Dios os descubrí os mando un abrazo
Antonio

(Amigo, no fue para tanto, que los andaluces sois un pelín exageraos y perdona si nombro tu región con buena voluntad y sin ánimo de meterme y con todo el respeto. (¿Ves cómo he cambiado?). Hablé de tu ciudad porque la conozco y me gusta el jamón 5 jotas y un buen y fresquito fino Quinta. Yo soy el oreja de la mala leche, quizá el amargado como tú dices pero si nunca tuve sensación de arremeter contra alguien fue contigo. Pudiera ser que intentara hacerme el gracioso pero no hacerte daño, y las gracietas a veces no se transmiten bien. No creo tener el corazón lleno de rencor pero si eso es lo que yo he transmitido cuando me ha tocado contestar a mí, pido perdón a ti y a quienes le haya molestado o herido. ¿Hacemos las paces?. Un saludo)


Hola amigos

llevo tiempo siguiendo vuestra pagina y me habia decidido a escribirles. Sin embargo, he observado que algunos e-mails eran contestados sistematica y negativamente por la oreja de guardia. A la buena intención y libre opinion de algunos se les respondia con cierta contundencia, a veces con ironia.... no me parecio correcto en absoluto. Celebro que hayais tomado la decision de no respoderlos y hacer constar vuestra opinion a traves de mails personales. Como bien apunta fede la pagina gana enteros en credibilidad y autentica libertad de opinion. Entonces si, les escribire en breve. un saludo.

A.V.


Lo unico que quiero subrayar, màs allà de que el Oreja de guardia haya acertado o no con sus comentarios, es que en este sitio han sido publicados todos las emails y cada cual ha podido argumentar el acierto o el no acierto del comentario mismo.

En los sitios criticos se encuentran pareceres en pro o en contra del argumento y -justamente porque por formaciòn reactiva, nos encontramos muy sensibles a las argumentaciones de autoridad- no dejemos de criticar ni al Oreja (y le estimamos y queremos) si no estamos de acuerdo con él. Esto nunca va a pasar en un sitio en que se hable istitucionalmente del opus.

Si el Oreja se equivoca, él mismo va a publicar los pareceres criticos, y en esto acierta mucho màs que si hubiera acertado el comentario origen de todo el mareo este.

Gracias a todos los Orejas -los de guardia y los que descansan- por el trabajo que hacen cada dìa por los que aquì nos encontramos, y que sepan ver también en nuestras criticas el esfuerzo comùn para estar de guardia y para no caer en los errores que criticamos.

Un saludo para todos
Aquilina

[He acogido la sugerencia de asignar con un nickname, que por cierto nos ayudarà a identificarnos mejor. Soy L.E. de Italia, y he escogido este nick desde que ya no soy ave de corral ;-)]


Hola a todos!

He visto las criticas a algunas respuestas de los orejas a los que se mantienen medio a favor del opus dei o a los que, aunque digan que se fueron, siguen con la mentalidad, que es lo mismo que seguir dentro... me gustaria decir que a mi me encantan todas las réplicas que han hecho y considero que deberian seguir con ellas.

Cuando lees algunos mensajes, como el de jose carlos, me indigna ver que hay gente que aun piensa así, gente que por muy buena experiencia que (dudo) dicen que tuvieron, pueda expresarse en nuestra web como si nada! si no hay replicas, empezaran a invadirnos los miembros del opus dei aprovechándose de nuestra "buena fe". Vamos a acabar dándoles propaganda si dejamos que nos cuenten lo bien que "se está" en el opus!!! eso, que lo expliquen en sus páginas, no creéis?

Dejarles hablar sí! pero con nuestro punto de vista a continuación. tal y como se hacía hasta ahora. es mi opinión. no debemos ser transigentes con la intransigencia. no todo en el opus era malo... hay aspectos de la vida en que,
desgraciadmante, hemos de ser como ellos.

ana_bcn


1-10-2003

(Amigos, llevábamos un tiempo pensando (a veces pensamos) sobre la conveniencia o no de que el oreja de guardia de turno, conteste directamente en la web a los correos que enviais. Tras la respuesta de ayer a José Carlos, nos han dado palos por casi todos los lados y el oreja que le contestó lleva varias horas leyendo "Surco", de castigo. Así que los orejas de este otro lado de la pantalla hemos acordado que no se contestará o replicará o sermoneará o apabullará a nadie "oficialmente", y que si alguno de nosotros quiere hacerlo -que sí que queremos porque la asepsia aún no se ha apoderado de nosotros-, lo hará a título personal a través de un correo publicado en la web, como hacéis los demás.)


He leído con atención el mensaje de José Carlos sobre seguir queriendo a la Obra. La verdad es que me pareció un testimonio sincero, respetuoso, sereno y en gran parte lo suscribo. En cambio me sorprendió muy negativamente el "comentario editorial" del Oreja de Guardia. Desde luego, esa forma de responder a quien no piensa igual que uno no favorece en absoluto la credibilidad de la web. Ya sé que no tenéis ninguna obligación de publicar el correo de José Carlos (ni éste que os escribo) y que tenéis todo el derecho del mundo a criticar a quien no piense de determinada manera, pero entonces dejadlo claro desde el principio. Advertid con claridad que en la web no se pretende ofrecer la verdad sobre el Opus sino sólo las opiniones negativas. Quien os dice esto ha escrito en otras ocasiones comentarios críticos hacia el Opus, y a las pruebas me remito. Pero pienso que la mejor garantía de credibilidad de los comentarios críticos es su contraste con las opiniones distintas. Confiemos en la madurez de las personas. ¿Quién soy yo o el oreja de guardia para juzgar la vida de José Carlos? El, que la vive en primera persona, es el más autorizado al respecto. Y su testimonio -en lo que se refiere a su experiencia- es insustituible e inatacable.

Os agradeceré me mandéis la dirección electrónica de José Carlos para escribirle.

Saludos
Ramiro E.


Yo tampoco quiero que la web se convierta en un sitio de alabanzas a la Obra y por la misma razón que vosotros: no tengo nada que alabar. Lo que es diferente de reconocer que pueda haber aspectos, patrimonio de todos los hombres o al menos de los cristianos, que están presentes en la Obra y que, pese a ella misma, tienden a hacer el bien en quien participa de ellos. Una cosa es alabar y otra reconocer. No creo que la Obra sea el Anticristo o, como dice alguno, "la suma de todos los males posibles sin mezcla de bien alguno". Negar que tenga, aunque sea "per accidens", aspectos positivos, me parece un error moral e intelectual. Que la mayoría de quienes escriben no hagan hincapié en ellos, es señal, en mi opinión, de que dan por supuesto que algo bueno o positivo tiene, porque si no ningún atractivo habría ejercido sobre ellos y, en ese caso, tonto el que pitó en su día. Pero también es señal de que saben que lo bueno o positivo es en gran medida accidental, y por eso tratan de lo negativo, para contrarrestar en lo posible la imagen que pretende dar la Obra, a toda costa y por encima de todos los que no fuimos, de ser todo lo contrario: "la suma de todos los bienes posibles sin mezcla de mal alguno".

Desde luego que la Obra tiene muchísimos elementos que la hacen algo más cercano a "la suma de todos los males" que a "la suma de todos los bienes", pero eso no obsta para que algunos hayan experimentado también lo bueno y quieran hacerlo constar, al margen del juicio que pueda merecerle al orejas de guardia o a los demás que visitan la página su nostalgia, su pena, etc., que por lo demás considero sinceras (lo que no tiene de suyo más valor que ese y no tiene por qué corresponderse objetivamente con un referente de bondad real; sólo percibido por él). Negar que su testimonio sea sincero y responda a su vivencia personal como miembro y ex-miembro de la Obra, negarle "autenticidad" y ver complós de infiltración del Opus, creo que es pecar de poseedores de "la auténtica verdad sobre la Obra". Aunque sólo fuese por respeto a las personas cuya visión difiere de la vuestra, sin por eso ser radicalmente contraria (él en ningún momento dice que la Obra sólo tuviese cosas buenas, y de hecho deja claro que tenía muchas negativas que le movieron a dejarla), creo que el comentario del orejas de guardia no estuvo nada acertado y que, más bien, si algo puede parecer, y más aún para los que no formaron parte de la Obra, es sectario, en el sentido de no querer ver lo que de verdadero pueda tener el otro o su parte de razón, aunque sólo sea en cuanto vivencia subjetiva, que no otra cosa es su testimonio.

Quiero hacer constar explícitamente que no comparto su punto de vista sobre las "excelencias de la Obra". Yo a eso no lo llamo excelencias, sino aspectos positivos, e, insisto, cualquier bondad sería accidental, derivada de la bondad de algunas o muchas de las personas que la integran, no de la institución o su aparato en cuanto tal. No hay que predicar en casa del cura: creo que todos los que nos fuimos lo sabemos, lo sepamos expresar mejor o peor en cada momento.

Si comento el comentario del orejas de guardia, es porque lo considero desacertado e hiriente, además de intransigente, sectario, sin tacto, etc. Así como él tiene libertad para decir lo que estime oportuno, los demás tenemos derecho a disentir de esa opinión, sin por ello correr el riesgo de exponernos a ser objeto de anatema y ser aleccionados para abrir otra web con otro tono. El tono de la vuestra, en general, es óptimo, y muy difícilmente superable. Lo que no quita para que ocasionalmente alguien, como yo, pueda encontrar objetable alguna respuesta del orejas de guardia. Es infantil pensar que, sólo por eso, quien disiente pasa a ser "pro-opus" o partidarios de "infiltraciones". Pensando lo que piensa José Carlos de la Obra se fue de la institución, precisamente porque lo malo predominó sobre lo bueno, y eso no tiene nada de "extraño". Sé (por el trato con otras personas que se fueron de la Obra) que su caso no es único, y por eso puede él también legítimamente aspirar a que alguien se reconozca en su testimonio, por muy minoritario que pueda ser el universo de quienes así vean las cosas, como él mismo admite.

Entiendo hasta cierto punto vuestro punto de vista sobre la web, pero flaco servicio hacéis a vuestro propósito, en mi opinión, con respuestas salidas de madre y poco ponderadas, como creo que ha sido ésta y como fue -aunque en menor grado- la dada en su día a Ramiro. Entiendo que se pueden decir las cosas sin necesidad de descalificar radicalmente y herir a quien os escribe.

Obviamente, sólo vosotros tenéis la clave del tono oficial del sitio y está en vuestra mano darle el que queráis. Pero despreciar la opinión de quien escribe sin mala voluntad y expone un testimonio tan real como muchos otros mucho más negativos, no me parece de recibo. Lo negro sin contraste no deja ver nada: se requiere un mínimo de claroscuro, porque así es la naturaleza de las cosas: que no son entera y radicalmente malas, sino que tienen algo de bien, aunque sea accidental en el sentido que ya he mencionado. El sitio es en verdad excelente, pero creo que a veces a algún orejas se le va la mano y que eso puede ir en detrimento del fin mismo que persigue el sitio.

Un fuerte abrazo, de
fede


para José Carlos

José Carlos, vaya por delante que yo también te deseo verdadera felicidad y paz. Soy Manuel (el M.F. de las contradicciones en los colegios...). Tu escrito me ha conmovido, pero -aunque sea por alusiones, pues soy de los que parece se toma a broma la santidad de San Josemaría, costumbres de la obra y alguna cosa más, quiero hacer alguna reflexión en voz alta- que diría Felipe Gonzalez.

Recordarás una "penícula" de una tertulia con sacerdotes, que se vio en todas las convivencias, de San Josemaría en latinoamerica; creo, no es seguro, era en Venezuela; lo que sí es cierto es que allí se permite bromear sobre la figura de Pablo VI, entonces Papa, porque había recibido a no se sabe quién, una especie de gurú (decía Escrivá) que olía fatal... aún recuerdo, entre las risas de los curas, como se giraba y le preguntaba a don Álvaro "¡Álvaro,¿es verdad o no?, te lo contó uno que estaba allí..." (el pobre Álvarete,¿qué iba a hacer?, pues decir que sí); y continuaba el santo "si tuvieron que abrir las ventanas cuando se fue el santón" -así le llamó). Y añadió: "¡qué pena nos da este Papa!".

Y en esa misma "penícula", Jose Carlos, pone en boca de un obispo italiano - estrategia muy farisaica eso de poner en boca de otro la opinión de uno - "no lo digo yo..., ¡lejos de mí!, lo decía el obispo- que "está claro que el Espíritu Santo actúa en la Iglesia, pero que a ese obispo de allá, o al de más acá, lo haya suscitado el Espíritu Santo... y Escrivá hacía un gesto muy significativo porque, todo hay que decirlo, era un buen comediante.

No sufras porque se trate con falta de respeto a Escrivá, o que su santidad sea puesta en duda. Él también lo hacía en vida (y podría contarte cosas más fuertes; por ejemplo, yo asistí a dos tertulias de un sacerdote, decano entonces de una prestigiosa Facultad de Teología, de cuatro horas de duración cada una donde nos contó anécdotas del Concilio -era consultor-, y de charlas que tenía Escrivá con los pocos consultores que asistían y que eran de la Obra; pues, entre otras pasadas que les debió comentar el Santo sobre la Jerarquía de la Iglesia un día, hablando de Fellini (Secretario de Estado, Cardenal y Obispo- la reberza, José Carlos- lo definió, a gritos, de sifilítico. Como lo lees, José Carlos). Y no me hagas recordar más de aquellas tertulias.

Nadie dice que Juan Pablo II sea tonto, pero cuidadín con mentar al Espíritu Santo como si le conocieras de toda la vida, porque no. Porque, claro, Juan Pablo II sí, pero si es Pablo VI, no: éste recibía a guarringuandones y mala gente y, encima, con Fellini de amiguete.

Escribes una frase que me tiene confuso... "la Obra me lo presentó de forma sistemática y constante desde que era muy joven, en muchos momentos de manera muy atractiva, y así se forjó la personalidad que tengo ahora. En la Obra aprendí la maravillosa realidad que es el matrimonio cristiano, desde la teología más profunda de Juan Pablo II; aunque os parezca contradictorio, mis muchos años de numerario me prepararon estupendamente para mi vida matrimonial, y si no os lo creéis preguntádselo a mi mujer". A ver, a ver, que esto es muy bueno: la Obra te ha forjado esa personalidad que tienes ahora - debes de estar muy contento con tu mismidad propia-, y te preparó estupendamente en tus años de numerario para el matrimonio (?) -y añades "preguntádselo a mi mujer". Pero, bueno, José Carlos, una cosa es que tú te veas muy bien, y que sea muy feliz... que estés forjado, vamos; pero de allí a que tengas la osadía de pretender que toda la web sepa quien es la "mujer de José Carlos". O sea, que ahora voy llamo a información de Telefónica y digo " con la mujer de Jose Carlos, que le quiero preguntar que qué tal", y van y me ponen; o que en Google escribo "mujer de José Carlos" y, hala, me sale la dirección de tu chica.... Jose Carlos, José Carlos, que me parece que te has pasado.

Además, y esto entre nosotros, como decía Escrivá en las tertulias -los demás no se enteran-: ya me gustaría hablar con tu mujer sobre la forja de la que estás hecho. Pelín fantasmas sí eres, y no te enfades, campeón, que te lo digo con cariño.

Otra cosa; tú sabes que cuando dejas de ser numerario de mayorcito (parece tu caso), no te dejan volver a incorporarte como supernumerario en, por lo menos, 15 o 20 años. Por eso no eres supernumerario, pero el tatuaje lo tienes: un Mihura. Y creo que la obra hace bien en dejar tanto tiempo porque, si no, si pitaran todos los exnumerarios mayores que se van a la vuelta de un año como supernumerarios, te aseguro que se monta una estampida de numerarios que haría falta otra subdirección en todas las delegaciones: Subdireccción de "Pies para qué os quiero", que se encomendaría a San Marcos , el que dejó a San Pablo más colgado que un fuet.

M.F.


felicitaciones

Soy un exnumerario mexicano. Entré a los 14 y medio y salí a los 19. No estuve tan involucrado, no llegué a hacer la oblación (o no sé que madres), de hecho me daba mis escapadas al cine, a fiestas y alguna vez tuve "contacto" con mujeres, por lo que enfrentarme a la realidad no estuvo tan difícil, además del apoyo incondicional de mis padres y hermanos.

Me ha gustado mucho su página, a pesar de no leerla toda. De vez en cuando me reúno con ex numerarios contemporáneos mios (mis hermanos también fueron numerarios) y platicamos como amigos que somos.

Yo estuve muy resentido con los numerarios, porque solía toparme con muchos de ellos en la universidad y ni siquiera me miraban, ni un saludo ni nada, lo que más me molestaba era el hecho de que hacía algunos años nos considerabamos "hermanos" me respetaban y hasta cierto punto me admiraban porque era de los adscritos "mayores". Qué hipócritas, lo que demostraban entonces era pura caca. Pero en fin, ya lo superé y en realidad me importa muy poco, la mayoría me caía muy mal y los que me caían bien ya se salieron.

Por otro lado, tengo una preocupación. Mi novia suele ir a medios de formación, de hecho trabaja en un colegio del Opus, por mí eso está bien, pero la preocupación me surgió a raíz de saber que comentan las charlas, no sé si también las confesiones con el cura. Lo que realmente me importa es que le den "consejos" sobre nuestra relación, que le mal influencien y que hasta le hablen mal de mí, dada mi condición de exnume.

Bueno, espero puedan responderme. Muchas gracias. Un saludo y felicidades.
F.J.


30-9-2003

Hola Orejas,

Encontré vuestra página por casualidad, ya que compré el libro de Isabel de Armas porque ojeándolo en la libreria me gustó para que lo leyera mi mujer. La verdad es que me he quedado enganchado a vuestro site. El libro de Luis Carandell ya lo había leído. Mi madre cuando entramos en un colegio sello "obra corporativa" lo compró para saber de qué iba el Opus Dei. Lo divertido es que cuando lo comentó con el preceptor de mi hermano le dijeron que no era un libro fiable y le remitieron a toda la bibliografía "oficial"

Sobre el libro de Maria del Carmen Tapia puedo decir que me ha encantado. No me sorprende todo lo que leo y es una lástima que no se encuentre en las librerías esta clase de literatura.

No sé qué tecnologías web utilizáis ni vuestro conocimiento de HTML, pero si necesitáis alguna ayuda sólo tienes que perdírmelo. Creo que la incorporación de foros o formularios para contactar con vosotros sería un punto. También os puedo ayudar en el diseño de la página si lo estimáis conveniente. En fin, os felicito por vuestro trabajo.

Os agradeceré que toda comunicación y suporte sea de la manera más anónima posible
C.R.


A pesar de todo, se puede seguir queriendo a la Obra

Queridos todos:

Me topé con vuestro portal una noche de guardia, y he estado leyendo vuestros testimonios y vivencias. He de decir que algunos me han arrancado la sonrisa, y con otros me he reído abiertamente; todos me han dado mucho que pensar. Pero si he de recalcar una sensación predominante, debo deciros que sobre todo me embarga una profunda pena. Y al final me he decidido a poner estas líneas, porque creo que entre lo mucho escrito no se representa una vivencia como la mía, que creo que muchos comparten pero no la han contado.

Me da gran pena, en primer lugar, el dolor y la amargura que en estas páginas se recuenta. Muchos hemos sufrido, después de tomar decisiones generosas en plena juventud. Lo que hemos pasado unos y otros, ahí queda, y las lágrimas, zozobras, temores y angustias no se pueden negar. Que personas buenas con tantos ideales hayan tenido que pasar por tales trances para mí sigue siendo un misterio que conoceremos en el Cielo.

También me da pena pensar que parte de ese sufrimiento haya podido ser causado por otras personas, que nos quieren, que han convivido con nosotros, que se esfuerzan por ser santos, que en su inmensa mayoría tienen buenas intenciones, y por lo que sea terminan causando dolor, muchas veces sin querer.

Me entristece ver que en tantos testimonios parecen cobrar mayor relieve los malos momentos, las incomprensiones, los malentendidos, las injusticias; y que estos sentimientos negativos dominen nuestro recuerdo, cuando tantos de nosotros hemos vivido momentos realmente bonitos, hemos conocido a personas estupendas, lo hemos pasado en grande, y hemos gastado años felices entregándonos por los que teníamos alrededor con alegría y tesón. Creo que para muchos de nosotros no fueron todo sombras, pero las luces no se vislumbran en estas páginas.

Me duele que, por encontrar la chispa o aligerar la carga de nuestros recuerdos, a veces se deje que la ironía o el sarcasmo tiña a prácticas que vivíamos antes, y que en sí son buenas y meritorias. Yo aprendí mucho de mis años en la Obra, y a la Obra he de agradecer la disciplina personal, el orden, el saber tratar con delicadeza a las mujeres, el poder comer de todo, el pensar en tener detalles con los demás, haber aprendido a hacer oración, el amor a la Eucaristía y a la Virgen, el conocimiento de la doctrina católica, y el vivir la amistad y el apostolado, que para mí siempre han sido sinónimos. Es verdad que todo eso lo podía haber aprendido fuera: pero la Obra me lo presentó de forma sistemática y constante desde que era muy joven, en muchos momentos de manera muy atractiva, y así se forjó la personalidad que tengo ahora. En la Obra aprendí la maravillosa realidad que es el matrimonio cristiano, desde la teología más profunda de Juan Pablo II; aunque os parezca contradictorio, mis muchos años de numerario me prepararon estupendamente para mi vida matrimonial, y si no os lo creéis preguntádselo a mi mujer.

Me apena que algunos se alegren de que el Opus Dei pueda estar pasando momentos difíciles, y que no se reconozca que el espíritu de la Obra ha dado sentido a las vidas de muchas personas; que haya miles de cristianos que se esfuerzan, día a día, por rezar, por ser mejores padres y madres de familia, por difundir la doctrina de la Iglesia, por servir a los demás con detalles de cariño o con iniciativas de envergadura. Hay muchas obras buenas suscitadas por este espíritu, y personas santas -a algunas las conozco muy de cerca - que lo viven desde hace muchos años y para quienes su vocación ha supuesto una avalancha de bien que se ha extendido al ambiente que les rodea.

Me parece duro que se hable del fundador de la Obra con poco respeto, quizá porque no estoy acostumbrado a que su figura se me presente de esa manera. Que tenía sus defectos, como todos los tenemos, está claro, porque sin defectos no hay lucha y sin lucha no hay santidad; y estoy de acuerdo con que hubiera sido más realista que se nos hubiera dado a conocer su persona en su totalidad, precisamente porque eso edifica más. Pero también es cierto que ahora pertenece al santoral de la Iglesia; ni este Papa es tonto, ni se le engaña al Espíritu Santo, así que a mí por lo menos me parece más prudente ceder el juicio sobre el significado de su vida a los que tienen el mandato de emitir esos pronunciamientos.

He de constatar que siempre me sentí libre en el Opus Dei: libre cuando escribí mi primera carta al Padre, apenas cumplidos los quince años; libre cada vez que renové mi entrega; libre cuando hice la fidelidad; libre también cuando años después llegó el momento de crisis, y después de un proceso desgarrador, de mucha oración y conversaciones interminables, decidí salir y emprender una nueva vida con la ayuda de Dios. Una nueva vida condicionada por lo que viví, y enriquecida por ello. Una nueva vida que asume el pasado, agradece lo bueno, pide perdón por lo malo -lo causado por mí, y lo que haya sido causado por otros -y trata de no juzgar. Y desde que salí, no me ha faltado la comprensión, el apoyo, y la amistad de muchos numerarios que convivieron conmigo, a muchos de los cuales todavía trato en persona y por escrito.

Sé que mi experiencia no es la de todos: quizá sea porque viví la mayor parte de mis años en la Obra en un país en el que siempre se ha valorado la libertad personal. Desde los cargos que he tenido he visto a muchos salir, y creo que siempre nos esforzamos porque se hicieran las cosas bien por ellos. Cuando me llegó el turno a mí, aunque hubo momentos muy duros, gracias a Dios salí adelante. Mi familia, que en su relación con la Obra reúne toda la gama posible, me trató con gran delicadeza y cariño. Pude encontrar piso, ahorrar, aprender a lavar la ropa y a cocinar, y me casé con la primera novia que tuve, que me cayó como enviada del Cielo.

Pero aunque no sea la de todos, mi experiencia es tan real como la de los demás: por eso creo que se debería incluir entre "Tus Escritos", para que todos aquellos que todavía guardan cariño hacia la Obra y aprecio a los que siguen dentro puedan encontrar algo con qué identificarse. Espero que "Orejas" dé lugar a que se recoja un testimonio favorable, porque es sincero y sentido (os aseguro que lo he escrito por mi cuenta, y sigo sin pertenecer al Opus Dei); y no tengo inconveniente para que les deis mi dirección electrónica al que os la pida si quiere entablar una conversación privada conmigo.

Con cariño verdadero por todos los que compartisteis años en la Obra, deseándoos verdadera felicidad y paz, un fuerte abrazo,

José Carlos

(Amigo, permítenos que decidamos dónde tenemos que colocar los correos que nos llegan y cuáles nos ofrecen credibilidad para colocarlos en los Escritos. En esta web sabemos qué es la Obra, conocemos la marañana de su fondo y trasfondo, vivimos la incoherencia entre la teoría y la práctica, vimos y padecimos cómo se viola el secreto confesional, negamos categóricamente que un chico de 15 años tenga libertad para atarse de por vida a una institución y sin conocimiento de sus padres... Y así podríamos seguir enumerando información para ilustrar tu deslumbramiento. Lo de que la novia te cayó del cielo también es para nota: ¿en paracaídas?
Añade tu experiencia a alguna web del Opus Dei donde recogen testimonios de tu estilo, pero esta web no es para ti. Curiosa coincidencia la tuya con los testimonios de ex miembros que el Opus Dei incluyó en la causa de beatificación de Escrivá. Algo así como "todo era perfecto, maravilloso, fabuloso, genial, pero yo fui tonto y me fui"...
Si la personalidad que tienes ahora se forjó en la obra, evidentemente sigues pensando como cuando estabas dentro y si no encontraste nada que repudiara tu conciencia, aunque hayas salido, continúas dentro. No sientas pena por nosotros porque nosotros sí que, gracias a Dios, nos fuimos.)


Supernumerarios

Estimado amigo B.S.

Soy el padre de Halma, y como supernumerario que fui he guardado silencio durante muchos años pero, a raíz de conocer esta pagina, la estoy siguiendo de cerca y he de advertirte, si aún no te han vaciado todavía la cartera o la cuenta, espabila.

Soy padre de seis hijos y todos queridos, ya te puedes suponer cuántos números he hecho para mantenerla económicamente y mi mujer y yo nos hemos privado de tantas cosas como cualquiera de esa Obra. Pero no llegué a la estupidez de firmar letras de 300.000 pesetas de hace 25 años como insistentemente me pedía mi director espiritual. No porque fuera más listo, sino porque desde que me casé tengo bien claro que a lo primero que me comprometí con Dios es a cuidar de ellos.

En un principio yo también creía en la bondad y sinceridad que me rodeaba, pero en este mundo las peores mentiras son las verdades a medias u ocultas. Lee atentamente el escrito de mi hija, y verás que no es que nos andáramos listos en recuperarla, sino que como los conozco a todos ellos, yo aunque me sonriera, sabía que mi 'Halma' estaba triste.

Por mi podéis estar dentro o fuera, cada uno va por la senda que mejor le parece, pero lo que no es de recibo es que a los menores de edad se les diga que oculten esto o lo otro a sus padres. También he de decirte que tiene muy mal gusto el que metan tu nombre o el mío en el Sagrario y empiecen a querer hacerte pitar. Ahora es cuando estoy pitando de veras, al ver que sigue con las mismas tácticas ¿Por qué no critican ahora a los sacerdotes que no llevan sotana como antes?

Podría escribir un libro de mis vivencias y de testimonios presenciados. Eso de que te vas cuando quieres es una falacia, te vas cuando te dejan. Y te preparan un acto humillante y bochornoso parecido a un negación de tu fe ante testigos. Yo pase por ese bochorno por tener un familiar muy próximo y querido en la Obra. Te insisto, si quieres dentro, pues nada. Tú mismo. Pero lo mismo que yo padezco la IGNOMINIA de haber abandonado la Obra porque mi conciencia la rechaza por su soberbia y doblez, vosotros tendréis que soportar a los que no pensamos como vosotros.

En cuanto a la veneración del Santo Padre hacia la Obra, supongo que no creeréis que sois los únicos a quien estime y venere. Esto te lo digo sin acritud. Espero que si tienes hijos, no pases por mi experiencia, deseándote lo mejor para ti y los tuyos. Un saludo.

PEPE


Estoy con Claudia, que escribió una de las mas bellas correspondencias de los ultimos dias, com comprensión, argumentacion y caridad. Sus palabras expresan muy bien el objectivo desta Web. Sirve también para recordarnos que actuemos con autocrítica construtiva. Tal vez nos sirva más a nosotros que a los de fuera, pues es dificil que nos comprenda quienes no pasaron por expericiencias similares. Gracias Claudia.

Mr.M


"LOS DE AHORA"

R.H.G. eres muy amable por explicar un poco más sobre lo que significaba "LOS DE SIEMPRE" (JESUITAS). Escuché del asunto en el último curso anual al que asistí, y me llamó la atención.

Pero lo escuché porque el sacerdote estaba hablando del peligro de hacer apostolado o aceptar gente que hubiera tratado con los de "LOS DE AHORA", es decir, los LEGIONARIOS DE CRISTO (grupo de religiosos y religiosas mexicanos, cuyo fundador es el P. Maciel, aún vivo).

A lo que voy es que nuevamente salta a la luz el tema de la "unidad de la Iglesia". Y lo que quiero decir públicamente es que es muy importante que al interior de la Obra aclaren sus sentimientos y formación sobre el tema, ya que con lo que dicen algunos de sus miembros (precisamente en contra de otros grupos al interior de la Iglesia), lo que logran es confundir. Se infunde cierto resentimiento contra esos grupos (baste con la críptica denominación "los de siempre", "los de ahora", y con la insinuación sospechosa de que son grupos que han hecho daño a la Obra -sin especificar motivos-). Claro, al final siempre añaden que de todas formas en “casa” se quiere y respeta a todos y hay que velar por la unidad de la Iglesia... ¡absurda contradicción!

Lo expuesto es sólo una sugerencia para que en el Opus Dei revisen el tema y eviten la confusión que causan en sus fieles respecto a qué pensar sobre otras instituciones religiosas.

Atentamente,
Teresa


Reconocimiento

Acabo de descubriros al buscar otros remas en la red. Estoy verdaderamente alucinado con lo que leo porque soy un pobre sufridor de los de "Suegra Supernumeraria" a quién San Josemaria hace innumerable milagros un día sí y otro también.

Tengo que leeros con más detenimiento, hoy tengo prisa, pero no quería dejar pasar ni un solo minuto para felicitaros por tan esclarecedora web.

Enhorabuena porque gracias a Dios os fuísteis.

Un cordial saludo y espero que mantengais mi nombre en el anonimato por si las "suegras".

A.V.


Contestación para Ana

Probablemente se trate de un sacerdote agregado o supernumerario de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y Opus Dei. Éstos son sacerdotes diocesanos (es decir que no son de ninguna orden ni congregación) que se incorporan a al Opus luego de ser sacerdotes, a diferencia de los sacerdotes numerarios que primero son del Opus y luego, por pedido del Padre de turno, se ordenan dentro de jurisdicción de la Prelatura Personal.

Los sacerdotes agregados o supernumerarios (ignoro si éstos últimos siguen existiendo) siguen dependiendo de su obispo que es quien les asigna sus tareas pastorales (por ejemplo, ser párroco) y reciben formación espiritual del Opus: asisten a círculos, retiros, hacen la charla fraterna, etc). Por lo que te dijo parece que no te mintió: recibe formación espiritual pero en cuanto a la obediencia depende de su obispo.

Espero que la aclaración te sirva.
Nasius


Para Ana, sobre la tipología de los sacerdotes de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y los del Opus Dei

Es normal que tengas dudas porque el asunto tiene miga. Sin entrar en las circunstancias que, como consecuencia del deseo del fundador de tener sus propios sacerdotes, han llevado a la organización actual, voy a intentar explicar como es el asunto. Te puedes encontrar con las siguientes situaciones:

a) Sacerdotes numerarios del Opus Dei

Son los laicos numerarios del Opus Dei que se ordenan sacerdotes por invitación del Prelado del Opus Dei. Al ordenarse automáticamente pasan a formar parte también de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, y siguen siendo miembros del Opus Dei. . Quedan incardinados como sacerdotes de la Prelatura, es decir, que su ordinario ("su jefe") es al prelado del Opus Dei..

b) Sacerdotes agregados del Opus Dei

Igual que los anteriores, pero cuando entraron en el Opus Dei lo hicieron como "agregados" en lugar de cómo "numerarios".

Los dos grupos anteriores forman el "presbiterio de la prelatura", o sea, el grupo de sacerdotes cuyo "jefe" es el Prelado del Opus Dei. Todos los cargos de dirección y de formación en el Opus Dei para los que se requiera ser sacerdote están ocupados por sacerdotes de estos grupos. Su trabajo está dedicado al cien por cien a actividades del apostolado del Opus Dei.

(Como indicaba antes, forman parte automáticamente, desde que se ordenan, de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz. ¿Por qué? Pues porque la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz fue el mecanismo jurídico mediante el cual M. Escrivá pudo tener sus propios sacerdotes cuando el Opus Dei aún no era una prelatura personal.)

c) Sacerdotes agregados de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz

Son aquellos que siendo sacerdotes diocesanos, deciden que quieren colaborar con el Opus Dei. Los puedes encontrar en los centros de la Obra, normalmente confesando, pero no ocupan cargos de dirección. Digamos, que "echan una mano" en las labores, e intentan vivir el espíritu de santificación del trabajo ordinario en su profesión de sacerdotes diocesanos. (Parece el caso que Ana indica en su correo es de este tipo). En sentido estricto no pertenecen al Opus Dei, pero sí a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz (que, no olvidemos, son inseparables. Cuesta un poquito entenderlo, pero...)

No forman parte del "presbiterio de la prelatura", porque "su jefe" es el obispo de la diócesis a la que pertenezcan. (No cabe duda, sin embargo, de que a través de la dirección espiritual, charlas, convivencias, etc. la influencia del Opus Dei sobre ellos es muy fuerte).

En los centros, estos son los sacerdotes que suelen conocerse como "agregados".

d) Sacerdotes supernumerarios de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz

Esto ya es para nota. Son como los anteriores, caso c), sacerdotes diocesanos, pero con imposibilidad de dedicarse a "echar una mano" en las labores. Por ello no te los encontrarás habitualmente en los centros. Pertenecen a la S.S. de la Santa Cruz, pero no pertenecen al presbiterio del Opus Dei, y su ordinario es el obispo diocesano.

Javier


29-9-2003

El complejo de infidelidad.

“Después de respetar y aceptar –escribe a este propósito el P. César Vaca- la doctrina moral sobre la responsabilidad que engendra la vocación y la obligación moral de responder a llamamiento de Dios, se exagera mucho, incluso en libros espirituales que tratan del tema, sobre los peligros del abandono de la vida religiosa, sin distinguir lo suficiente en los casos en los que ese abandono es por voluntad propia y falta de fidelidad a la gracia, de aquellos otros en los cuales la vocación no se reveló con plena claridad...

(El correo compleo de 'Crítico Constructivo' está en Tus escritos y se titula "El complejo de infidelidad")


Para la Hermana Gloria

Estimada Hermana Gloria. Gracias por tu mensaje, sobre todo porque recuerdas que lo que debe primar en la vida es la caridad. Coincido contigo en eso. Ahora, en cuanto a los juicios que realizas sobre lo escrito en la web, difiero un tanto.

No se trata sólo de presentar una visión "amarga, sin amor y sin sentido". Quizá puedas verlo desde otra óptica (como lo vemos muchos de los que participamos):

1. Compartimos experiencias reales, situaciones de vida que "curiosamente" coinciden, independientemente de la época, la edad, la nacionalidad. Por tanto, objetivas, ciertas, fundadas en hechos. Pueden narrarse en distintos tonos, pero no por ello son necesariamente "amargas" como las calificas. Me parece que muchas de ellas reflejan más bien el sufrimiento padecido en común. Si lees bien, otros mensajes encierran también esperanza y motivan a salir adelante, comunican alternativas, abren paso a otra vida posible -fuera de la institución- (y si se narran los hechos es para dejar constancia de que al interior del Opus Dei hay cosas que dañan, pero que se pueden superar).

2. ¿Puedes categóricamente juzgar que sin "amor"?

Hermana, sólo Dios mide los corazones. Creéme que detrás de muchos escritos lo que existe es un profundo deseo de ayudar (incluso, me atrevo a decir, el afán de algunos exmiembros por comunicar -por este medio- al mismo Opus Dei la pena que los embarga al confirmar errores a nivel institucional, y la intención de que se den cuenta de ellos) .

El simple hecho de compartir situaciones de vida -que al leerse recuerdan la propia experiencia-, lo que hacen es ayudar a quienes las padecieron a no sentirse bichos raros, casos exclusivos, seres egoístas que "no supieron", "no quisieron", "despreciaron", "fueron soberbios" respecto su camino... creéme, esas ideas son las que permanecen rondando la mente de muchos que salen, porque así los hicieron sentirse (así se les "culpó" al salir), y cuando uno se da cuenta de que no era "uno", sino una "mentalidad institucional" (porque lee la misma situación en otras personas), revalora su propia persona, revalora su propia conciencia, y encuentra nuevos motivos para continuar adelante -conforme ve a otros que lo han logrado después de su salida-.

3. ¿Sin sentido? Delatar el mal es un deber de justicia, y ofrecer alternativas un deber de caridad. ¿Que hay que aprender a hacerlo? ese es otro boleto, “al que tenga oídos, que oiga”. Muchos testimonios lo hacen con objetividad, incluso con caridad, con esperanza.

Además, algunos encuentran el "sentido" justo después de "desahogarse", y no por ello lo que dicen es infundado, ¡muy por el contrario! No olvides que “esos” que son calificados como “amargados” (por personas ajenas al modo del vida y conocimiento preciso de la vida al interior del Opus Dei) son gente buena, que entregó por años su vida a Dios, que ha luchado y sigue luchando por ser coherente con su conciencia. Y que entre las cosas que dicen se pueden encontrar elementos comunes que llevan a comprobar aspectos viciados de ese “camino” que finalmente no les correspondía.

Mira, hermana Gloria, si vas siguiendo a personas concretas por algún tiempo (hay gente que escribe permanentemente), te irás dando cuenta de su propio cambio, es genial. El simple hecho de haber convertido esta página en un espacio de diálogo, es ya muestra patente de su propia evolución. De sólo contener "libros silenciados" se ha convertido en un espacio en que concurre cada vez más gente que busca la verdad. De una adecuada participación dialógica dependen muchas cosas.

Sentido existe, y profundo. Ojalá la propia Iglesia, las autoridades del Opus Dei, y la gente de buena voluntad puedan desentrañar ese "sentido" que se desprende de un clamor hondo de tantas almas que han pasado por la institución. Hay documentos valiosísimos que pueden servir de líneas rectoras para una transformación para bien... depende de "su voluntad" para descifrar la riqueza antropológica y espiritual que encierran. Me parece, en conclusión, que lo que hace falta es la disposición de encontrar errores reales, para cambiarlos (no basta con decir "miren, una bola de amargados, sin nociones de amor, y que escriben sin sentido, se han reunido..." lo interesante sería mejor que se preguntaran ¿por qué una vez que se ha abierto un espacio de libre expresión ha confluido gente tan diversa, diciendo -de diferentes formas- lo mismo respecto a situaciones muy concretas y dañinas?).

En cuanto a que el Opus Dei pueda servir a algunas personas a alcanzar la santidad y a otras no, de acuerdo, aunque sinceramente me parece que esa cuestión es más personal que de "camino" (uno puede estar en un "camino" siendo un sinvergüenza, o desaprovechando los medios que ofrece -y vale de una vez recordar que el Opus Dei es un medio y no un fin-). A mí en lo personal me ha ayudado mucho, y le debo y agradezco varias cosas (incluidas las circunstancias que me causaron y causan crisis, porque también de ellas he podido aprender -sobre todo a no hacerlas-). Pero eso no quita que existen prácticas concretas y objetivas que producen serias consecuencias perjudiciales a nivel moral y espiritual. En la historia de la Iglesia ha habido también errores -que el mismo Santo Padre, con el valor y humildad que lo caracterizan, ha reconocido, rectificado y hasta pedido perdón-. ¿Por qué no puede ocurrir lo mismo en el caso del Opus Dei?

Espero que puedas leer con más calma y profundidad lo que se encierra en este espacio de confluencia, y encuentres lo que realmente hay detrás de lo que has calificado como "ataques" y "veneno".

Dios te bendiga hermana.

Claudia


Desde hace unos días, cuando se abre el apartado "Diario de a Bordo" salta una página porno en inglés. No me he quedado con la dirección porque algunas de esas páginas se "enganchan" automáticamente y cobran por entrar. Como el ordenador es del trabajo y los gastos están "relativamente" controlados... no la he abierto, pero salta siempre. Si hace falta saber esa dirección me lo decís.

Un abrazo.
Alfonso

(Amigo, no podemos hacer nada ante los milagros de Escrivá que tanto se prodigan por internet y especialmente contra esta web. Ya no sólo, si se pierde la dentadura postiza, se encuentra; ahora si se le reza mucho, redirecciona webs a páginas pornográficas... La santidad hace maravillas.)


hola orejas!

que tal? tengo una pregunta a ver si me la podeis contestar, plis

un presbitero de una parroquia de barcelona al que le preguntaron si era del opus dijo que era de la orden de la santa cruz. eso implica ser del opus? porq el dice que recibe la direccion espiritual del opus, pero que el no tiene nada que ver. puede ser eso posible?

ana

(Amiga, a ver qué nos contestan los orejas porque este oreja no lo sabe. El Opus Dei es en realidad "Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y Opus Dei", pero quizá para abreviar, se han buscado un "nickname" más corto o quizá haya una orden de la Santa Cruz o quizá ahora se diga que uno pertenece a la "Santa Cruz" en lugar de al Opus Dei o quizá ya funcione la Sociedad Sacerdotal por una lado y el Opus Dei por otro, o quizá el presbítero tiene amnesia pasajera.)


Los Jesuitas.

He leido que habían prohibido a un jesuita hablar sobre el Opus Dei. Por favor, que alguien le comente al General de los Jesuitas, que en el Opus Dei se habla de ellos y muy mal por cierto.

Vamos a hacer un poco de memoria: Se nos daba una charla titulada "LOS DE SIEMPRE", con un libro llamado "Instrucciones" (escritos por san josemaría, había uno específico para cada labor y otro exclusivo para los directores, esos libros sólo los podían utilizar algunos directores, no están en todos los centros.)

En esa charla y siguiendo el texto de san Josemaría, se nos contaba el tremendo daño que los jesuitas habían causado a la Obra, lo mucho que había sufrido san Josem. con ellos, lo prohibidísimo que estaba que un jesuita entrase en un centro, la torpeza que significaba que un numerario se le ocurriese hacer la tesis en la universidad de los Jesuitas en Roma y la especial vigilancia a que quedaba sometido dicho numerario por ese hecho, y otras barbaridades durante cuarenta y cinco minutos que duró aquello.

Todo era descrito con un lenguaje amenazante y con mucho miedo y sin demostrar nada. Se leían de vez en cuando trozos de texto de san Josemaría de aquel libro.

Supongo que ese libro no lo habrán presentado al proceso de canonización.

Uno salía de aquella charla perfectamente convencido de que los jesuitas eran verdaderos demonios. Al final de la charla el director comentaba que existía un nuevo subgrupo de "LOS DE SIEMPRE" formado por los que se habían ido de la Obra, insinuaba que habían cometido graves pecados contra la pureza, y que no merecían otra cosa que apartarse de ellos todo lo posible, los directores habían hecho todo lo que habían podido para salvar sus almas, pero ahora era todo inútil.

Por favor, que alguien se lo comente al Padre General de los Jesuitas, para que hable con el S.E.R. Prelado del Opus Dei (Besad donde él pise) para que ellos tampoco hablen mal de ninguna institución de la Iglesia.

R.H.G.

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OPUS DEI: ¿un CAMINO a ninguna parte?