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Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

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CORRESPONDENCIA

 

24-2-2004

 

Hola!

Yo nací en Pamplona en el año 1980. Entre 1986 y 1991 estudié en un colegio de los Hermanos Maristas; guardo grandes recuerdos de aquella época. Hacia 5º de EGB mi rendimiento académico bajó un poco, de manera que mis padres, con la mejor intención del mundo,decidieron matricularme en El Redín, colegio de Fomento cuya dirección espiritual la lleva gente del Opus. Allí, desde 6º de EGB hasta COU fui descubriendo ese peculiar mundo llamado OPUS DEI.

He de decir que nunca me atrajo tal ambiente, pero en -cierto modo- lograron meterme el miedo en el cuerpo: todo el día hablándonos del Infierno, del demonio, del binomio salvación-condenación, de los mandamientos 6º y 9º. Lo cierto es que estos temas pueden impresionar y atemorizar bastante a un niño de 12 años. No tardé demasiado en empezar a coger manía a la gente del Opus con sus acosos, ñoñerías y clasismos. Pese a la mencionada "manía" yo me creía más o menos todo lo que me contaban.

Con el paso de los años mi amplitud de horizontes creció hasta llegar a perder la fe casi del todo: a día de hoy soy el perfecto católico no practicante tendiendo a no creyente.

Desde la perspectiva de los 24 años de edad me doy cuenta de las barbaridades que se cometían (y supongo que se seguirán cometiendo) en los colegios del Opus: clasismo reinante por doquier, humillaciones a los alumnos por parte de algunos profesores, intromisión en la vida íntima de los críos (preceptor/cura: "¿cuántas pajitas te has hecho esta semana, fulanito?" ). ¿Acaso es de recibo que un profesor le pregunte a un adolescente por su recién estrenada vida sexual?

He llegado a pensar que detrás de toda esa avalancha de preguntas relacionadas con el sexo hay "algo más": una especie de morbo o deseo sexual frustrado. No creo que ande muy lejos de vislumbrar la verdad, teniendo en cuenta que en el colegio donde yo estudié hubo, hasta 1994, un conserje numerario que acostumbraba meterles la camisa por dentro del pantalón a los niños con fines bastante alejados de lo que predica el Opus: fueron varios mis compañeros de clase los que aseguraron haber experimentado los "tocamientos" de él. Lo último que sé de ese numerario es que fue a trabajar a la "Meca" española del Opus: Torreciudad.

Terminé COU en Junio de 1999; en septiembre de ese mismo año comencé a estudiar Humanidades en la Universidad de Navarra (del Opus, para variar). Aquí el ambiente es muchísimo más permisivo que en un colegio con 600 ó 700 alumnos; es algo lógico y comprensible: si no quieren quedarse solos y aislados en su burbuja deben abrirse al mundo, al menos en "gandes feudos" como este, donde estudia gente de todo tipo.

En febrero de 2003 una ola de frío azotó gran parte de la península Ibérica; Eduardo Buxens, fotógrafo de Diario de Navarra, publicó una imágen en relación con tan intenso frío: una chica abrigada hasta las cejas esperando al autobús contrastaba con la imágen de una valla publicitaria de fondo en la que se podía ver parte de la anatomí ade una modelo anunciando ropa interior femenina. He de decir que la fotografía en cuestión pasaba tan desapercibida que ni siquiera reparé en ella el día que fue publicada.

Pero hubo alguna que otra persona que quiso buscarle cinco pies al gato y aprovechó la ocasión para criticar al fotógrafo y poner de manifiesto sus trasnochadas ideas: poco se hicieron esperar las cartas dirigidas al director de Diario de Navarra; hubo dos personas, J.M.P.B. y T.G.C, que yo sabía de muy buena tinta que eran del entorno opusdeísta (que no miembros) que escribieron unas cartas al director que daban risa; reproduzco algunas de sus palabras:

J.M.P.B.: "¿Qué puede pensar un hijo de un padre al que se le cae la baba viendo a una moza que vende su cuerpo en un cartel de las marquesinas del autobús? (...) no se con qué conciencia dirá este hombre a su mujer "te quiero" cuando, mientras espera al autobús no es su esposa precisamente la que ocupa su corazón". Las tonterías se sucedían unas a otras; para poner la guinda al pastel, este iluminado decía que las modelos que se dejan fotografiar en ropa interior practican una prostitución de baja intensidad, y que los maridos que las miran hacen lo propio con la fidelidad a sus esposas ("infidelidad de baja intensidad")

¡Toma ya!

T.G.C., por su parte decía, en un tono mucho menos inquisitorio que le parecía de mal gusto la foto del periódico.

Yo leí su carta desconociendo que días atrás, J.M.P.B. había publicado una mucho más "opusiana". Se me calentó la sangre en las venas y decidí escribir al periódico una carta de lo más incendiaria:

"Qué irónico resulta leer en Cartas al director de Diario de Navarra una serie de textos cuyo tema es siempre el mismo: la indecorosa publicidad en las marquesinas de las paradas de autobús. Si en el pasado nos han hecho soltar alguna que otra carcajada los exagerados escrúpulos y devaneos de los señores T. P. y E. M., ahora es T.G.C. quien saca las cosas de quicio. En su carta publicada el pasado 23 de febrero, pone de manifiesto su indignación ante un anuncio de ropa interiorfemenina que, en mi opinión, alegra bastante la vista de quienes no tenemos la desgracia de poseer una mente calenturienta y ultraconservadora. Señora TGC, estamos hablando de publicidad de ropa interior que rezuma un poco de erotismo, no de material pornográfico que muchos onsideramos (el abajo firmante el primero) de mal gusto. No quisiera con mis palabras herir la sensibilidad de nadie, pero me da la impresión de que las tres personas que he mencionado pertenecen a un ámbito ideológico-religioso muy similar. En mi pueblo se llama Opus Dei y tiene fama de practicar excelentes lavados de cerebro a asus miembros. También es cierto que sus integrantes suelen ser gente muy disciplinada y trabajadora. Ojalá algún día lleguen a tener una visión del mundo algo más tolerante.

Conociendo la tendencia de Diario de Navarra, dudo que estas líneas lleguen a ser publicadas; si ven la luz algún día quizá haya lectores que me den la razón."

A partir de aquí comenzó el calvario de quien escribe estas líneas; como era lógico las cartas en mi contra no se hicieron esperar. Yo no temía demasiado las posibles críticas; lo que más miedo me daba era mi posible expulsión de la Universidad del Opus. Afortunadamente no me echaron; sigo aquí estudiando y trabajando y escribiendo estas líneas desde uno de sus ordenadores.

Las críticas que me llegaron fueron terribles: llegué incluso a temer por mi integridad física. Recuerdo que muchas veces caminaba por los pasillos de la Universidad dándome la vuelta cada 10 ó 15 metros, por si alguien me seguía; sé que esto suena paranoico y digno de un loco con fobias persecutorias, pero el ambiente hostil que se creó a mi alrededor despertó en mí un miedo dificil de controlar.

Pasaré a escribir alginos de los piropos que me llegaron, vía Diario de Navarra:

TGC se enteró de que yo trabajaba como becario en la Universidad y lo mencionó en su carta de respuesta a fin de hacer sonar ciertas alarmas en rectorado; su carta concluía así:

"podemos seguir debatiendo otro día. Los dos disfrutamos pensando con ironía. Te invito a un pincho (tu trabajas en la Universidad de Navarra y yo estudio allí.) De verdad te dejas lavar el cerebro?"

Hubo alrededor de 8 cartas de respuesta a la mía: ya se sabe, si les tocas los cojones a los del Opus se defienden con uñas y dientes; llegaron a llamarme pervertido, machista, ordinario... en un periódico con una tirada de 90.000 ejemplares. El caso más extremo que recuerdo es el de una persona que tituló su carta (en el periódico el título de esas cartas aparece en negrita y a tamaño titular pequeño) "Fulanito de tal y sus marquesinas"

Está claro que estas personas demostraron un exquisito pudor para lo referente al erotismo; realmente respetan muy mucho los mandamientos 6º y 9º; lo que no llevan muy bien es la caridad con el prójimo.

METALHEAD


Hola Orejas,

Quería decir nomás que estoy de acuerdo con lo que dice Cooper. A medida que uno conoce más cosas y las piensa en profundidad, resulta difícil creer que existió un tiempo "anterior a la caída", donde todo era inocencia.

Sería muy interesante escuchar más testimonios de los años 40 o 50.

La Obra es producto de una planificación total y al detalle, como bien le gustaba hacer al fundador. Este nivel de detalle es la prueba que más compromete la inocencia de la Obra y su fundador. Han dejado sus huellas digitales en la escena del crimen, por todos lados.

Como decía una película («El club de los emperadores»), el final de una historia depende de su comienzo. Y del modo en que terminan tantas historias en la Obra, está claro que desde el comienzo de cada una de esas historias la Obra ya venía actuando de manera dolosa.

Muy bueno de lo de "Reloaded" por parte de Mystique.

Confío profundamente en que este sitio web nos ayudará a descubrir y entender qué es lo que pasó y de qué manera.

Saludos,
E.B.E.


Yo realmente no he tenido una mala experiencia con el Opus, pues estuve en un colegio mayor y me fui en cuanto me empezaron a tocar los.... Pero me casé con una supernumeraria, y resulta que cuanto más me opongo al Opus, es peor. En su familia, tampoco tiene a nadie que sea del Opus. Y lo peor, o lo mejor es que ahora hemos tenido una bebeb. Y ya está pensando el día de mañana en meterla en colegios, etc.

Vamos que necesito ayuda para que deje de ser del opus. Necesito que mi mujer sea libre.

Un abrazo

José


Queridos todos:

hace días que no entraba en la página. Me pondré al día poco a poco, pero veo, por lo que leo hoy, que los correos son cada día mejores, tanto en contenido, como en claridad. Se incorpora gente tan preparada que te da un poco de vergüenza escribir. Bueno, si uno tuviera vergüenza a estas alturas de la copla.

Sólo contestar rápidamente al correo de María (23 de febrero de 2004).

María, creo que este familiar tuyo necesita ayuda, y debes proporcionársela. Pero, honestamente, no creo que la culpa la tenga Camino.

Te puedo asegurar que he leído ese libro muchas veces, hasta acabar aborreciéndolo (es un decir). Fíjate si es así, que en los últimos once años, desde que dejé la obra, no lo he cogido ni una sola vez. Pero hay que ser sinceros, y por muchas tonterías que diga, se trata sólo de consejitos "carcas", a veces un pelín fascistoides, propios de la Iglesia de los años 30, pre-conciliar, estrictos en moral católica, con su asomo de pedantería del cura de pueblo de toda la vida. Pero no aconseja a nadie que deje de comer, que deje de beber, que deje de respirar aire puro, o que se suicide de cualquier forma. Al menos yo nunca le he visto ese cariz.

Creo que los problemas de tu familiar van por otro lado. Quizá el padecimiento de una enfermedad que desconocéis, o que se haya obsesionado por las cosas que ha leído en ese libro, pero que podría haberle pasado lo mismo con "El Quijote", por poner un ejemplo.

Es cierto que hay personas que se toman las cosas a la tremenda, y que si se leen, en un libro que les gusta, que es bueno ayunar, deciden dejar de comer para siempre. Pero eso le sucede a personas con desordenes psicológicos previos, quizá desconocidos, que les impulsan a cometer esas exageraciones, de las que no podemos culpar a los autores. Como quienes quisieron culpar a Goethe (creo que se escribe así) de los suicidios de personas que leyeron su "Werter". Es excesivo.

Creo que lo explicaré mejor con un relato que cuenta Sender en "La tesis de Nancy". Es más o menos así:

Un señor está muy angustiado, por problemas que no puede resolver, de todo tipo. No ve escapatoria a su situación. En estas, se encuentra con un amigo, un tanto piadoso, que le recomienda lo siguiente: Abre el Evangelio por cualquier página, y sigue el consejo que te dé. El señor hace lo que le indican, y lo abre por el fragmento en el que dice: "Y fue Judas y se ahorcó". Compungido, mira a su amigo, que le dice: Hombre, a veces no da resultado a la primera, y hay que abrirlo otra vez. El angustiado vuelve a abrir el Evangelio, y lo hace por el lugar en el que Jesús le dice al Maestro de la Ley: "Haz tú lo mismo". Con lo que su angustia se acerca a la más evidente desesperación, que sólo en el cáñamo puede encontrar alivio, según la escritura.

Claro, si el individuo del chiste se ahorcara, después de lo leído, se le podría echar la culpa a Jesús, pero creo que sería muy fuerte. ¿O no?

He introducido algo parecido a un chiste, pero que, en realidad, es una reflexión. En ningún caso me tomo a broma el correo de María. Todo lo contrario. Deseo que encuentres el motivo por el que tu familiar padece este problema, y puedas resolverlo. Pero creo que estás buscando en un lugar equivocado. Y a lo mejor pierdes un tiempo precioso.

Un fuerte abrazo, y todo mi cariño.

Gregory P.


Hola, J.O.

Por tu escrito de ayer (23 Febrero 2004), tú y yo debimos coincidir por aquellos verdes prados de Albión, pero por tus iniciales no caigo. Yo estuve en Netherhall, Kelston y Elmore, del 76 al 86, pero tus iniciales se me resisten. Yo dejé la obra en el 96, diez años después de volver a España desde Inglaterra.

Si quieres, te puedes poner en contacto conmigo directamente a través de los Orejas, y podemos recordar y contrastar pareceres de todo aquello. Léete el pequeño homenaje que le ofrecí a Desmond en estas páginas (18 Noviembre 2003), porque creo que es la misma persona a la que tú te refieres en tu carta de ayer.

Un saludo para ti y también para tod@s, con el cariño de siempre,

tony london


Mystique:

Muy interesantes tus reflexiones de ayer. Por esa vía -positiva y constructiva- pueden aportarse muchas ideas para cambiar a mejor el Opus Dei. Ahondando en esas ideas puedes cuajar un gran escrito, a colocar en "Tus escritos".

Un saludo cordial,

Espíritu crítico


No todo fue alegría y felicidad tras irme del Opus Dei, y para ello quiero dejar aquí para la eternidad mi testimonio y vivencias, que luego no haya alguien que crea que le ocurren estas cosas porque ha dejado la vocación, no. Es que se trata del mundo real.

Recuerdo mucho mi primer día en mi piso en Granada. Sólo, sin nadie a quien contarle como me sentía, sin tener un hombro cerca donde apoyar la cabeza…

¿Y qué sentía en esos momentos? Sentía una incertidumbre y un malestar que no se lo deseo a nadie…

(FML envía dos entregas a su escrito "Un año fuera del Opus Dei".
Se titulan:
-Días malos tras mi salida
-Con los pobres, camino de santidad)


Satur,

has tocado un tema ante el que, por ser mujer y haber pertenecido a la opus como supernumeraria, soy especialmente sensible. Esta es una materia delicada y quiero tener el máximo cuidado para ser justa.

Hay que tener en cuenta las características que se pueden dar en una supernumeraria. Y recalco el “se pueden dar”, para ahorrar respuestas desmelenadas que me digan todo lo contrario. Una supernumeraria, como los demás miembros de la prelatura, es dirigida en todo, en todas y cada una de las decisiones que toma. Si ha de casarse, tened por seguro que ese matrimonio ha sido más que estudiado.

Para una mujer maltratada es más que difícil salir de esa situación, baste ver los telediarios para suponer que esas estadísticas espeluznantes no son voluntarias por parte de ellas. Satur, estoy de acuerdo contigo que para salirse de la Cosa hay que echarle narices, pero no es fácil. No es fácil cuando te vas con lo puesto, porque las presiones son muchas, el miedo al escándalo es mucho, el mal ejemplo, el infierno, y, para los que habéis sido numerarios y agregados y numerarias auxiliares, la garantía total de que nunca encontraréis la felicidad.

Pero… ¿conocéis a muchas supernumerarias separadas?. Yo en 17 años, ninguna. Miento, durante una convivencia, me dijeron, en secreto, que una de las que estábamos allí era separada porque su marido se había escapado con su secretaria. Sin comentarios. Quiere esto decir que, después de la presión que aguantas en casa viviendo con una bestia, llegas a contarlo a aquellas personas que crees que te van a ayudar, que tienen la obligación de hacerlo, y, primero, la numeraria que escucha tu confidencia no tiene ni idea de lo que es vivir con un monstruo, el consejo local al que se lo consultará, tampoco, y el cura, menos.

Que nadie olvide que se repite por activa y por pasiva, ya lo comente en otro escrito, que el camino de una supernumeraria, para ir al cielo, pasa por su marido, se llama “fulanito”. Si el tal fulanito es un hombre normal, hay que dar gracias, pero como el fulanito sea un monstruo eso quiere decir que tu camino va a ser de espinas. O sea, que si en la opus ya se fomenta la baja autoestima, porque es así y estoy dispuesta a batirme dialécticamente con quien diga lo contrario, no te quiero contar qué debe ser vivir con un maltratador cuyo deporte favorito es que la imagen que tenga su mujer de si misma sea nada, niente.

Pienso en la santificación del trabajo ordinario, en el hogar, en los esfuerzos de esas mujeres por hacer bien su tarea, por hacer bien, es un ejemplo, el caldo gallego, pon esto y lo otro, que cueza mucho, se lo ofrezco a Dios, y por cada borbotón, una jaculatoria… Es la obra de arte que le tienes que ofrecer al Sumo Hacedor, como Abel, el sacrificio de lo mejor. Y llega a casa el impresentable y te tira el caldo a la cara porque no sabes cocinar. Es para pensarlo despacito. Y si sólo te lo tira, estás en el mejor de los casos. Sin olvidar que, probablemente, tengas un montón de hijos con los que seas chantajeada. Si me dejas, no los vuelves a ver. Y ella a disimular, porque encima no quiere que los chiquillos se enteren.

Este tema da para mucho, pero por hoy lo dejo aquí.

Brisas


Se acerca el 19 de marzo...

Se acerca el 19 de marzo, puesto que no hice la fidelidad, será el día en el que dejaré de permanecer juridicamente al Opus, decisión que ya he anunciado desde hace algunos meses, sin embargo tengo una inquietud, sobre el 19: ¿debo hacerme presente para decir de palabra que no renuevo?, o no me aparezco para nada?. Me preocupa que después digan que como no confirmé que no renovaba, me digan que no es valida mi no renovación, aunque en ese sentido ¿tambien no sería valida una renovación?, por Dios que lio!!, pero conociendoles... me preocupa que saquen un as bajo la manga.

Les agradezco sus opiniones.

Jack.

PD. He leido el ultimo escrito de Ruiz Retegui, como los anteriores, me ha maravillado, quisiera preguntarles, si hay algun escrito con datos biográficos de él.

(En la web puedes leer "Semblanza" y "Antonio Ruiz Retegui, breve biografía teológica. In memorian")


Hola.

Di con su página web por error, y "me enganchó". He leído varios artículos. Yo llevo 13 años en la Obra, y todavía sigo. O sea, soy "el enemigo" para ustedes.

Puedo asegurar que en sus textos se dicen muchas mentiras. También verdades, pero muchas mentiras. Algunas dan mucha pena: gente desagradecida, rencorosa, calumniadora. Pero espérenme, no se me enojen. No quiero generalizar. Entiendo que hay gente que ha sufrido mucho, gente muy dolida.

Respeto su dolor, y quisiéra tenderles una mano, y pedirles perdón si no hemos sabido tratar a cada uno-a con el máximo respeto y delicadeza. Pero vamos a ser objetivos, y no decir mentiras, ni verdades a medias, visiones deformadas para autojustificarse.

Estoy totalmente de acuerdo en lo que leí en un artículo, y lo digo así: en el Opus Dei no hay ni una sola persona de mala fe, o sea, con ganas de fastidiar a los demás, o de engañar, etc. Todos están porque sinceramente piensan que deben estar (o pensaron que debían estar), y están allí queriendo hacer el bien a todos. Aunque se oiga muy idealista, pero es la verdad.

Pero a lo que iba. Me ha llamado tremendamente la atención ver que ponen escritos de don Antonio Ruiz Retegui. Yo conozco su libro Pulchrum, y estuve en tertulia escuchándole a él, y me merece mucho respeto. Me dolió mucho saber de su muerte en el 2000. El ya está muerto, y no se puede defender. ¿De dónde sacan ustedes que él es el autor de los libros/artículos que publican? ¿Cómo sé que no es una más de las mentiras que publican? ¿Cómo sé que no está alterado?

También mencionan en algún artículo que don Antonio iba a dejar la Obra hacia el final de su vida, pero no le dio tiempo. Es una acusación muy grave. ¿En qué se basan? Pienso que si es falso, estarían difamando (quitándole la fama) a alguien después de muerto. Y eso es muy injusto.

SS

(Respecto a tus juicios sobre nuestros escritos y testimonios, que te contesten otros porque yo tengo muy poco tiempo hasta las 21.00 horas en que tengo que colocar los correos. Te hablaré de Ruiz Retegui.
Ruiz Retegui era inconfundible en la manera de escribir y de hablar; sus charlas, retiros, conferencias, etc., eran muy bien acogidas por los miembros de la Obra porque no se ajustaban al guión de decir frases comunes y citas preestablecidas. Es imposible falsificarlo. Por ejemplo, en verano, en los retiros mensuales donde se daba a elegir en la sección de mujeres que acudieran a uno entre varios propuestos, los de Ruiz Retegui se llenaban a rebosar. ¿Por qué? Porque hablaba con "savia nueva", porque no citaba a Escrivá y no se notaba, porque decía las cosas como las veía tras analizarlas en conciencia y se ajustaba al magisterio de la Iglesia, no al de la institución: parece lo mismo pero no lo es. Ruiz Retegui se vio relegado de su labor docente y en su vida dentro de la Obra, -su último encargo era atender a cuatro o cinco supernumerarios (con todo respeto para los supernumerarios) cuando era un teólogo reconocido y había sido capellán de la Universidad de Navarra-, por seguir teniendo entre sus mejores amigos a muchos que habían dejado la institución y que para él eran almas y tan hijos de Dios como tú y los que seguís dentro. Ruiz Retegui dejó sus últimos escritos a sus íntimos amigos, ¿y sabes quiénes eran? ex miembros de la Obra. ¿Por qué se lo dejaría a ellos y no al Opus Dei? Porque sabía que el Opus Dei los tiraría a la basura y nunca se publicarían. Y él escribía para que se pudieran leer porque quería ayudar a los de dentro y a los de fuera. El Opus conoce muy bien los últimos años de Ruiz Retegui: ¿por qué no cuenta qué sucedió? Porque no le interesa. ¿Por qué el Opus no edita y publica, por ejemplo, su documento "Lo teologal y lo institucional", para que lo lean los miembros de la Obra? Porque el Opus no es humilde y no reconoce que Ruiz Retegui quería ayudar a la institución para que se volvieran a enfocar las cosas. Y por esa soberbia institucional, el Opus priva a los miembros de la Obra de que lean algo que les daría mucha paz. Pero llegó internet y el Opus ya no puede detener que ese documento ni muchos otros -y el último libro suyo que terminó un mes antes de su muerte y del que nosotros y otras webs afines tenemos el manuscrito y que colocaremos pronto-, se lo pasen y se lo irán pasando unos a otros a través de email. Y además de todo lo dicho, Ruiz Retegui sufrió el derrame cerebral en casa de un oreja muy muy muy cercano a esta web, no en un centro de la Obra, sino en casa de un ex miembro del Opus Dei. ¿Por qué comete el Opus esa injusticia con Retegui y no publica sus escritos? Nosotros se los cedemos si los quieren. Algún día se conocerá todo y lo haremos nosotros con nombres y apellidos de los ex miembros que estuvieron a su lado, porque el Opus es cobarde y se calla. Aquí no hay "acusación muy grave" como dices tú, sino vuestra enorme ignorancia a la que el Opus os ha condenado o castigado a los miembros al no contaros la verdad, no solo de Ruiz Retegui sino de tantos otros miembros y ex miembros de la Obra. Tú no tienes la culpa, pero tienes la misma mala fe heredada de la institución a la que perteneces. "Se cree el ladrón que todos son de su misma condición".)


(de MF) Gracias

Enhorabuena por esta Web, lo dejé hace nueve años después de pasar 15 ¿amargos? años continuamente contracorriente, a pesar de mi buena intención. Ahora soy feliz, me siento normal, casada y con hijos y hago lo que me da la gana, no lo que quieren otros.

Escribiré mis experiencias para sacármelas de dentro, pues a veces sueño. Me alegro de que existais, estaba buscando algo así por internet pero fue mi hermana, también ex, quien me indicó la dirección.

Muchas, muchas gracias, me siento muy identificada con muchos de los testimonios y me alegra saber que no era yo la rara.

Un abrazo y hasta pronto.

MF


 


NOTA: cuando el oreja que está de guardia contesta a alguno de los correos, su comentario va en cursiva y es la opinión personal del oreja que contesta. Lo hace expresando su opinión como uno más de los que escribís, no como línea editorial de la web. Sus opiniones son igual de personales -y criticables y respetables- como las opiniones que se vierten en los correos que se reciben.


 

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