Amapola :
YA LE HE COMPRADO EL DOGAL
Es verdad, pasó hace mucho,
para los nuevos es viejo,
el dolor que aún late agónico,
en el centro de mi pecho.
Está a punto de morirse,
eso es lo que yo deseo,
ya le he comprado el dogal,
que voy a ponerle al cuello.
Por si no sirve la cuerda,
también preparé un veneno,
es preciso que termine,
de una vez con el recuerdo.
Ayer me salió de pronto,
recordándome el infierno
en el que un día caí,
sin comerlo ni beberlo.
Se presentó reclamando
recuperar de aquel tiempo
los cuatro años perdidos
en aras de un cielo eterno.
Cuatro años de juventud,
presa, más presa que un preso,
en manos del Opus Dei,
prometedor de los Cielos.
¿Quién te arreglará las alas,
que te lastimaron ellos?
Me gritó el recuerdo amargo,
viendo mis muñones viejos.
¿Quién volverá a regalarte,
el amor que quedó yerto,
de aquellas dos ilusiones,
que alentaban tus anhelos?
¿Donde están las margaritas,
que le echastes a los cerdos?
¿Donde aquellas amapolas
que en tus mejillas lucieron?
¿Merecían tus renuncias?
¿Merecían tus desvelos?
¿Merecían esa sangre,
que brotaba de tu cuerpo?
¿Y esas mortificaciones
que aturdían tus deseos?
¿Y ese continuo rezar
sin darte tiempo al recreo?
¡¡Calla, cállate por Dios!!
Grité apagando ese incendio,
y hoy estoy ya decidida,
a vivir el hoy que tengo.
Amapola
Publicado el Sunday, 19 September 2004
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