Opuslibros - Los nuevos fariseos.- JasonJonas

JasonJonas :

Si uno lee los encabezados de las plataformas oficiales del Opus, no se encuentra otra cosa más que puras cosas lindas y ciertas, que apelan a las virtudes humanas y a una muy alta moral en las personas.

Titulares recientes como:

• “El gran don para la vida cristiana que esconden las virtudes teologales”
• “Combate, cercanía, misión, ‘elige la vida’”
• “La fortaleza es ante todo una victoria contra nosotros mismos”
• “El don de la templanza hace que uno saboree mejor los bienes de la vida”
• “El Papa al Univ, ‘contemplemos a Cristo crucificado’”
• etc.

Asi, todo el tiempo el Opus comunica valores apreciados por muchos, y con ello dan la impresión constante de ser una institución muy humana y muy comprensiva con todos los problemas que vivimos las personas, al cobijo de la fe en unión con la Iglesia y con el Papa...

¿Quién, en sana consciencia, no se vería motivado o interesado por adentrarse en una organización que promueve de esta forma el ser mejores personas, ser personas de bien?

El caso es que yo no dejo de sorprenderme de la hipocresía superlativa que tiene el Opus. Pero es muy curioso como mi propia percepción del Opus ha ido evolucionando al paso del tiempo, concretándose en los últimos años con dicha afirmación.

Reflexionado, es proceso ha sido más o menos así:

• Cuando joven (de unos 16-17 años), mi opinión era nula, no tenía ni idea del Opus (aunque mis padres participaban en algo ya, yo ni en cuenta).

• Cuando me empezaron a tratar, había poca religión de su parte: no había mucho de normas piadosas, pero sí muchas actividades de excursiones y cosas así. Mi opinión era positiva, me decía que los del Opus eran personas buenas y “divertidas”.

• Cuando su labor rindió “fruto” en mí, y pité (con el afán de hacer el bien al mundo), el Opus para mí era mi todo, y mi opinión se vertía en puras cosas positivas acerca de.

• Cuando transcurrieron mis años como numerario, las pequeñas y grandes incongruencias e inconsistencias de mi vida fueron irrumpiendo mi forma de apreciar al Opus: Ya no era ferviente mi creencia acerca de la santidad prístina ni del fundador ni de la institución de la que formaba parte. Mi opinión empezó a decantar en planos más objetivos de valoración, sobre todo en vivencias que no eran consistentes con la caridad.

• Cuando comprendí que el Opus no era definitivamente “mi lugar”, y de que entré allí por un engaño en despoblado (engaños que yo mismo provocaría a otras personas), digamos que mi opinión del Opus -cuando salí- era más positiva que otros aspectos que no lo eran. Mantenía una posición relativamente favorable hacia el Opus.

• Pero en los últimos años mi opinión del Opus se ha ido transformando al revés. Cuando hoy la observo, observo que son muchas, pero muchas más cosas negativas que las pocas positivas que pudieran existir, y estoy seguro de que, cuando son positivas, son precisamente las que se realizan desobedeciendo y “fuera de las normas y de los cánones” marcados en el Opus (las positivas, en proyección, serán eventualmente negativas si no te "agachas" o te sometes en todo al Opus).

Así que hoy mi opinión sobre el Opus es bastante negativa, como negativa es la opinión que puedo tener sobre cualquier secta, llámese como se llame y trátese de quien se trate: Los hechos me han demostrado que el Opus es una secta, en toda la extensión de la palabra.

En esta evolución de opinión me he dado cuenta de que el Opus no solo no era un lugar “para mí”, sino que no es un lugar “para nadie”. Es muy injusto e inhumano que cualquier persona sea atrapada y dedique años de su vida en algo que no es ni por tantito lo que dice ser en sus encabezados lindos de sus plataformas oficiales o de cualquier otro medio del que se valgan. El Opus realmente obedece, desde su origen, fundación y permanencia, a otros muchos más intereses que son ajenos a la caridad cristiana.

Y este gran cambio de percepción y opinión en mí no ha sido derivado de meras invenciones o creencias de mi parte, ni por una animadversión, odio o rencor de mi parte. No, no tengo intereses creados a favor o en contra del Opus en lo más mínimo (dejé al Opus hace muchos años ya). Este cambio parte fundamentalmente de la objetividad de los hechos, hechos que yo desconocía completa y totalmente hace algunos años, incluso dentro de la vida que tuve por muchos años como numerario (gracias Opus Libros, y gracias a los sitios de Ágora que comunican cómo es realmente el Opus).

Así que mi sorpresa no cede, y reacciono con un verdadero estupor y con una gran impotencia cada vez que escucho o leo cada desaire, desatención, desdén, capricho, menosprecio, robo, acoso, vejación, rechazo, cinismo, peladez, calumnia e injusticia en cada acto realizado por el Opus, en el más alto nivel de hipocresía de estos individuos que se dicen fieles seguidores de Cristo y de la Iglesia.

¡Ay estos del Opus!... Sin duda alguna, con la contundencia de los hechos reflejados en cada afectación física, material, laboral, profesional, económica, sentimental, emocional y espiritual sufrida por cada una de las miles de personas que han sido dañadas por el Opus, me queda claro que todos* ellos son los nuevos fariseos de este mundo.

¿Algún día serán diferentes? Me respondo: Como institución NO, de haberlo deseado hace luengos años que lo hubiesen hecho. Jamás cambió su ególatra fundador y ellos, fieles a, jamás lo harán tampoco. Las sectas en esencia no cambian, en todo caso desaparecen, pero no parece que el Opus vaya a desaparecer completamente, sino con uñas y dientes se apeñuscan hoy y siempre a sus mezquinos intereses -aun poderosos- para permanecer en este mundo. Los que sí serán diferentes son cada vez más miembros que se salen del Opus como una consecuencia natural de conocer a fondo cómo los atraparon y cómo los engañaron, y cómo es el proceder farisaico de sus directores o de ellos mismos sin desearlo. Ellos son ahora ex – opus, y eso ya es diferente.

JasonJonas

PD: Me atrevo a decir que todos, porque todo miembro que está allí realiza, de alguna u otra forma, lo que le está impuesto en el Opus, aunque tal vez la mayoría de ellos actúe en consciencia y de buena fe (al tener convicción plena de estar haciendo el bien o de acercar almas a Dios). Pero esta fe y convicción dentro del Opus NO EXIME NI DILUYE lo que resulta de su labor: Perversa actuación en cada hecho y persona afectada.

Algún día, cuando cada uno del Opus o ex -Opus vea esto con claridad, su misma opinión también evolucionará.

Publicado el Friday, 26 April 2024