Xavier_de_Barcelona :
Hola. Yo diría que el Opus Dei es un "si es no es" porque surgió tratando de imitar los entonces exitosos métodos de la repudiada masonería.
A quien no me haya leído otras veces aclararle que no soy exmiembro y que no cuento con estudios superiores. No creo que sea por falta de capacidad personal sino porque hacia los 13 años ya andaba muy afectado y muy sobrepasado vitalmente preguntándome por lo que no andaba bien en ese Opus Dei que me rodeaba y pretendía.
La fobia del general Franco hacia la masonería y la relación de la Iglesia con la masonería son cuestiones conocidas que ahora no requieren de más explicaciones. En mi opinión durante la Guerra Civil española el obispo de Madrid Leopoldo Eijo Garay encargó a Escrivá de Balaguer, que ya tenía seguidores, que su asociación ocupara el hueco social y político de la masonería utilizando sus mismas tácticas.
Pero la discreción masónica, justificada por sus antiguas luchas contra los absolutismos, se vuelve ridícula en una institución cristiana convirtiéndose en ese absurdo "si es no es" sobre el que nos ha escrito Carmen Charo.
Creo que la Iglesia no rechazaba de la masonería lo que yo creo criticable, y por ello ahora nos encontramos esos males de origen masónico en el imitador Opus Dei. Diría que la Iglesia rechazaba la masonería más que nada porque históricamente ambas instituciones se habían definido políticamente en bandos distintos.
Y por ejemplo algo a mi entender reprochable en la masonería es lo de los increíbles conocimientos secretos que se le enseña al adepto que hay y que solo irá conociendo al ir superando niveles. Cuando he discutido con un masón siempre les he descolocado completamente explicándoles que en el catolicismo no hay conocimientos secretos, que todo está escrito en los libros públicos que cualquiera puede consultar en cualquier biblioteca de cualquier facultad de teología. Todos se me han quedado con sorprendente cara de parecerles imposible, pero entendiendo que es cierto. Pues por imitación de métodos, y por posible afán de dominio como el de ofertar manzanas de la sabiduría, en el Opus Dei también tenemos a veces de esa absurda promoción de los idealizados conocimientos secretos que únicamente poseen algunos sobre todo de los niveles superiores. No hay la misma estructura piramidal basada en tales supuestos misterios revelados que hay en la masonería, no obstante en la Obra a veces se juega con eso incluso yo lo viví no siendo ni adolescente.
Ese "yo sé algo importante y secreto que nadie sabe yo soy tu superior" es un acto de dominio mezquino basado en una falsa autoridad cuando hablamos de fe cristiana y de dirección espiritual. En la masonería podría justificarse (igual que la discreción) para crear una disciplina útil ante la persecución política que sufrían al combatir los absolutismos, sin embargo en el catolicismo ese dominio se convierte en una relación anticristiana e indecente, más bien sectaria, y propia de gurú sabelotodo y sumiso adepto alucinado. Lamento no saber explicarme con más propiedad de veras lo siento.
Hay más razones conocidas de por qué el Opus Dei es hoy como es. Que si lo de las numerarias auxiliares es la manera en que funcionaban los hogares en otras épocas, que si el entramado jurídico para "no tener propiedades" pretendía evitar expropiaciones eclesiales que se dieron en otras épocas, que si lo de ser laicos era entre otras cosas una táctica para evitar las expulsiones de órdenes religiosas que se iban dando en varios países, que si los falseamientos históricos sobre la fundación pretenden ocultar que el Opus Dei nace como es hoy en el contexto del fin de la Guerra Civil española, etc. Hoy día todo eso se debería actualizar porque ya no hay tales peligros para la Iglesia ni tales afinidades políticas de la Iglesia que deban ser defendidas por sus hijos. Además, no creo que nunca debiera de haber surgido una agrupación religiosa así, ya que dados sus fines políticos debiera haber sido una asociación civil de cristianos católicos y no una... ¿orden religiosa? ¿un "si es no es"?
Hoy la Obra pienso que debiera librárse de sus innecesarios y dañinos lastres históricos y reconstruirse para poder centrarse óptimamente en la evangelización. Y por supuesto tratando de conocer bien sus faltas para poder confesarlas y repararlas al hilo sincero y socialmente leal de cómo trata de actuar hoy la Iglesia.
Aprecios muy grandes,
Xavier de Barcelona
Publicado el Friday, 26 November 2021
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