Este mes la carta de D. Fernando Ocariz empieza así: “Perdón por nuestras faltas y pecados”. Una petición inusual para un momento de celebración. Al cumplir 90 años de la fundación del Opus Dei, el prelado quiso reconocer las carencias de los miembros de la Obra, sobre todo con aquellas personas que no recibieron en ella ”la generosidad y el cariño que necesitaban.
Me pregunto:

.- ¿Hay alguna persona que haya recibido cariño en el Opus Dei?
.- ¿Y con el perdón basta?
.- ¿Es de verdad sincero?
.- ¿Cómo se puede ser sincero si se vive en la mentira?
.- ¿Y la restitución del daño moral, físico y psicológico causados?
.- ¿Y la indemnización económica por todo el dinero robado?
.- ¿Y la manipulación?
.- ¿Y los años perdidos?
.- ¿Y…..?

Creo que NO. Qué NO basta. Llegados a este punto de escasa o nula evolución opusdeística, NO nos lo creemos. Teatro. Puro teatro.

Dice un refrán bien conocido: “dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”. Pequeño gran resumen: el barco se hunde.  Cómo tu DAX muy bien decías en tu escrito, en el que te agradezco tus palabras de ánimo, Todos los muros caen.

MAT