Dos debates que se han dado últimamente en Opuslibros han llamado mi atención especialmente, la planificación familiar y el Humanae Vitae, y la restricción/control de los correos electrónicos dentro del dark side.

Mi experiencia es que dentro del opus todo es relativo. Relativo a cada director o directora, a su interpretación personal de la norma. 

Hay directores/as que interpretan todo al pié de la letra sin importarle un pito las circunstancias personales de cada quien, y hay otros, al parecer un poquito más humanos (que si los hay) que son un poco más flexibles en cuanto a cuando y a quien...

Así como te puede tocar una directora o un sacerdote que te diga que no le importa que tengas 17 hijos, 48 años, poco dinero, mucha histeria y mala salud, tú debes de procurar dar el débito conyugal a tu marido especialmente en los días fértiles. Sé de una directora que incluso decía que especialmente en esos días había que ser seductora con el marido para que él quisiera éso del débito conyugal. Abro aquí un paréntesis para pensar en voz alta, -o escribir lo que voy pensando que es casi lo mismo-. Muchísimas veces oí a varias directoras e incluso a uno que otro sacerdote salir con que especialmente en los días fértiles había que "hacer la tarea" para quedar embarazada. Es muy simpático pensar que esas cosas las dicen personas que todas las cuestiones sexuales y de relaciones de pareja sólo saben de oidas. Ya me gustaría verles en una situación de las que compromenten a los supernumerarios a actuar de tal o cual forma. No siempre el hombre o la mujer tiene ganas de 'jarana', especialmente los supernumerari@s, de familias numerosas. Cuando uno tiene muchos hijos, lo natural es que con lo único que relacione la cama es con el sueño, y no precisamente con el sueño erótico. Porque entre corretear a los críos, hacer malabarismos para que el sustento alcance para todos y el miedo reverencial de quedar nuevamente en 'estado de buena esperanza', el sexo no solamente es evitado, sino que también es temido.

Por otra parte, algunas veces la pareja tiene períodos de falta de apetito sexual que es completamente normal. Y para poder hacer el amor hay que estar de humor. Un sacerdote -del opus- que ya falleció, se emocionaba al recomendar: "En tus días fértiles, acuestas pronto a los hijos, preparas una cena rica, te pones muy guapa y coqueteas con tu marido para que pase lo que tiene que pasar"...¡ay don J!, si supiera que la mayoría de las veces los hijos no se duermen ni aunque uno les dé un cóctel de Valium con ginebra, que la cena rica quedará en un sandwich por que ya una no tiene ganas de nada, lo de ponerse guapa es un decir, por que ya a esas alturas una tiene el pelo como el león de la Metro, la ropa toda sucia de 'guarraditas infantiles' y un genio de perros, y lo de coquetearle al marido, más bien es evitar clavarle un cuchillo en el pulmón a la menor provocación. O puede ser que el marido ignore olímpicamente las artimañas de la cuasi-vampiresa de su mujer porque lo único que quiere es terminar de leer los resultados del futbol encerrado en el baño para que nadie lo moleste y meterse a la cama lo antes posible a descansar.

Por otra parte, la Iglesia, y de hecho, la gran enseñanza del Humanae Vitae, insisten en la paternidad responsable, es decir, que incluso alienta el uso de métodos naturales para el control de la natalidad. Claro que el opus que es infinitamente más que el Papa, que el Vaticano y que todo el Colegio Cardenalicio insiste en que nada de nada, a cumplir el débito y llenarse de hijos que de otro modo es mal espíritu. Todos los métodos de control de la natalidad son vistos con muy malos ojos. ¿Cómo no va a ser así?, de que los supernumerarios se llenen de hijos depende en gran medida su supervivencia, de cada familia, debe de pitar al menos uno, pero cuantos más mejor.

En cuanto al uso de internet, yo puedo sólo hablar por mí misma. Todas mis amigas numerarias nunca me comentaron nada de restricciones, es más, muchas veces les envié correos un poco pícaros y me comentaron que se habían divertido con ellos -sobre todo los chistes verdes que a mi me encantan-. Me imagino que de haber pasado por el ojo acusador de las directoras, por lo menos hubiera sido merecedora de una correción fraterna. Lo que sí escuché de boca de una con un cargo muy alto en la asesoría es que a las auxiliares no se les permitía navegar por la red sin supervisión, por que "Son tan inocentes las pobrecitas que se pueden impresionar". Una forma más de 'ningunear' y pisotear a las personas que les hacen a estas mujeres la vida más fácil.

El opus dei, a mi gusto, tiene la peculiaridad de que cada cosa depende de la interpretación personal del encargado en turno. A mi me tocaron directoras que nos prohibían hablar con nuestras compañeras de círculo para evitar amistades particulares, y otras directoras que fomentaban entre nosotras la amistad y la camaradería. Me tocaron sacerdotes que me recomendaron espaciar -con medios lícitos obviamente- la llegada de mis hijos, y otros, a quienes si les hubiese hecho caso, ahora iría por el hijo número 27... así es todo, cada quien interpreta según su propio criterio.

Un abrazo a cada quien.

Salypimienta.