Santis :
Preguntas si vi gente feliz en el Opus Dei. Claro que sí, como también la he visto en hospitales mentales, en prisiones, en países comunistas e inclusive en funerales. Hay quienes matan y torturan con una sonrisa en la boca, algunos disfrutan humillando y otros se regocijan ante el dolor ajeno. ¿Justifica esa supuesta felicidad de algunos las prácticas del Opus Dei y el silencio de la jerarquía Católica? De ninguna manera.
¿Alguno les aportó algo positivo? Desde luego. El Opus Dei, aunque trate, no puede matar el amor, la caridad, la inteligencia y otras tantas virtudes propias del ser humano.
E insistes ¿El Opus Dei le aportó algo positivo? Claro que sí. Aprendí a valorar el amor de mis padres y hermanos de sangre. Aprendí a diferenciar entre la hipocresía y el amor sincero. Aprendí a desconfiar de los lobos disfrazados de ovejas, curas y santos. Comprendí el valor de la libertad. Todos esos positivos aprendizajes me motivaron a abandonar esa cárcel mental y física que fue el Opus Dei.
¿Culpa? Si, por haber sido tan ingenuo de creer inicialmente en esa institución, deformación absurda del Cristianismo.
Jorge Santiago
Publicado el Friday, 07 January 2011
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