Carmen Charo :
¡Pobre Raimon Panikkar! Vaya trajín nos traemos con él. Pienso que se reirá con nosotros, porque creo que todos hablamos desde el respeto y la admiración. Agradezco a todos los que lo habéis tratado que nos hayáis hecho partícipes de esos detalles muy personales, algunos, grandes detalles.
Quiero agradecer a Ramón Rosal que se haya tomado la molestia de interpretar su modo de actuar. Mi interés es sincero porque Panikkar era una persona a la que admiraba, y no me cabía el pensar que callara por desinterés, miedo o comodidad. Creo que puede que Ramón tenga en parte razón en lo que explica sobre su modo de actuar. Yo pienso que sus genes hindús le dieron un modo de ser y de pensar como punto de partida, pero su no reaccionar nunca contra el Opus Dei responde a algo más hondo y más espiritual, que soy incapaz de poner en pie y dar forma. Quizá me ponga a ello y algún día sea consiga expresar lo que intuyo sobre ello. Puede que eso me ayude a comprender mis incoherencias y contrastes, unas veces en pie de guerra y dispuesta a rodar cabezas y otras convencida de que todo forma parte del plan de Dios, nadie sufre más de lo que puede, cada quien es libre y responsable de sus decisiones y no necesita de la ayuda de nadie para salir adelante… Como siempre, en medio debe estar la virtud, y creo que los libros de Panikkar ayudan a intuir algo de todo esto. No sé si su libro “Invitación a la sabiduría” habla de esto, pero sí puedo decir que este libro me abrió un nuevo camino interior...
Me uno a Jacinto cuando dice que no tenemos por qué juzgar la actuación de nadie y por mi parte lo voy a dejar descansar en paz. Sólo quiero aclarar que si me lamenté de que no hubiera alzado la voz ante la Iglesia fue porque al ser una persona de gran talla intelectual, espiritual y humana seguro hubiera conseguido que algo se removiera más rápido. Nosotros nos hemos empezado a mover de forma organizada a raíz de la creación de opuslibros, y ya pasados unos años de esto, el año 2002. Se cuentan con los dedos de una mano y sobran dedos, las personas que hablaron de su nefasto paso por el Opus Dei en los años anteriores: Mª Angustias y Alberto Moncada. Opuslibros ya le pilló a Panikkar muy mayor, con el opus muy lejos en el tiempo, y seguro que con inquietudes en su alma más cercanas a la Meta. De todas formas pienso que el compromiso con un camino espiritual, la riqueza interior tiene un reflejo inmediato en la vida exterior, en un compromiso con los demás, en una coherencia de vida, una rectitud, honestidad…. Las manifestaciones sean tan variadas como cada persona, pero serán. Creo que la verdad es el gran valor sobre el que edificar la propia vida. La verdad entendida como transparencia, como autenticidad, como sencillez….
Puede que este tema me espolee tan fuerte porque la mentira y la doblez son, en mi opinión, el peor vicio del Opus Dei y lo que más daño me ha hecho a mí. Es un vicio cotidiano y perverso, que hace un daño atroz. Creo, hasta que es la malla que sustenta toda la “formación”, sí formación del Opus Dei. Por eso la gente se rompe, se desquicia, y los que aparentemente no se rompen pierden la conciencia, el corazón, llevan dobles y triples vidas con total naturalidad, compaginando el arrobo en la oración ante el sagrario y la ferviente comunión con la mentira en lo más central de sus vidas. Muchos han machacado su ser espiritual y hasta su humanidad por una apariencia mezquina. Y en gran parte el mérito es de la propia institución, sin restar importancia a la responsabilidad personal, cuando ya se llevan muchos años viviendo en la mentira.
Bueno, ya os dejo en paz. Le pido a Dios hecho un Niño, para todos, los de dentro y los de fuera, que nos haga veraces y transparentes, que reflejemos la vida divina en nosotros.
¡¡Un fuerte abrazo y Feliz 2011!!
Carmen Charo
Publicado el Monday, 27 December 2010
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