Hola, 99

Quiero responderte brevemente a lo que apuntas en tu escrito acerca del mío.

Afirmas:

y de repente alguien ve claro que tengo que plantearme a fondo mi vocación, tema antes INTOCABLE, ...

Y te contesto:

En mi caso nadie vio claro que debía plantearme el tema. Fui yo quien lo planteó, lo que provocó un cierto revuelo entre los que me conocían y entre los directores.

Afirmas:

Sin embargo me habían dicho al llegar que si no seguía ese camino me podía condenar...

Y te contesto:

A mi jamás me dijeron que si no “pitaba” me iba a condenar. Lo que sí me dijeron era que si esa era la Voluntad de Dios sobre mi vida, debía asumirla, aceptarla y abrazarla. Luego se demostró que no era esa la Voluntad de Dios sobre mi vida.

Afirmas:

lo que parece realmente es que tanto a ti como a mí nos querían sacar de encima...

Y te contesto:

Pues mira, si fuera como tú dices, me hicieron un gran favor, porque no estaba en mi sitio. Sin embargo, y recordando lo sucedido en aquellos meses en mi caso, hay que ser lo suficientemente falso e hipócrita para no decírmelo a la cara. De todos modos, déjame que dude sobre que quisieran sacarme de encima y que no tuvieran el coraje suficiente para decírmelo. No existía ningún motivo aparente o no para que la Obra deseara sacarme de encima. Fui yo quien al final se acabó yendo felizmente.

Afirmas:

El pensar que la obra es buena y es de Dios pero que en mi caso algunos se equivocaron.... tuvo consecuencias importantes y negativas, luego de mi salida durante mucho tiempo.

Y te contesto:

En mi caso, gracias a Dios, no tuvo esas consecuencias negativas. Es más, dejar de ser numerario tuvo consecuencias muy positivas en mi vida. Por otro lado, si en tu caso esas consecuencias fueron negativas, lo lamento de corazón y aquí me tienes si precisas de mi ayuda.

Afirmas:

cuando han decidido por algún motivo, que debes irte de la obra, tratarán de hacerlo del modo más pacífico posible...

Y te contesto:

Nadie decidió por mi para irme. Así como al “pitar” acabaron decidiendo por mi o, cuando menos, me vi acorralado para decir un sí del que no estaba del todo convencido, para irme fue justo todo lo contrario. En mi caso no había ningún motivo para que mi salida no fuera pacífica.

Aquí me tienes para ayudarte en lo que quieras. De todos modos, 99, piensa que cada uno de nosotros tenemos una historia particular, la historia de nuestra vida. Y aunque haya aspectos, situaciones, circunstancias semejantes e incluso idénticas, cada historia es distinta, como distintas somos las personas y nuestras vidas.

Un abrazo sincero