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CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 09 de Abril de 2021



Deben pedir perdón por todos los engaños.- Lgracem

Lux, al leer tus palabras me emocioné y me puse a llorar un buen rato. Agradecí tanto que ignorabas y no sabías nada de como trabajábamos en las casas del Opus. Nunca me sentí a gusto relajada, soy tan leal que quería avisar que me quería marchar y me caía el peso de la vocación. ¿Cómo iba a tirarla por la ventana?

Pasando a otra cosa, ese lugar es muy machista siempre era cuidar a ellos. A las numerarias señoritas podían trabajar chicas que no son del Opus. Con los señores no. ¿Alguien me puede explicar esto? Otra era la casa de la comisión, hasta las camas les hacíamos con la asquerosidad de ver sábanas sucias muchas de nosotras sin saber qué era. Disculpen pero esto es re normal. La asesoría también tenían auxiliares algunas oficinas limpiaban ellas, por algo será.

No tienen vergüenza ni un poco de humildad para pedirnos perdón por todos los engaños. No puedo comprender tantas contradicciones de su fundador que hablaba de humildad y a él realmente no le interesó nada practicarlo. Espero que cada pisos, escaleras y millones de camisas que lavé y planché les haya servido para dar gracias a Dios por todas las burras de noria. ¿Les suena?

Hasta pronto.

Lgracem 





Tanta razón tienen.- CRNUMEROBAJO

Zartan, Antonio y EBE tienen razón:

Zartan, yo coincido contigo en un 205%, si no más.

En efecto, esto es algo que tanto tú como EBE explicáis con mucha claridad y que, desde luego en mí caso –pero no en el de otros muchos que he conocido así ha sido: mi paso por Octupus, como dice Benetton, se ha llevado consigo prácticamente todo lo que, pretendidamente, quiere expandir en el mundo. Todavía no sé muy bien cómo ni por qué. No pasa nada porque no lo echo en falta. Ni siquiera reconozco su falta como tal. Menos aún como culpabilidad, castigo, rejalgar o cualquiera otra nota que pueda tener carácter negativo. Dios sabrá por qué, cómo y cuándo.

Antonio,  también rondo en el 205% de coincidencia contigo. Solo que, como expresaba en la entrada a la que haces referencia, mi promoción del centro de estudios pudo ser de más de cincuenta (con otros cincuenta del año uno y otros cincuenta adscritos). Los porcentajes, como me ya he puesto de relieve en otro momento, siguen igual de bajos.

Ahora veo que incluso el centro de estudios donde está la Universidad de Navarra parece o es un colegio abierto. Desconozco dónde está ahora el centro de estudios propiamente dicho (¿ahí mismo como en un “anexo”?, ¿en otro centro pequeño?)… y eso que ahí iban muchos jóvenes pitados en otros lugares. Me parece que lo mismo ocurre en Madrid, donde queda uno y diminuto (creo que estaba en la sede de la Comisión) que, salvo noticias que alguien de, aún subsiste (desconozco el número de n que hay). ¿Sevilla, Valencia, Barcelona? No existe ya el centro de estudios como Colegio Mayor para numeratas en ninguno de estos lugares (no digamos en otros lugares donde desapareció ya hace décadas, como Valladolid, Granada, Santiago, Zaragoza).

Simplemente están lejísimos de cualquier tipo de recambio generacional. El hachazo ha sido enorme en cosa de diez-quince años. Supongo que así igual con las chicas. Si alguien sabe algo más y mejor, que nos lo cuente.

Recibo contactos, por una vía u otra, de personas que se fueron antes que yo y con las que viví o estuve en diversos lugares. Todas ellas son personas maduras, normales, felices, razonables. Supongo que tienen sus trepidaciones interiores, pero la fuerza que tiene su experiencia vital las -nos- ha convertido en personas profundas, resilientes. Verdaderos “expertos en humanidad” y no en “confidentes de apostolado y amistad” (¿era así como se decía?). Lo mejor en ese trato es que no hay atisbo de rabia, sino experiencia, cercanía y por más que se rumie lo pasado, aprendizaje, quizá un poco de necesaria terapia grupal. Lo que no me ha vuelto a ocurrir con nadie que todavía está dentro, con quienes, tras tantos años, no he conseguido –o no han conseguido- establecer conmigo una relación razonable y normal. Ni parece que lo pretendan, ni creo que puedan, ni yo aceptaría otra cosa.

Eso no es normal. No es normal porque no es razonable y porque no es humano; y se puede cambiar el orden entre humano, razonable y normal como quiera cada quien. Por eso no parece tampoco muy sobrenatural, salvo que sea “marciano” y lo “marciano” exista como forma de pensamiento.

Felices Pascuas Floridas a todas/os.

CRNUMEROBAJO




 

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