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CORRESPONDENCIA

 

Miércoles, 28 de Noviembre de 2018



Reconquistar la libertad.- Crítico

Después de tomarnos una buena merienda, mi amigo me pasó una hoja con una lista de nombres de personas que en su momento estuvieron dentro. Ya no. Pero él reza por ellos para no olvidarlos. La lista era larguísima, un DINA4 lleno de nombres. 

 

¿Cuántos nombres hay? 55

¿Cuántos sois ahora en tu centro? 9

 

Son aquellos que él vio salir desde que entró en el Opus Dei: 55 son muchos!!!

 

¿Y cuántos has visto entrar? creo que solo 4

¿Todo esto en un periodo de cuántos años? 30

 

Pensaba, le dije, que esta lista es la muestra de un fracaso institucional.

 

¿Esto pasa a nivel general, en España? No lo sé, pero me temo que sí. Me llegan noticias, pero no de dentro. Dentro no se dice. Ya sabes que entre nosotros no hablamos de las deserciones. Solo con quien hacemos la charla fraterna. Entre nosotros no hay amistad. No podemos hablar de todo entre nosotros. No tenemos libertad para eso. Voy leyendo Opuslibros y ahí me entero de lo que no me dicen dentro. Nos dijeron hace unos meses después de un círculo que no había caso Gaztelueta, que se había comprobado que el profesor estaba limpio. Me enteré por Opuslibros hace unos días que le han condenado finalmente. No creo que llegue ninguna nota diciendo nada. El opusdei no tiene manchas y si las hay se ocultan.

 

Hace un par de días leí un artículo en la web oficial. El Prelado por Granada, de tertulia en tertulia hablando de que "Hay que reconquistar la libertad". ¿Con plena libertad los asistentes pudieron hacerle todo tipo de preguntas, todas improvisadas, si censura previa? Pues no, todo sigue como siempre.

 

¿Cómo se puede ser libre si todo el día solo se está pendiente del cumplimiento de las normas, costumbres y una lista increíblemente larga de detalles agobiantes que de ninguna forma dan libertad. Se llaman criterios. No es tu propio criterio, es el criterio de otro. Os paso una lista, que tampoco es exhaustiva. Solo es una muestra.

 

·  consulta cualquier gasto que no sea habitual; no tiene porqué ser caro, basta que sea excepcional

·  anota cada día tus gastos en algún sitio y envíaselo a tu director a principio de mes

·  no beses a las mujeres en las mejillas, extiende la mano

·  si estás reunido con una mujer deja la puerta entreabierta o que sea en un lugar donde te puedan ver desde fuera

·  no vayas solo en coche con una mujer (no se qué pasa si vas al médico y te atiende una mujer, quizás es una excepción)

·  no puedes ir a ningún espectáculo público: cine, teatro, musical,... (quizás no están tan en medio del mundo como pensaba su fundador)

·  por la calle reza jaculatorias, partes del rosario, o contempla los misterios, saluda las imágenes de la virgen que veas, 

·  dúchate con agua fría y ofrécelo

·  reza 3 avemarías antes de acostarte de rodillas y brazos en cruz (no hace falta cargar libros en las manos, es un detalle)

·  mejor comenta todo lo que vayas a decir en confesión en la charla fraterna. Es de buen espíritu. Y luego no pidas que eso que has dicho no le llegue al consejo local. Es de mal espíritu. Seguramente harás la charla fraterna con alguien del consejo local, con uno de esos que no tiene potestad de gobierno, claro; porque en el Opus Dei está muy clara la distinción entre gobierno y dirección espiritual.

·  recuerda que tu verdadera familia es el Opus Dei, no tus padres y hermanos. Así que no te apegues mucho a ellos.

·  Si te vas de boda, que sea por la iglesia. Aunque sea una hermana tuya quien se case por lo civil no debes ir. Sería un escándalo, y vete antes de que empiece el baile. No pintas demasiado en el festín posterior.

·  Si quieres ver la tele en casa, consulta antes los programas que vayas a ver. Quizás es una pérdida de tiempo. Podrías estar encomendando a tus amigos en ese rato, o hacer un poco de oración, no sé.

·  bla, bla, bla, bla, bla, bla

Súmale las horas de dedicación al plan de vida y verás que vida tan plena de libertad que hay. Sí, señor Prelado, hay que reconquistar la libertad, pero mejor fuera, será más fácil, ¿no cree?

 

Terminamos la merienda y él aprovechó para invitarme a un retiro. Muchas gracias, le dije, yo voy al de mi parroquia.

 

Fuera del Opus Dei, que lugar tan fantástico para vivir y morir, y vivir en libertad.

 

Crítico




 

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