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CORRESPONDENCIA

Viernes, 20 de Enero de 2017

Hola Agustina y todos:

Envío la traducción de la sentencia definitiva del asunto de la ex numeraria auxiliar francesa Catherine Tissier que en 2016 ha visto culminar una batalla judicial iniciada en noviembre de 2001, seis meses después de abandonar el "Opus Dei" en el que había estado como auxiliar quince años.

Hay que felicitar efusivamente a Catherine, ha sido toda una luchadora, ha reunido testimonios de muchas ex alumnas de la escuela Dosnon donde fue captada. Se ha ido a buscar a ex numerarias auxiliares, todas han dado la cara ante el tribunal y sus testimonios han sido muy importantes para este final feliz. No ha tenido que ser fácil y supongo que también ha sido costoso económicamente...

Yo siempre he pensado que el opus dei forma parte de la mafia internacional. Su manejo del dinero me hace pensar así. Mueve millones y millones por el mundo pero no se sabe en que lo usan en Roma pues en obras de caridad con sus propios miembros o los más necesitados definitivamente no es donde ponen su riqueza, pero la avidez que tienen por él es impresionante. Maciel usaba el dinero para vivir en Miami o Madrid, pasarla bien y entregarse a sus placeres. Parece que el prelado de la obra no actúa así o tiene otros placeres pero mueve más dinero que "Los de siempre"...

Recomiendo releer el escrito de Pinsapo titulado "Continuador del Sucesor: Balance final", dado que el tema está de actualidad ante la próxima elección del sustituto de Echevarría.

Saludos

Aloevera

Estimado nempedronempaulo:  estoy absolutamente de acuerdo contigo en todo lo que has escrito.  Sin duda las diferencias de idiomas pueden ser la causa de no haberme explicado bien.

El Papa no está en absoluto obligado a hacer obispo al nuevo prelado.  El prelado del opus dei, para cumplir sus funciones de tal NO necesita en absoluto ser obispo. Los dos anteriores prelados del Opus Dei, nombrados obispos por el Papa NO eran obispos del Opus Dei, eran obispos de circunscripciones eclesiásticas territoriales, que alguna vez existieron y que ya no existen en la práctica: eran Obispos Titulares, a quienes el Papa confirió el orden episcopal porque le dio la gana, no porque debía hacerlo.

Las Prelaturas Personales, no forman parte de la estructura jerárquica de la Iglesia.

No obstante todo esto, el Opus Dei está empeñado desde hace algún tiempo, en instalar la idea de que esos prelados, que en algún momento fueron nombrados  obispos, eran obispos del Opus Dei, porque de esa forma instalan simultáneamente la idea de que el Opus Dei es parte de la estructura jerárquica de la Iglesia. 

Esto, lo del obispo prelado no siempre fue así, porque yo mismo con mis oídos, le oí decir en más de una ocasión a Alvaro del Portillo, que el prelado del Opus Dei no necesitaba ser obispo.  Quizá lo decía porque entonces no era obispo aun y no quería parecer que lo deseara.

Mi comentario a tu nota anterior, tenía la intención de destacar – a propósito de los términos en que se nombró “Vicario Auxiliar” a quien no puede ser nombrado en esta web: “excepto aquellas funciones que requieren el orden episcopal” – que las únicas funciones a las que podía referirse esa expresión, eran las de ordenar sacerdotes y que esas funciones no las tenía el prelado del Opus Dei por ser prelado, las tenía por ser obispo, cualidad esa que no era en absoluto necesario que la tuvieran los prelados del Opus Dei.

Por otro lado esa expresión, en ese nombramiento, es absolutamente inútil, porque un simple sacerdote no puede ejercer ninguna función que requiera del orden episcopal: ¿Qué se buscaba entonces al deslizar en ese nombramiento una aclaración absolutamente inútil? Pues lo de siempre, instalar en la opinión que el prelado debe ser obispo, pues hay funciones que debe cumplir que requieren el orden episcopal, cosa que es absolutamente falsa: No hay ninguna función que el prelado del Opus Dei DEBA cumplir que requiera el orden episcopal, absolutamente ninguna

Como verás ahora y antes también, estoy absolutamente de acuerdo contigo.  Espero haberme explicado mejor.

Haenobarbo

Querido Nacho, Canario de adopción por lo que se lee en tus escritos.

Mucha ilusión (ya la tienes), ánimos (los que nos has dado) y buenos recuerdos, graciosos recuerdos. Aparte de las anécdotas que nos contabas, los trajes árabes, chilaba, que te ponías. ¿Te acuerdas?. Mucho ánimo en compañía de tu familia y amigos. Ignoro si ya has salido del hospital y te estás recuperando.No tardes en contactar con nosotros.

Un fuerte abrazo lleno de ilusión y esperanza.

removiendo53 

Texto sacado de un artículo de la web oficial del Opus Dei titulado: "Las competencias del prelado del Opus Dei". Dice así: "...Los Estatutos de la prelatura del Opus Dei señalan que el prelado ha de ser, para los fieles de la prelatura, maestro y Padre, que ame de veras a todos en las entrañas de Cristo, y los forme y encienda con ardiente caridad, gastando su vida gustosamente por ellos”. (cfr. Estatutos de la prelatura del Opus Dei, 132, §3).

Pues bien, basta para desmentirlo conocer el trato que recibieron en su día personas como D. Miguel Fisac, D. Antonio Perez-Tenessa , Dña. María Angustias Moreno, Dña. María del Carmen Tapia, D. Antonio Petit , D. Juan Jose Marti, D. Danilo Eterovic, Mlle. Catherine Tissier y tantos otros y otras. Todos ellos, muy lejos de ser amados de veras en las entrañas de Cristo y encendidos con ardiente caridad, fueron tratados con prepotencia, hostilidad, desprecio, persecución e indiferencia en vez del amor que dictan los estatutos. Asi que, en el próximo artículo, por favor, nos cuentan una de indios.

Y ya, de cara a la próxima elección, el congreso y el próximo prelado deberían, además de emplear la consabida retórica aduladora de las bondades de la Obra y sus próceres, reconocer y asumir también sus fallos (que son muchos, graves y de dominio público).

También tienen en el congreso, si se dejan inspirar por el Espíritu Santo, una magnífica ocasión para iniciar una nueva etapa abandonando la tradicional actitud farisaica, hasta ahora casi consustancial al Opus Dei. En su lugar deberían tener la humildad de pedir institucionalmente por boca del nuevo prelado, perdón públicamente por los graves errores cometidos y por el profundo daño causado.

Orange

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