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CORRESPONDENCIA

Miércoles, 11 de Enero de 2017

Gracias Opus libros, que me han publicado mis escritos. Muchas ex nax me han conectado para felicitarme, contarme sus alegrías y las que acaban de salir, preguntándome como hice para salir adelante. Por un lado me parte el alma, pero sé que van a salir adelante, no se acaba el mundo en la esclavitud del Opus. Las injusticias se van a terminar, debemos conocer nuestros derechos, cosas que adentro no nos enseñaron, porque no les convenía. Con solo recordar que no gasté un peso para comprarme ropas a mi gusto, porque me lo daban del depósito de ropas usadas o de las numerarias que ya lo habían desechado.

Me acuerdo de un conjunto verde que usé era de una de 60 yo de 20 años, hasta ahora me da vergüenza me daba la impresión que toda la gente me miraba por la calle.

Me vine al centro porque me dijeron que podía hacer el colegio, era una escuela para enseñarte a limpiar, planchar etc. esto es para servirles de la mejor manera al Opus, ya que nosotras eramos las siervas con el derecho a un techo y a la comida. Qué hijas pequeñas ni nada puro verso.

Pido a Dios y a las personas que puedan dar una mano a las ex nax que lo hagan, nosotras salimos peor que los numerarios porque no hemos podido hacer una carrera. Yo hice la secundaria después de salir. Adelante siempre se puede.

Un abrazo para todas las ex nax.

Lucía Giménez

Querido Ramón,

Gracias por tu comprensión y amabilidad. Creo que has captado muy bien mis reflexiones y situación.

Supongo que dentro de la Iglesia hay muchas "Iglesias". Será cuestión de tiempo dar con la que busco y reparar los daños que la obra me causó.

Aprovecho para saludar a las directoras que nos leen, esas que antes de salir, me dijeron "amablemente" que ni se me ocurriera escribir mis experiencias en la obra.... por un oído me entró y por el otro me salió.

Se me olvidaba contar que una de esas amigas que no pisa la iglesia, una vez se confesó con un sacerdote de la obra....cuando salió del confesionario me dijo que no volvería jamás a pasar por lo mismo: "Me ha preguntado qué hago con mi novio en la cama".

Un abrazo,

Andrómeda

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