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CORRESPONDENCIA

Viernes, 08 de Julio de 2016

Si bien la cuestión de las relaciones del Opus Dei con el franquismo se había tratado en diferentes ocasiones en Opuslibros (relaciones de Escrivá y del Portillo con Franco, presencia de miembros del Opus Dei en los gobierno e instituciones del franquismo, intentos de Escrivá de ser nombrado obispo, cuadernos de Ruedo Ibérico, etc.,) el debate que se ha generado en los últimos días ha terminado siendo una discusión entre posiciones políticas alrededor del régimen franquista, de la guerra civil que lo antecedió, de la transición española, y de la actual situación política en España.

Opuslibros nació para ayudar a los que nos fuimos y a quienes están dentro o fuera pasándolo mal. Si desvirtuamos el sentido de esta página, si nos enzarzamos en cuestiones sociológicas o políticas españolas, ¿Estamos ayudando a alguien que no ve cómo salir de la Obra? ¿Y si lo que lee no tiene nada que ver con lo que viene a buscar...?

En mi responsabilidad de coordinadora de Opuslibros me reservo el derecho a no publicar aquellos escritos que en mi opinión se salgan del tema de la web y no contribuyan a ayudar a los que están o estuvieron afectados por esta institución enfermiza y deshumanizante. Si alguien me acusa de censurar, no se lo voy a negar. Hay otros muchos foros donde discutir sobre esos otros temas.

Un abrazo

Agustina L. de los Mozos
Coordinadora de Opuslibros.org

Y es que el 7 de julio era la maldita fecha en la que en "la Región de España en el opus", comenzaba el largo periodo de formación, donde una entraba a llanto pelado agarrada a su osito de peluche, o a la foto del novio al que acababa de dejar, porque "valía la pena", y porque Dios no se dejaba ganar en generosidad", y por aquel mentiroso prometedor "soñad y os quedaréis cortos", que por cierto, ¿tendrán la cara de seguir repitiendo? Si, soñad y os quedaréis cortos, cortísimos, en personalidad, en salud, en normalidad, en ideas propias, en espiritualidad, en vida social y familiar, en amor, en amistades, en conocimiento de las cosas, en libertad, en madurez, en Caridad... Y en el bolsillo. En todo os quedaréis cortos. Y contándole estas cosas a mi querido grandullón... Se me ha quedado dormido. (Hemos llegado de una juerga y son las dos de la mañana, porque el verano es para veranear).

El caso es que los recuerdos de aquellas niñas que lloraban en la primera noche (y segunda, y tercera... de aquel temido periodo inicial al centro de estudios, llanto que intentaban ahogar con la almohada, mientras pensaban que al día siguiente deberían confesarse de falta de entrega, de poco amor a su vocación, y de no haber vivido la norma de siempre de la alegría... Todos esos angustiosos recuerdos, repito, frente a la desahogada, divertida y entusiasmada segunda vida que me ha tocado vivir ahora, en la que ni huelo el rejalgar, ha chocado en mi conciencia, y he tomado la decisión de retomar mi pequeña colaboración en la meritoria empresa de Agustina, tanto de mantenimiento con el bolsillo como con la pluma, pues mi experiencias de más de 40 años en esa cárcel del alma, a alguien podrán ayudar, digo yo...

Así qué, con todos mis buenos propósitos, me dispongo a ver las últimas actualizaciones ... Os aseguro que pensé que me había equivocado de página.

Os confieso mi disgusto al advertir que este espacio abierto a ayudar a los que están dentro, o estuvieron, o estarán si Dios no lo remedia, y nosotros tampoco, se ha convertido en los últimos días en algo totalmente ajeno a los intereses de quien acude a esta web como tabla de salvación.

Perdonad, pero los que os creéis tan listos, tan intelectuales... ¿No sois capaces de daros cuenta de que estáis desbarrando? No caéis en el daño que podéis hacer exponiendo unos puntos de vista políticos trasnochados, enquistados... y que nada les importa a los que llegan al fin aquí buscando consuelo, buscando ayuda, y se encuentran con viejas historias de heridas que no sabéis cerrar, rencores que no sois capaces de dejar a un lado, ni siquiera en un lugar en el que entran personas rotas en busca de ayuda, y se encuentran con recuerdos de la guerra de nuestros padres y sus abuelos? Por favor, abrid si queréis un blog donde hagáis vuestra guerra, y pensar un poco más en los demás.

Y ahora me dirijo a Agustina: ¿recuerdas? Estábamos cenando con otros amigos, te hablé sobre el diario de los centros y me sugeriste contarlo en tu web; y así lo hice... Y lo seguí haciendo... Y me anime tanto, que un día, me creí muy graciosa y te envíe un escrito un poco burlón hacia el fundador. Y tú, como amiga sincera, me dijiste: no lo voy a publicar, porque... ¿A quién beneficia? ¿Qué tiene de positivo? ¿A quien va dirigido?

Y fue para mí una gran lección. Reconocí que había hecho algo por diversión, puede que por presunción, no sé, pero que de cualquier forma, estaba fuera del sentido de este sitio. Y para mí fue una buena lección que te agradecí.

Pero esto ya no es lo que era.

Me disponía a retomar mi colaboración, pero... Se me han quitado las ganas.

Fueraborda

Una intención principal de mi escrito Para una memoria histórica no maniquea, era advertir de que si aparecen aquí escritos con estilo maniqueo –atribuyendo a un bando la maldad integral y al otro la bondad integral- pueden perder autoridad moral las experiencias y reflexiones críticas sobre la Prelatura, al suscitarse en el lector la sospecha de que sean escritos influidos por esa distorsión. Entre los lectores posibles, pienso, especialmente, en dirigentes de la Iglesia, aparte de lectores que nunca hayan estado vinculados a la Prelatura.

La autoridad moral de los valiosos escritos testimoniales de Opuslibros es importante que se siga caracterizando, en su gran mayoría, por su respetable ecuanimidad, tanto al referirse a la estructura y la praxis de la Institución, como a las personas responsables de su dirección, o a miembros que hayan ejercitado responsabilidades importantes en la vida política o económica española.

Cualquier tipo de exageración en las denuncias, especialmente si no están acreditadas por documentos públicamente asequibles; y con mayor razón cuando están firmados con seudónimos, pueden ser un obstáculo para que el lector confíe en su validez.

En un escrito mío antiguo (05-08-11): Mejor centrarse sólo en hechos comprobados, ya resumí lo que expliqué en mi libro: el hecho de que críticas maniqueas españolas en los años 60 fueron uno de los cinco factores que retrasaron mi decisión de desvincularme.

Como bien decía Curial: “No hay que cargar al Opus más ‘muertos’ de los que tiene”.

Un saludo cordial a todos y hoy especialmente a Agustina, Dionisio y Curial.

Ramón Rosal

ramonrosal@terra.com

La deriva que está tomando la discusión en relación al tema opus dei-franquismo me parece extremadamente peligrosa para el futuro de esta web. El artículo de Rescatado, en respuesta a alguna de las afirmaciones y juicios de Dionisio y Ana Azanza, y las posteriores respuestas de éstos (Dionisio - Ana), muestran claramente que el debate se ha situado completamente fuera de lo que constituye el tema de esta página.

Evidentemente las relaciones entre el Opus Dei y el franquismo encajan perfectamente en el ámbito de esta página. (Por cierto, que echo en falta en Opuslibros el excelente libro de Ramón Artigues: "El Opus Dei en España. Su evolución ideológica y política", publicado en Ruedo Ibérico en los años 60). Sin embargo cuando de las relaciones entre Opus Dei y franquismo se pasa a focalizarse en el juicio histórico del franquismo y de la transición política española, nos vamos a enredar en una discusión que ha enfrentado a los españoles desde hace 80 años, y sobre la cual los historiadores han escrito infinidad de libros y artículos. Es un apasionante tema de debate, me encantaría dar mi opinión sobre algunas de las cuestiones que se han planteado pero no voy a entrar en ello porque no es el tema de esta página. Sinceramente creo que para quienes vengan a esta página buscando ayuda para su situación personal o la de sus hijos, el debate anterior no les va a aportar mucho.

Los que llevamos años leyendo esta página sabemos que aquí todos hemos aceptado opiniones con las que no estábamos de acuerdo, y por ello hemos tenido defensores del Opus Dei escribiendo sus opiniones, con quienes hemos discutido y argumentado. La situación actual es diferente: desplazando el objeto del debate a una cuestión externa, y mucho mas amplia, que el Opus Dei,  y sobre la cual la diversidad de opiniones, visiones y experiencia es tremenda, corremos el riesgo de desvirtuar la razón de ser de opuslibros y que mucho de los participantes decidan decir adiós.

Desde la AOP deben estar frotándose las manos.

Saludos,
Ottokar

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