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Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

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CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 24 de Julio de 2015



La hipocresía de unos intentos de acercamiento.- Heraldo

NikitaSoy nos acaba de contar que varias señoras o señoritas del Opus Dei, con las que ha coincidido casualmente en Misa, se han acercado a ella interesadas en su situación. NikitaSoy fue supernumeraria.

Lo que nos cuenta me ha llamado la atención debido a que no responde a los esquemas numerariles que conocí. Cuando un numerario deja la Obra, deja de existir para los demás numerarios. Aunque haya excepciones por razones muy claras, esta es la norma general. Conjeturo que los Directores han comenzado a promover que a los ex se nos salude con cierta normalidad para evitar que a la Obra se le continúe criticando por tan ridícula e injusta praxis tradicional. Claro está, siempre habrá que obviar la posibilidad de escándalo, como es por ejemplo que los jóvenes en la Obra puedan pensar que la falta de perseverancia es un asunto de menor importancia (Cfr. Vademecum de los Consejos locales). Quizá el caso de NikitaSoy responde a que en los supernumerarios y las supernumerarias el tema no es tan riguroso… Quizá la Misa (o en general una Iglesia) sea considerado un marco de encuentro diferente…

Pertenecí más de 30 años al Opus Dei como miembro numerario, dieciocho de los cuales me desempeñé como director de Delegación en diversos cargos. Otros más fui también director de Consejos locales de San Miguel y San Gabriel.

Por la misericordia de Dios dejé el Opus Dei hace 12 años. Comencé a cotizar a la seguridad social apenas 2 años antes de dejar la Obra (a los 43 años de edad), bajo una legislación nueva completamente desfavorable, lo que significa que no podré alcanzar ni siquiera una miserable pensión. Para poder afrontar el problema, he tenido que olvidarme de un doctorado y de toda una experiencia profesional docente y universitaria, y convertirme en pequeño empresario. El futuro es muy incierto, pero confío en que iré encontrando alguna solución.

Cuento lo anterior sólo para contextualizar unos hechos y unas reflexiones. Durante los siguientes 10 años de haber dejado el Opus Dei, nadie de la Obra, absolutamente nadie, se interesó en mí, en mi situación y en mi destino. No hubo ni siquiera una llamada telefónica ni un correo electrónico. Parece difícil creerlo pero así fue. 10 años en blanco. A pesar de haber dedicado mi vida, todo mi tiempo y energías al Opus Dei, con una dedicación completa, mañana, tarde y noche, durante más de tres décadas, no medió ni el menor interés en mi persona. Había dejado de ser útil y por tanto había que olvidarme. Eso es el Opus Dei, al que llaman “familia”, y familia cristiana. Dejas de servir y dejas de existir. Hasta está muy mal visto que alguien mencione tu nombre en una tertulia.

Pero antes de pasar a lo que me interesa contarles, quiero dejar muy claro que mi deseo no hubiera sido, de ninguna manera, que siguieran interesados en mí y continuaran buscándome. La razón es muy sencilla. Si tal cosa fuera posible, sólo se llevaría a cabo para seguir sacándote dinero y/o a condición de que sigas aceptando la imposición de sus criterios, sus modos, sus categorías mentales. Sólo es posible seguir a la sombra de la Obra si reconoces que eres un traidor, un miserable, y que la Obra es santa y perfecta. En suma, son incapaces de estar al lado de nadie –y menos aún ayudar- respetando una diferencia de criterios. O te asimilas y te sometes a ellos o no existes.

O sea que les agradezco en el alma ese olvido total, pues seguir asimilado y sometido hubiera sido el peor error de mi vida, sólo comparable al error de haber pitado.

Paso ahora a contarles lo que más me interesa. Ocurrió que con ocasión de mi 10º aniversario, escribí Ad Mentem Patris, que por decisión de Agustina, pronto formó parte del grupo de artículos que encabezan esta web. Al escribirlo no tuve ninguna intención al respecto. Puedo asegurar que incluso lo escribí para mí, de un jalón, haciendo un balance personal, aunque a lo largo del escrito interpele a otras personas.

Al poco tiempo de su publicación en Opuslibros me comenzaron a llegar comentarios sobre las reacciones que había suscitado dentro del Opus Dei. Por supuesto, en la Obra saben perfectamente quién es el autor. Me comentaron que habían llegado indicaciones de España y de Roma. Y no pasaron más que pocas semanas que me comenzaron a llegar correos electrónicos de gente de la Obra  o de exes que se han mantenido en el círculo del Opus Dei. Uno de esos correos provino nada menos que del vocal de San Miguel de la Región. Se trataba de una “muy afectuosa” invitación a tomar el café para charlar, recordando excursiones a la montaña que habíamos hecho juntos (sic). Yo no salía de mi asombro y las carcajadas resonaron en la estratósfera. Salir ahora con esa ridiculez…

No tuve que pensarlo demasiado. Estos chicos de la superprelatura quieren ahora un acercamiento conmigo para expresarme que me quieren mucho y para que recuerde cuánto les quise yo. Y por supuesto para que no diga más esas cosas tan feas que digo en Opuslibros, que tanto ofenden a Dios y dañan a las almas. La hipocresía en su estado más puro y al alto vacío. ¿Debo acceder a la invitación? Por supuesto que no; no voy a perder mi tiempo. Sentí curiosidad, pero superé la tentación. No estoy dispuesto a tener que ser correcto con esta gente que se olvida durante 10 años de un ser humano, y ahora, cuando conviene a la Obra –uno continúa interesándoles un pimiento-, dice desear estar cerca ,invitarme a ser cooperador y a uno de sus círculos, cosas a las que no accedería ni aunque me ofrecieran en dólares una cuantiosa pensión vitalicia. A la tumba me iré orgullosamente pobre, muy posiblemente de forma prematura, quizá por el cáncer de pulmón que contraje por haber fumado tanto en mis años de numerario.

Pero como decía, esa misma semana aparecieron otros intentos de reencuentro. Uno de ellos de un ex numerario que continúa muy “arropado” por el Opus. Un tipo petulante como el que más, que según se cuenta tuvo la santa pillería de quedarse con buena parte de la fortuna de un supernumerario con quien no tenía lazos de sangre. Todo me hace pensar que preparó durante años su salida, para irse con las manos llenas. Otros nos hemos ido con una mano adelante y otra atrás,  conservando nuestra dignidad.

Pero el asunto no quedó ahí. Desde que se publicó ese artículo –y ya han pasado dos años- no han dejado de intentar reencontrarse conmigo sacerdotes numerarios, numerarios, supernumerarios, ex numerarios vinculados con la cosa, etc., etc. El formato siempre es el mismo: ¡qué recuerdos, cuánto cariño! Como los veo venir a kilómetros, no han pasado de intentos.

¿Soy cerrado y obtuso por evitar un reencuentro con miembros de la Obra? Yo creo que no. Simplemente no quiero perder mi tiempo ni pasar un mal rato. Por razones muy semejantes, también evito “dialogar” tomando el café con los chicos de la Cienciología y de la Secta Moon.

Heraldo





Cuando Cristo no es el centro.- A.Plaza

Hoy he leído el pasaje del Evangelio de la Resurrección de Jesús. Y tengo que reconocer que, momentáneamente  he perdido la paz. Se supone que es el pasaje más importante de todos, ya que la Resurrección da sentido de nuestra fe. Sin embargo, por un momento, mi mente se trasladó a aquellos años que pertenecí a la secta donde el comentario de este evangelio consistía una y mil veces, en decirnos que Juan llegó primero y no entró mientras que Pedro llegó el último y entró el primero. La enseñanza sectaria consistía en magnificar la importancia de obedecer a los directores convirtiéndolos en jefes supremos.

Qué Jesús hubiera resucitado, era la anécdota.

Después de 22 años en la obra y 15 fuera, todavía sigo sin tener ni idea, de porqué Juan no entró primero. No entiendo por qué no lo hizo. Es posible que fuera por el grito que le debió pegar San Pedro, amenazándole de que si entraba antes que él, lo mataba. La verdad es que me da igual.

Prefiero fijarme en Jesús Resucitado y poner mis energías en reconocer su figura resplandeciente en esta encrucijada qué es la vida.

En la obra, se descentra  el Centro. Y cuando Jesús no es el centro... la obra se convierte en secta. En la secta de Escrivá de Balaguer.

Me viene a la memoria una vez que mi padre, que en paz descanse, supernumerario  él, estaba confundido porque tenía que elegir un día estival entre ir a Misa e ir al Círculo y le “habían dicho en el piso” qué mejor ir al círculo. Evidentemente mi padre, que tenía las ideas bastante claras optó por ir a Misa. Pero se llevó un gran disgusto.

A.Plaza





A propósito de la tozudez.- JaraySedal

Vuelve Antonio Esquivias a la casilla de partida, quizás más atrás, pues ya no existe un “limbo laboral”, una laguna del derecho, simplemente el Opus incumplió su obligación de cotizar por él durante 30 años. De nada han servido los escritos de Gervasio (10 de noviembre), JaraySedal (24 de octubre), Pinsapo (31 de octubre), y otros muchos.  Es muy simple: no existe una relación laboral entre los miembros del Opus y la Prelatura y, por ende, no existe obligación de cotizar.  Hay que insistir en lo ya escrito, bajo diferentes perspectivas, y explicaré la razón de mi insistencia...



(Leer artículo completo...)




Las pugnas con el Opus son alargadas.- Ramón

Hola amigos,

 

Acabo de encontrar esta noticia sobre la diócesis de Zaragoza. Al parecer, el obispo anterior fue destituido fulminantemente por el Papa. Al parecer, el prelado previo estaba tirando de la cuerda demasiado ya con BXVI con sus decisiones de dudosa moralidad y adecuación al derecho eclesiástico, y a este Papa le ha hinchado las narices tanto como para que la destitución haya sido instantánea. Lo que es interesante es que la diócesis al parecer ha sido objeto - como otras, para qué engañarnos - de tejemanejes del anterior obispo que ahora hay tiene que solventar su sucesor. Para variar, la loga manus del Opus sigue estando por ahí:

 

"... Zaragoza, diócesis que desde hace años es escenario de una disputa por el poder eclesiástico entre fuerzas conservadoras como el Opus Dei, que contaban con el apoyo de Ureña, y colectivos de perfiles más sociales, como los cristianos de base, alineados junto al retirado Elías Yanes"...

 

Igual algún amigo de Zaragoza nos puede dar algo más de luz en todo este asunto.

 

¿Qué pensaría de todo esto Santiago el Mayor, cuya fiesta celebramos mañana? Él, que defendía la pureza ritual judía, pescador, hijo del trueno, hermano mayor de la comunidad cristiana de Jerusalén... Que él nos proteja y cuide de la Iglesia.

 

Saludos

Ramón





Familia y opus… Cada cosa por su nombre.- Class

El opus dei no es una familia es un cuartel, y ya está. Y todas estas sandeces “una familia con lazos más fuertes que los de la sangre” son para los incautos que se lo crean. YO NO.

Si fuera el opus dei una familia, habría amor y amor de verdad.

En un escrito de Flipper (15 oct 2007) dirigido a los directores, apuntaba: “En una familia no hace falta mantener las formas de manera extrema, en una casa todos se conocen, se discuten, se reencuentran, se perdonan... en un centro todo es escaparate.

Además el opus, sr. director, no es una familia, una familia no abandonan como mínimo el 90% (tirando a lo bajo), por muy malos que sean, se preocupan y se ocupan. Y tiran hacia adelante con lo que tienen. Yo te diría que el opus es familia rota, llena de divorciados y separados, no es una Iglesia doméstica, es un ejército, el que no obecece, le hacen un "consejo de guerra" y no un "consejo de amor". Una familia con la ley marcial y en estado de sitio, es un infierno.

Preocuparos por aquel que llora en silencio y en secreto, no os escandalicéis por lo que os preguntan, dad la mano.

Por lo tanto, replantearos las cosas, y poned una solución. SED UNA FAMILIA Y NO UN EJERCITO DE VULGARES MERCENARIOS.

Dialogad con los hijos pródigos, venid a nuestro encuentro y hablemos. Seguramente muchos de nosotros hemos formado otras familias felices (no me refiero a las de sangre, pero también) y ya somos independientes y no queremos volver ya que tenemos otra casa. Otros desean volver con dignidad, con las cosas cambiadas. Que sepas que no hemos muerto.

Si lo hacéis así, todos saldremos ganando.”

Y según mi opinión tiene toda la razón del mundo

Class




 

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