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CORRESPONDENCIA

Lunes, 03 de Septiembre de 2012

“No se van ni a tiros”

Manzano, 3/09/2012

Una noche, soñando despierto, me vino a la memoria la frase de aquel fundador que no quería fundar nada, pero si se descuida refunda toda la Iglesia Católica entera -cosa que siguen pretendiendo hacer sus fanáticos seguidores-, que decía: “No se van ni a tiros”, que pronunció en repetidas ocasiones en multitudinarias tertulias y así lo recogen los documentos cinematográficos que la mayoría tuvimos que visionar cansinamente.

Llamo a la delegación: -¿podría hablar con Pepito Grillo? Cada mañana él acudía a trabajar allí, era la culminación de su fulgurante y brillante carrera civil.

-Hola Pepito: te llamo para decirte que no me esperes para la comida, me voy. -¿Dónde? -Pues eso ahora ya no es de tu incumbencia, me voy de Casa, sólo para que lo sepas…

Josef Knecht hace un perfecto resumen de nuestra discusión acerca de los aspirantes pero pienso que hay un punto que se ha dejado de comentar que no es poco importante.

Imaginad que hoy (el año 2012) uno que ha pitado en 1986 como aspirante, acuda a la Signatura Apostólica con la demanda de nulidad de su vínculo con el Opus Dei. El motivo de este numerario se basa en: analogía a los cánones (1083 - edad; 1098 - dolo en el vinculo y 1103 - vinculo contraído por miedo o violencia)

Uno puede decir: hombre, ¿estás loco? ¡Estos cánones hablan respecto al matrimonio! O bien, solo se ingresa a la prelatura con 18 años.

Es verdad que solo se ingresa jurídicamente a la prelatura con 18 años. Pero cuando uno pita a los 14, se le decía, ahora no es así, que estaba asumiendo (canon 1083) un compromiso de por vida (canon 1098) y que si no era fiel, su salvación eterna estaba en peligro. Un chaval de 14 años puede entonces tener miedo y al llegar a los 18, ingresar con el mismo miedo (canon 1103).

¿Podría ser esta petición de nulidad de vínculo con el Opus Dei?

Un saludo

Gaudi

Hola buen día, hace tiempo que no escribo, pero acabo de leer el escrito de carlos 88 y me remueve lo que viví y sufrí por 17 años. La discriminación por causas de nivel socioeconómico.  Siempre me pareció algo tan humano y que se debería superar, ya he escrito sobre esto, asi que no abundaré pero me dijeron que El Padre lo sabe y que nada cambiaría.... motivos de esperanza para continuar ahi?

Me pasa igual que a ti en lo de la relación con DIos, me cuesta hacer oración, ya no creo en la Iglesia ni en el liderazgo moral o espiritual de los Sacerdotes. En fin... Dios nos ayude para alcanzar no solo la salvación sino un gran cielo, pues solo Él sabe por lo que hemos pasado emocional, espiritual y psicologicamente que nos ha llevado a esta frialdad en la relación con El,  y El  ha permitido todo esto.

Yo difiero de tus sentimientos en que no guardo ningún rencor ni resentimiento. Pero igual que tú me pregunto: si ya somos tantos los que hemos hablado de que "algo anda mal ahi" ¿por qué la misma Iglesia no hace nada por indagarlo seriamente? Tendrá que ver algo el $$$ y poder de quienes son pro Opus, o estan ahi?.

En fin, solo un comentario más que sale del corazon, un gran saludo a todos

Miguerita

En esta web se critica al Opus Dei. Evidentemente, a lo que es criticable de esta organización, pues también tiene sus cosas buenas. Yo las reconozco, al igual que he criticado aquellas que no veía bien.

En opuslibros se ha criticado a la persona del fundador. De él sé que es un santo canonizado. Si lo es, pese a ciertas incidencias de su proceso de beatificación, es porque realizó algo bueno en su vida. Y ese algo tuvo que serlo en un grado de bondad elevado. Y digo esto, teniendo en cuenta todos los matices de su personalidad y algunos hechos de su vida.

Como muestra de una clase de pensamiento existente en la Iglesia, reproduzco el siguiente artículo de un sacerdote, el padre Fortea, relativo a otra organización: los legionarios de Cristo. Los principios existentes en los argumentos de su autor podrían ser aplicables, por analogía, al Opus Dei. Os reproduzco esta carta por su interés.

"Estimada Ana (el nombre es ficticio)...

14. - ¿Se precisa una específica vocación divina para formar parte de la Prelatura del Opus Dei?

Para formar parte de la Prelatura del Opus Dei, se precisa una vocación divina, que es una específica determinación de la vocación cristiana.

 Esta vocación no saca a quien la recibe de su estado y condición en la Iglesia y en la sociedad civil.

 

(Cfr. Statuta, nn, 1 § 2; 6)  

Comentario personal: la específica determinación de la vocación cristiana a la que se refiere el Catecismo del Opus Dei en relación con el estado de cada persona provoca confusión. No se entienda por estado la capacidad de desarrollar alguna labor, sino por estado ha de entenderse el laical, religioso, sacerdotal. Escrivá mantiene una confusión respecto a esta palabra para separarse de los religiosos aunque, en la realidad, la vocación al Opus Dei conlleva asumir una serie de compromisos y actos propios del carisma que corresponden a la vida religiosa y no laical. Así mismo, la profesión es vista en el Opus Dei como algo secundario, pudiendo ser reemplazada, conmutada o eliminada en función al proselitismo...

"La Iglesia va 200 años por detrás de su tiempo". Esta frase caracteriza las declaraciones del Cardenal Carlo María Martini en la última entrevista [se encuentra tras el comentario del autor del blog] que le realizaron el pasado 8 de agosto.

La muerte del purpurado italiano, cardenal arzobispo de Milán, figura clave y emblemática del sector progresista de la Iglesia Católica, me ha llevado a reflexionar sobre la actuación de esta Iglesia respecto a diversos aspectos que nos suelen ocupar en esta web. Permitidme pues que los comparta con vosotros, con todos aquellos que tantas veces me habéis ayudado y me habéis dado palabras de aliento. Mis padecimientos obedecen a la actuación de esta "partecica de la Iglesia" que obra por obra y gracia de la Obra y también por obra de la voluntad de la Iglesia.

El cardenal Martini, gran teólogo y papable en varias ocasiones, ha sido un atrevido hombre de fe, capaz de decir siempre lo que realmente pensaba sobre la manera de obrar de la Iglesia Católica. Diversos medios de comunicación publican la última entrevista en la que Martini asegura que, sea por miedo o por acomodamiento, la Iglesia va 200 años por detrás de su tiempo, afirmación con la que estoy totalmente de acuerdo. La Iglesia "romana" circula a una velocidad muy por debajo de la aconsejada, en una sociedad cuyos cambios se producen con una aceleración cada día mayor en todos los ámbitos. Tanto en el campo tecnológico, como en el científico, el social, el moral, el económico, los cambios van tan rápido que, si la Iglesia no se pone al día, será imposible que el mensaje de Jesucristo llegue a gran parte de los fieles y por supuesto imposible que llegue a los que lo desconocen.

La iglesia romana está llena de politiqueos y envidias. Está afectada de una enfermedad llamada ansias de poder que cada vez la aleja más del mensaje primario de Jesucristo. La Iglesia romana fue capaz de inhabilitar varias veces (Pio XII, Pablo VI y Juan XXIII) a santos como el Padre Pio de Pietrelcina por sus ideas. Pero Jesucristo nos da y les da una lección inmejorable haciendo que este santo permanezca con el cuerpo incorrupto. Sin embargo, algunos siguen sin VER ni OIR. Algunos miembros de la curia romana siguen sin poner remedio a una de las grandes injusticias de nuestro tiempo: la existencia del Opus Dei. Con su consentimiento y su beneplácito, siguen aumentando las víctimas individuales y familiares de esta organización, que acumula poder y dinero ¿Tendremos que esperar 200 años para que desaparezca de la faz de la Tierra esta pesadilla? ¿No tiene la Iglesia romana suficientes testimonios? ¿Hacen falta más?

Perladeladratico

Copio, tal cual, una noticia que incluye hoy, 3.09.2012, el Servicio de Prensa del Vaticano. Me ha hecho pensar si el Opus Dei puede sentirse aludido por el peligro de su falsa religiosidad, que consiste en cumplir normas, costumbres y praxis sin ton ni son, conocido como "el plan de vida".

Una cosa que me ha hecho pensar siempre es si Escrivá se puso este apellido en lugar de mantener el de su padre, con el que fue bautizado: ESCRIBA, por si le recordaba el pasaje del Evangelio.

Abrazos,
Agustina L. de los Mozos

EL PAPA ALERTA DEL PELIGRO DE LA FALSA RELIGIOSIDAD

Ciudad del Vaticano, 2 de septiembre (VIS).-La Ley de Dios que encuentra su cumplimento pleno en el amor fue el tema de la meditación de Benedicto XVI antes de rezar el ángelus con los fieles reunidos en el patio del palacio apostólico de Castel Gandolfo.

Comentando el Evangelio de San Marcos en que los fariseos reprochan a los discípulos de Jesús que no siguen los preceptos higiénicos de la ley mosaica, el Papa explicó que la Ley de Dios “es su Palabra que guía al ser humano por el camino de la vida, lo aleja de la esclavitud del egoísmo y lo lleva a la 'tierra' de la libertad y de la vida verdaderas. Por eso, en la Biblia, la Ley no se considera ni un peso ni una limitación opresora, sino el don más precioso del Señor (...) de su voluntad de estar cerca de su pueblo, de ser su aliado”.

Pero el problema, cuando el pueblo se establece en la tierra prometida y es depositario de la ley, es la tentación de “poner su seguridad y su alegría en algo que ya no es la Palabra del Señor: son los bienes, el poder, otras 'divinidades' que en realidad son vanas, son ídolos. Sí, sigue habiendo una Ley de Dios, pero ya no es lo más importante, ya no es la regla de vida; se convierte más bien en un envoltorio, en una cobertura, mientras que la vida sigue otros caminos, otras reglas, otros intereses, a menudo egoístas. De ese modo, la religión pierde su sentido auténtico (...) y se reduce a la práctica de usanzas secundarias, que satisfacen, más bien, el deseo humano de 'cumplir' con Dios”.

“Este- advirtió el Santo Padre- es un grave peligro de todas las religiones, y con el que Jesús se encontró en su tiempo, pero que puede ocurrir, desgraciadamente, también en la cristiandad. Por eso, las palabras que Jesús dirige en el Evangelio de hoy a los escribas y fariseos también deben hacer que reflexionemos nosotros. Jesús hace suyas las palabras del profeta Isaías: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. En vano me rinden culto, enseñando doctrinas que son preceptos de los hombres. (...) También el apóstol Santiago, en su carta, alerta del peligro de una religiosidad falsa”.

Si yo pudiera escribirle al Padre, le haría llegar esta  carta:

Estoy cansada de guardar silencio y cansada de saber que poco o nada interesa lo que pueda contar de mi experiencia en el Opus, una experiencia que terminó este año y que agradezco a Dios porque al salir me ha hecho fuerte, me he sabido querer y he aprendido que aunque me partan la vida, hay cosas que nunca podrán robarme. Cosas como mi familia y lo que realmente soy, incluso si tengo que rescatarme de las sombras en que me dejaron...

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