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CORRESPONDENCIA

Viernes, 02 de Noviembre de 2012

Querido PepGrass:

No suelo escribir en la página, pero en tu caso concreto y como tienes la valentía de poner una dirección de e-mail, si me gustaría ponerte unas letras al hilo de tus palabras.

Antes de empezar te diré que yo me fui después de 21 años y muy poco antes de cumplir los 40. Ahora ando por 65. Mi caso no será como el tuyo, ya que me ordené en la prelatura y al servicio de ella. Eso significó que el aterrizaje fuera menos brusco que en otros, ya que sirvió de paracaídas algunos encargos en una parroquia, y posteriormente capellán de un hospital. Pero al final lo dejé todo.

Al hilo de tus palabras comento algunas cosas:

-Yo quiero mucho a la Obra…

Querido Gervasio, 

A mi tampoco me gusta la administración aunque pasé media vida en ella, creo que fue otro invento “decimonónico” de “marqués” inspirado en las casas, palacetes, palacios de sus amigas marquesas duquesas, condesas o lo que pudo pillar, porque no creo que llegara a ver la serie televisiva “Arriba y abajo” (señores y criados). Pero te aseguro que trabajar trabajábamos, aunque además de trabajar se fomentaba el cuento de Blancanieves limpiando y cocinando para los siete enanitos, y he visto mucha deformación fomentada por el “consabido espíritu”, que hacía jugar a las “casitas”: éramos madres, hermanas… o novias que, con “amor”, lo  mismo doblábamos calzoncillos que se cocinaba una paella para el amado e inexistente hijo, hermano, novio.

Dices “no son los destinatarios del servicio los que eligen los menús. Les vienen dados. En las familias no basadas en un vínculo sobrenatural, no hay ninguna Manolita que decida qué se come o se deja de comer. Los menús los eligen los comensales”.

Evidentemente no hay Manolitas, pero si Pepitas, Juanitas, Marujitas y etc. etc... Y no, no decide cada uno lo que quiere comer, se pone lo que se ha hecho y a correr, ni antes ni ahora el presupuesto de una casa normal puede permitirse eso, la diferencia está en que la Juanita, Pepita o ex Manolitas, si quieren a los suyos y en la nevera o en la despensa suele tener aquellos “caprichos” que sabe les gustan  a la hora de picotear, o merendar o desayunar, y ya que la vida normal le impone a cada uno un horario, cada uno se prepara su desayuno. Pobres de nosotras ex Manolitas si cada uno eligiera lo que quiera comer, aunque se procura una buena alimentación.

Preguntas: ¿Las numerarias de un mismo hogar pueden acceder libremente a su Manolita”.

Hace unos días viajé con mi marido, a él le gusta tener fruta a mano y bajé a una frutería cerca del hotel, me encontré con una numeraria muy mayor con más de medio siglo dentro de la casa, (y digo casa que no hogar) de una Manolita, entró a comprarse un kiwi, me contó que estaba enferma y los medicamentos la estreñían y que como no había forma de entenderse con la “dire” ni con la Manolita, cada día bajaba y se compraba uno. Ni que decir tiene que yo, que soy sensible a esos problemas le regalé una enorme bolsa de kiwis. Hace un par días me llamó y me dijo lo bien que le estaban sentando, de lo que deduje que ya no registran armarios al menos a las tan mayores.

De lo que si estoy segura es de que si algún tesoro tuvo el opus fueron la numerarias auxiliares, pero como es su “espíritu”, tampoco a ellas las supieron cuidar. Repetiré esa frase que tanto me gusta y se adapta a casi todos nosotros: “Dios que buen vasallo si hubiera o hubiese habido buen señor”

Pepgrass, ya te lo han dicho todo, la decisión solo debe ser tuya, si decides salir, te vas a colocar así,  de repente, en el autentico campo de batalla que es la vida real, y llevando a cuestas todas las lacras que almacenamos los años que hemos estado dentro, que poco o nada  tienen que ver con la normalidad y la realidad de una persona corriente, pero te aseguro que pasada la primera racha se agudizan los sentidos y se despierta el alma, si decides salir, una vez fuera no te precipites, no busques soluciones rápidas, ni en el terreno profesional ni en el afectivo. No se si podría servirte de ayuda, pero si lo necesitas Agustina te facilitará mi correo.

A esos padres les diría ya lo dije anteriormente: todos los numerarios hemos pasado por la situación de vuestro hijo, y estoy segura de que es tan contra natura lo que nos piden para con nuestras familias, que sin saberlo ellos, con estas actitudes ponen la primera piedra en el camino de la salida, en ese momento, si llega, quererlo mucho.

Un abrazo muy fuerte para todos.

Julia

Leyendo el escrito de diplomaticbag: “La Obra y el dinero”, me vienen a la mente varios recuerdos y observaciones vividas cuando recibía formación en el Opus Dei o lo que llegaba a observar con los supernumerarios, que veía en el centro al cual acudía.

En el Opus Dei se tienen un amor impresionante al dinero, y éste no solo se le tienen al que pueden aportar los padres de los miembros de la Obra, sino de manera preponderante a aquellas personas que aun sin ser miembros, se les consideran importantes para la Obra en razón del dinero o estatus social y poder o una combinación de todas estas. Tenemos por ejemplo mi caso...

Querido Atomito,

Muchas gracias por tu cordial mensaje. Respecto al último párrafo, estamos de acuerdo en lo esencial: la institución es perversa (es una “estructura de pecado”), pero en ella hay gente buena.

Respecto a todo lo demás, me parece que dialogar contigo sobre nuestras respectivas concepciones del cristianismo y la Iglesia cae fuera de los objetivos de esta web. Tan sólo querría hacer un breve apunte.

Tu reacción contra la religión es para mí muy comprensible. Posiblemente tú, como yo mismo y muchos otros en el Opus y en otras instituciones de la Iglesia, has recibido una formación religiosa de corte fundamentalista. Este tipo de formación resiste muy malamente el análisis crítico de una razón madura: o sucumbe, o se encierra en un castillo inexpugnable de irracionalidad.

Sin embargo, creo que hay otra alternativa: abandonar el fundamentalismo sin abandonar la religión. Sinceramente creo que hay muchos entre los cristianos, y entre los católicos en particular, que han elegido este camino, aunque quizás sean menos visibles que los otros, mucho más resultones desde el punto de vista mediático. Yo diría que también los hay en otras religiones, lo que resulta muy prometedor para la paz mundial.

Me parece que eres una persona con gran curiosidad intelectual. Para resolver, quizás, la multitud de dificultades y objeciones que pones a la revelación bíblica, tal vez te pueda ser útil leer a autores católicos no fundamentalistas. Te sugiero el portal El Testigo Fiel, en cuyos foros participan tanto agnósticos como creyentes, y que por cierto tiene a Opuslibros entres sus webs amigas. En particular hay un artículo sobre las genealogías de Jesús que te puede resultar interesante.

Cordialmente,

Daneel

Hola a todos: 

Esta nota puso Agustina, al final de un escrito de Daniel_M, (que puede consultar quien lo desee dentro de su contexto) publicado en esta Web el lunes 22 de octubre de 2012:  

Nota de Agustina.- Intervengo en este "diálogo" porque quiero recordar que Opuslibros no es una web confesional, no damos doctrina, no juzgamos las creencias de los demás -todas son respetables-. Aquí testimoniamos sobre el opusdei. Ya recibimos bastante "doctrina" adentro y no ha lugar a que nadie juzgue a nadie por lo que cree o por lo que piensa o por lo que vive.

Esta nota puso Daniel_M, al final de su escrito publicado en esta Web el miércoles 24 de octubre de 2012, que también puede consultar quien lo desee dentro de su contexto:

Nota de Daniel_M: Agustina, tus comentarios [tras mi escrito] del lunes pasado, sobran. Son una errada excusa para coartar la libertad de opinión ajena. Llevamos ya bastantes años viviendo en una democracia, para que tú impongas ahora la censura previa.

Me da la impresión que te has dejado arrastrar por un extraño prejuicio sexista consistente en que cuando un hombre argumenta algo distinto a una mujer, otra considera necesario salir en defensa de ella. Como si hubiera sido atacada, simplemente porque alguien le contradice sus ideas. 

A ver cuando sabemos distinguir entre la persona y sus ideas y/o actos. Una persona es siempre respetable, pero sus ideas pueden ser certeras o desacertadas, justas o injustas, razonables o irrazonables. Deberías saber distinguir perfectamente entre la persona y su opinión. Y, de paso, respetar la libertad de opinión y expresión ajena, que con tus comentarios del lunes pisoteas.

Por otra parte ha habido un intercambio de notas entre Daniel_M y yo:

Yo escribí el día 29 de octubre de 2012 un breve comentario (que cualquiera puede leer completo, para que lo interprete en su contexto) en el que entre otras cosas, pedía educadamente a Daniel_M lo siguiente:

…Es injusto acusarle a ella (Agustina) precisamente de partidismo. Ah, ¿No te parece, que sería muy elegante de tu parte, pedirle disculpas?

Daniel_M contestó en un escrito del 31 de octubre de octubre de 2012 (que también se puede leer completo para entender en su contexto) en el que, entre otras cosas, me pide a mí lo siguiente: 

…Lo siento si a alguien le fastidia, pero soy demócrata. Y la censura es incompatible con la democracia. Intenta comprender que me indignase la intervención de Agustina. Por cierto, y si eres imparcial, ¿podrías pedirle a ella que se disculpara por haber querido censurarme? ¿A qué no?...

He puesto estas citas para que cada cual extraiga con mayor comodidad, -a la vista de todas ellas juntas­, si las quiere comparar-, las conclusiones a las que su razón, su rectitud de intención, su inteligencia, su natural entender, su imparcialidad o talante democrático puedan conducirle.

Ex_Apéndice

Atomito es mas simpático, pero tan cansador como Daniel M. Personalmente me parece que uno y otro van a lo suyo, a lo que les interesa a ellos. Hacen una especie de apostolado de sus propias ideas, en un lugar en el que todos entramos con otro fin, que es en general, tratar de entender lo que vivimos, apoyarnos mutuamente, aprender de las experiencias de los demás, y, quizás, aportar un grano de arena para que otros no tengan que pasar por lo mismo.

El tema del sitio es el Opus. Creo que ambos, Daniel El Creyente y Atomito El Ateo, están la mayoría de las veces fuera de tema. A mi juicio tienen en común mucho más de lo que se percibe a primera vista, aunque uno esté interesado en limpiar la reputación de Escrivá, y el otro en manchar la reputación de la Iglesia. La verdad es que me cansaría enumerar las similitudes que observo, aunque hay una que vale la pena mencionar: ambos son completamente impermeables a la crítica. Todo lo que alguien pueda decirles cae en saco roto, no escuchan, simplemente argumentan en contra... y argumentan... y argumentan... En mi vida me he encontrado con apenas dos o tres personas de ese estilo, y la conclusión es que el riesgo de perder el tiempo discutiendo temas que no interesan es demasiado grande comparado con lo poco que se puede aprender de ellos. Esta gente suele ser un mal negocio. Prefiero mantenerme a distancia, y de este modo ellos se quedan con la sensación de que no tienen oponentes dignos, y yo me ahorro la pérdida de tiempo. El que quiera puede tomar esto como un consejo.

Paz a todos,
Otaluto

Hola. amigos.

He leido el correo de Atomito. Y la exposición de su visión del Evangelio me resulta interesante: es una radiografía de alguien que no cree en Jesús como Hijo de Dios. Resulta interesante, pues es un reto para nosotros los creyentes. Se me vino a la mente el reto de presentar hoy la figura de Jesucristo con eficacia, especialmente en este Año de la Fe. Voy a intentar decir algo para Atomito y otros que, como él, piensan de forma semejante...

Hace varios años, con motivo de mi matrimonio, mi futura esposa y yo tuvimos  que presentarnos con dos testigos en el Palacio Arzobispal de la diócesis. Nos atendió a los cuatro por separado uno de los Vicarios Episcopales formulándonos una serie de cuestiones para dar el visto bueno al sacramento, que se celebraría felizmente cuatro semanas más tarde.

Una de las preguntas indagaba en si yo mantenía algún tipo de vínculo con instituciones religiosas o había sido o era sacerdote. En parte por agotar toda la verdad –aunque hacía más de 25 años que había dejado la Obra- y en parte por la genuina curiosidad que me suscitaba la reacción que pudiera tener aquel Vicario Episcopal le dije que había pertenecido al Opus Dei como numerario entre tal y tal fecha. Mi expectación no quedó defraudada. Sin  esperar ni medio segundo, ya que prácticamente me cortó, el prelado contestó: “Bueno, eso es una prelatura que se han montado para ellos”. Traducido: lo que haga el Opus Dei con sus laicos carece de cualquier valor jurídico para la Iglesia.

Reconozco que este hecho me ha hecho reflexionar bastante. Si para la institución Madre –la Iglesia- no existe vínculo jurídico de los laicos, ¿puede la institución inferior –la Obra- hacer vivir a sus miembros como si ese vínculo existiera? Deduzco por las palabras de aquel Vicario Episcopal que cualquier laico del Opus Dei, desde el último agregado hasta el cargo más importante de Roma (laico, insisto), si se largara de la Obra sin despedirse (sin pedir dispensas ni demás zarandajas) podría contraer matrimonio canónico al día siguiente sin que ningún párroco u Obispo le pusiera objeción ni le pidiera explicación alguna, pues de cara a la Iglesia no sería más que un soltero que va con su novia a casarse. Saludos,

Jímenez

Me pregunto que si trabajamos en una obra coorporativa, y tenemos un trabajo con um contrato legal que nada dice que esté ligado a la prelatura, ¿por qué no nos hacemos los "pillos", y nos mantenemos en el trabajo aunque no compartamos las ideas de la prelatura, de que ya queremos salir? Si lo quieren, que nos expulsen ellos, quando quieran, pero entonces como tenemos un contrato legal de trabajo, y si somos competentes en el trabajo y tenemos testigos de ello,  podemos demandarlos y preguntar por qué nos despiden. ¿Qué pretextos van a exponer?  Si no es justa la descriminación religiosa para que se despida a una persona de su trabajo, siempre que sea competente y no hagamos mal a la instituicion donde trabajamos, también es injusto, de cara a la ley, un despido sin motivo real. 

¿Por qué no nos podemos hacer nosotros un "un poquito los tontos" para que asegurarnos nuestros trabajos en obras corporativas, por lo menos hasta conseguir un nuevo trabajo? ¿No es un derecho individual? ¿y de los mismos derechos de la doctrina social de la Iglesia? O sólo se ve la parte institucional y no el derecho del trabajador?.

Las empresas que actuan de mala fe no son peores que el opus dei con sus obras corporativas, que no saben respetar la libertad religiosa, siempre que trabajemos sin hacer daño a la instituicion en que trabajemos. No somos monjas ni monjes de conveento, ¿no es así? para que al irse de la prelatura nos quedemos sin trabajo también. ¿Santificacion del trabajo o abuso del trabajador?

Mil Gracias Agustina y fuerza para enfrentares dragones, que se olvidan de la dignidad de la persona y solamente consiguen mirar a lo istituicional, la de ellos claro.

susan

Querido Pondal, toda mi solidaridad contigo. Sinceramente creo que poco puedes hacer porque te va a ser difícil demostrar que ellos son la causa de tu desgracia aunque yo no lo dudo. ¿No será que el carisma del Opus Dei es dar con todas las personas susceptibles de enfermar en su mente? No, ellos son la causa de tanto enfermo, de tanto suicidio, de tanta rareza, de tanta gente muerta pero que siguen andando por la calle cual fantasmas, de tantísima gente con el corazón y el alma secos.

Pondal, creo que podríamos conseguir algo si nos uniéramos los miles de damnificados del Opus Dei, pero yo ya he tirado la toalla, porque en esto sí que trabajaron bien y han dejado paralítica en el espíritu a la mayoría de la gente. Mira sobretodo de no calentarte demasiado porque no sé si merece la pena seguir sufriendo por su causa. Sí te animo a visitar a tu obispo. Vete a verle y cuéntale tu historia. Y que tenga el valor de decirte a la cara que el Opus Dei es inocente y no abusa de las personas.

De todas formas si decides hacer algo y yo te puedo echar una mano, cuenta conmigo.

También quiero agradecer a MMZ su testimonio. No la conozco personalmente porque vivimos en continentes distintos, pero sé por otra ex que la conoció siendo numeraria que ahora no la reconocía físicamente del cambio para bien que ha hecho. Es una mujer guapísima y Dios le ha regalado el estar al lado del hombre del que estuvo enamorada en su adolescencia y por el que lo dejó todo. Ahora se merece ser infinitamente feliz, ¡como todos!, pero ella puede además sentirlo hondamente ahora. Me alegro tanto!!

Me ha dejado nuevamente de piedra el testimonio de Diplomaticbag, los padres del numerario. Me encantaría que me escribieran a carmencharop@gmail.com para sugerirles una posible acción.

En cuanto a Pepgrass, no sé si tengo derecho a decir lo que voy a decir, máxime cuando pido mandar el miedo lejos, cuidado. Puede que sea sincero, pero también es cierto que la gente que sigue dentro y juega a todas las posturas posibles a un tiempo,  tiene unos arrepentimientos atroces, y larga hasta la lista de los reyes godos en su charla fraterna. Algo así le sucedió a Kaiser con la María de turno, que tras dedicarle horas y horas a petición de ella, va y se encuentra con una denuncia suya por coacciones, y con una sentencia, que le acompañará toda la vida –como acosador de mujeres-que le prohíbe acercarse a menos de 500 metros de esta pobre y manipulada mujer. Por eso que no seamos cándidos. Los directores juegan a todo menos a ser santos, y usan a la gente de todas las formas posibles. Puede que Pepgrass sea un inocente palomo, pero precaución. Es hora de que los que siguen dentro maduren de una vez y se porten como adultos. Si siguen diciendo que jamás dirán nada negativo del Opus Dei, pues que se den ellos solitos con el muro, y cuando despierten allí estaremos, por lo menos yo, pero que no jueguen más con nosotros.

No sé si me equivoco, si soy injusta o creo paranoias gratuitas en vosotros, pero creo que no, que tras muchas imprudencias fruto de la buena fe estoy aprendiendo a ser prudente. Y lo que he aprendido, pero bien!, es que el Opus Dei en sus directores no es bueno, más bien al contrario, usa, manipula, abusa, destroza, miente y lo que se tercie, por su gloria. Así que cuidadín.

Un abrazo

Carmen Charo

Estimado Pondal,

La verdad es que estuve tentado de responderte el otro día y sinceramente preferí no hacerlo por no tener muy claro qué decirte.

Yo trabajé durante 16 años en la Universidad de Navarra y cuando me fui del Opus Dei lo primero que me dijeron en la Universidad, es que me buscara otro trabajo. Medio ingenuo de mi parte pensé que a mi salida del Opus Dei no afectaría a mi trabajo, con qué nivel de ingenuidad se vive dentro del Opus. El caso es que me querían fuera de la Universidad y a costo cero, es decir, todo bien, lárgate, pero de dinerillo olvídate nene que somos ricos y poderosos. Mi consejo, y no es para ti ya que tú ya lo hicistes con la gente de Irabia, es que la gente en estas circunstancias vaya a una indemnización de máxima. Si yo trabajé 16 años y me corresponde tanto porque no me quieres ver el pelo en tu colegio, universidad, o lo que sea... ningún problema, me pagas lo que me corresponde y a otra cosa mariposa. Como vayas onda no quiero escandalizarar a la gente, la Obra es pobre, yo no puedo hacer esto al Opus Dei, etc., etc., etc... al final sales mal y cabreado. Si tú puedes demostrar con testigos que te están sacando mal de tu trabajo, que te aislan, que no te dan tareas, etc... no duden y vayan a juicio. Afortunadamente la justicia en España, en estos temas, funciona bien.

Resumiendo: Si alguien está en este caso, que se vaya a una sede de algun sindicato (en España los mejores para esto son los abogados de CCOO ya que les tienen unas ganas enormes a los abogados del Opus Dei), y ellos te van a orientar bien. Con respecto a pedirles daños y perjuicios despues de tantos años, yo no soy abagado, pero me suena complicado.

Te deseo la mejor de las suertes y que te recuperes de tu enfermedad.

Un abrazo

Javier G.

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