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CORRESPONDENCIA

Lunes, 23 de Abril de 2012

Mi historia (6): La manipulación de mis amigos

Debo de de reconocer ahora, reconocer con vergüenza, la manipulación que me enseñaron a hacer, que hice y que enseñé a otros dentro de la obra. Estoy seguro de que tendré que rendir cuentas a Dios por esto. Dentro de la obra aprendí a hacerme de amigos por doquier, amigos por decirlo así, porque lo que me movía realmente era el interés proselitista, ese compelle intrare que el fundador predicaba, una terrible interpretación que hacía de aquel pasaje del evangelio, siempre guiado del director, un tipo con un temperamento seco y duro como un tronco viejo pero de abolengo, por lo tanto con un cargo en comisión regional y con derecho a humillarte de la manera más dura. Aquel director me enseñó a "trabajar con las almas"…

A propósito del tema del “Kilo de Alimentos”, anoto algo parecido acerca de las donaciones. En mi región había unos colegios opus que estaban puestos por todo lo alto, obviamente dirigidos solo a los estudiantes de clase alta de las ciudades donde estaban. Sin embargo, cuando se les acusaba de este hecho, se sacaba a relucir que también había un colegio en una zona pobre de tal ciudad en donde se ayudaba a los niños de la zona. La verdad era que ese colegio no era una obra corporativa, sino una labor personal cuyo dinero provenía principalmente de empresarios que habían decidido ayudar a esa zona y desde entonces dicho colegio se mantiene con la donación de empresarios que no tienen nada que ver con la obra.

La verdad del colegio es que, efectivamente, en los 80 era una zona pobre de la ciudad y ha quedado con esa reputación, siendo la verdad que ya no lo es. Aún más, el colegio está situado en la zona más pudiente de dicho barrio, totalmente alejado del corazón pobre de la zona. Ahí hay varios colegios privados también dirigidos a familias pudientes de la zona, y para variar el colegio "opus" es el más caro de todos los colegios privados de la zona. De esta manera dicho colegio no atiende a la educación de los niños pobres, todo lo contrario, rescata a los niños más pudientes, no otorga becas y el club anexo, como obviamente todo colegio opus tiene, también está dirigido a niños pudientes de la zona.  Otra mentira más de la obra.

Ricardo

Ésta fue muy buena:

- Pax!
- ... in aeternum...
- Oye, ¿podría hablar contigo un momento?
- ... sí, claro.
- Mira, quiero hacerte una corrección fraterna porque esta mañana, desayunando, me di cuenta de que tocabas con los labios tu cuchillo con mermelada...
- ¿ein?
- ...y esa es una grandísima falta de educación porque, date cuenta, los numerarios tenemos que estar preparados para todo, desde compartir mesa con un ministro hasta dar ejemplo a los chicos de san rafael en un colegio mayor...
- ¡Ah!
- ¡Pax!
- ... in aeternum...

Resopon

Apreciada Janabenito:

Muchas gracias por tu interesante exposición sobre el miedo al que tú te referías, es decir, el miedo insuperable, tal como tú dices, un miedo que llega a dominar la voluntad. En tu respuesta me defines exactamente de qué miedo se trata y, la verdad es que te entiendo perfectamente, aparte de que me ha ido muy bien para hacer un poco de cultura sobre el tema.

Yo viví hace unos años una situación de este tipo de miedo insuperable en mi trabajo que podría haber acabado realmente muy mal. Mi propia mujer no acababa de entender que no supiera superar este pánico y terror que me producía este miedo para mí insuperable. Al final, simplemente aceptó que esto era así y de esta forma, fue una de las personas que pudo ayudarme a superarlo.

También quiero que sepas que conozco algún caso parecido al tuyo y que sé perfectamente que no exageras en absoluto y que, por supuesto, sois muchos los que habéis pasado por estos miedos en "la Cosa" y muchos los que lo siguen pasando. Vamos, nada más hay que tomarse la molestia de leer muchos escritos y correos en Opuslibros.

Un abrazo,

PepeG

He visto que en esta página web se está debatiendo con viveza la cuestión de la paternidad responsable y el control de la natalidad en las últimas semanas. Tenía la intención de escribir para manifestar mi opinión sobre este tema, pero, después de leer el contundente artículo de Ana Azanza Humanae vitae 1968, no tengo nada más que añadir a la argumentación de Ana, con quien estoy totalmente de acuerdo: ¡chapó! Ana ha expresado muy bien lo que yo pienso. Sólo os recuerdo que el 29/10/2011 ya escribí, aunque un poco de pasada, sobre esta cuestión.

Y, si se me permite una pequeña observación, la hago. Todos los análisis y debates acerca de la teología moral que actualmente se plantean entre los teólogos oficiales (no críticos) de la Iglesia católica se fundamentan en las enseñanzas de la encíclica Veritatis splendor (06/08/1993) de Juan Pablo II. Esta encíclica, que no desciende a la casuística concreta de la moral, sino que se queda en el nivel de la “Moral Fundamental” tanto en el plano filosófico como teológico, viene a ser como la “ley básica y constitucional” de la doctrina moral actualmente vigente en el Magisterio oficial de la Iglesia. Con la Veritatis splendor se pretendió dar solidez filosófica y teológica (Ley Natural, conciencia, opción fundamental, identificación con Cristo, espiritualidad martirial, etc.) a otros documentos magisteriales de materia moral que, como la Humanae vitae (25/07/1968), descendieran a la casuística del comportamiento ético y también se pretendió desautorizar a los teólogos católicos disidentes y contestatarios de la actual postura oficial sobre la anticoncepción o sobre la homosexualidad o sobre las relaciones prematrimoniales, etcétera. Por eso, Ana Azanza seguramente no estará bien vista ahora mismo, a partir de su magnífico artículo del 20/04/2012, por aquellos que ella misma llama “los inquisidores romanos que hoy se expanden por el orbe”, pero sí está bien vista y sinceramente apreciada por muchas y muchos de nosotros.

Giovanna Reale

Estimados todos,

Si las réplicas a mi escrito del pasado miércoles y al de Melqui (con el que por cierto no me identifico por completo) no prueban que éste es un asunto de lo más enmarañado, no sé qué otra cosa puede probarlo. Son demasiadas cosas y no voy a pretender responder a todo. Me siento quizás particularmente dolido con la réplica de Perladeladriático, pues pienso que ha malinterpretado mis palabras, especialmente sobre el silencio. Manzano cree que por el simple hecho de exponer lo que dice la Iglesia Católica (o más bien lo que yo creo que dice la Iglesia Católica, pues puedo estar equivocado o no entender bien todo lo que dice) debo tener directores y dirigidos; preguntaré a mi mujer qué piensa de esto, es lo más parecido que tengo a un director; no puedo preguntar en cambio a mis hijos, lo más parecido que tengo a dirigidos, porque son demasiado pequeños para entender la pregunta. ¡Cuánta indignación desatada sólo por exponer, con mayor o menor acierto, la doctrina católica tal como yo la entiendo, sin tratar de imponerla a nadie, incluso admitiendo que tal vez debería cambiar! Si es necesario atribuir esta doctrina a “los malos” debe ser porque no se sabe otra forma de rebatirla...

Simplemente el debate de látex o mercurio, no es un debate para opuslibros. Es una cuestión de Iglesia en general.

Lo que sí es lo es recriminable al opus, es el abuso, coacción y la criminilización de muchos aspectos de la sexualidad humana, que si bien son importantes, no son los únicos; pero sólo se fijan en eso, dejándose en el tintero otros aspectos como la doctrina social de la Iglesia, la caridad, los pagos de impuestos (la seguridad social por ejemplo a las Nax, administradoras, etc.), el liberalismo económico... y un largo etcétera más largo que el Quijote.

Además, a la hora de formar sobre sexualidad/pureza, no se habla claro. Todo lo relacionado con dicha virtud es pecado grave y plumazo... no se admiten decimales... Y se hace desde el temor y no desde el amor.

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