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CORRESPONDENCIA
Miércoles, 27 de Enero de 2010
Monumento a la hipocresía.- Ana Azanza
Alucino con las respuestas que estoy leyendo se le dan a la chica que se ha líado con un numerario... Ese tío es un fresco, y no quiero escribir adjetivos más específicos que como poco "desdicen del cargo y posición que ocupo".
Un "fiel de la prelatura" con un compromiso en la iglesia de celibato, al que como a mí y a todos los ex numerarios "Dios llamó desde la eternidad", una persona que si ha estado en la labor de san Rafael ha "captado" adolescentes diciéndoles que se acabaron las chicas "puesto que ese no es tu camino", y si está en san Gabriel recuerda a los supernumerarios que sólo son lícitos los métodos naturales. Un numerario que habrá dado charlas de "pureza" en su vida a todo tipo de hombres. Yo no sé cómo son las charlas de pureza que se dan a los hombres, conozco las de mujeres y aquello era un ir poco menos que con el metro midiendo largos de falda y de mangas.
Y ahora el caradura este que predica una cosa y vive otra, nos parece tan genial...
A mí me indigna. Porque de muchos de los que estamos aquí el opus dei ha inventado calumnias sobre este tema, mentiras sobre los motivos que nos llevaron a dejar la obra. Los curas opus, don Benito Badrinas y otros fueron de de casa en casa acusando a María Angustias Moreno de lesbiana, cuando era una pura mentira indemostrable. Una pura calumnia que como son los curas opus no se les ha denunciado. Son intocables. Parecidos insultos he leído yo en esta página contra Nacho Fernández. Y leemos una cosa así, de un tío que sabe que tiene unas responsabilidades personales y que sabe que ese amor es imposible... es decir que actúa con una caradura infinita, y lo único que se nos ocurre es decirle a la muchacha que no desespere, que ya lo conseguirá.
Que queréis que os diga, si nosotros mismos que hemos vivido en carne propia la calumnia, la mentira, la persecución decimos estas cosas... ¿qué estamos esperando que vayan a hacer las jerarquías eclesiásticas con esta cuestión?
Me hierve la sangre de pensar a cuántos niños pequeños este tío fresco ha podido plantear la vocación de numerario... ¡cuánto cuento chino!
Alguien decía hace poco por aquí que como en el opus no hay problemas de castidad, que seguirán adelante. Ya. Lo que pasa es que los problemas no se conocen ni se publican, pero haberlos ya estamos viendo que los hay.
¿Quién se puede creer que un director de un centro tiene esa relación tan íntima y continuada con una mujer y que eso no se sabe? Yo no me lo voy a tragar.
En este caso me parece claro que éste es de los privilegiados que se puede permitir lo que le dé la gana. En el opus no hay tiempos muertos: sabéis perfectamente los que habéis sido directores que nadie puede pasar la noche fuera del centro, ni estar media hora más de lo previsto fuera por la cara. Todo se controla. Al menos que tengas bula papal...que ya se ve hay quien la tiene.
Cuando pienso en aquello del "celibato por el Reino de los cielos"... y un cuerno. Lo que hace falta en esta vida es ser honrado, primero con uno mismo. Y dejarse de "aristocracias del amor" y demás cuentos chinos, que lo único que conllevan, lo estamos viendo en este y otros casos, es a la hipocresía. A las apariencias de querer ser la inmaculada concepción ocultando las verdaderas conductas.
Lo que haría falta y sería de utilidad pública es que supiéramos nombre y apellidos, ciudad, país del hipócrita.
Y no me da ninguna pena ni lástima de él, porque el opus cuando nos calumnia no dice "una numeraria tal y cual...". No. Las numerarias se pasean entrevistándose directamente con las personas que te rodean (me consta en mi caso) esparciendo sus difamaciones, manchando tu nombre "Ana Azanza es..." lo que les dé la gana a ellos. No se olvidan de nadie que te pueda querer.
¿Por qué somos tan indulgentes con quien no lo merece? ¿por qué no somos consecuentes con lo que nos ha pasado en la vida?
Me ha gustado lo que ha dicho Dionisio, nosotros somos la iglesia que tiene que reaccionar ante tanta hipocresía. Los primeros que debemos hacerlo. No podemos estar esperando que el papa Benedicto ayude a las madres afectadas por sus hijos captados, eso ya veremos si llega.
Nosotros ayudamos hablando claro, contando las cosas como son, y llamando al pan pan y al vino vino.
Los opus son eficaces, actúan, van y hablan. Hacen cosas.
A mí me parece que aquí hablamos mucho, pero no hacemos lo que está en nuestra mano. No tenemos fe en que esos gestos a nuestro alcance son los que frenarán estas injusticias.
Siempre estamos pensando en plan "que la iglesia haga, que los obispos hagan". Que nos caiga el maná del cielo. Ellos ya harán si hacen. Pero decidir esa agenda no está a nuestro alcance.
Pero somos nosotros como primeros afectados los que además de lamentarnos, algo a lo que tenemos perfecto derecho, hemos de ser consecuentes.
Como se ve estoy muy harta de los rollazos infumables...y me ha salido un mitín.
Otra cosa, yo no quiero personalizar ni decirle a nadie lo que tiene o no que hacer. Sólo pienso en voz alta. Pero alguien dice que tiene problemas económicos y que las opusianas le han pedido dinero. Vale, nos lo ha contado. Así nos enteramos. Pero ahora lo que a mí me gustaría saber, no quiero una respuesta sólo pienso en voz alta, es: ¿qué vas a hacer? ¿les darás ese dinero? ¿seguirás relacionándote con ellas para que te sigan pidiendo en el futuro? ¿es que todavía no nos hemos dado cuenta de porqué los opus siguen manteniendo lazos con los ex que se dejan?
Me ha impresionado mucho el escrito de Dionisio sobre el money, nos cuentas de primera mano dónde no van los dineros del opus, es impactante tu artículo donde lo explicas. Pero yo me pregunto, ¿vamos a seguir dándoles dinero aunque sea 20 euros? ¿puede uno leer todas las barbaridades de sufrimientos de gente que entra, de gente que sale, de madres que pierden a sus hijos ahí y seguir dándoles dinero?
Visto lo visto si hay tanto ex que colabora y se empieza a cerrar ese grifo, es ya una manera bien concreta y al alcance de cualquiera de empezar a "ser eficaces" en nuestra protesta.
Sin esperar a la reacción papal.... Cortemos el suministro por la parte que nos toca.
Ana Azanza
5. Su visión sobrenatural.- Luxindex
5. SU VISIÓN SOBRENATURAL
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Lo que hice yo cuando ya no pude más. Para Felipep.- Maurina
Querido Felipep,
Me gustaría aportar mi granito de arena a tu situación. No conozco tus circunstancias concretas pero se parecerán mucho a las de cualquier persona que quiere irse y no sabe por donde empezar.
Primero te diré que el hecho de que hayas llorado me ha emocionado de verdad y para mi significa dos cosas: que tu cerebro emocional (la parte más antigua del cerebro humano) ha hablado y ese parte del cerebro es la que está diseñada para nuestra supervivencia, ergo, la segunda cosa. No quieres morirte, eso es la salida fácil lógica (lo que te dice el cerebro cognitivo, la parte más moderna) porque no cuadra con la otra, con tus emociones. Las ganas de morir, además, creo que indican que estás deprimido de verdad y la depresión, más que tristeza indican una ausencia de placer.
En mi caso, fui incapaz de llorar durante mi estancia en la Obra. Nunca lloré.
Segundo, te diré como hice yo cuando ya no pude más. Me pasé muchos días pensando cómo iba a plantear el asunto a quien llevaba mi "charla fraterna". Finalmente, el día que me decidí, sólo pude balbucear: "Creo que me quiero ir de casa". Mi "hermano" que llevaba mi charla se levantó de un brinco del sofá y me dijo: "tienes que hablar con el director". No me volvió a dirigir la palabra durante las pocas semanas que tardé en irme. Hablar con el director fue mucho mejor, para mi gusto, era una persona más afable y cercana al menos para mi gusto.
Ya sabes, porque supongo que lo habrás visto, que se te recomendará que te vayas sin hacer ruido, a escondidas y como un delincuente para no escandalizar y esas cosas. Hazlo como te dé la gana. Yo acepté todas las condiciones porque el objetivo final, que era salir, pasaba por ahí. Me dio igual. Sabes que cuando te vayas, se dirá que te has ido temporalmente porque estás muy enfermo, tronado o cualquier otra cosa. Perfecto, que se justifiquen ellos mismos como quieran, que se autoengañen como quieran. Qué más te dará a ti ya. Cuando salgas por la puerta para no volver más (aunque en principio es temporal y toda la historia) sentirás el sol o las nubes o la lluvia o la nieve o el viento de otra manera. A mi me pasó. Todo es nuevo y todo es maravilloso. Mi experiencia y muchas otras que habrás leído te dicen lo mismo. Es maravilloso y no pasa nada. Afuera hay muchas cosas espléndidas. No todo lo ajeno a la Obra es el demonio disfrazado. Yo salí con esta concepción (reconozco que era un problema mio) y me llevé infinitud de sorpresas como tú harás.
Yo viví la salida de algunas personas, algunas muy jóvenes, otras más mayores. Se me dijo que estaban enfermos y todo eso. Pero resulta que me los crucé por la calle a algunos y les vi mejor que nunca. Pinta de locos no tenían en absoluto, más bien todo lo contrario. La pinta de loco debía tenerla intentando evitar el encuentro y el cruce de palabras con aquel "loco" que se había ido de casa. Le seguí al cabo de poco...
Una vez fuera me crucé con algunas personas en la calle que habían vivido conmigo en algún centro y la tónica era decir "hola" si era inevitable el encuentro y apartar la mirada para no contagiarse supongo. En aquellos momentos recientes después de salir eso duele y te hunde un poco más. Ahora casi me río y me compadezco de aquellos. Con otra persona, tomaba café de vez en cuando pero él lo hacía a escondidas. Eso me ayudó una barbaridad, no sabes cuanto. Esa persona duró un par de años en la Obra... también se fue...
En fin, me alargo y, en conclusion: escoge un día, el que quieras, pero cuanto antes. Antes de febrero, por ejemplo y le dices a quien tengas que decirle: "me voy a ir de casa" o como quieras decírselo pero claro como el agua. Y le dices cuando. Antes de un mes. Punto. A partir de ahí todo va solo, por lo menos en mi caso me lo pareció. Aprieta el gatillo y ya está. El día señalado, haces las maletas y te vas. Cumple con tus condiciones laborales de preaviso, etc. si quieres dejar el trabajo y, si no, sigue allí. Consulta un abogado laboralista y le haces caso. El ruido no gusta.
En definitiva, suele ser un proceso más o menos largo más cuando coges las riendas y te responsabilizas totalmente de tu vida, experimentas la plenitud que todos buscamos. Y en las condiciones en las que estás de bruma mental, sigue tu instinto pues está diseñado para procurar tu supervivencia. Sigue tu instinto, es el camino más corto para tu salud, seguridad y coherencia aunque, intelectualmente, ahora no puedas entenderlo.
Un abrazo y si necesitas cualquier cosa que yo pueda brindarte, no dudes en pedir mi correo a Agustina.
Maurina
P.D.: He aprendido a abrazar hace relativamente poco tiempo. Abrazar de verdad a alguien puede curar muchas cosas...
Mis años de agregado (19).- Israel Zepeda
MIS AÑOS DE AGREGADO (19)
La década de los 90´s
Parte III
Israel Zepeda
Le doy continuación al escrito publicado el 10 de agosto de 2009. Al iniciar el siguiente año estuve buscando trabajo en diversas empresas. Volví nuevamente al centro de Louisiana con el grupo de universitarios. Fueron algunos meses de revisar periódicos, entrevistas de trabajos, visitar a los amigos y ver alguna oportunidad de empleo. Semanas después ingresé a trabajar a las Afores. Fue mi primera experiencia en trabajar fuera de los ámbitos de las labores personales y corporativas del Opus Dei. Estaba sujeto a un horario muy distinto al del ámbito educativo. Era también la primera vez en donde tenía compañeras de trabajo. La paga era baja pero había que pelear por los contratos para obtener buenas comisiones. Empecé a integrarme a grupos de trabajo con compañeros y compañeras: visitábamos diferentes empresas, negocios comerciales, casas habitación; comíamos en la calle generalmente y eran momentos muy propicios para relacionarte con la gente…
(Leer artículo completo...)
Jugar a dos bandas. Para Mondy.- aldeano
Querida Mondy,
deliberadamente esperé un poco para contestarte para ver qué te decían los demás, porque, la impresión que tengo de tu historia puede ser un poco dura y no iba a enviarla en caso de que otros la dijeran también y termináramos abrumándote sin necesidad; como nadie lo ha hecho, me parece que debo hacerlo.
No quiero juzgar los sentimientos del numerario, porque la confusión que puede haber en su alma debe ser gigantesca, pero esta relación afectiva sólo podía terminar de esta manera: con imposibles y eternas promesas que, sinceramente, dudo que se cumplan. Este numerario tomó una decisión en su vida y, sabiendo que la rompía, no hizo ninguna elección: jugó a dos bandas en toda la relación... y sigue haciéndolo.
Puede que lo esté haciendo inocente y sinceramente, o como una forma de liberarse del Opus o porque es un cretino, no lo sé, pero de hecho te está colocando a competir contra el Opus Dei sin que tenga él ningún derecho a hacerlo. No tiene derecho a que tú estés soñando una vida con él con la espada de Damocles pendiendo sobre tu cabeza de "a ver si se anima a salir de una vez de la Obra"... Si lo amas y él dice amarte, tienes derecho a exigirle que sea sincero consigo mismo y haga algo por solucionar esta situación, porque realmente quieres lo mejor para él (y él mismo te dijo que prefiere irse). No digo que golpees a la puerta de su casa y le grites; hazlo con respeto y midiendo los tiempos, pero poniendo las cosas claras... exactamente como ustedes, las mujeres, lo hacen tan bien :-)... Dile o haz algo que le transmita el mensaje "Tú tienes un compromiso de celibato y estás enamorado de mí: ¿qué eliges?"... Y hazle saber también que tú estás ahí para ayudarlo (si no, sería burda coacción) porque lo amas.
Es que no puedes esperar vivir como "amante" de alguien que, en teoría, está comprometido... Si él rompe con el Opus Dei, sólo entonces podrás estar segura de que intentará dejar esa "doble fidelidad" (que no es fidelidad). Ojo, aquí no importa la consideración que hagamos de si él está o no libre, jurídica y legítimamente comprometido al celibato, sólo basta con que él crea que está comprometido para que esté faltando a su conciencia. En este momento, su relación contigo es algo que se opone contra aquello en lo que él cree; por esa razón, creo que debe sincerarse consigo mismo y no mantenerte a ti, una persona, con el alma en vilo.
Ahora, entiendo que es difícil y que no es algo que se pueda hacer en dos días. Si el amor de él es real, en el momento en que le hagas notar que su amor será pleno si se libra de las amarras del Opus y de la doble vida que está llevando, estoy seguro de que las romperá. Pero hasta que no lo haga, no des nada por seguro... nada.
Un abrazo,
aldeano
P.S.: Espero que comprendas lo que quise decir...
Olvida la idea de querer morirte. Para Felipep.- aldeano
Querido Felipep,
contesto un poquito más tarde que el resto porque quería reposar un poco antes de hacerlo... para hacerlo algo mejor que siempre, espero.
Primero, te pido, como los demás, que olvides ¡¡por favor!! la idea de querer morirte. Dios nos ama a todos, pero no sólo Dios... seguramente conoces gente fuera de la Obra que te quiere y que, si les pides ayuda, te la darán. Quizás incluso haya gente dentro del Opus Dei que te quieran, pero, por sanidad mental, es mejor que este tránsito lo lleves a cabo lo más alejado posible de ese ambiente, porque, como te das cuenta, te está haciendo daño.
Cualquier cosa, aquí estamos. Pídele a Agustina el mail de cualquiera de nosotros, que te ayudaremos con lo que podamos.
Segundo, un consejo que me dio alguien muy sabia (y que repito aquí mil veces). Caminar (¡no correr!) por parques y acercarse a la naturaleza. Parece una idiotez, pero permite calmar el espíritu para tomar decisiones... o... simplemente para calmarlo. Por favor, no te lleves el Santo Rosario ni nada que tenga que ver con las prácticas del Opus; hazlo porque te hace bien... al principio, oblígate; después ya no será necesario. Por supuesto, esto no es la píldora mágica que te sacará de todos los problemas, pero te ayudará a sobrevivir algo mejor en medio de la tormenta.
Acerca de tu posición de "estatus" en la Obra... bueno... yo no sé qué decir al respecto. Te van a despedir si te vas, eso es evidente... Supongo que lo más sensato es crear el colchón para caer suave cuando lo hagan. Pero olvídate del escándalo: las obras corporativas son, en ocasiones, tal estafa escandalosa que hasta puede que te salves de verte involucrado hasta en algún juicio si te vas.
Un abrazo enorme y muy fuerte,
aldeano
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