Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
OPUS DEI: ¿un CAMINO a ninguna parte?

Correspondencia
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados
Documentos internos del Opus Dei
Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links

Google

en opuslibros

CORRESPONDENCIA

Ponemos sólo las iniciales, el nick o el nombre propio de las personas que envían los correos porque aquí nadie quiere ser mártir. Pero conservamos todos los originales, la dirección con los que los hemos recibido y no publicamos ningún anónimo. No publicamos tampoco correos que no cuiden las formas básicas de educación, sean anti-opus o pro-opus. Amigos, cuidemos las expresiones desagradables y vulgares; hagamos todos -orejas que alguna vez contestan, incluídos- un esfuerzo para expresar lo mismo sin recurrir a la ordinariez ni al mal gusto.

Los correos se actualizan a las 21.00 horas de Madrid,
lunes, miércoles y viernes.

Al mencionar a algún correo o escrito anterior, indicad la fecha en la que se publicó para facilitarnos hacer el link.

Los escritos para publicar los debéis enviar a través de la NUEVA WEB (opción 'Envios'). Nos ahorraréis mucho trabajo. Graciasssss.


De cara al 19 de Marzo: selección de artículos

19marzo2008


 

Miércoles, 21 de Marzo de 2007


Pensar bien de los demás.- Books

Señor Odediego:

Al leer las breves líneas que nos envía, mi primera reacción fue de indignación e incredulidad. Pasado ese  primer momento lo que sentí fue pena por usted. Pena porque entra a formar parte de aquellos que contribuyen a que todo sea creíble, a que no te sorprendas por nada. Yo no soy una enferma mental ni una mentirosa.

Lo que cuento cuando escribo es lo que he vivido o me limito a dar mi opinión. No puedo hablar con rotundidad de los que colaboran en en este página, porque personalmente sólo conozco a unos cuantos, pero confío plenamente en que cuentan la verdad. Usted con sus palabras se ha llevado por delante a todos, incluidos los miembros de la Obra que  aquí escriben. De todos nosotros piensa que somos unos enfermos mentales y afirma que somos unos mentirosos (supongo que no habrá caido en la cuenta).

Soy una gran defensora de la libertad de expresión, pero también lo soy del respeto por las personas. Yo le perdono aunque usted no me pida perdón y lo hago porque he inventado un personaje. Ese  personaje es usted. Alguien que quiere muchísimo a la Obra y se siente dolido por lo que se ha encontrado aquí. Por eso ha actuado arrebatadamente. También creo que no tiene "todos los datos", como a mí me dijeron tantas veces, cuando no estaba de acuerdo con algo, a lo largo de los muchos años que pasé allí. Y tenían razón, después de mi larga estancia en el Opus Dei y del tiempo transcurrido fuera, aún no sé con certeza qué es. 

Gracias por rezar mí. Yo también lo haré por usted. Y con la ayuda de Dios y con sus oraciones, espero no tener  nunca la necesidad de acudir a un psiquiatra. Primero porque considero que la enfermedad mental es muy dura y me imposibilitaría cuidar de mi familia y atenderlos en lo que necesitan. Segundo porque no tendría ni tiempo ni dinero para semejante lujo.

Le saluda cordialmente,
Books.

P.D. En este escrito he utilizado una palabra totalmente inapropiada  cuando hacía referencia a la asistencia a una consulta psiquiátrica. Esa palabra era "lujo". Lo hice pensando en mí, ya que por mis circunstancias actuales no me lo podría permitir. Entiendo y me consta que son muchas las personas que no tienen más remedio que acudir a estos especialistas, haciendo a veces grandes esfuerzos económicos y por otra parte creo recordar que una amiga me contó en una ocasión que lo había hecho a través de la Seguridad Social.

Pido perdón a aquellos a los que haya podido molestar mi expresión, absolutamente fuera de lugar.





Vida cotidiana de una numeraria (Capítulo II).- Alter

VIDA COTIDIANA DE UNA NUMERARIA DEL OPUS DEI

Capítulo II

Elena Longo, 2006

 

 

II. DIVERSAS CLASES DE CENTROS

 

            En términos generales, los numerarios del Opus Dei están obligados, en cuanto les sea posible, a dejar su familia de origen para vivir en un centro del Opus Dei. El Opus Dei está considerada la verdadera familia de los que piden la admisión en la institución, y si esto es verdad para todas las clases de miembros, lo es especialmente para los numerarios que, si todo va bien, pasarán la vida en un centro de la Obra.

            En realidad, con el paso del tiempo, esa exigencia ha evolucionado mucho. Mientras que en el periodo 1971-1988 recuerdo un único caso de dispensa de la vida de familia para una numeraria italiana que tenía la necesidad de atender a su madre sola y enferma, y en todo caso era una dispensa que la interesada debía solicitar y el gobierno de la Obra conceder, actualmente me consta que esa práctica se ha difundido notablemente y se ha simplificado el iter para obtenerla, que no requiere ya particulares formalidades...

 

Leer capítulo completo (PDF, 30KB)

Capítulo anteriorCapítulo siguiente





Dos años de libertad.- Armando

DOS AÑOS DE LIBERTAD

Armando, 21 de marzo de 2007

 

Hoy 21 de marzo hace exactamente dos años escribí la carta en la cual solicitaba al Prelado la dispensa de mis compromisos vocacionales. Era lunes santo, por lo tanto en plena Semana Santa. Junto con esta circunstancia estaba la agonía de Juan Pablo II que me afectó muchísimo y me hacía sentir más traidor aún. Por un lado estaba que volteaba a ver atrás y dejar el arado en la Semana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor y por otro, un gran hombre, uno de los papas más grandes del siglo XX  estaba a punto de dejar la tierra para ir a la Presencia de Dios.

 

No obstante estos hechos y el peso que ejercían sobre mi conciencia, di el paso definitivo y me fui de la Obra. Aquel día me decidí a ir al centro y decir al director que ya no podía más, que me dejara ir en buen plan y no dando un portazo como seguro llegaría a ser si continuaba dentro. El director me escuchó, trató de argumentarme por quinimil vez que lo pensara bien, pero no había marcha atrás, así que me indico que escribiera la carta solicitando la dispensa. No sé por qué este detalle se me había olvidado, recuerdo que una vez tratamos el tema al estudiar el catecismo, aún tengo presente esa tarde en “La Masada” y me llama la atención que los dos que estábamos repasando aquel punto del catecismo de la Obra para memorizarlo, nos hemos ido...



(Leer artículo completo...)




Cómo procede un sacerdote agregado para irse de la Obra. Para Gon.- Alkaradura

Querido Gon:
 
                 Respondo a tu pregunta, acerca de cómo debe proceder un sacerdote agregado (si fuera supernumerario, lo mismo da) de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz para disociarse del Opus Dei.
 
                En primer lugar, hay que señalar, como bien lo publicita el Opus Dei, por activa y por pasiva, para adentro y para afuera (y que además es verdad) que la sociedad sacerdotal de la Santa Cruz es una asociación de clérigos, unida a la Prelatura Opus Dei. Y eso, subrayan, para dejar claro que los sacerdotes diocesanos que se asocian a dicha sociedad, mantienen inalterado su vínculo de incardinación con sus propios Prelados.
 
               El vínculo de los socios de la sociedad sacerdotal de la Santa Cruz es pues de carácter asociativo. Luego, el que quiere disociarse, basta que lo manifieste. No hace falta que nadie le dispensen de nada, ya que esos socios no se encuentran ligados por votos u otros sagrados vínculos análogos.
 
              Si para tener la conciencia más clara, el que quisiera disociarse desea formalizar su libre e inequívoca manifestación de voluntad, podría hacerlo por escrito, por algún medio fehaciente según el derecho civil del lugar -que si lo és, también lo será para el derecho canónico- por ejemplo, un telegrama, o una carta documento, un requerimiento notarial, etc. 
 
              Cordiales saludos
 
Alkaradura




Permitirme una opinión.- Blue-Hotel

Hola a todos.

Es la primera vez que escribo. Mi experiencia personal es la siguiente: Educado en Colegio de Fomento, Asistencia a Centro de Estudios y Medios de Formación.. Educado en la Universidad de Navarra. Familiares y amigos numerarios y super numerarios. Edad por encima de 40 años. Nunca pité a pesar de las presiones, los retiros y los UNIV...

Me parece muy bien esta página.  También me parece un poco catartica. Me explico. Yo no tuve nunca la pasíón del converso, a pesar de los intentos. Tampoco tengo los daños y las secuelas de los que os habeis ido. Por eso lo veo un poco más frio.

Creo que cuando escriben "ellos" diciendo su parte de la verdad, su visión del OD, debeis de respetarla como la "suya". Cada intervención favorable al OD desencadena o una nota de "los orejas" o una sucesión de e-mails queriendo "dar batalla". Entiendo por que es, estais dañados, dolidos, decepcionados...

Creo que deberias permitir sus opiniones con mayor desapasionamiento. Los que conocemos el OD sabemos como es y también sabemos que la liberdad de expresión, los juicios mesurados y el equilibrio en las opiniones es la mejor manera de apostar por el respeto a las personas y la manera de relegar las técnicas manipulatorias.

Un saludo,

Blue-Hotel





¿Reforma o aburguesamiento?.- Aquilina

Reforma o aburguesamiento?

Aquilina, 21 de marzo de 2007

 

 Con referencia a la intervención de Pacifica (I y II) y a unas cuantas noticias que, de forma distinta, me van llegando de actuaciones y modales de personas que actualmente aún se encuentran en el Opus Dei, quiero comentar que yo, desde el exterior, percibo estas noticias más como un aburguesamiento que como una puesta al día.

 

No es que uno encuentra en todo caso que criticar: cuando el OD no cambia y cuando cambia. Es que hay cambios que se dan tan sólo cuando ya no hay más remedio que cambiar, ob torto collo, a regañadientes; y otros que quieren ser serios intentos de corregir lo que se vio que estaba equivocado, cuando se quiere rectificar, y entonces sí se puede hablar de una reforma.

 

¿Cual es el caso presente? Unos cuantos, dentro de la Opus Dei, contestan a nuestras criticas afirmando que algunas cosas ya no se viven como antes (que las numerarias visten pantalones, que las cartas personales ya no se entregan abiertas, que se va a celebraciones de la “familia de sangre”, que se puede utilizar tarjeta de credito y movil personal, y un largo etcetera). Ahora bien, si la Obra se pusiera seriamente a analizar, después de tres cuartos de siglos de experiencias y de reflexiones, cuales son las formas autenticamente laicales de santificarse en medio del mundo por medio del trabajo (por ej. con referencia a la justicia social, a la atención a los más debiles, a la responsabilidad fiscal y con atención al bien común, etc.) y a raíz de esta reflexión formulara unos cambios dentro de una praxis ascetica y doctrinal verdaderamente profetica y exigente, entonces realmente podriamos hablar de reformas y de conversión. Pero mientras la “puesta al día” del Opus Dei se reduce a “conceder” cuando ya no logra “exigir” a sus miembros, no creo que pueda hablarse ni de reformas ni de puesta al día.

 

Me causa perplejidad cada vez que leo que “ya no se vive” algún detalle extraño y pintoresco, como si los que pasamos en el OD en los años ’70 y ’80, o aún anteriores, pertenecieramos a siglos lejanos y obscuros. Las cosas que extrañan ahora son las mismas que extrañaban antes, por ser contrarias e hasta incompatibles con una vida autenticamente laical (que significa, como sabemos, suelta de ataduras) y secular (o sea: en el tiempo concreto que nos toca vivir, en la historia). No puedo creer que sea el espesor temporal de unos veinte, treinta años lo que justifica que el OD esté perdiendo en el camino constumbres que nos fueron presentadas y explicadas como exigencias de una donación que, en el medio del mundo, quería ser más exigente y absoluta de la de una monja de clausura (a mí de esta forma me la explicaron al entregarme los instrumentos de penitencia corporal).

 

Por lo que veo, sólo hay dos alternativas: o se reconoce que ya desde los comienzos estas costumbres no podían ayudar a santificarse específicamente como laicos en el medio del mundo –y entonces haría falta una reforma de todo el espiritu y la praxis del Opus Dei, además que admitir que teoria y praxis del OD son criticables y reformables-, o, en cambio, estos cambios son concesiones que responden a la evidencia que ya es imposible continuar exigiendo actuaciones tan totalizantes y extravagantes, y entonces baja la exigencia y se va hacia el aburguesamiento.

 

Como, por la experiencia que tenemos, es dificil imaginar que vaya a ocurrir lo primero, me temo mucho que con el aburguesamiento haya empezado la fase final de la historia de la institución.

 

Aquilina





No sólo eres del Opus Dei, sino que has vivido de serlo. ParaOdediego.- Rafinosa

Querido Odediego

Me ha emocionado tu correo, delicado en la forma y doctrinal en el fondo. Seguro que te merecerá una felicitación en esa conversación íntima y fraterna, felicitación reservada para los que exentos de respetos humanos -y de argumentos- se enfrentan al error respetando la libertad de las conciencias y sin prejuicio alguno.

Además, recién pasado el 19 de marzo, me permito felicitarte por tus 40 años de perseverancia. Doble enhorabuena, porque no sólo eres del Opus Dei, si no que además has vivido de serlo. Tras veinte años en un colegio de la Obra, a mi me echaron cuando dije que quería dejar la Obra. Por supuesto esa decisión la tomaron personas de honda y acendrada vocación educativa, que no han pisado un aula con niños en su vida pero que disfrutan de ese aura de infabilidad -que el resto de los católicos, la "gente de fuera" (¿lo he dicho bien?), otorgamos sólo al Papa y para ciertos asuntos- y que se denomina gracia de estado (muy diferente al estado de gracia).

¿Por qué si mi hermano numerario -nuestro hermano, por lo tanto Odediego, aunque más mío que tuyo, vaya-...Empiezo otra vez, sin disgresión. Por qué si mi hermano numerario que trabaja en la enseñanza pública no asciende o es arrinconado por razones de su conciencia eso es injusticia, persecución en razón de la fe, con mérito cercano al del martirio. Sin embargo, si yo por razones de conciencia y asuntos entre Dios y yo decido dejar la Obra y ésta me deja sin trabajo, eso es comprensible y estupendo. Peut-être que el fin justifique los medios? Yo pensaba que eso no funciona muy bien en ética... También es verdad que todo, hecho siempre por razones extraprofesionales, se hizo por mi bien; no lo he acabado de entender todavía, quizás por no haber dado con el psiquiatra adecuado. Casualmente parientes, amigos, personas a quienes me encuentro en el camino de la vida tampoco lo ven claro. Cierto que ellos no han oido las sacrosantas e inviolables profecías de nuestro amadísimo, que os dan las coordenadas a vosotros para juzgar toda conciencia de aquí a la reunión en Josafat Valley.

Te diré que durante mi tiempo de paro, me quisieron dar dos veces trabajo en razón de mi curriculum y se me negó por mi condición de  ex-combatiente. También es cierto que tú y tu psiquiatra podéis decirme que más tonto fui yo por seguir creyendo en ciertos eslóganes, pero bueno, fue mucho tiempo en ello, claro y los desengaños necesitan abrirse camino...

O sea que profe 25 años en un colegio; bueno somos colegas, entonces. Durante bastante tiempo llevé un grupo de supers donde había muchos profesores. Te confieso que, si pensé que tras tantos años de perseguir al adscrito adolescente para que hiciera su plande y fuera a las cosas -siempre respetando su libertad- iba a descansar en brazos de San Gabriel, me equivoqué de medio a medio. Aquellos hombretones tenían un cacao de no te menees: tenían que recibir sus medios de formación en su horario de trabajo, las convivencias y cursos de retiro, si iban, eran versión microfilm, Mezclaban su trabajo, sueldo, horas complementarias y demás con las obligaciones vocacionales: no soy profeta ni hijo de profeta -aunque tú y tu psiquiatra podéis hablar con mi padre por si acaso- y puedo asegurarte que la mayoría de ellos pensaban en ser de la Obra como un modo de conservar su trabajo o incluso acceder a ciertos cargos en el colegio. De hecho sólo se despidió a gente que dio motivos de escándalo muy gordos -sí, Odediego, los dieron siendo de casa, lo siento, snif!-; vi a muchos supernumerarios cambiar de encargo pero rara vez perdían sueldo; en mis postreros años con sus descensos en el escalafón con pérdidas de sueldo dije a las claras -yo también soy muy lenguaraz, como tú- "esto me lo hacéis por ser numerario"; afirmó y no negó.

Tú procura no dar guerra, Odediego, ve a hacer tus cosas cuando te toque, sin descalabrar el horario de tu encargado de grupo.

Me figuro que en tu condición de super no has llegado ni a oler toda la cohorte de glosas, vademecum, instrucciones, catecismos, planes de formación etc. que han brotado en tu familia sobrenatural con la misma  -misma, mismita- naturalidad que el agua que brota de una fuente. Ahí te has perdido mucho, pero siempre puedes leerlos aquí.

Te los puedo resumir diciéndote que la flexibilidad de la prelatura frente a las necesidades de la conciencia personal es nula y que, importante Odedieguito esto, siempre y en todo lugar entre la defensa de la organización o la del individuo y su conciencia, el Opus se elegirá a sí mismo con la admiración que se debe.

Quedo a la espera de noticias vuestras -tuyas y del psiquiatra- en que me digais como se come todo esto pisto. Un abrazo

                                                                                   Rafinosa

PD : Oh tú, Webmaster ¿Hasta cuando tendremos que soportar el insulto de gentes que no argumentan, escupen y se van? ¿A qué esperan los directores mayores, medianos y locales a sacar papeles amarillos -autodestruyanse en el año- o blancos -consérvese in aeternum hasta nueva versión- en que se indique que les puede hacer a los miembros mucha pupa y daño leer esta página a la que "casualmente" y buscando anécdotas y favores de nuestro queridísimo llegan tantos?

¿No ven que la curiosidad malsana hace que se les caiga el santo y seña al leerla?

Esto no puede seguir así, deben responsabilizarse de las almas que les han sido encomendadas y velar por ellas (y por nosotros).





Para Odediego.- Pero

Querido Odediego,

Gracias por tu valiente alegato. Envíos como el tuyo nos motivan para seguir escribiendo día tras día en la web.

Dices:

"Soy supernumerario del Opus Dei desde hace más de cuarenta años. He sido profesor en un colegio de la Obra más de 25 años y lo único que puedo pensar de los que escribís estas cosas de la Obra, es que sois unos enfermos mentales."

Si te quedas tranquilo diciendo que lo que aquí se escribe es simplemente la obra de unos enfermos mentales... allá tú. Pero a mi tu actitud me recuerda a la del avestruz que esconde la cabeza en la tierra para no ver lo que pasa a su alrededor.

Ten en cuenta que aquí somos muchos, y que coincidimos en muchas cosas.

Y que cuando el río suena, agua lleva.

"Gracias a vuestra enfermedad, el Señor no os tendrá en cuenta las mentiras que decís. Que Jesús os proporcione un buen psiquiatra. Rezaré para que así sea."

A tí, muchas gracias por perdonarnos la vida.

Siendo como somos unos mentirosos, ya iba haciendo falta que llegase el poseedor de la verdad para desenmascarar nuestra inquina. Loable es que tú, portavoz oficial del Señor, te dignes a escribir aquí.

Pero en materia de psiquiatras, me fío de cualquiera antes que de la Prelatura. Eso te lo garantizo.

Saludos,

Pero.





Para odediego.- E.B.E.

No entiendo lo que dice Odediego, me parece demasiado críptico.

Saludos,
E.B.E.





Todos enfermos mentales y mentirosos.- Democrito

Contestación a Odediego

Pues para llevar más de 40 años de supernumerario has aprovechado muy poco. Que la intransigencia es con el mal pero que a los malos - equivocados, perdón - no hay que llamarlos enfermos mentales ni mentirosos. 

Va a tener que repetir curso insistiendo en educacion, caridad, paciencia, consideración, discernimeinto, inteligencia, comprensión, tolerancia, amor al prójimo y sentido común. Y otras cosas así.

Ah; y nadie te obliga a leer la web pero no deberia molestarte tanto que otros la leamos y disfrutemos de esa parcela de libertad.

Democrito





No nos tomes el pelo. Para Pacífica.- Heidi Berger

Queridisima Pacifica,
 
acabo de colgar el telefono -casi una hora estuvimos hablando!- y ya sabes lo que pienso y dejo de pensar de tu correo. Por eso no quiero repetirme, ademas de que serian cosas demasiado personales y ya te las he dicho. Me siento obligada a escribir y en nombre de de los orejas a contestarte, y te lo pido de todo corazon: no nos tomes el pelo. Ya me lo tomaste bastante los años que pasamos juntas (te conozco 14 años de los 18 que pase en la obra) y me entiendes, sabes que no te lo digo enfadada y sabes lo que significa cuando escribo de todo corazon.
 
Maja, has causado una hecatombe en la web. Pienso en cada uno de los que te contestó, alucinando, de lo bien que te ha ido la vida en la obra y lo booooniita que ha sido tu salida.... vaya, a mi no, sabemos que no es asi! No voy a hacerte el favor de traducir tu correo, a mi tu opinion personal, lo pasas a alguna de esas web oficiales -en Alemania claro que tambien tienen una- y quiza te lo publican: sabes que en serio se toman lo que tu escribes. Prueba. Quiza esta vez si tengas suerte.
 
Nos cuentas que no has dormido en tabla. Despues, le contestas al bueno de Supo en aleman (Supo, no se que tal tus aptitudes hacia esta lengua... je je je) que claro, la mayoria del tiempo has vivido en residencias universitarias. Y mira por donde van las cosas, coincidimos algun tiempo en la misma casa. Tranquilo Supo, tranquila Mercy, tranquilos todos.... las normalitas que dormiamos en habitaciones normalitas no teniamos tabla: es que las residentes pasaban mucho tiempo con nosotras y hubiese resultado chocante. Las pobres del consejo local, si, a la tabla, y a las que por la razon que fuere no lo haciamos se nos pedia una mortificacion extraordinaria que remplazara ésta. Puede ser que a ti, Pacifica, no te lo hayan dicho, pero sinceramente no lo creo. Y no lo creo porque vivimos en la misma casa y teniamos las mismas directoras. Quiza pasaste en el momento que te lo comentaron, pero hay que ser valiente y decir las cosas como han sido. Muy bien tambien lo que contestas de las mortificaciones corporales: ;-)
 
Como se te ocurre contestarle a Supo (queridisimo, "Supo"-ngo nuevamente que esto del aleman te tendra....) cuando cuestiona el tema del manejo del dinero que lo normal en una familia, en una pareja, es que se maneje de manera conjunta? Y no le cuentas que tu no pasabas tu dinero al centro, que por las razones que sean no lo hacias, no dejabas tu tarjeta de debito en la caja del centro mientras que todas las otras que trabajabamos y cotizabamos "normal" si lo haciamos???. Sabes como deje yo la obra y como la han dejado algunos otros orejas y mira que casualidad, la web esta llena de historias similares.... por qué no cuentas que te fuiste a tu piso bien puesto gracias al dinero que te habias ahorrado no pasándolo al centro???. No es que sea abogado de Supo, pero no contestes por favor asi a gente que conoce la obra tambien muy de cerca y se esfuerzan por entender lo que intentas explicarnos.
 
Te enredas un poco con Asunta y el sindrome de Estocolmo. Yo lo supere recien leyendo esta pagina y te recomiendo la misma terapia. Yo tuve mis caminos, tu tendras los tuyos... pero creeme, hace muy bien. Te llama la atencion que tu te hayas ido tan bien y nosotros no?.... ya te dije que no conzco numeraria en la region que se haya pegado el vidorrio que tu te pegaste, y menos una que se haya ido en plan super guay y "ven a las meditaciones de san miguel cuando te parezca", como nos cuentas! Y lo peor, cuando te pregunte por algun alma gemela alli adentro o aqui afuera.... no supiste nombrarme ni una. Entonces ....????
 
El camino hacia el corazon -y pasar por el sindrome de estocolmo es una etapa de este camino- me hizo acordar a un libro que lei hace poco (creo que en el index de la obra tendria por lo menos un 7 u 8, o sea, tan terrible que ni clasificasion tendria) Es la historia de una chica que cae en una relacion tortuosa con un hombre un poco mayor y como intenta salir de ello. Y sabes cuando lo logra? Cuando se da cuenta que "el dependia de mi dependencia, necesita mi necesidad" (Er war von meiner Abhängigkeit abhängig, sagt sie, brauchte dass ich ihn brauchte!) Ese es el sistema nocivo de la obra: mientras espiritualmente dependas de ellos (y mira que los hilos son muy sutiles...) pues bieeeen, mirad que gusto las que se van en buen plan. Pero ya sabes lo que nos pasa a las que nos vamos plantando la cara.
 
Le dices a EBE que no esperas conversion de la obra, sino de sus miembros. Y cuentas de la directora con la que vas a merendar .... en fin!!! En esta pagina se ha escrito mucho sobre este tema. Es el espiritu o son las personas??? Son las personas que viven ese espiritu! Ademas, me has comentado que lo del espiritu que a ti no te iba, pues lo dejabas... O sea que al final eran cosas del espiritu (que siiiii, que tenias tu filosofia para vivirlo...) Esto no queda muy claro en tu escrito pero tampoco intentes aclararlo que ya sabemos -tu y yo- donde terminamos.
 
Y despues cuentas que tu contacto con los sacerdotes, los mails, las cartas con tus amigos hombres... Siempre te gusto poner a prueba los limites, ver hasta donde llegabas.... pero sabes que alli las cosas "se viven" de otra manera.... que tu no??? Nuevamente, doy fe de ello, pero fuiste siempre la excepcion y tuviste la frescura de hacer lo que te daba la reverendisima gana.
 
Bueno, me quedo un poco largo...
 
A ti Pacifica, bienvenida a la pagina y a la vida. Pero ya sabes... aqui cada uno a lo suyo, esta el que es divertido en sus escritos, el sistematico, el que lo analiza, el que nos cuenta "aneldotas", el historiador (y cada vez que pongo "el" me refiero tambien a "la"), el filosofo.... cada uno tiene su sitio. Pero nos debemos el respetuo mutuo, un feroz amor a la verdad y el compromiso personal de ser muy sinceros con nosotros mismos.
 
Heidi Berger




Lo que Odediego dice... y lo que Jesús enseña.- Daniel M

El pasado 19 de marzo de 2007 -día de renovación de los compromisos en la prelatura del Opus Dei- nos dice Odediego:
 
Soy supernumerario del Opus Dei desde hace más de cuarenta años. He sido profesor en un colegio de la Obra más de 25 años y lo único que puedo pensar de los que escribís estas cosas de la Obra, es que sois unos enfermos mentales. Gracias a vuestra enfermedad, el Señor no os tendrá en cuenta las mentiras que decís.
Que Jesús os proporcione un buen psiquiatra. Rezaré para que así sea.
 
Esto es lo que enseñó Jesucristo hace dos mil años:
 
Habéis oido que se dijo a los antiguos: "No matarás", pues quien mate será reo de juicio. Pero yo os digo: Todo el que se encolerice contra su hermano será reo de juicio, y el que llame "estúpido" a su hermano será reo ante el Sanedrín, y el que lo llame "necio", será reo del fuego del infierno. Por tanto, si al presentar tu ofrenda en el altar recuerdas que tu hermano tiene algo contra tí, deja allí tu ofrenda delante del altar, y ve primero a reconciliarte con tu hermano; después vuelve y presenta tu ofrenda. (San Mateo, 5, 21-24). Y también: Bienaventurados los que trabajen por la paz, (o los pacíficos), porque ellos serán llamados hijos de Dios. (San Mateo, 5, 9)
 
En fin, hermano presuntamente supernumerario (y según tus datos de 58 años de edad aproximada), acepta de buen grado mi corrección fraterna -que no he necesitado consultar a ningún director, sólo al único Maestro verdadero, Jesucristo- con mi deseo de que alcances la paz de corazón necesaria para que tu oración sea escuchada por Él (después de haberlo purificado de ese mal pensamiento que nos has expresado). 
 
La Paz de Cristo, en el Reino de Cristo.
 
Daniel_M




Piensalo bien y pregunta sobre cooperadores del opus. Para Córdoba.- Eomer

Hola a todos,

He descubierto esta web hace poco buscando información sobre el Opus porque estoy bastante verde en el tema, que dicho sea de paso, me tiene muy preocupado.

A Córdoba, decirte que lo pienses muy bien. Aún no ha pasado gran cosa entre vosotros y el camino luego puede ser muy duro. Mi consejo egoista es que intentes superarlo y pases pagina, te vas a ahorrar mucho sufrimiento.

Mi novia ha entrado hace poco como cooperadora del Opus, no me gustó nada pero me lo explicó un poco (colaboración económica, circulo,...) y me prometió que no nos afectaría. Aunque creo que ultimamente nos estamos distanciando y se está radicalizando en sus creencias religiosas.

¿Podría alguien explicarme en qué consiste exactamente ser cooboradora? La quiero muchisimo, con todas mis fuerzas, pero tengo momentos de gran infelicidad y no sé hasta cuando podré seguir así.

Muchas gracias por vuestra ayuda,

Eomer





Opus y dinero.- Lucía

Hola, os resumo brevemente unos hechos para ver si alguien me puede dar alguna pista.

Mis padres son unas personas mayores, supernumerarios desde hace la tira de años.  Desde hace medio año, mis padres viven en una residencia y hemos observado como su cuenta da unos bajones realmente sospechosos, sabemos que siempre han dado lo que ellos llaman “aportación”  hasta ahora no nos hemos metido en este tema pero, ahora nuestros padres son nuestra responsabilidad y como sigan así vamos a ser los hijos los que financiemos al opus, a lo cual no estamos dispuestos, este grupito de numerarios/as, visita por una parte a mi madre y por otra a mi padre en la residencia y, con la disculpa de la charla fraternal les dan el sablazo. Sabemos cómo funciona el opus y a lo que están dispuestos pero, ¿sabe alguien si esto es una práctica habitual en el opus con las personas mayores?¿Se puede hacer algo por la via legal para que esto no suceda?.

Hace algunos días le pedimos a mi madre que nos diera su tarjeta porque, era un escándalo el dinero que sacaba pero, de los opusinos me espero cualquier cosa en nombre de sanjosemaría. 

Gracias

Lucía





En nombre de los que no tienen voz. Para Odediego.- Xiqui

Aunque hace mucho tiempo vengo ojeando las paginas de “opuslibros” y sopesando cuidadosamente todos los recuerdos, vivencias personales, hechos que tanta gente variada, de toda condición, manifiesta. Nunca había contestado a ninguna carta en concreto,  ni explicado experiencia personal alguna hasta ahora.

 

Leo con lastima, no con indignación, su muy breve y poco caritativo escrito, tanto que me animo a contestar en nombre de los que no tienen voz, de los que nunca han tenido la oportunidad de manifestar ninguna opinión personal, porque realmente en esa Institución a nadie le ha importado.

 

Y tal como veo, la Institución no es la que contesta asumiendo sus afirmaciones,  es un particular que  expresa una opinión personal, tambien van incluidas sus apreciaciones personales. 

 

Como bien se sabe quien lo ha vivido, todas las personas que en su momento fueron cediendo su voluntad, y todas las posibilidades de realizarse humana y espiritualmente en esta vida  “quemando sus naves” a las directrices de la Obra, abandonándose en las que creían ser  las manos de Dios.

 

No creo que nadie esté capacitado para emitir públicamente el juicio de “mentiroso” o “desequilibrado” al que cuenta una experiencia vivida. Moralmente es inaceptable.

Una realidad que se comenta hasta la saciedad como usted sabe es que Dios es Padre. Ciertamente así es por lo tanto, mucho cuidado, ¿está usted insultando a quien ...?  O... es que hay dos clasesde hijos, los que son como usted y… los enfermos mentales.

 

Yo pertenecí a la Obra durante algunos años, para ello abandoné un novio/a a punto de  boda, fui fiel, hice todo el bien que pude, no he demostrado públicamente ninguna hostilidad ni comentario negativo, entre otras cosas porque en mi familia de sangre nos enseñaron a ser señores.

 

Sin entrar en detalles, le diré que a raíz de la santificación del Fundador se me presentó en casa un numerario/a, con los papeles de Cooperador a la vista, pidiendo en primer lugar cooperación económica .

 

Sabiendo perfectamente quien era, con amor se le recibió, en ánimo de devolver bien por mal .A partir de aquí siguieron las demandas y necesidades. Con una gran paz interior pensaba  ¿Cómo puede ser? Llevan 20 años sin saludarme por la calle.

 

No entraré en calificativos de lo que su articulo me merece, pero creo que si debiera interesarle el concepto que le merecerá a Dios, que en definitiva será lo único importante. Estoy en la certeza de que Dios nos va a premiar y mucho, que hemos pasado por “la noche oscura” , que hemos vivido malamente en una mala posada. Seria muy buena cosa que en lugar de decir, les avalasen a ustedes las obras.

 

¿No le parece a usted que puede colaborar en no hacer mal a otros, añadiendo más pesar a lo ya padecido, en resumen haciendo de buen samaritano, ayudando a los que no saben a curar heridas?  Puesto que conoce y puede desde dentro, tiene moralmente esta obligación.  

 

Deseando que su vida sea un remanso de paz  y de caridad para todos los que le rodean, y que no necesite ningun psiquiatra, dado que no se debe desear para otros lo que no se quiere para sí aprovecho esta oportunidad para saludarlo.     

 

Xiqui





Sobre juicios y realidades. Para Daniel.- Chiara

Hola Daniel! A diferencia de lo que te habìa dicho estoy  aqui por responder a tu correo… mas esta vez fui ayudada por una amiga que conoce la lengua española! Antes de nada gracías por tu correo que aprecié mucho: yo non dudo de tu buena fe!

 

Después, querría replicar por medio de tí a Australopitecus. (Tengo una pena, penita, pena. A los apenados.- Australopitecus- correo publicado lunes 12 marzo) Como había explicado, mi dificultad primaria por comenzar una correspondencia consiste en la lengua. Como puedes ver, para que presente un correo decente debo pedir ayuda a una traductora. Ademas, no pensaba que mi correo habría sido publicado. Antes de lunes tenté ya cuatro o cinco vez a escribír, inutilmente, no se si por los temas o igualmente por la lengua. Y, último, debo confesar que encuentro bastante restrictivo hablar de temas tan importantes, que a mí son también un poco personal, en una web, donde no puedo tener un conocimiento directo con las personas que escriben...



(Leer artículo completo...)




La sanción, en manos de un arzobispo del Opus Dei.- Brian

La sanción, en manos de un arzobispo del Opus Dei

J. G. B. – El País. Madrid - 20/03/2007

La notificación del Vaticano contra Jon Sobrino no incluye sanción alguna, en contra de lo que es habitual en la actuación del ex Santo Oficio de la Inquisición. Se sabe, sin embargo, que llegarán medidas disciplinarias, de la mano del arzobispo de San Salvador, Fernando Sáenz Lacalle. El prelado es un destacado miembro del Opus Dei, poco inclinado, por tanto, a tratar con mimo a los jesuitas. En su inmenso poder ha dejado Roma la decisión.

Jon Sobrino es profesor de la Universidad Centroamericana (UCA) en San Salvador y director de Revista Latinoamericana de Teología. Él mismo da por seguro que perderá esas funciones, de las que lleva apartado meses por seria enfermedad. El principal castigo es la propia notificación. Roma señala por ese procedimiento extraordinario a los teólogos herejes o rebeldes, de los que los fieles deben alejarse. De ese "sufrimiento" habla Sobrino citando a "amigos y familiares", y a su hermana, "muy cercana a monseñor Romero y a los mártires".

Se refiere a los compañeros asesinados por la extrema derecha militar de El Salvador: el obispo Romero, el también vasco Ignacio Ellacuría, otros cuatro jesuitas españoles, un salvadoreño y dos empleadas. De la importancia de la sanción a Sobrino dan fe el eco en los medios de comunicación de todo el mundo y las reacciones de teólogos y facultades de Teología católica, como la de Graz, en Austria. "El padre Sobrino es un ejemplo luminoso para la Iglesia universal", dice su equipo directivo.

En España han expresado su pena e indignación la Asociación de Teólogos Juan XXIII, Somos Iglesia y Cristianismo y Justicia, un centro de pensamiento de los jesuitas de Cataluña, entre otros. Todos han ponderado "el ejemplar estilo de vida" del pensador jesuita. "La reflexión de Sobrino sobre Jesús de Nazaret es una de las más importantes e influyentes en la teología cristiana del siglo XX. Ha iluminado la fe de los creyentes e inspirado su compromiso solidario con los pobres y excluidos", dice la Asociación Juan XXIII después de señalar a Sobrino como un "impresionante testigo de la fe para mucha gente". También ha habido críticas al "procedimiento seguido por el Vaticano, con secretismo, ausencia de diálogo y autoritarismo".





Tú nos muestras otra cara del opus. Para Pacífica.- Noventa y nueve

"Para muestra alcanza un botón...sobra"
 
Para Pacífica,
 
Leí con interés tu correo del 14-03-07. Leí también las respuestas de todos a tí y tus respuestas en alemán... [ya están traducidas al español].
 
Quiero preguntarte: por qué te fuiste del Opus Dei? Debe haber sido muy duro para tí decidirte a eso, con la linda vida de niña mimada que llevabas. O debe ser más duro aún estar fuera ahora y no gozar de tantos pequeños placeres... y más duro aún si por esas "cosillas" que parece que no vivías te dejaron de aguantar porque ya no tenían ellos qué sacarte... aventuro que tu familia es rica  o eres de nobles ancestros... y ya ningún contacto podían sacar de tí? Comparte con nosotros, querida Pacífica. Por qué te fuiste del Opus Dei?
 
Y de paso cuéntanos como te tratan ahora de cooperadora. Y cómo cooperas.
 
Si te has enamorado de un supernumerario y si os casará un cura numerario...conozco casos de niñas como tú: familia aristocrática a quien la obra quiere pescar, y hace lo que sea por llegar a esos ambientes y mantenerse... qué bueno es encontrar gente como tú también en opuslibros: ya que para muestra alcanza con un botón, y sobra para desenmascarar el comportamiento de la secta: te chuparán contactos y dinero hasta donde puedan... o al menos con sus favores te mantendrán tranquila en tu ambiente, que les interesa más que otros... teniéndote siempre en el "lado oscuro", y tal vez hasta mandes a tus hijos a sus colegios y ellos piten... y los directores consientan en que tú les proporciones una vida "libre". LLena de paseos, regalos... o no es cierto que tu madre te llevaba de compras y luego tampoco entregabas esos regalos... así vivían las niñas como tú que yo conocí...
 
Tu no vivías en "otro" opus dei, como dicen aquí... vivías en el mismo que todos hemos vivido. Sólo que tú nos muestras otra de las mil caras del monstruo: te han chupado todo lo que han podido cuando estabas adentro y ahora afuera... pero tú feliz con tu libertad y amor a la obra... realimentas a La Bestia.
 
Y cuando nos hablabas del "mobbing" y "la noche oscura de San Juan de la Cruz" el año pasado...? (21-08-06) Es que te es difícil sobrevivir "fuera" y quieres recuperar lo perdido?, fijate lo felices que los haces al seguir enganchada. Ojalá puedas liberarte de este Gigante que es la obra, que siempre trata de hacerse imprescindible!!
 
qué tengas Paz Pacífica!
 
"La  Noventa y Nueve"




Faltas de concordancia. Para Odediego.- Asunta

Hola don Odediego. Sólo quisiera corregirle su texto cuyo contenido no tenía desperdicio pero que tenía unas cuantas faltas de concordancia. Quizá ahora queda el texto más coherente:

 

Soy supernumerario del Opus Dei desde hace más de cuarenta años. He sido profesor en un colegio de la Obra más de 25 años y lo único que puedo pensar es que somos unos enfermos mentales. Gracias a nuestra enfermedad, el Señor no nos tendrá en cuenta las mentiras que decimos.

Que Jesús nos proporcione un buen psiquiatra. Rezaré para que así sea.

Odediego

 

Pues eso, ¡a rezar para ver claro y decir menos barbaridades!

Asunta





Traducción del correo de Pacífica.- Pablo

Traducción del correo de Pacífica del día 19/03/2007

Nunca hubiera pensado que iba a producir tanto asombro y escándalo con las pocas líneas que escribí a vuelapluma. Tengo claro que mi situación probablemente no sea lo normal. Pero espero que en el futuro cada vez haya más casos de este tipo. ¿Por qué no? Pienso que la mayoría de la gente de la Obra nota claramente que hay algunas cosas que no están bien. No hace falta más que leer el Evangelio para ver que no se puede tratar a los antiguos de la manera que se hace con frecuencia. 

Querido/a Supo: Pues mira, el hecho de no haber dormido sobre tabla en los últimos años se puede deber a que todos los centros en los que he vivido eran o bien residencias de estudiantes, o bien casas de dimensiones tan reducidas que cualquier visita podía entrar en cada una de las habitaciones. Sin embargo, tengo la impresión de que, en mi región, la mayoría de la numerarias duermen sobre colchón blando, sencillamente porque, a causa del estrés de la vida de trabajo, se necesita dormir bien. Me parece que aquí en buena medida ha vencido el sentido común.

Por supuesto que habrá en muchos países un sinnúmero de numerarias y auxiliares que todavía no tienen su propia cuenta. Pero, gracias a Dios, las estructuras en la vida de trabajo y en las cuestiones de seguros han llegado al punto de que a la larga resulta demasiado complicado no tener cuenta propia. Supongo que pertenecerá a la vocación de numeraria que viva en una “comunidad de bienes” y que de hecho no pueda disponer libremente de su dinero. Pero, ¿qué madre o padre de familia puede disponer libremente de la totalidad de su dinero sin ponerse de acuerdo [sc. con la otra persona] en lo más importante? Claro que, por desgracia, hay muchos centros en los que siempre hay dinero para libros nuevos, muebles bonitos y cursos anuales caros pero nunca para una bicicleta nueva que sea realmente buena: eso sí que es una “historia interminable”.

Yo misma quise seguir como cooperadora porque de verdad pienso que la espiritualidad de la Obra, es decir, la vida normal en el mundo, es lo mío, sólo que liberada de algunas manías que se cogen de numeraria. Claro que me he perdido muchas cosas en los últimos años, pero también he aprendido y vivido muchas cosas.

Querida Asunta: Por supuesto que tengo claro que tengo el síndrome de Estocolmo. ¿Para qué si no se estudia psicología, entre otras cosas? Por supuesto que es posible que alguna vez someta a crítica mi actitud ante la Obra o me distancie algo más. Para mí, lo decisivo será, por ejemplo qué espiritualidad tenga mi futuro marido (creo que Dios tiene sentido del humor y me enviará uno muy divertido), es decir, si, por poner un ejemplo, le va más lo carismático o pertenece a algún movimiento. Porque entonces me gustaría irme de curso de retiro etc. con mi marido y no por separado. Por otro lado, no sólo he estudiado pedagogía y psicología sino también historia y sé que un corte radical con el pasado (en plan “punto final y se acabó”/”borrón y cuenta nueva”) sería una grave equivocación. Veinte años de mi vida no son sólo veinte años, sino que son yo misma. Lo mismo que hay matrimonios que se separan en un momento dado pero siguen en contacto e incluso mantienen una amistad, puede haber numerarias que no cortan todos los contactos. Pero igualmente habrá muchos casos en los que las heridas interiores por ambas partes no harían más que ensancharse, si se siguieran viendo todo el rato. Pero, en cualquier caso, hay que perdonar, porque el perdón no es una opción más (más bien inofensiva) que ofrece el Evangelio, sino un mandato. (Pero el poder perdonar no es el resultado de un esfuerzo sino un auténtico regalo de Dios y he tenido que pedírselo durante mucho tiempo.) Claro que a alguno que otro le pondrán mi caso como ejemplo de “buena salida”. Tú escribes: Pero piensa que van hasta a usarte de ejemplo diciéndole a una persona pitable cosas de este estilo: “Pacífica ya no es numeraria, porque cuando ha querido se ha ido, pues ya sabéis que las personas en el Opus Dei son libres… pero es una estupenda cooperadora, siempre estará agradecida a la Obra, pero como Pacífica todos los que se van…. porque los ex que hablan mal de la Obra son sólo unos cuantos, unos locos en mal plan… lo normal es que como Pacífica sigan en contacto…..” Si esto es así –y será así– entonces cualquier exnumeraria de mi ciudad podrá preguntarle directamente a la directora del centro o al Vicario General [nota: Regional]: ¿Por qué tratáis a Pacífica de esta manera? ¿Por qué puede ir al centro y yo no? ¿Por qué la invitáis a excursiones y a mí no? 

Sigues escribiendo: “Antes que nada me pregunto por qué no das al menos tu nombre de pila pues si tienes esa relación tan cordial y relajada con numerarias y supernumerarias que nos explicas en tu escrito, no veo por qué no te identificas.” En el fondo, no tendría ningún problema en dar mi verdadero nombre, pero esto podría crearme problemas en estos tiempos del Google, ya que trabajo de profesora en una escuela pública y los ecos del código Da Vinci no contribuirían a fortalecer mi autoridad en clase. 

Querido/a E.B.E.: Escribes: “Sin conversión, los cambios que pueda haber son un engaño.” Te doy toda la razón, pero, al contrario que tú, he decidido que no voy a esperar esa conversión de toda la institución, sino que veo con agradecimiento la conversión y el cambio de ideas de cada cual. Veo a la directora concreta con la que me voy a merendar y que me invita a la meditación (¡de las numerarias!) en un día de fiesta, sabiendo que eso no está previsto en no sé qué documento interno, pero que seguro que corresponde al (auténtico) espíritu de la Obra. A veces no hace falta decir las cosas explícitamente, expresarlas con palabras, sino que son las acciones las que dejan claro que ha habido un perdón recíproco. 

Querido/a Supo: Paso al tema de mi correspondencia electrónica con amigos y amigas. (Por supuesto que no sé cómo lo han hecho otros, porque no es que tenga precisamente la costumbre de husmear en la correspondencia de mis hermanas o de hacerles preguntas concretas sobre el tema.) A lo mejor siempre he sido un espíritu liberal, pero siempre me he tomado la libertad de escribirme con amigos (género/sexo: masculino) y mi único filtro, es decir, mi única censura ha sido el latir de mi corazón. Si el amigo iba demasiado deprisa y yo notaba que alguien me resultaba definitivamente demasiado simpático (y eso me ocurrió más de una vez), entonces le contestaba brevemente o dejaba de contestarle. Y he de confesar que eso costaba más que dejar todas las cartas sobre la mesa de la directora. Puede ser que en mi región, a causa de nuestra historia nacional, el control del correo personal sea un tema especialmente peliagudo y es probable que todo director que haya hecho algo así, haya tenido una sensación desagradable o bien remordimientos de conciencia. Supongo que mi región debió de ser una de las primeras que eliminó esas prácticas. 

Lo que sé de seguro es que la mayoría de los sacerdotes de mi región, siempre que les parece oportuno, se ponen en contacto con numerarias a través de correo electrónico (a fin de cuentas, no se ven mutuamente, al igual que en el confesionario). Con la cantidad de cambios que hay, apenas sería posible realizar una “pastoral sostenible” a favor de cada vocación individual.

Además, me dio una gran alegría poder visitar a mi confesor, sacerdote numerario de la Prelatura, en el hospital y llevarle un ramo de flores pocos días después de haber recibido la dispensa. 

Me citas: “En los últimos cinco años no me preguntó nadie en la charla fraterna si utilizo el cilicio o las disciplinas, ni hablé yo del tema.” Perdón, pero esto no me lo creo. La mortificación carnal es muy importante y no hablabas de ella. Entonces ¿de qué hablabas?

Tienes razón. Fui una mala numeraria, ya que, de hecho, ese asunto tenía para mí una importancia relativamente escasa, me resultaba molesto y me ha beneficiado más bien poco en mi vidad espiritual (quizás porque tengo una piel de elefante muy poco sensible), así que renuncié a hablar del tema en la charla y, de hecho, sólo utilicé esos cacharros en raras ocasiones. 

Querido Nasius: Escribes: “Si tan importantes cuestiones de la opus están cambiando a un ritmo tan acelerado, en un [!] 2.000 años quizá me plantee volver a ser numerario.” Por desgracia, tienes razón: está cambiando algo pero a velocidad de caracol, de manera que no quise esperar al fin del mundo y pedí la dispensa. De todas maneras, cuando veo el centro de estudios actual, con el que hice mi último curso anual, pienso que el “mundo interno” se ha vuelto más abierto y más normal.

Pacífica




 

Correos Anteriores

Ir a la página principal

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?