Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?

Correspondencia
Inicio
Quiénes somos
Correspondencia
Libros silenciados
Documentos internos del Opus Dei
Tus escritos
Recursos para seguir adelante
La trampa de la vocación
Recortes de prensa
Sobre esta web (FAQs)
Contacta con nosotros si...
Homenaje
Links
Si quieres ayudar económicamente...

Google

en opuslibros

Si quieres ayudar económicamente al sostenimiento de Opuslibros puedes hacerlo desde aquí.


CORRESPONDENCIA

 

Viernes, 09 de Junio de 2006



Los 'informes secretos' sobre personas en el Opus Dei.- Oráculo

LOS “INFORMES SECRETOS”  SOBRE PERSONAS

EN EL OPUS DEI

 

© por ORÁCULO

 

 

1.             Sigo aportando textos que ayuden a comprender mejor la realidad vital e institucional del Opus Dei, que esta web permite ya entrever a través de muchos de sus valiosos testimonios. Una vez descrita la reprobable costumbre de “murmurar” sobre la vida de los fieles de la Prelatura, que institucionalmente asumen los Directores por causa de su oficio y del locuaz silencio que lo caracteriza, deseo presentar algunos textos de la Instrucción para los Directores, donde puede verse el origen de tan detestables “hábitos  institucionales”.  Me refiero a los números 70, 71 y 72, de la mencionada Instrucción, y a las respectivas notas de Álvaro del Portillo sobre esos puntos, que son las notas 97 a 101. Publico los textos como Apéndice, al final de estas líneas de presentación.

Esos textos permiten comprender la práctica en sí misma y la intencionalidad con que fue propuesta en sus orígenes. No obstante, después de varias décadas de funcionamiento, de ese núcleo embrionario ha brotado una gran agencia de información, capaz de “burocratizar” hasta lo más íntimo de las personas —reléase, si no, el informe sobre un Numerario publicado anteayer— y de poner todo al servicio de la institución o, más exacto, al servicio de los proyectos y de las ideas de la nomenclatura que la maneja y la dirige. Por aquí se entiende mejor cuál es el poder del Opus Dei como institución y cómo se concreta de facto la finalidad de su Prelatura.

Al considerar la dirección espiritual como una función propia de gobierno, de un gobierno fuertemente centralizado y piramidal, es fácil deducir que toda la organización funciona como una gran “agencia de inteligencia”. A los Directores les llega toda la información de conciencia de los miembros de la Obra y allegados. Y tales conocimientos, tanto de fuero externo como interno, se materializan en “informes” escritos —aparte la información oral— que son informes secretos, trasmitidos hacia  arriba  en la escala de mando. Y lo peor es que su “veracidad” jamás se discute, como tampoco se aceptará jamás la discusión de sus contenidos —aun infamatorios— según las reglas del derecho. He aquí por qué “eso” es murmuración. ¿Tendremos que añadirle el adjetivo de “santa” para su purificación? Suena casi a blasfemia: desvergüenza indecente, sí que lo es.



(Leer artículo completo...)




Maltratados por el interés en el Opus Dei.- Doserra

Se extraña Miguel Ángel de que la canción “Quiero” no aparezca en el folleto de Canciones de familia del Opus Dei publicado recientemente en esta Web. Esa canción ha sido una de las varias que no llegaron a formar parte del elenco oficial: unas veces por falta de calidad, como imagino que le sucedió a “Yo tengo un primo, podrá pitar”. Pero en el caso de “Quiero” –o también en el de  “Nadie”, que también tenía una letra sustanciosa-, pienso que pudo ser excluida porque su autor no perseverara.

 

En todo caso, esta praxis del Opus Dei, según la cual, como decía Trinity, el que se fue nunca estuvo, responde a una actitud sectaria: sectaria porque rechaza al que no sirve a los intereses de la institución. Y hace mucho daño a las personas que la padecen, pues se sienten maltratadas, como se puede constatar en muchos de los testimonios que aparecen en esta Web. Unos, como el de Paulag, que no ha llegado a ser de la Obra, porque se rebelan al descubrir que se acercan a ellos sólo para captarles. Y otros, como Rocaberti o Maydeth, porque se quedan dolidos al comprobar que son tratados peor que unos apestados en cuanto dejan de pertenecer a la Prelatura.

 

Ésta ha sido otra de las grandes incoherencias del Fundador del Opus Dei, quien permitió en la práctica esta manera de proceder a pesar de haber escrito unos textos tan contrarios que convierten en patológico su incumplimiento sistemático. Veamos lo que dice al respecto en su Carta Quem per annos, de 24 de octubre de 1942, sobre la labor de san Rafael, el apostolado con la juventud:

 

“Aunque deseamos que el Señor promueva muchas y buenas vocaciones, os insisto en que buscamos en primer lugar la mejora espiritual de todas las almas –sin excepción-, que con buena voluntad se acercan a nuestro apostolado.

     Por eso, no dejamos que se marche nadie, por el hecho de que no dé esperanzas de servir para la Obra. Tenemos siempre presente que, aunque sólo algunos recibirán de Dios esta gracia particular, nos interesan todas las almas” (n. 10. Los subrayados son míos).

 

Y lo mismo proclamaba el Prelado actual en la entrevista del 21 de abril pasado en Le Figaro-Magazine cuando aseguraba que “el fin del Opus Dei, como el de la Iglesia, no es aumentar constantemente, sino prolongar la presencia de Cristo en el mundo, servir a las almas, hasta que vuelva Nuestro Señor”. Por eso duele tanto cuando actúan sin esa rectitud de intención que predican, demostrando que sólo les interesas como éxito proselitista y que dejas de importarles cuando ya no les eres útil en ese sentido.

 

¿Por qué utilizan a las personas, en lugar de tratar de ayudarlas de forma desinteresada, que es el signo de la caridad cristiana, según ha recordado Benedicto XVI en su encíclica? No se entiende que hagan estas cosas después de que el Fundador afirmara que la flexibilidad del Derecho peculiar de la Obra permite que siga como Agregado o Supernumerario el Numerario que en conciencia así lo desee, y añadiera:

 

“Hemos de poner todos los medios para que nadie que se acerque a nuestro camino se aparte con recelo o amargura. Y habrá que procurar recuperar a todos, al menos para la amistad personal; ayudarles a llevar una vida cristiana y hacerles colaborar en nuestras obras de apostolado, siempre que sea posible” (Carta Multum usum, 29.IX.1957, n. 33). Los subrayados son míos).

 

No tienen nada de extraño esos enfados planetarios que se producen cuando las personas se sienten maltratadas, utilizadas. El mismo Fundador lo advirtió, aunque en la práctica permitiera su incumplimiento:

 

“Es necesario, pues, no dejarles; que lo que se comenzó, con tan buenos auspicios, con tanta rectitud, se acabe bien. No podemos abandonarles, aunque veamos que no llegarán a tener vocación. Esto podría hacer mucho daño a los interesados, y a la misma labor de San Rafael en general.

    Se quedarían resentidos, amargados; hablarían mal de nosotros –con motivo-, enrarecerían el ambiente y dificultarían la tarea con otros, a los que prevendrían contra la Obra. Mucha visión sobrenatural hemos de tener y mucho espíritu de responsabilidad, para poner con estos jóvenes el mismo o mayor empeño que antes, en mantenerlos unidos al apostolado de San Rafael” (Carta Quem per annos, cit., n. 22. Los subrayados son míos).

 

Es penoso que no se tengan en cuenta estas advertencias. Y, ¡qué torpes! Pues si fueran listos se darían cuenta de que, hasta por una motivación interesada, no les compensa actuar así: eso es pan para hoy y hambre para mañana. Pues esos resultados inmediatos duran muy poco y el campo se queda sembrado de muertos que espantan a los que podrían acercárseles. Como repite tanto Benedicto XVI, hasta por egoísmo compensa actuar rectamente.

 

Saludos cordiales,

 

Doserra



Inscritos ¿especie en extinción?.- Ángel

            Me he encontrado, en medio de un debate sobre los inscritos, citado por Doserra y Antonio María. En mi escrito de 2004, partía del hecho que la figura del numerario había cambiado y señalaba: “El numerario dejó de ser, como decía Escrivá, ‘una inyección intravenosa en el torrente circulatorio de la sociedad’. Ahora pitan para trabajar en las empresas de apostolado y a dedicarse a la formación de los demás fieles de la Prelatura”.

 

En esto hay coincidencia en esta página. El propio Doserra escribía  recientemente sobre “el cambio de la figura del/a Numerari@  que se ha realizado en los Estatutos de 1983 completamente a espaldas de los interesados (…) El/la Numerari@ ya no es la vanguardia del apostolado secular del Opus Dei, sino alguien recluido en los ambientes internos de la institución”.

 

En esta transformación, la diferencia entre el papel del inscrito y el del simple numerario se había diluido aparentemente. De allí, yo concluí que la figura del inscrito había desaparecido, porque ahora “sus funciones han sido asumidas por todos los numerarios, que de esta manera han dejado el mundo, ya que la característica de su vocación es dedicarse de manera primordial a tareas internas”.  

 

Doserra discrepó de mi conclusión y señaló que sí existían los inscritos, aunque reconocía que “esa dedicación ya no constituye aquel status institucional del que no podían ser removidos más que a ‘título de castigo’ (sino…) una mera función de la que no se dice que haya de ser estable ni a tiempo completo”.

 

El hecho es que ambos estábamos equivocados. Es cierto que la figura del inscrito no se recoge formalmente en los Estatutos de 1982. Pero esto no significa que no exista, ni tampoco que sea una mera función, como lo ha aclarado con su conocimiento latino Antonio María. El Oráculo, estoy seguro, podría confirmar que se mantiene el rito de incorporación y demás. Es decir, que nada ha cambiado en relación a lo que señalaba las Constituciones de 1950, sólo se ha tendido un velo.  

 

Lo que ha hecho la prelatura es esconder aún más al inscrito, manteniendo esa referencia críptica en latín a su existencia –puesta de relieve por Antonio María- en los Estatutos, para darle una base o justificación jurídica a la figura. De este modo, no se refleja con toda crudeza, como en el documento de 1950, la verdadera naturaleza del inscrito: una categoría privilegiada de numerarios que establece, además, una distinción entre quienes controlan el poder interno; y  los otros numerarios que obedecen y hacen el trabajo de campo, creyéndose la elite de la Obra.

 

La figura del inscrito está inspirada en la del profeso de los jesuitas. Los profesos son los únicos que realizan el cuarto voto solemne de obediencia al Papa -los inscritos hacen juramentos especiales- y constituyen el núcleo de la Compañía. Los demás grados (novicios, escolásticos formados y coadjutores formados) se consideran preparatorios, o subsidiarios de éste. Los cargos principales sólo pueden ser ocupados por los profesos. Por lo demás no disfrutan privilegios, y muchos puestos de importancia tales como el gobierno de colegios, pueden ser ocupados por jesuitas miembros de los demás grados.

 

El disimulo sobre el inscrito por parte del Opus Dei es explicable, por algunas críticas externas. Por ejemplo, Ricardo de la Cierva, que también fue engañado y pensaba que esta categoría había desaparecido, los calificó como "especie de guardia pretoriana que actuaba como reserva exclusiva para cargos directivos".

 

Pero asimismo, la categoría del inscrito debe resultar incómoda –a poco que reflexione-  para el numerario de a pie; porque significa tener que aceptar que no todos los numerarios son iguales y que existe dentro de ellos, una casta burocrática superior (profesionalizada y de mayor confianza) a la que están reservados algunos cargos, como el de elector, y el sacerdocio. Inscritos que en su condición de directores designan a los nuevos inscritos, retroalimentando su poder de manera endogámica. Un perfecto gobierno oligárquico.

 

Por eso, de los inscritos no se hablaba y de su existencia te enterabas mucho tiempo después de pitar, básicamente al estudiar el catecismo en los Cursos Anuales. Era un tema sobre el que existía una discreción de facto. ¿Alguien se puede imaginar a un numerario preguntándole a otro si era inscrito o tratando de averiguar quienes eran inscritos en su centro?. Corrección fraterna inmediata.

 

Ángel





Da Vinci Code, y Apocalipsis.- Hormiguita

Hola a todos,

De entrada diré que este escrito es de tipo imaginativo o especulativo.

Si yo fuera del opus dei, me preguntaria ¿que lecciones me quiere dar el Espiritu Santo con todo el tema del Da Vinci Code? Sic Flavia y Trinity recientemente plantearon lo mismo.

Posibles respuestas:

a) Apropiarse de Dios. El policia del opus sentencia que "es la voluntad de Dios", justificando ciertas actuaciones suyas.

b) El sigilio sacramental: El prelado rompe el silencio sacramental. ¿Que pintan los curas en los consejos locales? Si en ellos se hablan de las almas y de los temas que ya han salido en confesion. Este hecho ¿no seria suficiente para que un sacerdote se levantase de una reunión del consejo local, se disculpase y se fuese de la reunión?

c) Suntuosidad: reflejado en el jet privado que usa el prelado. Dios no es nada amigo de la suntosidad, ni siquiera disfrazada de "pobreza". Escrivá usaba un mercedes con chofer... nadie lo cuestionaba.

d) Manipular asuntos de la Iglesia para conseguir fines propios. Es el caso del "concilio" de la peli. Actuaciones a espaldas del Papa so pretexto de "servir".

e) En fin, si no entienden que el Espiritu Santo puede estar dando un buen toque, que se lean el Apocalipsis en lo referente a las 7 copas. No arrepintieron de sus obras, pese a las plagas que cayeron sobre ellos.

f) las autolesiones de Silas el monje numerario. ¿lo quiere Dios? Dios dijo "misericordia quiero y no sacrificios".

g) el "monje" numerario. El simbolismo puede ser que que los numerarios ya no estan "en medio del mundo".

Ja ja ja.. las carcajadas del demonio.  

Con este especulativa aportación mia, ruego a todos no se confunda con mis otras aportaciones mas fecundamente investigadas.

Hormiguita





No te hemos condenado. Para Carmen Charo.- M.M.

Querida Carmen Charo:
 
Me dirijo a ti de nuevo para dar respuesta a tu último artículo (publicado el lunes 5 de Junio), sin que esto suponga, creo yo, una intromisión en tu libertad. Tampoco lo fue mi correo anterior (publicado el 29 de mayo).
 
De entrada, suscribo punto por punto la respuesta de Samuel del pasado Miércoles. Ninguno te hemos juzgado, ni mucho menos condenado. No podríamos hacerlo, pues no podemos "leer" las conciencias, esto sólo puede hacerlo Dios. Pero sí que parece que tu alejamiento de la Iglesia se debe a razones que van bastante más allá del rechazo del Vaticano a una denuncia. A mí me da la impresión de que tú nos pides a los católicos, con todo el derecho, que no te juzguemos ni mucho menos te condenemos; pero tú sí te has permitido juzgar duramente a la Iglesia; Veamos: 
 
- En primer lugar, has acusado a la Iglesia de presunción ("todo lo decidimos nosotros que somos los más majos, los más ricos, los más cultos, los privilegiados"...), de prepotencia y de ser "los más explotadores, los más mentirosos y miserables..." (?¿?¿!!!); enfadada sí que estás, de esto no hay duda, aunque no tengas razón en todo esto que dices.
 
- Luego te has referido a la actitud de la Iglesia para con los ex-miembros de la Obra; eso ya lo comenté en su día (en correo enviado el pasado 16 de Abril) y luego has mencionado la presunta (por ti) "inmoralidad en tantas actuaciones en las que priman los intereses diplomáticos ante la Verdad, los lios de dineros, de delitos de todo tipo", referido a la Iglesia.Lo cierto es que, si hay una Institución que no acepta componendas a la hora de enseñar la verdad evangélica, ésa es la Iglesia Católica (aunque haya Obispos más valientes que otros, que todo hay en la viña del Señor); Por eso tiene la Iglesia tantos enemigos. Y tu alusión a los "delitos de todo tipo" y demás "líos"... me parece una afirmación gratuita, injusta y muy grave. La Iglesia está integrada por pecadores, eso enseña Ella misma y, a veces, puede haber clérigos y seglares católicos que hagan barbaridades, no lo niego; pero generalizar de esta manera y sin probar nada... estás siendo muy injusta, Carmen. Hay mucha gente muy buena en la Iglesia y lo sabes.
 
Dados estos terribles juicios tuyos contra la Iglesia, ya has dictado sentencia condenatoria y la pena consiste en tu alejamiento de la Iglesia. Grave decisión, que es a ti a quien más perjudica (perdona que te lo diga), adoptada en función de premisas falsas e injustas. Pues nada, hale. Pero, eso sí, "católicos, no me juzguéis ni me digáis nada..." Estupendo, hombre, esto sí que es comodidad.
 
Entiéndeme, por favor: Ninguno de los católicos preocupados por ti que te estamos respondiendo queremos fastidiarte y nos alegra que estés bien, estoy segura de que los demás suscriben esto que digo. La paz y la alegría no son incompatibles con la fe católica, todo lo contrario, pues el amor, al que también aludes, es mandamiento sagrado para nosotros. No estamos afectados por ningún "estigma de muerte opusino" (¡Si yo nunca he sido del Opus!), ni te consideramos "endemoniada", nadie ha dicho nada de eso. Tampoco queremos que sufras. Pero añado que la salvación de tu alma y de las almas de todos sí supuso sufrimientos brutales a Nuestro Señor Jesucristo, por lo que no pasa nada porque nos sacrifiquemos un poco nosotros mismos por nuestra salvación (hay gente que se sacrifica mucho por estar más delgada, o por ganar más dinero, o por muchas otras cosas mucho menos importantes que esto). Esto es doctrina católica, con Opus o sin Opus.
 
En fin, Carmen, ¿Qué más te voy a decir..? Necesitamos a la Iglesia para estar con Jesús, así lo quiso Él. Jesús se lo merece, no te creas que te he escrito pensando sólo en ti; también pienso en los intereses de Cristo, que nos ama y quiere tenernos en la Iglesia. Tiene derecho a ello, pues nos compró "a gran precio", como enseña San Pablo, quien, por razones obvias, no fue del Opus, tranquila.
 
Un fuerte abrazo.
 
M.M.




Para Carmen Charo.- Cooper

Carmen Charo,

Tu no tienes que justificar tu vida ante nadie, menos aun ante nosotros que estamos cerca de ti. Mucho defender la libertad y hay quien se ahoga con pasos dados en su nombre

Un abrazo

Con cariño

Cooper





Qué pereza me das, Samuel.- Carmen Charo

Samuel, majo!
¡Pero qué pereza me das! ¡No te queda nada, cielo!
Y como tú, en el buen cinismo aprendido en tu querida madre la opus, tiras a dar, no te voy a responder. Lo hará la vida si tienes buena fe, y si no, pues tu mismo....
Si buscas de buena fe aqui me vas a encontrar siempre con los brazos abiertos. Pero, si vas a sermonear desde tu púlpito de soberbia, pues .... ¡hasta la otra vida!, aunque como yo estaré en el infierno, pues me temo que tampoco coincidiremos.
¡Que la vida te vaya bonita!
Un sincero abrazo
 
Carmen Charo Pérez de San Román




Silencios en libros silenciados.- Salvador

Estimados orejas:

El otro dia, comentando sobre personajes significativos de la historia de la Obra, entre otros, Gregorio Ortega Pardo, remití a mis interlocutores chateros al libro de Jesus Ynfante "la prodigiosa aventura del Opus Dei..." (1970) informándoles que "está publicado en la web".

Pero no es exacto. Consultada la web, constaté que lo publicado no era completo, ya que faltan cuadros, pies de páginas; y, además, tal como anunciais, no publicais 5 de los 9 capítulos del libro, ni 4 de sus 5 anexos, arguyendo que en un nuevo libro de Ynfante los actualiza (referencia a la problemática de los derechos de autor).

No he leido el nuevo libro de Ynfante; pero pienso que, en el caso que no haya actualizado el subcapítulo "el desgaste interno del aparato" (págs. 352 a 362), al menos, deberías reproducir el impagable, periodisticamente hablando, reportaje de "Iñaki Goitia" escrito para "cuadernos de Ruedo Ibérico", y que en dicho subcapítulo se transcibe parcialmente, en el que se narra la historia de Gregorio Ortega Pardo; "nuestro hombre en Portugal", como lo calificaba Antonio Perez-Tenessa, el que fue segundo consiliario en España y secretario general, recientemente fallecido.

La historia, salvo algunos adornos, carencias e inexactitudes es cierta.

Asimismo, para aquellos interesados en nombres, datos y empresas, también agradecerían que publicaseis el último anexo del libro, la famosa "lista", que aunque con muchos errores -Ynfante escribía de oido aunque se autocualifique de periodista de investigación- tiene su interés histórico.

Muy cordialmente

Salvador

Nota de la web. El libro que citas de Jesús Ynfante, cierto es, no está colocado íntegramente. Cuando comenzamos la web, ese libro se podía leer completo en otra página, así que hicimos un link. Pero esa página dejó de funcionar y recuperamos sólo algunos capítulos. El capítulo que citas sobre Gregorio Pardo, lo incluyó Ynfante en otro libro, "La cara oculta del Vaticano" y de ese libro, sí que publicamos ese capítulo. Tenemos también en la web el libro más reciente de Ynfante, "El santo fundador del Opus Dei".





Sobre Ruiz Mateos.- Supo

Alguien pregunta desde México si Ruiz Mateos ya no es del Opus Dei. Contaré lo que recuerdo.

Durante el escándalo que se generó por la polémica de la expropiación, a los numerarios de España nos llegó una carta que se nos leyó con todo detenimiento. En ella se contaba lo que había pasado, lo que supuestamente había hecho y pensado y José María Ruiz Mateos y las amonestaciones que había tenido por parte de los directores. Además se dijo que le habían echado por confundir las cosas. Sí, Ruiz Mateos desde hace unos 20 años no es del Opus.

Supo





Ruíz Mateos y el Opus Dei.- Rocaberti

Hola a todos:

Una aclaración sobre la permanencia de Ruiz  Mateos en el Opus Dei:

Hace muchos años, cuando se  produjo el enfrentamiento entre socios de la Obra, gente importante en el mundo de las finanzas y algún Director de Comisión, y Ruíz Mateos, pues él creyó que le habían traicionado, la alta jerarquía de la Obra, capitaneados por Don Álvaro, quien era el padre, se pusieron  en contra de Ruiz Mateos  Recuerdo que .apareció un artículo en Crónica, en  el que se hablaba de la necesidad de que los  negocios estuvieran de acuerdo a la moral. Pensé: alguna se prepara para el  tema Rumasa.    En el Cículo Breve del mes siguiente de leyó una nota de los directores, en la que se informaba de la petición a Ruiz Mateos para que cambiara su actitud, y de no hacerlo se le daba el primer aviso, y al segundo sería expulsado de la  Obra, y esto fue lo que ocurrió.  Él siempre comentó que si hubiera vivido el Fundador las cosas hubieran sido distintas. No lo sé, pero había mucho follón económico, ya que se habían transferido cantidades importantes al exterior. Si no recuerdo mal una financiera holandesa manejada por el Opus devolvió muchos millones para evitar problemas.

Esta es la información que recuerdo, desconozco por qué ahora da tanto dinero a los Legionarios, tal vez sea para fastidiar al Opus o  comprarse un pisito en  el cielo, en donde parece que no hay problemas  de edificación.

Un saludo.

Rocabertí





Nuevo en esta página.- Chopo

Estimados amigos,
 
Hace más de 20 años que deje el Opusdei. Nunca estuve del todo seguro, más bien al contrario, de que eso fuera para siempre. Soy, como muchos otros "blandos" un 14,5. Estoy tan lejos del Opus, aunque sigo cerca de la Iglesia (creo que más cerca que en el engaño opusino), que ni sabía de la existencia de esta página. La  malísima novela de "El código"  y su repercusión me ha hecho descubrirla. He leido muchos comentarios de mucha y variada gente, que confirma, en casi todos los casos mis impresiones. Han pasado tantos años que tenía olvidado hasta la jerga esa de delegaciones, consejos locales, etc.
 
En fin, que un escrito recién leido me dice que hay que animar, en serio, a dejarlo a los que quieren. Que es mejor antes que después. Yo estuve 8 años y me sobraron... iba a decir los 8, pero diré que me lo planteé a los 6, que es cuando tenía que haberme ido. Me sobraron dos, y encima me dieron cargos. Fue horrible. Así que, porque nos da la gana, animaremos a irse a los dudosos. Yo por lo menos.
 
Un abrazo a todos. Qué bien que nos fuimos.
Chopo




¿Que se hizo con nuestras cartas pidiendo la admisión?.- Ildefonso

Ahora, después de haber metido la pata con la propaganda en contra del Código Da Vinci, la sacan pretendiendo abrir sus puertas de par en par.
 
Y yo me pregunto. ¿Sabe alguien qué se hizo de nuestras cartas al Padre solicitando nuestro ingreso en el Opus Dei? Quizás no fuera mala idea una forma conjunta de solicitud.
 
Es tan solo una idea, pero ahí queda, a ver si sirve para algo.
 
Saludos y gracias por mantener la Web
 
Ildefonso




La niña de 'El exorcista', un angelito al lado de estos.- Brian

He leído varias veces el informe sobre un numerario que se publicó el miércoles pasado. Es muy fuerte que todos esos datos hayan sido conseguidos a través de la dirección espiritual y aunque ya se sabe que es práctica habitual del opus, no por eso, al verlo escrito, deja de llamar la atención que se puedan hacer este tipo de cosas en una institución que se dice católica y cristiana.

Que no olviden los que están dentro, que cada uno tiene su informe, al que se le van añadiendo datos nuevos. Tampoco deberíamos olvidar los que estamos fuera que cada uno seguimos teniendo nuestro informe correspondiente y que no se ha destruido por habernos ido.

Volviendo al informe colocado el miércoles, quiero plantear unas preguntas a la prelatura porque es bien sabido que nos leen.

Dice el informe en el "anejo" (el resaltado es mío):

2. Al final del verano comenzó a replantearse problemas de perseverancia. No fue sincero: en la charla fraterna sólo manifestó su deseo de volver a [su ciudad] para reincorporarse al mundo laboral, un poco cansado del ritmo de trabajo de [interno…] y de lo arduo de la labor del club.

Si no fue sincero porque en la charla fraterna sólo manifestó... 

Pregunta 1: ¿Cómo sabéis que no fue sincero?

Pregunta 2: ¿Dónde fue sincero para comparar lo que había dicho en la charla fraterna y deducir que mintió?

Pregunta 3: ¿Comparastéis lo que había dicho en la charla fraterna con lo que había dicho en el sacramento de la penitencia?

Pregunta 4: ¿Mintió Escrivá cuando dijo que se fiaba más de un hijo suyo que de mil notarios?

Pregunta 5: ¿Se refería Escrivá a que de quien se fiaba era del sacerdote de la obra sobre lo que había oído en confesión y comunicaba a los directores?

Pregunta 6: ¿No se os cae la cara de vergüenza?

Brian





Para Samuel.- Bastián

 
Cuando no se tienen razones ni argumentos, como es tu caso, se acude a lo que haces tú: acusar de no ser dialogante. MIra a ver si te lees con detenimiento las aportaciones a esta web de Oráculo, escriBa y otros auténticamente enterados, quienes, con mejor talante y mucho más talento que yo han dejado las cosas bastante claras. Pero tú eres de los convencidos, es probable que seas cura, miembro de un consejo local, de una delegación o de qué sé yo que covachuela del pus, hasta donde no llega el aire libre, la información. Tú, sigue así, encerrado en el buen espíritu.O, en fin, haz poesías, pero no odas.
 
Bastián.




Acerca de la obediencia de los laicos en el Opus Dei.- Sergio

En el Código de Derecho Canónico:

296 Mediante acuerdos establecidos con la prelatura, los laicos pueden dedicarse a las obras apostólicas de la prelatura personal; pero han de determinarse adecuadamente en los estatutos el modo de esta cooperación orgánica y los principales deberes y derechos anejos a ella.

 

En los Estatutos:

125. §2. El poder de gobierno del que goza el Prelado es pleno en el fuero externo e interno de los sacerdotes incardinados en la Prelatura; pero, en los laicos incorporados a la Prelatura, este poder es tan sólo lo que atañe al fin peculiar de esta Prelatura.

 

En el Catecismo del Opus Dei:

313. -¿Qué jurisdicción tiene el Padre en toda la Prelatura?

El Padre tiene en toda la Prelatura potestad ordinaria de jurisdicción, tanto en el fuero externo como en el interno.

 

Recordemos que sólo los dos primeros documentos son conocidos por la Iglesia.

 

Sergio




 

Correos Anteriores

Ir a la correspondencia del día

Ir a la página principal

 

Gracias a Dios, ¡nos fuimos!
Opus Dei: ¿un CAMINO a ninguna parte?