CORRESPONDENCIA

Lunes, 24 de Julio de 2006

La deformación de la figura del sacerdote en el Opus Dei 

Autor: Doserra

Imagen: Thomas Eakins, "Archibishop William Henry Elder"

Sumario: 1. Una adquisición convulsa. 2. El sacerdocio como accidente de la vocación al Opus Dei. 3. Desacralización de la vocación al sacerdocio. 4. Una mera cuestión de selección de personal. 5. Criterios de selección. 6. Sacerdotes por obediencia humana.

Uno de los grandes aciertos del estudio de Marcus Tank sobre el trabajo fundacional de José María Escrivá ha sido, a mi juicio, mostrar la relación que existe entre los traumas que marcaron su personalidad, y las contradicciones en que incurrió a la hora de plasmar en concreciones prácticas la espiritualidad de la Obra. El Fundador comentaba algunas veces que en su actuación fundacional había procurado dejarse llevar por Dios, que le decía: Pon esto aquí o allá, haz esto o lo otro. Pero, en otras ocasiones, reconocía que había sido un “instrumento inepto y sordo” (Instrucción, 19.III.1934, n. 7): sordo para entender las inspiraciones divinas, e inepto para traducirlas en normas concretas que no traicionaran el carisma recibido...

Hoy estaba consultando la correspondencia publicada aquí y no tengo grandes motivos para escribir pero...  ¿por qué no hacerlo?, me doy cuenta que ya hace mas de tres años y medio que deje de ser agregado, la dispensa llego mucho mas tarde, pero este tramite "burocrático" me importaba bien poco.

Medio año antes, un director de la delegación me hizo ver que llevaba mas tiempo de mi vida siendo agregado que sin serlo. La mitad de mi vida!!!!!!!!!!, mas de veinte años !!!!!  Ahora ya estoy sumando mas años "sin" serlo.

Viene a mi memoria un comentario de un "hermano mío" cuando dije que no "perseveraba", me sentenció, "Ducados...  no sé de nadie que haya dejado de ser de "casa" y sea feliz.....".

La verdad es que una decisión así (después de 20 años) es dura, se pasa mal, pero os aseguro que VALE LA PENA!!!! Vale la Pena ser valiente y dar el paso. Ahora mi vida transcurre con los problemas, éxitos, luchas, penas y alegrías como cualquier mortal, pero sobretodo mi vida transcurre muy FELIZ!!!!!!!!!!!!! Y gran parte de esta felicidad se la debo a mi pareja. Quiero resaltar la importancia de encontrar una persona a quien poder dar todo el amor del corazón, en mi caso esta persona apareció y no me canso de repetir que ahora soy la persona mas Felizzzzz del mundo a su lado.

Deseo animar a quien pueda leer esto y le falte un empujoncito, que Vale la Pena dar el paso, que seguro será mas Feliz que nunca (con pareja o sin ella, con muchos amigos o con pocos, con la familia de sangre o sin ella). Tengo el convencimiento de que Dios recompensa a los que hemos pasado por esto con una mayor felicidad,

Ducados

Durante untiempo llevé la charla de un super con el que hice bastante amistad de manera que en muchas ocasiones él no hacía la charla conmigo, sino que la hacía yo con él.

Tras mi marcha, nuestra amistad (cosas de la vida) se fortaleció, no sin grandes dificultades y presiones.

Hace poco me escribía desesperado. No puede más. Las presiones son cada vez mayores. Intentan que sus hijos piten como sea y, lo peor, es que no puede irse: trabaja para ellos. Si se marcha no tiene ningún recurso para sacar a su numerosa prole adelante.

Cada vez que releo su carta me despiertan los viejos fantasmas. Las cosas siguen igual, las mismas frases, las mismas actitudes... Que si falta de enrega, falta grave de amor, dar mal ambiente, no compensa...

Lo que más siento es que no sé cómo ayudarle

Ancasti

Querid@s tod@s:

El 14 de julio Haenobarbo nos invitaba a contrastar pareceres en lo referente al estatus jurídico de las prelaturas personales:

Ya he visto en esta misma web, la opinión que les merece a algunos los canonistas del Opus Dei que tratan este tema [= la figura jurídica de las prelaturas personales], pero me parece que en una discusión de altura, lo razonable sería leer las dos versiones, para poder comparar los argumentos, las bases científicas, el apoyo histórico, que de cada bando pueden aportar.

En este escrito y los que sigan, intentaré cumplir con lo que pide y para ello me serviré de un discurso pronunciado por el Prelado del Opus Dei, Javier Echevarría, en el Simposio Internacional de Derecho Canónico de la Universidad Católica "Peter Pázmány" (Budapest, 07.02.2005) con el título "El ejercicio de la potestad de gobierno en las prelaturas personales", publicado en el último número de Romana (n° 40 de enero-junio 2005, pp. 87ss y versión internet http://es.romana.org/). Antes de entrar en materia, quisiera realizar algunas puntualizaciones.

I. Preliminares

1. Haenobarbo se pregunta lo siguiente:

He tratado de encontrar infructuosamente un documento que sería clave en la dilucidación del tema [= la figura jurídica de las prelaturas personales] y que me sorprende que no exista: la interpretación auténtica de los cánones del Código y de los textos legislativos que se refieren a la figura de las prelaturas personales. ¿Alguien sabe si la Pontificia Comisión para la Interpretación Auténtica de los Textos Legislativos, se ha pronunciado sobre el asunto?

Que yo sepa, el Pontificio Consejo para los Textos Legislativos no se ha pronunciado sobre el tema, a pesar de que su presidente sea el [numerario] cardenal Julián Herranz. Se me ocurren cuatro motivos:

Después de llevar un tiempo viviendo como una persona liberada de la influencia  y presión ejercidas por el opus me doy cuenta que una baza que utiliza el opus en la formación que imparte es darle una importancia grande, casi definiría como desmesurada, a la voluntad.

Cuando alguien empieza a cuestionarse ideas y formas de hacer del opus el director correspondiente suele dar la explicación oportuna y si ésta no convence la respuesta suele ser del tipo: " no te preocupes tú haz tal o cual y ya lo entenderás"

A base de actuar sin entender lo que uno hace se acaba por relegar la inteligencia a un segundo plano. Porque con la coletilla de entregar la inteligencia se pretende que uno actúe entendiendo o sin entender por lo que la voluntad pasa a ser el motor que hace que la persona funcione  y aunque suene fuerte  la persona se acaba robotizando.

Por honestidad y dignidad propias nadie debería quedarse sin su propia inteligencia porque nos podemos equivocar o acertar pero eso nos va madurando como personas si son otros los que piensan por nosotros acabaremos siendo marionetas en  manos de otros, en este caso del opus.

En el opus se pretende un perfeccionismo enfermizo, "no equivocarse" es un argumento válido para ellos ¿por qué ese miedo al error? Me viene a la cabeza aquello de "si obedeces no te equivocarás nunca".

Así veo yo a las personas del opus como marionetas en manos de los directores, marionetas en general con buena voluntad pero que se han negado a escuchar a otros que no sean  las manos que mueven sus hilos. Los que nos marchamos del opus también fuimos marionetas durante más o menos tiempo según el caso, pero gracias a Dios cortamos los hilos que nos manejaban y empezamos a andar por la vida con criterios propios y no impuestos  sin que la voluntad sea el motor de nuestra existencia porque ese motor hace a la persona rígida y provoca la ruptura interior que desborda al exterior, de ahí tanta enfermedad psiquiátrica en la gente del opus.

Durante los meses de verano muchos numerarios, agregados y supernumerarios hacen su curso anual, algunos llegarán "en crisis" y estos días de convivencia se los plantean como una oportunidad para aclararse. Los argumentos que se darán en las charlas, meditaciones... serán los de siempre, argumentos muchas veces carentes de toda razón y sentido común  en donde se apelará a un voluntarismo dañino para las persona. Frases como "vamos a volver a empezar" o  "vamos a intentarlo de nuevo" hacen que la voluntad tome el protagonismo de nuevo, imaginando la persona que sus inquietudes desaparecerán cuando en realidad lo que ocurre es que después de esos días de vivir en una burbuja donde todo lo que se respira es aire opus pues uno vuelve a tener las mismas dudas cuando el impulso del curso anual se va desvaneciendo por comparación entre lo vivido en esos días  y la vida habitual.

Ojalá escucharan esas personas lo que les dice su razón, su inteligencia y su corazón para descubrir su vida en libertad.

Saludos,

Mabel         

En Argentina, de donde yo soy, existe desde hace algunos años, no recuerdo exactamente cuantos, mas de 10, la costumbre de saludarse entre amigos hombres con un beso en la mejilla. Vamos, no es darle un piquito al otro sino simplemente en un pseudos abrazo apollar mejilla con mejilla y hacer un chuick. Digamos que el beso se lo da al aire pero bueno, es un beso.  Asi saludo yo a mi padre, a mis 3 hermanos y a la banda de forajidos que se dicen mis amigos y es, en mi pais, totalmente natural, es mas hoy dia es hasta un bicho raro quien saluda a un amigo dandole la mano. No se como haran los de la obra en estos dias, sé que en los centros se dan la mano pero no sé como haran en la calle, sobre todo los que estan en edad escolar o en la universidad.

Para los no argentinos escandalizados (hace 4 años vivo fuera de mi pais y me ha pasado varias veces que al visitarme amigos o al reunirme con amigos connacionales en presencia de locales estos nos miren con extrañeza) esto no comporta sigo alguno de homosexualidad. Y no tengo nada contra los homosexuales, tengo un hermano homosexual a quien amo con toda el alma igual que al resto de mi familia, la que siempre fue y sera mi verdadera familia, vamos, los respeto mucho porque son personas igual y en muchos casos mejores que yo aunque a mi me gusten las mujeres y a ellos no. Que para mi solo importa si sos buen tipo o no, el resto, si sos alto, bajo, flaco, gordo, lindo o feo, homo o heterosexual es un accesorio, como si te gustan los coches deportivos o las 4x4, puedo coincidir o no pero no es mi asunto, no define a una persona.

Bueno el caso es que recuerdo que en un curso anual coincidi con un un numerario de otra provincia con quien habiamos coincidido en cursos anuales previos y a quien tenia mucho aprecio, nos llevabamos muy bien. Pues nos alegro reencontrarnos y los dos sentimos sincera alegria de volver a vernos y con total naturalidad nos saludamos de este modo que he explicado. Y vuelvo y aclaro, no porque nos gustasemos, sino porque era y sigue siendo el modo corriente de saludar a un amigo. Aunque reconozco que en aquel entonces era una costumbre mas o menos reciente.

De mas está decir que nos cayeron sendas correcciones fraternas por el modo tan impudico de saludarnos y en la charla y en la confesion, a ambos pues lo corroboramos mutuamente, nos machacaron una y otra vez si no teniamos tendencias homosexuales, si no nos gustaba el otro y tal. Fue tal la persecuta con el tema que no sabiendo como decirle ya al number con el que yo hacia la charla que no pasaba nada le dije “mira, ya no se como decirtelo asi es que si te parece que no hay otra forma me conseguis una revista porno y vas a ver como mi cuerpo te dice sin lugar a dudas lo que yo ya te he dicho y no me queres creer (el que tenga oidos para oir, que oiga, la conversación fue en otros terminos mas groseros pero creo que queda claro lo que quise decir). Su respuesta me saco de quicio “eso no prueba nada, podrias ser bisexual”. Pero yo no me bajo del caballo ni a palos y le dije algo asi como, perfecto, asi como hay revistas de chicas debe haber de chicos, te conseguis una de cada una y que la naturaleza haga lo suyo cuando corresponda, contento?

Se me prohibio saludar con beso a hombres y nunca volvi a coincidir con este tipo, no sé que habra sido de el pues yo me fui del opus ese mismo año. Yo pase a ser el bicho raro entre mis amigos, que los tenia de veras porque gracias s Dios nunca ejercite la utilitariedad de la amistad, pero bueno al poco tiempo me converti en un ser normal y hoy puedo saludar con un beso y un abrazo a mis amigos sin que nadie me diga que esta mal.

Y digo hoy porque los tatuajes, como dice Satur, los tatuajes quedan y me costo tiempo adaptarme, supongo que como a todos, a mi nueva vida de “civil”.

Y hablando de tatuajes hace poco hablaba con mi mejor amigo antes, durante y luego de mi estancia en el opus. El sin querer me dio el empujon para pitar y sin querer tambien me dio el empujon que me faltaba para salir cuando vi la falta de caridad hacia él, que se habia ido poco antes que yo. Pero eso es tema de otro escrito. Decia que hablabamos, después de mas de 10 años de no tocar el tema, de estos tatuajes. Y eso es para mi lo realmente grave del paso por el opus, las marcas de estupidez que lleva años de cirugía mayor (casualmente el es cirujano) eliminar. Yo tengo un tatuaje en la piel y porque me dio la gana y cuando decidi hacermelo estaba plenamente conciende de las implicancias de lo que hacia. Me acompañara hasta mi tumba porque yo decidi que asi fuera, pero tengo tantos otros en el alma que no pedi... Pero aquí estamos, mi amigo descollando en su profesion, felizmente casado y yo en camino de y agradecidos a nuestras mujeres que de a poco nos van ayudando a remover con mucho amor y paciencia estos tatuajes. Y él, que ni siquiera sabe de la existencia de opuslibros, me dijo “gracias a Dios que nos fuimos”.

Saludos,

Emanuel

Permitidme que hoy cuente algo que me sucedió a mis 19, estudiaba COU (el curso preuniversitario que hacíamos en España. Ahora ya ha cambiado la cosa).

Pues bien, Juan Pablito II visitó en el mes de mayo Fátima y, desde la ciudad donde yo vivía en aquella época, se organizó el típico viaje para jalear a Su Santidad así que, como siempre, todos como locos a llenar el bus invitando a todos nuestros amigos, con toda la "santa coacción" (Qué desfachatez hablar así) de que fuéramos capaces.

Invité a un amigo mío (el destino quiso que, como tantos otros, aquella amistad no perdurase puesto que allí no se tienen amigos, sino personas a las que se instrumentaliza), el pobrecillo acababa de perder a su padre (debo decir también que fue mi primera experiencia con alguien próximo que pierde a un ser querido) y lógicamente estaba "hecho polvo". Bueno, le convenzo y tal, "te hará mucho bien, te ayudará en este trance, patatín y patatán". Le acompaño a hacer los trámites( necesitaba permiso materno para salir del país) y, dos días antes, me comunica el impresentable del director que yo no puedo ir a Lisboa porque tengo que estudiar ya que se aproximaba el fin de curso y, ciertamente, nunca fui un estudiante fetén (otro motivo por el que se me quitó de enmedio, supongo) pero hablamos de un viaje de un fin de semana un mes antes de acabar el curso, en fin, aceptado.

Y ahora viene lo "divertido": yo, con un cabreo descomunal, me encaro con el director y le comento que debo decirle a mi amigo la verdad y el motivo por el que no voy a Lisboa. Respuesta absolutamente amenazadora y pidiéndome que mintiera. Era algo así:
"Mira a este tío le va ir muy bien ir a ver al Papa. Dile que has hablado con tus padres (ellos hubieran estado encantados de que fuera a ver a Wojtyla. Además vivían a unos 700 km) y que te prohíben ir a Lisboa porque tienes que estudiar. Si no le dices esto y él no va a este viaje, serás el único responsable y Dios te lo tendrá en cuenta"

Así le dije y mi amigo fue, solito, triste, aguantando las sandeces, las canciones y toda la parafernalia que le hicieron vivir quienes, para él, eran completamente extraños"

¿Esta es la voluntad de Dios que nos llegaba a través de los directores?

En este caso hablo de una persona con graves problemas de comunicación, de esas que ni se le entiende cuando hablan.

Amandus

Hola a todos:

La pregunta de este encabezamiento es la que en estos días ha motiviado un debate más intenso, sobre todo a partir de la intervención de Valenzuela, uno de cuyos hijos se ha ido del Opus Dei. Para mí el asunto es así:

En primer lugar, pienso que muchos supernumerarios no se enteran de casi nada (lo tengo corroborado por algunos ex supernumerarios, que ellos mismos aseguran que no se enteraban de casi nada). Para muchos supernumerarios, ser del Opus es la única forma de ser católico, es más el Opus se identica con la "verdadera" Iglesia y simplemente aceptan a las monjas de clausura o a los religiosos que lleven siempre hábito. Entonces lo que han encontrado en el Opus es una forma de defender su manera de ver la Iglesia: un poco cerrada y pensando que el Vaticano II trajo grandes problemas.

En segundo lugar, es probable que la propia madre no quiera "enterarse" de lo que ha pasado, porque si no, quizá tendría que replantearse algo. De todas formas, me imagino que cuando un numerario se marcha, su madre supernumeraria se enterará enseguida, antes incluso de que se lo pueda decir el hijo como considere más oportuno.

En tercer lugar, recordando el principio de que para un hijo una madre siempre será una madre, nos encontramos con el problema de que mucha veces no es fácil abrir nuestro corazón a nuestra madre pues sabemos que ellas quizá no lo entiendan. Más o menos sería algo así como: si tu madre te dijo desde pequeñito que San Josemaría era impresionante, si siempre que te veía confesarte con el cura de la parroquía te decía que era mejor hacerlo en el club porque así podías llevar dirección espiritual, si cuando un domingo no comulgabas te preguntaba por qué no habías ido a comulgar... en fin que cada uno añada más elementos. Si se dan estos supuestos... cómo va a llegar uno a decirle a su madre. Mira, mamá, el director me engañaba, me han mentido en cosas supervulgares, me prohibían esto o lo otro, no me parece que seamos gente corriente (por lo menos los supernumerarios son un poco más corrientes que los numerarios). Como le va a decir uno a su madre, que ella también ha contribuido al engaño en que se ha visto sumergido. Haciendo un paralelismo salvaje: uno no le dice a su madre que se ha metido el "dedo en la nariz", o que está engañando a su esposa porque esta es una petarda. 

En cuarto lugar, una madre supernumeraria quizá se plantee el tema con el dilema: mi hijo-mis creencias. Y en ese caso todos sabemos que lo que prima en el Opus son "mis creencias". Por ejemplo, y ha habido nuevos testimonios de ello: en la manipulación de la amsitad. Soy amigo de la gente para llevarla a Dios, pero si alguien ya no quiere ir a Dios... quizá lo dejemos porque con él no podemos hablar de Dios como nosotros queremos hablar de Dios.

Tampoco es fácil que uno hable con sus hermanos o hermanas numerarias cuando se ha ido. No tienen por qué hacerle el vacío, pero para evitar problemas (y mantener la paz familiar en las pocas reuniones en las que todos se puedan ver juntos) uno prefiere no andar polemizando y recuerda aquello de que más es lo que nos une (el Amor) que lo que nos distancia (al fin y al cabo una prelatura).

Recuerdo que uno de los momentos más impresionante de mi vida fue el siguiente: mi mejor amigo y yo habíamos hecho el centro de estudios juntos. Al acabar el segundo año, cada uno a un centro diferente y como hacíamos carreras distintas (y porque no hay que cultivar la amistad particular, con excepción hecha del director) le perdí la pista. En ese tercer año de carrera, los dos nos marchamos sin que el otro lo supiera. Por mi parte, no quería defraudar a alguien que había llevado a la Obra, por la suya no lo sé. Pero nos encontamos un día por la calle en otra ciudad y me dijo: "Mira, te voy a decir esto porque eres mi amigo". Recuerdo que él no sabía que yo me había marchado y que yo no sabía que se había marchado. "He dejado de ser numerario". Allí mismo yo le contesté que yo también. Una de las cosas más bonitas de escuchar de este amigo fue que yo era su amigo, aunque él pensara en ese momento que yo era numerario, pero él me quería como amigos que habíamos sido antes. Esa es la verdadera amistad.

La instrumentalización de la amistad es uno tema que llevo fatal y el proselitismo por el proselitismo también. Hay que acercar las personas a Dios, no al Opus por encima de todo.

Por cierto, ¿alguien puede decirme si el ex ministro de Defensa, Trillo, ha pecado por mandar las tropas a Irak en una guerra rechazada por el Vaticano?

Supo

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