A todos los lectores y colaboradores de Opuslibros os deseo una feliz Navidad. En especial a Agustina.

A los miembros del Opus Dei que nos leen lógicamente también les deseo mucha paz interior y felicidad en estas fechas. Y les pido que, en la medida de sus posibilidades, a título individual, contribuyan con valentía a la mejora del Opus Dei, comentando con sinceridad en sus charlas y a sus directores todo aquello que vean que se puede mejorar. Algunas pequeñas sugerencias: 1) pedir perdón públicamente por el mal causado; 2) resarcir moral y económicamente a aquellas personas a quienes no se les haya retribuido salarialmente y por quienes no se ha cotizado y que muchas se quedarán sin pensión de retiro; 3) fomentar la amistad sincera y no instrumentalizarla; 4) apertura de corazón a todos aquellos que nos fuimos incluidos los que puedan estar resentidos.

No estaría de más que el Prelado en algunas de sus cartas abiertas mencionara a quienes nos fuimos y nos desee feliz navidad o algo así. Quizás suene ingenuo, pero espero ver el día en que cambien en su forma de vernos. Sin nosotros la historia del Opus Dei estará incompleta. Y gracias a nosotros, seguro que Dios ha hecho muchas cosas buenas en el pasado y también las hará en el futuro.

Feliz Navidad!

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