HE
AQUÍ MI HISTORIA EN LA "OBRA DE DIOS"
PILI, 9 de febrero de 2005
Queridos Amigos Ex Opus:
No sabeis lo maravilloso que ha sido descubrir vuestra web
a la que he llegado por casualidad en un momento crucial,
ya os contaré en mi relato el por qué. Quisiera
deciros antes que vuestros testimonios me han tocado el corazón
y que me he visto identificada en muchos de ellos, por esa
misma razón quisiera contar mi historia para que sirva
también a muchas otras personas.
Conocí la "Obra" (Opus Dei) años atrás
por medio de una amiga del colegio quien me invitó
a participar de charlas doctrinales en una de sus centros
de formación. Luego de varias invitaciones acepté.
De entrada me impresionó la ola de preguntas con la
que me atropellaron la primera vez a pesar de que había
sido invitada por mi amiga del tipo: ¿Cómo te
llamas?, ¿Donde vives?, ¿Que estudias o que
profesión tienes?, entre otras. La clases de doctrina
me gustaron pero solamente asistí dos veces más,
tenía mi tiempo muy ocupado en otras actividades, sin
embargo siempre tuve siempre contacto con gente de la Obra
debido a que tenía conocidas Numerarias (son parte
de la obra y se comprometen a la pobreza, castidad y obediencia)
que se dedican a la medicina, ellas siempre se mostraban muy
simpáticas y amables conmigo por lo que empezamos a
entrablar una "amistad" o almenos eso creia yo.
Ellas me invitaban a sus centros, pero yo pasaba muy ocupada
entre mi trabajo y mi novio así que iba muy de vez
en cuando, él tb iba de vez en cuando pero al centro
de varones. Vale recalcar que en el Opus todo es separado
entre hombres y mujeres, son atendidos por Numerarios y las
mujeres por Numerarias, los centros son separados y los sacerdotes
también son distintos, algo que es sin sentido aunque
ellos siempre dicen que es por los temas que se tratan, porque
el fundador lo dispuso así, etc.
Bueno luego de un año en el exterior (año en
el cual cursé un master) mis "amigas" Opus,
volvieron a invitarme a las charlas y demás (paseos,
etc) y ahora no tenía excusa del tiempo ya que no estaba
trabajando ni tenía novio, así que accedí
a ir con mayor frecuencia y claro ahora entiendo: me volvía
una carnada más apetecible por tener mayor formación
intelectual, ser joven, soltera, etc.
Empezaron a absorber todo mi tiempo, primero eran las clases
de los sábados: clase, meditación, confesión
y tertulia. Luego charla con mi amiga Numeria una vez por
semana: los martes. Sobre esta charla que empezó como
amistad de conversar sobre cosas mutuas fue convirtiéndose
como una especia de investigación policial sobre mi
persona: intereses, planes, personalidad, cualidades, defectos
e incluso intimidades... cosa que no me era muy grata porque
en realidad no había tanta confianza para que me preguntase
sobre esos temas. Luego de sábados y martes siguío
el Circulo de los viernes, el cual consistia en una charla
dada por la misma "amiga" numeraria sobre virtudes
humanas, lectura del evangelio del día, etc. Por si
esto fuera poco también empezaron a proponerme charla
con la directora de la casa sobre: intereses, personalidad,
intimidades, etc. La cosa no me cuadraba mucho pero sentía
que al mismo tiempo estaba aprendiendo bastante sobre religión
y estaba creciendo mucho espiritualmente así que seguí
asistiendo.
Entonces entre el coctel: martes charla con la numeraria,
viernes círculo y charla con la directora, sábado
clases (toda la tarde), paseos, invitaciones a cenas, etc
se aunó a una persecución y control telefónico
de mínimo 2 llamadas al día del tipo: ¿Que
has hecho? ¿Que estas haciendo? ¿Que harás?
¿Vendras a la clase o charla hoy, mañana? y
si no estaba ¿Porque no atendias el movil? ¿Donde
estabas? ¿Con quien estabas? Se tornó un acoso
horrible e insoportable. Mi familia no estaba muy ade acuerdo
porque no veian con buenos ojos tanta insistencia para ir
a sus reuniones, practicamente ya no tenía vida propia.
Adicional a eso en las charlas ya me habían planteado
el famoso plan de vida: oración diaria, rosario, lectura
diaria de un libro especializado, misa diaria, confesión
semanal, mortificación diaria, novenas por intenciones
especiales, metas apostólicas (llevar a mis amigas
los sábados) etc a lo cual tb accedí y cumplia,
al principio me costó un poco, luego me habitué
pero luego se volvió una presión y un agobio
porque eran muchas cosas... me ponía ansiosa de ver
que aún no había ido a misa o que todavía
me hacia falta hacer la lectura y el día se acababa...
era una opresión horrible... claro que en las charlas
se hablaba si había cumplido con todo esto... si no!!!!!!!
Yo como siempre (ingenua y pensando bien de la gente) pensé
que lo que querían era ayudarme a ser mejor y porsupuesto
a alcanzar la santidad que es el propósito fundamental
de la Obra para claro: ir al cielo. Pero no me daba cuenta
que todo era un trabajo psicológico para: crearme una
crisis vocacional, es decir plantearme ser de la Obra como
Numeraria... llegaron al punto de hacerme sentir que si no
lo aceptaba era una persona poco generosa, que Dios me había
elegido y que yo no quería corresponderle... en algún
momento dudé pero yo pensaba en lo más profundo
de mi (y que siempre les recalqué) que deseaba casarme
y tener hijos (al menos 3) y que ese era mi camino de santificación.
Bueno la opresión fue tal que me sentía atrapada...
pero decidí plantearme seriamente lo que me sucedía
y empecé a buscar en internet cosas relacionadas y
encontré la web www.opuslibros.org que me aclaró
todo. Es una página hecha por ex-opus que cuentan cosas
muy fuertes y fue como vi claramente la estrategia que usan
para hacerte "pitar" es el término que ellos
usan para la gente que acepta entrar a la obra y todo lo que
hacen para crearte esa famosa crisis vocacional con el objetivo
que luego hagas todo lo que te dicen y muchas cosas muy graves...
que nada tienen que ver con el mandamiento de amar a Dios
sobre todas las cosas y amar a tu projimo como a ti mismo.
Bueno ahora me he retirado totalmente, siguen llamándome
pero nunca les respondo, en mi casa me apoyan y por supuesto
a pesar de ser muy católicos repito que no ven con
buenos ojos esa situación de persecusión. Yo
me he vuelto más feliz desde que rompí los lazos
con ellos que nada tiene que ver el de romper los lazos con
Dios, siempre hago mis oraciones (propias no las de ellos)
voy a misa y soy una persona católica practicante pero
no fanática como ellos... lo más triste es que
utilicen la santa "coaccion" para lograr sus fines
"apostólicos" sin interesarse por los sentimientos
de las personas ni por su verdadera vocación... gracias
a Dios me di cuenta (gracias a vuestros testimonio) antes
y no como mucha gente que entra y sólo logra salir
años después si es que sale y alguna luego de
todo lo que ve y de lo que te hacen incluso llegan a perder
la fe y se hacen no creyentes... es muy fuerte.......
Espero que mi historia sirva para otras personas que estan
en esa "crisis vocacional" y me despido no sin antes
agradeceros nuevamente por la ayuda que me habies brindado
con vuestra web y testimonios.
Un beso, Pili.
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