CORRESPONDENCIA

Miércoles, 07 de Junio de 2006

Ref xxx 465/05, 2

 

1. Debe seguir creciendo en madurez, sentido común y conocimiento propio. Es cumplidor, durante este tiempo no ha dejado de vivir completo el plan de vida, pero le falta rectitud de intención y poner amor de Dios en las cosas.

2. Últimamente le hemos insistido en moverse por motivos sobrenaturales y desarrollar una actividad seria, en el trabajo y en el encargo apostólico, huyendo de los caprichos y de lo que no supone esfuerzo. Es poco constante y le cuesta someterse a un horario de trabajo continuado. Tiene que amar más la cruz, también para vivir el desprendimiento de sus propios juicios, de los gustos personales y del afán de pasárselo bien: planes de descanso, deporte, cine, lecturas, etc. Aunque el origen de su situación es la falta de virtudes, tanto humanas como sobrenaturales, no dejan de sorprender la reacciones que manifiesta, muy lejos de las que corresponderían por la edad que tiene.

3. Se le ha insistido en darse con generosidad a los de Casa y a sus amigos y en tratar con profundidad y constancia a los chicos de San Rafael. La labor que atiende está comenzando y le ha faltado espíritu de sacrificio e iniciativa para sostenerla.

4. Sigue con algunos juicios críticos hacia algunas cosas de nuestra familia. Con la soberbia se mezclan cuestiones que no entiende o no ha asimilado; le conviene tratar de esas cosas en la dirección espiritual, también para aclarar dudas y lo que no comprende. Su carácter fuerte y algo caprichoso, con algunas reacciones desproporcionadas que no está acostumbrado a dominar, contribuyen a crear conflictos internos y a agrandar algunos juicios críticos. Esta situación le hace sufrir y le lleva a dudar de su capacidad de superar el alejamiento de los Directores que le provoca. Actualmente parece estar más tranquilo y contento. Le hemos insistido en que hable con sinceridad antes, sin dejarse llevar por las primeras reacciones, y que concentre su lucha en el día a día, sin preocuparse de hipotéticas dificultades futuras.

5. Le conviene tener un trabajo con un horario bien determinado y del que tenga que rendir cuentas. También le vendrá bien un encargo apostólico atrayente para que pueda tomar gusto a la labor.

 

xx-xx-2005

Ref xxx 465/05,

Anejo 2

 

1. Se ha dejado llevar por algunos caprichos en los últimos meses –en dos ocasiones ha ido a dar un paseo a la playa en vez de ir al club, y en otra ha ido al cine, también en horario del club–. Como consecuencia de estos descuidos ha tenido dificultades (cfr B 10, III, 28); esporádicamente ha tenido alguna otra dificultad. Después de estos episodios ha acudido con prontitud a la dirección espiritual.

2. Al final del verano comenzó a replantearse problemas de perseverancia. No fue sincero: en la charla fraterna solo manifestó su deseo de volver a [su ciudad] para reincorporarse al mundo laboral, un poco cansado del ritmo de trabajo de [interno…] y de lo arduo de la labor del club. Le hablamos de la conveniencia de que permaneciera en [la ciudad donde estaba] tal como se le había explicado a final de curso, para consolidar las disposiciones y hacer hábitos en la virtud de la laboriosidad y la fortaleza, a la vez que iba poco a poco resolviendo el espíritu crítico. (…)

3. Desde entonces hemos procurado ayudarle a tomar una decisión con madurez y de cara al Señor, a desligar su marcha a [su ciudad] del abandono de la vocación y a volver con deseos de servir en el trabajo profesional y apostólico.

 

xx-xx-2005

            Me ha parecido ilustrativa la Carta mensual del Prelado a los fieles del Opus Dei en junio. En el fragor del varapalo que les está suponiendo la película El Código Da Vinci, Mons. Echevarría asume una posición victimista e invita a perdonar a los que critican a la Obra; y en un alarde de voluntarismo, trata de diluir la acusación hablando de “la agresión que se promueve contra Dios, contra Jesucristo, contra la Iglesia; y, en el mismo orden, contra la familia, contra la dignidad de la persona, contra la vida, etc.”, y exhorta al optimismo, pensando satisfecho que todavía hay países -como Rusia, Rumanía, Vietnam, Corea, Bulgaria…- donde les están llamando (posiblemente, me malicio, porque todavía no conocen la trastienda de la institución).

            Me asombra, como planteaba Flavia este lunes, que no sea capaz de preguntarse qué ha hecho mal el Opus Dei para ser visto de ese modo tan deleznable. Se mantiene en la misma actitud que manifestó en la reciente entrevista del pasado 24 de Mayo en el diario “La Razón”: «¿Por qué este encarnizamiento con el Opus Dei?» -preguntaba Vittorio Messori. La respuesta fue significativa: «Porque se conoce nuestra fidelidad al Papa, a la Iglesia, nuestro rigor en cuanto a la ortodoxia de la fe. Se nos ataca a nosotros para atacar estas realidades: no somos más que la criatura hipócrita de una Iglesia católica que no puede dar más que frutos envenenados. Y además porque, cuando ya no se cree en el diablo, en el verdadero, se buscan otros imaginarios. La pérdida de la fe lleva siempre a la superstición...».

            No, monseñor. No nos referimos a ese tipo de críticas. Estamos hablando de cómo es posible que haya personas que piensan que en el Opus Dei hay gente que reza y se mortifica notablemente y luego son capaces de cometer las mayores atrocidades contra el prójimo. Lo del sicario albino Silas es una burda caricatura de asuntos tan serios como ampararse en la aprobación jurídica de la Iglesia, para mandar lo que la Iglesia no les ha autorizado; o presionar para que la confesión y la dirección espiritual se hagan con determinadas personas; o inducir mediante la Confidencia a la manifestación de conciencia con los Directores; o realizar un proselitismo fanático con los jóvenes y un rechazo sectario de los que se descubren capaces de cumplir unos compromisos que asumieron inmaduramente; o violar la confidencialidad de lo conocido en la dirección espiritual; o realizar un tráfico de informes confidenciales sobre asuntos de conciencia de los miembros de la Obra o sobre gente ajena a ésta, etc.

            La sensatez debería conducir a tener en cuenta la sabiduría popular que se encierra en el dicho: “Del enemigo, el consejo”. Y es que el enemigo podrá equivocarse en su malevolencia o en las valoraciones que realiza. Pero para que sus ataques resulten eficaces, tiene que ser cierto lo que critica. Pues bien, ante este clamor, ¿las autoridades de la Obra no tienen nada que reconocer ni que rectificar?

La palabra “opus” la he escuchado desde que tengo memoria. Crecí viendo a la figura del “padre” como un gran santo, si bien aún ni se le beatificaba, ni mucho menos se le canonizaba (de hecho, hasta fui a la misa que con motivo de su muerte se celebró en su memoria en 1975); no obstante, en mi casa su presencia se sintió de mil maneras, desde las clásicas expresiones opuseístas como “encomendar” hasta su famosísima “foto de estudio” decorada con todo y aureola, visible en algún lugar de la casa. Y por supuesto, la imagen de la virgen en todas y cada una de las habitaciones, la bendición de los alimentos durante las comidas, el angelus al mediodía, y de ser posible, la visita al santísimo… y el santo rosario. Sólo nos faltó rezar las preces, y a la hora de levantarnos besar el suelo y decir ¡Serviam!-, previo a que transcurrieran los sesenta segundos del “minuto heroico”.

A mis hermanos y a mi se nos “adoctrinó” muy bien desde pequeños. Mi madre se encargó de transmitirnos a todos la doctrina opus como la única fuente correcta de doctrina católica que debíamos recibir. Este fue un trabajo que hizo ella sola, pues mi padre –quien nunca fue miembro (¡gracias a Dios!)- le delegó dichas funciones. Y ella lo hizo “tan bien”, que le pitamos dos de sus hijos...

Queridos todos:

Leyendo la Introducción al documento Experiencias sobre el modo de llevar charlas fraternas, me he encontrado con un extraño anacronismo en el último párrafo:

“Hemos de suplicar al Señor, a través de la intercesión de San Josemaría, que nos ayude con su gracia para que todos en el Opus Dei crezcamos continuamente en la visión sobrenatural, en la sinceridad y en la docilidad con que vivimos este medio tan fundamental de dirección espiritual, teniendo siempre presentes aquellas palabras de nuestro queridísimo Padre: a Jesús siempre se va y se vuelve por María, y ya sabéis cómo se va: por la Confidencia y la Confesión”.

Este documento está fechado el 19 de marzo de 2001, cuando Escrivá era todavía beato, y faltaba año y medio para la canonización que se celebró en Roma el 6 de octubre de 2002. La estructura de Opus Dei parece que ya conocía con seguridad que su fundador sería canonizado y se atreve a afirmarlo por escrito en un documento que sería enviado a todos los centros de la Obra. De todos modos, aunque se trate de un alarde de penetración en la Curia y de un gesto de chulería, creo que no habrían podido comenzar de peor manera este Volumen interno delatando su doblez tan pronto.

Enumero brevemente como fue conociendo la opinión pública los hechos:

-La primera noticia pública oficiosa sobre la canonización fue difundida el 29 de septiembre de 2001. Ese día, los telediarios de RAI-1, y después todos los medios de comunicación italianos, afirmaron que había tenido lugar la reunión de la Comisión de Cardenales, último paso para la aprobación del milagro, y que por tanto el camino para la canonización quedaba expedito.

-Poco después, el 4 de octubre, el diario romano Il Tempo publicó otra noticia oficiosa: la identidad del miracolato —el doctor Manuel Nevado— y la historia de su curación. En todo caso, en el otoño de 2001 circulaban solamente rumores.

-El día 20 de diciembre de 2001 los servicios informativos del Vaticano informaron sobre la lectura del Decreto del milagro, primera noticia oficial sobre el asunto.

-El 26 de febrero de 2002, en un Consistorio público ordinario, el Papa anunció las fechas de varias ceremonias y confirmó que José María Escrivá de Balaguer sería canonizado el 6 de octubre.

O sea, que 9 meses antes de la primera noticia oficial (20 de diciembre de 2001) y 11 meses antes del anuncio de la canonización (26 de febrero de 2002), los jerarcas del Opus Dei ya se encontraban capacitados para tratar a su fundador de santo. La fecha del libro es la que es: puede ser ficticia y que el volumen se haya distribuido posteriormente. La incoherencia de las fechas no resultaría sorprendente, aunque fuera real, pues así como otras veces en la Obra modifican el pasado acontecido, aquí modulan el futuro.

No pretendo llegar a ninguna conclusión, simplemente señalar un hecho que evidencia los turbios mecanismos, la doblez y los misterios que envuelven a todas estas publicaciones secretas y siempre al Opus Dei.

Teniendo en cuenta las importantes cuestiones que está suscitando este documento sobre la aberrante manera de concebir la dirección espiritual en la Obra, esta apreciación mía no pasa de ser una anécdota, eso sí, muy sintomática del tipo de institución de la que estamos tratando.

Como siempre: todo muy extraño.

UN ABRAZO!

EscriBa 

International Herald Tribune – Opinion
June 6, 2006

(original en ingles)

 

 

Soy un teologo historiador catolico romano que ha seguido con interes todo lo catolico durante decadas. Estoy de acuerdo con Paul Fortunato que, sin duda, el Codigo DaVinci ha suscitado interes hacia el Opus Dei. Puede ser que Fortunato tenga la suerte de ser un creyente sano y todavia un socio activo en el Opus Dei.

 

No obstante, la historia mostrara que el Opus Dei fue una aberracion en la historia de la iglesia y que algunos de sus socios excepcionales (espero que Fortunato sea uno de ellos) supieron a pesar de todo permanecer cristianos autenticos y creyentes verdaderos a pesar del secretismo ofensivo y de las extranezas claras que el movimiento impone a sus seguidores.

 

John Alonzo Dick, Heverelee, Belgica

Drake

Hola amigos.

Luego de 2 años  de visitar esta web, me animo a escribir acerca de como fue mi salida del Opus Dei, pero para esto debo ir un poco antes

Conocì la obra a los 15 años, cuando fui a vivir a una residencia de la obra, pues iba a estudiar en una ciudad diferente a la que vivìa, recuerdo que me pusieron el "ojo" cuando hice un triduo para agradecer un favor que se me concediera, y desde aquella vez las numerarias creyeron que yo era una buena candidata, por que me abordaron y empezaron a hablarme de la presencia de Dios, hubieron muchas cosas que me acercaron a la vida piadosa, hasta que luego de la muerte de mi abuelo, sentì la vocación y me neguè, pero acabè contàndosela a una numeraria y al sacerdote que me confesaba.

Me dijeron que no dijera nada a mis padres y ellos se daban cuenta que estaba rara, pero no sabìan que era, me decìan que tenìa que estar contenta para que ellos me vieran asì.

Durante 3 años cumpli con las normas pero habìa muchas otras disposiciones que para mi edad me parecìa horribles que me las impongan, como no ir al cine, no fiestas, no amigos varones, solo amigas mujeres y con ojo clìnico vocacional (muchas veces sentìa que "habia que hacer amistad" no por afinidad sino por interès en vocaciones, cosa que me molestaba), no subirse al coche de un chico, no poder ir al centro con un grupo de compañeros por que al centro no entraban hombres, mientras que a una de las superioras se les permitìa eso y más.  Obediencia en cosas que no tenìan sentido para mì, como el uso de falda (no saben como las odiaba, eran super incòmodas, yo prefiero los pantalones y uso vestidos sòlo para fiestas), obediencia que tenìas que poner por encima de tus propios ideales, intereses, preferencias y hasta estado de salud.

Mi salida empezò cuando quise tomar la mayor cantidad de materias en la universidad para poder graduarme antes y hacer el centro de estudios en la capital de mi paìs. Por la distancia y los horarios universitarios pasaba màs de horas yendo y viniendo al centro, cosa que me dejaba poco tiempo para lo demàs, y como las normas eran primero, dejaba para ùltimo mis estudios, y ya que yo era una persona que me tomaba muy en serio mis estudios, los empecè a descuidar, y no podìa hacer mucho...llegò el momento en que me dio una crisis de nervios, por no dormir y no comer bien, pues por la noche llegaba a veces pasadas las 10 con susto de que me cierren las puertas (por que eso me dijeron) y alcanzar lo que quedaba del segundo turno de la cena. Llegué a no tener ánimos para nada...que cuando se dieron cuenta las directoras, en lugar de tratar de ayudarme, lo que hicieron fue llamar a mis padres para que me llevaran a un psicòlogo (por què? si ellas eran mi familia, se suponìa que ellas me iban a cuidar, etc,. lo que te dicen cuando preguntas acerca de quien cuida a la gente cuando se enferma y a los mayores)... fue lo que siempre me preguntè, por que ?, cuando ya no podìan cuidar de mí, me devolvieron (eso fue lo que sentì al pasar por todo ello).

Mis padres me llevaron al psicòlogo, estuve en terapia como 6 meses o màs, y fue muy fuerte y me todo lo que me pasaba me afectò en la universidad, pero poco a poco con el apoyo de mi familia pude salir del estado en que estaba. Entre tanto ellas me llamaban y me pedìan conversar, recuerdo que hablè con mi mejor amiga allì, una chica de mi edad que habìa pitado despuès de mì, y le contè todo lo que no me gustaba y ella me escuchò y fue un desahogo para mì, ademàs que lo hice para que se diera cuenta de las cosas que pasaban. Cuando decidì ir y enfrentar la situaciòn, me dijeron que la obra es madre y que podìa visitar al centro cuando quisiera, me preguntaron si podìa seguir con la vocaciòn y al evaluar mi estado de salud, pensè que esto ùltimo era màs importante y les dije que no, por lo que me aconsejaron escribir una carta de dispensa. 

La verdad como querìa mucho a la obra en sì, me tomè en serio lo de las visitas al centro y fui 2 veces màs hasta que la ùltima de estas veces, enviaron a mi mejor amiga a que en una conversaciòn me dijera que no era conveniente que yo volviera al centro, que màs adelante tal vez, pero que no lo hiciera. De todo esto lo que màs me doliò es que utilizaron a la persona que mas yo querìa allì para que decìrmelo ( obviamente yo sabìa que tal decisiòn fue de la directora)

Desde ese dìa no he vuelto a pisar un centro de la obra. He rezado mucho por las personas que considerè me ayudaron dentro de la obra, de mi amiga, para que sea  felìz si ese es su camino, por otras que realmente se veìa que eran felices en la obra y me alegra mucho y por otras que no se veìan muy contentas y dudaban, para que Dios las iluminara y vieran màs claro su camino.

Supe que muchas otras niñas menores de edad se salieron, que la hija de la directora de un centro de la obra se saliò, que una subdirectora tambièn lo hizo, asì como en el tiempo que estuve a una le dijeron que se fuera y la pusieron como cooperadora... todo esto me hace pensar en una pregunta que me hizo una vez la directora ¿Como hacer para atraer màs vocaciones? y mi ùnica respuesta hasta ahora es:

dejar que la gente maduramente tome una decisiòn de esta naturaleza, no se le puede pedir a un joven de 15 o 18  que tome una decisiòn asì para toda la vida. Estoy totalmente convencida que luego de los 24 uno puede considerar y evaluar una decisiòn tan importante como decir sì a la vocaciòn.

Maydeth

Hace poco ustedes me pusieron en contacto con una librería que me ayudo a conseguir un par de libros. Muchas Gracias.

Tengo una pregunta. En México la semana pasada fue publicado en el Diario Milenio un artículo en que la Familia Española Ruiz Mateos había donado 6 Millones de Euros a los Legionarios de Cristo.

No son los Ruiz Mateos miembros del Opus Dei?.

De antemano gracias por su respuesta.

Lorenzo

Nota de la web. No encontramos el link al Diario Milenio, sí al diario Yucatán y a otros medios que han reflejado la noticia. Ruiz-Mateos, supernumerario, inculpó, cuando la expropiación de Rumasa, a miembros del Opus Dei (en concreto a los banqueros numerarios Valls Taberner y a Rafael Termes) de que le habían "traicionado". Dio pruebas de que les había transferido 1.000 millones de pesetas con destino a la obra. Se recogió en las hemerotecas y fue, en su día, un gran escándalo financiero en el que el opus estaba por medio. Pero han pasado muchos años (la expropiacion del "imperio Rumasa" fue en 1983) y en la actualidad no se sabe si Ruiz Mateos dejó el opus y se pasó a los legionarios, aunque al transferirles en la actualidad esa importante cantidad de dinero, no parece que le sean indiferentes.

Al visitar la web el pasado lunes, veo publicado el cancionero de la obra. Es un buen trabajo, algo sin duda imprescindible en la colección de documentos internos.

¡Si las habremos cantado veces!. Sólo de ver los títulos me vinieron a la memoria las letras y las melodías. De muchas otras canciones que escuchaba por aquella época no recuerdo nada, pero de estas sí, y eso que hace ya 22 años que me marché. Además, en los dos últimos años, salvando los cursos anuales, no se cantaba casi nada en el centro, por falta de personas que tocaran la guitarra o cantaran.

En otros correos he leído que las canciones de casa iban y venían, aparecían y desaparecían del cancionero. Así, de este que habéis publicado, echo en falta una canción. Ojo, la transcribo de memoria, seguro que algo está mal, o me falta alguna estrofa quizá. Si alguien la corrige...

Quiero que toda la tierra

pueda hablarme de tu amor.

Quiero que todos los vientos,

que todas las lluvias

me traigan tu voz,

si hay que jugarse la vida

por poderlo conseguir.

Quiero, mil veces yo quiero

que nada del mundo me aparte de ti.

Quiero, mil veces yo quiero

que nada del mundo me aparte de ti.

Si en la arena del desierto

debe crecer un rosal.

Si hay que lograr trigo blanco

en un mar de fango

o en un pedregal,

yo bregaré con mis manos

por poderlo conseguir.

Quiero...

Quiero alfombrar de alegría

para que pisen tus pies

calles, mercados e industrias,

rincones perdidos,

los montes también.

Quiero trepar a las cumbres

y ponerte un trono allí.

Quiero...

Un fuerte abrazo a todos.

Miguel Angel

Correos Anteriores

Ir a la correspondencia del día

Ir a la página principal