CORRESPONDENCIA

Miércoles, 14 de Septiembre de 2005

Un saludo desde Bulgaria. Soy nueva en el cotarro, Alberto Moncada me dió la dirección de la web pero desde aquí tengo muchas veces problemas de conexión (estoy en un pueblo que se llama Vrattsa y no tengo ADSL) y no había entrado. Ayer, mirando periodistadigital, encontré otra vez la web y entré: es adictiva. Me pasé casi tres horas navegando, leyendo vuestras aportaciones y partiéndome de risa algunas veces. Confieso que me ha entrado el gusanillo de participar, y como a principios de octubre vuelvo a España, no tendré problemas.

Me presento: mi nick es Itaca, pero puedo decir mi nombre sin problemas: me llamo Ana Calzada, fui numeraria durante 13 años (de 1960 a 1974) y he de confesar que siempre fui una mala numeraria: nunca pude cumplir todas las normas (y lo intentaba, palabra), jamás me casó la cuenta de gastos y, fumadora empedernida desde los 15 años, cuando me entraba la neura me compraba un paquete de tabaco. Normalmente, al cabo de un par de cigarrillos lo entregaba a la directora, pero me perseguía el remordimiento de conciencia... Además, tenía la “funesta” manía de pensar, y eso me condujo a la ruina, como es natural.

Jamás he lamentado dejar el Opus, al contrario: a veces creo que Dios premió mi buena voluntad dándome a un hombre -mi marido, Jordi- excepcional, que ha llenado mi vida de felicidad y de paz. Murió hace dos años y medio, pero sigue vivo en mí y le debo todo lo que soy. Ya os explicaré más cosas si os interesan.

Vivo en Barcelona, en Sant Cugat del Vallès: estoy a vuestra disposición. Carmen Charo, si estás por aquí, dame noticias tuyas: me encantaría saber de ti. Recuerdo con gran cariño nuestro encuentro en Valladolid.

Vale, no os quiero dar la lata. Hasta pronto

Anna

Hola, Carlita

He leído tu carta y creo comprender tu angustia y tu preocupación: es muy importante en la vida saber lo que Dios quiere de uno. Me gustaría ayudarte, no sé si lo conseguiré, cuando leas lo que he escrito piensa en una abuela que da consejos a su nieta: por la edad, podrías muy bien ser mi nieta y quizá lo eres de una manera, no sé, un poco peculiar.

Carlita, no hay un solo camino para llegar a Dios; Dios es generoso, ofrece múltiples caminos a los hombres, no es exclusivista. La madre Teresa lo encontró entre los pobres de Calcuta, otros entre los enfermos de SIDA de Africa, otros en su propia família, en su marido, en sus hijos. Dios quiere que lo busques, pero también quiere que esa búsqueda te haga feliz, no que sufras. Me entiendes?

Hay hombres que encuentran a Dios en la oración, otros lo encuentran en el silencio, otros en la admiración por la vida en todas sus formas, otros en la participación activa por un mundo mejor: Dios está en todas partes.

Si dudas, si no tienes la seguridad de que has escogido el camino que te conviene, espera. Dale tiempo al tiempo. Tienes 16 años; madura un poco más, crece en tus propias convicciones, asegúrate en tus propias creencias: Dios sabe esperar, conoce muy bien la naturaleza de los hombres, sabe que no somos perfectos, que muchas veces necesitamos tiempo para crecer y madurar, como lo necesita el niño para hacerse hombre, el árbol para dar fruto, los conocimientos humanos para llegar a nuevos descubrimientos. Te lo repito: Dios sabe esperar. Lleva esperando miles, millones de años.

Y mientras esperas, descubre nuevos caminos; quizá no sean el tuyo, pero te irá bien conocerlos: así tendrás mejor seguridad cuando elijas. No te cierres a nuevas oportunidades: si viene, conoce el amor, que es en esencia dar, no sólo recibir. Aprende a comprender las necesidades de los que te son cercanos y de los que están lejos, y procura ayudarles en la medida de tus posibilidades. Esto es también amor a Dios, ese Dios que vela por los gorriones de los caminos y las flores de los campos.

Habla con Dios a tu manera, como te salga mejor, como te sea más fácil: por la noche antes de dormir, cuando te diviertes, cuando te lo pasas mal; no importa si son 5 minutos o 3 horas: lo importante es el diálogo.

No te dejes vencer por la inercia o la pereza, lucha por tus ideales, pero ten siempre presente que la lucha ha de nacer de dentro de ti misma, no de imposiciones externas. Nada que te sea impuesto es bueno, porque Dios quiere que escojas libremente.

¿Me entiendes? Si tienes dudas, estaré encantada de escucharte.

Un abrazo de tu “abuela”

Itaca

Hola a todos de nuevo. Un servidor se ha tomado unas “vacaciones” bastante largas pero no he dejado de seguir nuestra web, últimamente con dificultades debido a la cantidad de excelentes escritos.

Quería hacer referencia a la posibilidad de que Escrivá sea nombrado doctor de la Iglesia. Para empezar quieren convertirlo en uno de los grandes santos del siglo XX, de ahí las prisas por poner estatuas en lugares muy significativos. Quisiera añadir a los sitios mencionados por Nacho, que el año pasado vi en la basílica de san Pío X de Lourdes que ya habían colocado la pancarta con la foto de san Josemaría junto a las de los demás santos que cuelgan del techo de la basílica. Yo les diría que más que estatuas, lo que me gustaría es disponer de las obras completas de san Josemaría, incluyendo apuntes íntimos, documentos fundacionales, correspondencia, cartas pastorales, libros...

Uno de los motivos por los que el opus Dei puede tener interés en que Escrivá sea doctor de la Iglesia, reside en el hecho de que pasaría a ser de memoria obligatoria en las misas que celebraran todos los sacerdotes católicos del mundo. Actualmente es de memoria libre, y por tanto los curas no tienen ninguna obligación de mencionarlo, es decir no tienen que celebrar la misa de san Josemaría. Sin duda sería un triunfo y se alegrarían al pensar en tantos curas y obispos que los han criticado, que estuvieron en contra de la canonización, y que ahora se verían obligados a celebrar “su” misa.

Respecto a lo que mencionan Rapelu (9/9), y la respuesta de EBE (12/9), sobre la falta de sentimientos en el opus Dei, habría mucho que hablar. Los sentimientos por naturaleza son espontáneos y la espontaneidad está reñida con la obediencia y la planificación milimétrica del opus Dei. Incluso los sentimientos están planificados, previstos o consentidos, son los que tocan. Me refiero por ejemplo en el proselitismo, en los encuentros con el padre, cuando fallece el padre… Esa falta de sentimientos espontáneos y auténticos genera mucho sufrimiento y soledad, porque sabes que los superiores deciden en base a criterios y conveniencias institucionales, que su simpatía es pura fachada.

Matar los sentimientos puede acabar matando al opus Dei. Recuerdo una anécdota del centro de estudios absolutamente masificado a finales de los 70. Aquello era una especie de mili (servicio militar) y los sentimientos eran despreciados o ridiculizados por los machotes jovenzuelos de 18-19 años. La gente sensible lo pasaba mal. Esto llegó a tal punto que la dirección decidió llamar a un tertuliante para que nos hablara de la bondad de los sentimientos, nada más ni nada menos que Alejandro Llano, el de la conspiración leal. Recuerdo que nos habló lo bueno que era emocionarse contemplando una puesta de sol…, y claro el personal ponía una cara alucinante.

¡Cuántas pastillas y cuantos psiquiatras se ahorrarían si el opus Dei fuera más humano, más normal, más compasivo y por tanto más cristiano! Quiero hacer una llamada a los pitables y recién pitados/as que nos leen desde sus casas. Lo que veis en los clubes y residencias juveniles está planificado, se aprovechan del gancho de algunos/as para captar a la gente joven. Pero eso no es el opus Dei, es sólo el anzuelo. El opus Dei es falta de libertad, falta de respeto a la intimidad, falta de verdadera familia, falta de respeto a la promesa de ser cristianos corrientes que desarrollan su profesión sin obstáculos, falta de una verdadera formación teológica actualizada, falta de humanidad cuando tengáis problemas o flaquezas (y no digamos si lo dejáis), en definitiva hay mucha falsedad y mentira.

Se habla del final del opus Dei. Agradezco los datos que nos dio hace unos días Voliyo (2 de septiembre) y que coinciden con los que me han llegado de buena fuente hace unos días. Justo ahora que el opus Dei ha llegado tan alto, y tiene tanta gloria humana, se descompone por dentro y en su base (las labores de san Miguel y san Rafael). Los datos en España dan para pensar que nunca una institución católica había sufrido tal descalabro en sólo 10-15 años (sin mediar persecución). El tema está en cuando cundirá el pánico, cuando alguien (incluyo los directores) empezará a pensar en quien le mantendrá cuando sea mayor.

Sonsoles en su escrito del 24 de agosto afirma que en el Vaticano no tienen la lista de los que son o han sido del opus Dei. Yo pensaba como ella, pero hace poco una persona que estuvo en Roma me comentó que el opus Dei estaba obligado a remitir anualmente al Vaticano una lista con los nombres de todos los que se habían salido con la fidelidad hecha, incluso quizá con una pequeña nota o informe sobre las causas de la salida sin entrar en el fuero interno. A mi me sorprendió mucho, pero me aseguró que era así y por tanto, si no mienten, en el Vaticano deben estar muy al corriente de la crisis interna del opus Dei. Me gustaría que alguien pudiera precisar esos datos.

Para terminar una “perla” del candidato a doctor de la Iglesia. Refiriéndose a los motivos por los que las mujeres no podían recibir el sacramento del orden sacerdotal dijo que: "ordenar a una mujer sería como bautizar un gato". Ese “argumento” tan delicado con el género femenino y tan profundo teológicamente lo repetían los profesores del colegio romano cuando se hablaba del tema y me lo han confirmado testigos independientes.    

Un abrazo a todos,

Galileo

La Obra como conciencia colectiva y la conciencia de las personas 

Uno de los temas más graves que se plantean con la formación y el modo de gobernar que le son propios, es que la Obra saca atribuciones propias del ámbito de la conciencia personal y pone en la conciencia de las personas temas que no tienen el peso o la entidad de un tema de conciencia: pone cargas que no hay por qué llevar consigo y quita derechos inalienables.

Hace de temas opinables asuntos de conciencia y hace de asuntos de conciencia temas de gobierno. 

Pensemos en la cantidad de temas opinables que la conciencia de los miembros debe consultar a «la conciencia de la Obra», es decir, a los directores...

Apreciado Chisco:

¡Vaya! ¡Qué sorpresa! La verdad, no esperaba leerte aquí.

No es mi intención criticar tu mensaje ni, en modo alguno, burlarme de ti. Aunque nos tratamos poco, me consta que tienes muchas cualidades, algunas poco frecuentes en la obra. Por otra parte, has llegado a ser un buen profesor -no de Fomento, pero casi- y además has cursado después otra carrera, quizá para el día de mañana... Cuentas con mi simpatía personal y, sinceramente, te deseo lo mejor.

Yo también fui numerario durante muchos años. Ambos conocemos el paño. La diferencia estriba en que yo, lector asiduo de esta web, no me he puesto en contacto contigo para alarmarte por la desaparición de Peñafiel (centro de estudios de Valladolid), el progresivo envejecimiento de los habitantes del centro "juvenil" en el que resides, o los problemas crónicos del colegio en el que trabajas. Respeto tu camino. Tú, por el contrario, te permites emitir juicios de valor sobre las experiencias personales de mucha gente.

Por último: sí eres inteligente, pese a lo que dices. Pero también muy buena persona. Y es esto último lo que hace que uno pueda pasar tanto tiempo en la obra. Sobre todo si el ambiente familiar está en sintonía, como es tu caso.

También te envío un abrazo.

Trevi

Retomo la carta de Compaq de hace unas semanas en las que nos animaba a buscar mentiras y contradicciones entre los historiadores del opus. El tema nos viene de perlas para contrastarlo con la carta de Carlita, adolescente de 16 años que se define a sí misma como “numeraria”, aunque sus directoras saben perfectamente que la Iglesia Católica ha aprobado unos estatutos en los que dice muy claro que no puede haber numerarias antes de los 18 años.

El problema es que, para las directoras de Carlita, ella es suficientemente madura y, a la vez, demasiado joven.

Es suficientemente madura para meterle sin escrúpulos en su cabeza y en su alma la idea de que, si duda de su vocación, Carlita está traicionando a Dios. Seguramente –Carlita nos lo podrá confirmar- le han dicho lo que nos repitieron hasta la saciedad a todos los que pitamos a los 14 y medio: que el fundador “que siempre fue por delante de nosotros en el camino de la entrega- NUNCA dudó de su vocación”. Y si no se la han dicho de viva voz, Carlita lo ha podido leer (o se lo han leído) en los Libros de Meditaciones que se publican en esta web, libros que nos han leído a los recién pitados cada mañana cuando íbamos a la oración y a la misa por las mañanas al centro...

¿Recordáis que hace unos años se les dio por explicar que el Prelado podía dar decretos? Y, en efecto, se envió la lista de esos decretos, añadiendo la indicación de que cualquiera los tenía "a disposición" (y podía consultarlos, si lo deseaba) en la delegación. ¿Alguno de los juristas de estas páginas podría explicar por qué les dio por lo del decreto?

También se explicó en los círculos aquéllo del tribunal de justicia de la prelatura, con primera y segunda instancia en Roma. Otra vez, ¿por qué les dio por esto?

Arcano

Consejos A Un Joven Del Opus Dei.

Capítulo 5: La Materialización De La Libertad

Iván, 14 de septiembre de 2005

Hoy te daré algunos consejos que puedas llevar a tu vida diaria.

La Materialización De La libertad.

En la Obra te han repetido hasta cansarte que estás allí porque quieres. Decía el Fundador del Opus Dei que tenéis que hacerlo todo porque os da la gana, que es la razón más sobrenatural y más humana.

Pues bien, hoy te voy a aconsejar un método para que materialices en tu vida la existencia o no de esa realidad. Si sigues las pautas que te doy lograrás en muy poco tiempo saber si esas frases que dicen los directores de la Obra están conectadas a la realidad de tu vida o si son tan sólo palabras huecas...

Querida Carlita,

Estas en la flor de la vida y Dios quiere que la disfrutes. como adolescente que eres te resulta muy excitante llevarle la contraria a tus padres quizas??

Parece ser que no tienes vocacion de monjita y tampoco de numeraria que es muy parecido, aunque te digan lo contrario, te lo digo yo en nombre de tantos otros que nos hemos creido lo de que era algo laico. Las que tienen este tipo de vocacion , la buscan ellas, llaman ellas a la puerta de los conventos....

Si ya  lo estas viendo, como se deduce de tu texto, no te martirices pensando que es la tibieza o el demonio los que no te dejan ver lo que las numerarias sí “ven” .

Dios te llama a que seas, eso mismo, una mujer normal que quiere formar una familia y por ahora seguir con su familia . No te preocupes, la Iglesia no manda que se cumplan “las normas” de la Prelatura. Por supuesto estas te ayudan a tener un dia ordenadísimo, donde todo encaja y te cunde mucho el tiempo y cuando lo dejas, cuando actuas menos robóticamente, la pereza se puede meter.

Creeme, cuando te acostumbres, y te “desintoxiques” sabrás ordenar tambien tu vida y que te cunda el tiempo. Serás menos “pluscuamperfecta” pero mas humana, mas de carne y hueso. Tendras tiempo para pensar tú misma, para reir con tus amigos de verdad (no amigos postizos o buscados a la fuerza), para disfrutar de tus padres. Es normal que en la adolescencia seas desordenadilla, despistada y desorientadas. Fiate mas de tus padres y deja que tu cerebro se desarrolle por via natural. Date una oportunidad. Tú vas a madurar solita, sin la Obra y vas a ser mas libre.

No cometas el error de seguir metiéndote, como hicimos otros, pues se te iran muchos años tontamente. Aunque lo hagas por Dios y El te lo pague después, creeme no es necesario dejarse la juventud en la Obra, pues su fin primordial es ese mismo, que piten mas como tú, para qué?? para que sigan pitando…. La formación, sí, te entiendo, son excelentes dando formación, recemos para que otros tambien sepamos dar buena formación cristiana. Pero hay muchos otros que imparten buena formacion y muchos sacerdotes que oyen confesiones. El Opus Dei no tiene el monopolio, aunque ellos se lo medio creen. Pero en el fondo usan el impartir formacion como  un medio mas para que sigan pitando…. el cuento de nunca acabar, las bienaventuranzas no se viven tan a rajatabla, el evangelio según convenga pero lo importante es que sigan pitando…..

Animo, que sepas decirles adios y con la cara alta, que vales mucho Carlita, se ve que tienes un buen corazon, que  no te lo roben. Son muy buena gente pero estan  un poquitin equivocados.

Con cariño

Asunta

Me ha dado mucha alegría comprobar como determinados temas “clericales” son comprendidos por el pueblo fiel tal como el pueblo fiel debe comprenderlos, pero como a veces me da por el “prurito” de la precisión, trataré de acercar un poco mas el tema del que trata Jaime4 en su escrito publicado el día 12 en su contestación a Ottokar.

1. Hay que distinguir –en relación con la pertenencia a la Prelatura y a la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz- a los sacerdotes numerarios y agregados de la Prelatura, quienes a su vez por el hecho de su ordenación son miembros de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, de los sacerdotes diocesanos, agregados o supernumerarios, que  no son ni pueden ser parte del clero o presbiterio de la Prelatura sino solo socios de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y como tales siguen dependiendo de sus respectivos obispos...

"Los que creen, conducen su vida desde los ideales. Los que gobiernan las vidas de estos, no creen en los ideales, gobiernan desde el pragmatismo, cuando no del cinismo. Son políticos, no personas espirituales como habrían de esperar los que creen. Y éstos idealizan a los directores y creen que todo lo que deciden procede de una sublime disposición espiritual. A su vez, quienes gobiernan, predican los ideales como parte de su política, pero jamás permiten que los ideales limiten (y menos aún dirijan) la política que llevan a cabo. Los ideales tienen fuerza para seducir y convocar a creer, pero poca o ninguna fuerza para que los que creen exijan nada al que gobierna".

Querid@s amig@s:

En la anterior entrega de esta serie (02.09.05), empecé a hablar del significado y del alcance de las críticas al Opus Dei. Vimos que en personas y en instituciones siempre hay aspectos criticables y que, en el caso de estas últimas, puede ser conveniente e incluso necesario realizar las críticas en público. Quedaron, sin embargo, abiertas las siguientes cuestiones: ¿Hasta qué punto se guía la crítica por los principios de la justicia y de la caridad? ¿Cómo evitar que degenere en murmuración (>"Conversación en perjuicio de un ausente", DRAEL)?

Voy a intentar dar una respuesta al hilo de la teología moral presentada en el Catecismo de la Iglesia Católica (versión internet) y teniendo en cuenta los puntos que expresa Santi en su página (nueva versión del 08.09.05) Nuestra común premisa es la siguiente:

"El hombre busca naturalmente la verdad. Está obligado a honrarla y atestiguarla: ‘Todos los hombres, conforme a su dignidad, por ser personas..., se ven impulsados, por su misma naturaleza, a buscar la verdad y, además, tienen la obligación moral de hacerlo, sobre todo con respecto a la verdad religiosa. Están obligados también a adherirse a la verdad una vez que la han conocido y a ordenar toda su vida según sus exigencias’ (DH 2)." (2467)...

Estimada Patricia (12/sep/05):

Leí tu correo del lunes y manifiestas varias dudas que creo resumir en lo siguiente:

1. Por un detalle de tu vida pasada, te corrieron del Opus Dei.

2. Las directoras mostraron falta de caridad, aunque no dices en qué no hace falta entrar en detalles, lo cual habla bien de ti.

3. Los escritos de ex miembros te están causando que pierdas la devoción a San Josemaría.

Espero no ser simplista con estos puntos, pero déjame decirte pocas ideas al respecto:

1. Creo que si por un detalle "X" - es decir, que dá lo mismo - te corrieron de la Obra, agradécelo, tal vez hubiera sido peor. Nunca sientas culpa, sino sólo con Dios y con quien pudiste hacerle daño. Una vez reparado el daño y perdonada por Dios, qué importa. Si el daño no tiene solución, pide perdón a Dios, que siempre perdona.

2. Si les faltó caridad, pobres. Sólo ellas deberán dar cuenta a Dios. Tú, creo, lo estás haciendo bien, esas cuentas tú se las darás a Dios. Sé feliz y vive cara a Dios.

3. Hay muchas cosas que se escriben y se dicen. Mira, si crees que la Iglesia es de Cristo y que el Papa es infalible cuando decreta a una persona santa, como lo dice la propia doctrina de la Iglesia, ten la devoción que quieras. Vamos a pensar que San Josemaría tenía el carácter que narra María del Carmen Tapia, ¡qué cosas habrá tenido que corregir para llegar finalmente a los altares de la Iglesia!.

Te lo dejo a tu criterio. He tenido la oportunidad de conocer tu país y de modo especial la Ciudad de La Paz es una de las más hermosas que he conocido. Felicidades.

Te mando un beso,

Dany

A raíz de un caso de un “comentario” directo reciente – me supongo que no es el primero ni será el último que suceda – entre un ex numerario a su “director” en esta página y por los supuestos atropellos, faltas de delicadeza, cuentas por pagar, etc.; me atrevo a tratar de responder esa pregunta fundamental: ¿qué es primero, el huevo o la gallina?

Sé que no es fácil y que a lo mejor podría estar tocando un tema muy íntimo entre esas dos personas – no importa quienes sean; incluso podría aplicarse a mi persona y a algún hermano mío, a quien también yo en algún momento le atropellé con mis “consejos” – pero que se hace necesario para “perdonarse” uno mismo, en este proceso de recuperación de nuestra identidad.

Efectivamente, al tener el cargo de director u otro cargo de dirección, se nos decía que debíamos mantener a rajatabla el espíritu de la obra y que “no éramos nosotros” los que aconsejábamos; sino que era el mismo “Padre” (léase el consejo local)… y señores, nos los creíamos. En esa especie de atmósfera de todopoderosos que nos sentíamos, de poseedores de la verdad absoluta…. NOS LO CREIAMOS y actuábamos en consecuencia. No nos importaba más que cumplir lo que nos habían encomendado. Desde las cosas más insignificantes como “ve y le haces una corrección fraterna a fulanito, por que se durmió en la oración” hasta el caso de “te vas de la obra por que sí y además por la puerta de atrás”.

Podríamos decir – típico mecanismo de autodefensa – de que no éramos tan drásticos o que aconsejábamos a “nuestra manera”; no, no fue así y si somos sinceros tendremos que aceptar que el sistema nos imponía su ritmo y nos obligaba a hacer y decir las cosas de la manera oficial. Bajo el escudo de que no soy yo quién da el consejo… nos resbalaba todo; aún cuando sí nos doliera decirlo muy en el interior.

Pienso que la mayoría tiene en su cabeza nombres y apellidos concretos de personas declaradas por nuestro interior como “non gratas”; sí, aquella que nos revuelve las entrañas con solo recordarla. Aquel director, aquel sacerdote, aquel o aquel otro. Hasta aquí no hay problema, yo estoy afuera y “ese” – pobrecito – aún está adentro…

Pero resulta que no, que “ese” director ya no está adentro; y además resulta que está navegando por esta página también – como muchos seguramente - desde hace un tiempo atrás. Es uno de los nuestros ahora… y obviamente, hombre ni que fuera de palo, al leer lo que dice el primero, se siente mal, se siente aludido e incluso atacado. Ironías de la vida, ahora son dos ex numerarios EXACTAMENTE iguales – ya no son nada – ningún ligamen con la obra, ningún cargo; eso sí, mismos resentimientos de rechazo para con los directores, ambos sienten que la obra les hizo las mismas cochinadas que todos sentimos: abandonados, traicionados, engañados y desilusionados. ¿Qué es primero: el huevo o la gallina?...

Yo tengo la respuesta: el origen de todos nuestros problemas tiene un nombre: el opus. Desde cuando yo tenía la potestad de aconsejar a alguien si tenía vocación o no; es más, ¿existe la vocación al opus Dei?; y si fulanito estaba harto de estar metido en determinado centro y se quería largar, ¿quién era yo para decirle que lo pensara; peor aún, que si se iba se condenaría?... Le decía yo a ese ahora “ex numerario (anexo innecesario: director)” que si por mi fuera, iría a donde cada uno de esos hermanos - a los que aconsejé - a decirles que se fueran, pero ¡ya!... que hagan lo que les de la gana… que es mejor ahora que no después. Que fueran libres…. No lo hago, pues no soy sujeto de credibilidad probablemente para ellos aún – el lavado de cerebro es muy fuerte y no se escuchan razones – y de seguro no llegaría a nada.

¿Qué toca hacer ahora? Primero “perdonar” y “perdonarse” y luego si interesa la amistad – pienso que sí, pues ahora hay un sentimiento común en ambos por estar escribiendo en opuslibros -  proceder a hablar. No hacer réplicas donde se ataquen a las personas… no vale la pena… y bueno, que viva la libertad, si tampoco quieres hablar con él; pues no lo hagas… ¿Qué es primero: el huevo o la gallina?

YOHA

En contestación a Irene, he de decir que yo también he visto el J.J. Sister anclado periódicamente en el puerto de Cádiz. Y los que sean de Canarias lo habrán visto allí. Entiendo que no se trata del JJ Sister de la famosa travesía en la que el mismísimo diablo se tomó el trabajo de remover con su rabo las aguas del Golfo de León (Por cierto, hace falta mucha soberbia y poco sentido del ridículo para explicar así una rutinaria tormenta y unos meneillos en un barco). Si lo fuese, sería un milagro porque se le ve mucho más joven y sobretodo ha crecido muchísimo.

Este es un buque de Transmediterránea, relativamente reciente, al que se le dió el nombre del almirante, una vez desaparecido el barco anterior.

Claro, que bien pensado, y trabajadas convenientemente las fuentes de información, lo mismo podría ser el milagro necesario para canonizar a D. Alvaro, aunque él no estuviera en la travesía. Cosas así se han visto y al final, todo es bueno p'al convento.

Por cierto: Se nota últimamente una proliferación de mensajes tipo "ESANOFUEMIEXPERIENCIA", que me resulta preocupante. ¿Podría tratarse de una campañita entre "exenbuenplan" para desprestigiar a la página y sembrar las dudas? Eso explicaría también el uso masivo del "cortar y pegar" como ejercicio intelectual y contribución al debate.

Perdonad el tono irónico pero es que determinadas cosas o te las tomas así o te mueres de la pena.

Saludos o besos a todos y todas.
joem

Chisco:

Ya sabíamos que lo único que nos queda fuera es considerarnos perjudicados. Hagamos lo que hagamos. Si callamos, malo. Si hablamos, peor. Mientras haya quien se crea ungido con la facultad de administrar premios y castigos por ahí, ya se sabe de qué color serán tus papeletas, según cantes o no sus alabanzas.

El título de tu envío me recordó "El Tango Alegre", una canción que habitual en algunas tertulias con gente de San Rafael en la que todos hacíamos escarnio del protagonista.  Puede que alguien la conozca. Hasta donde recuerdo la letra decía así:

Su madre mujer mala,
su padre un invertido,
su esposa le engañaba con su mejor amigo.

Cuatro hijos que tenía
la lepra los mató
y al quinto que quedaba
se lo atropelló un camión.

Que sí, y no tenía pa comer.

Un día que a la iglesia
fue a dar gracias a Dios
un trozo de cornisa encima le cayó
y estando en la agonía
esta blasfemia echó:
¡CANASTOS!, dijo
fue su mayor pecado
se murió y se condenó

Que sí, y no tenía pa comer.

Estando en el infierno
se le oía decir:

¡Esto es vida, coño, esto es vivir!

Pues éso, hijo, esto es vivir. Pero tú a lo tuyo, repartiendo juicios y perjuicios desde tu presunta superior posición. Dices: "Lamentablemente no debo ser muy inteligente por que (sic) no acabo de reconocer la Obra en el esperpento que se recoge en esta web". Lo que en el inconfundible estilo rocambólico (al loro el palabro) vuestro quiere decir que todo es mentira. Bien. No voy a alterarme. Al fin y al cabo yo aquí apenas he vertido alguna pincelada de mi experiencia personal. Soy en esta página poco más que un huésped, casi como tú, pero algo más cortés con quien nos hospeda. Lo que sí no me resisto a decirte es que tienes un problema con tus sentidos, porque de lo que te llega, sólo percibes algunos pocos detalles. Lo importante no te llega. ¿Sabes qué es lo importante para mí? El dolor. La insensibilidad ante el dolor ajeno es muy mala, Chisco. Aquí hay dolor. Mucho dolor. Donde tú ves esperpento, otros han derramado todo el dolor de su alma rota. Y a tí te molesta que te salpique tu impecable terno. El territorio del dolor humano para los creyentes como tú y como yo debería ser sagrado. Es Cristo que pasa, Chisco, aunque no nos guste su aspecto.

 Añades: "Tampoco entiendo como (sic) algunos inteligentes colaboradores han tardado más de 20 años en descubrir el carácter mentalmente destructivo que tiene esta satánica institución". Te burlas como me burlaba yo con mis amigotes y "hermanos" del infeliz protagonista del tango. No te rías, Chisco, si aspiras a dar a cualquiera de nosotros un abrazo, sé íntegro y ofrece un mismo semblante en toda ocasión. Sabes que cualquiera ha podido estar dentro tan entregado o más que tú hasta el último momento. Y tacharlos de tarados o mentecatos no ayuda en absoluto a resolver su situación.

Por fortuna, ya no es mi caso, pero agradece que no me haya pillado en caliente. Y cuídate de las cornisas, que esas no entienden de elegidos o perjudicadosno sea que hayas de soltar a destiempo un "¡canastos!" y nos veamos aquí los dos echando unas letras.

Kaiser

CARTA ABIERTA DE SÚPLICA

Al Obispo de la diócesis de Carlita. A sus directoras.

Se me llenaron los ojos de lágrimas al leer el correo de Carlita de esta semana. No me veo capaz de contestarla a ella directamente, pues no creo que sirva de nada. Es una sensación de impotencia terrible a la que sólo encuentro escape mediante esta carta abierta de súplica.

Súplica, en primer lugar, a cualquier Obispo que nos lea en Opuslibros o a cualquier sacerdote diocesano que, a su vez, tenga acceso a algún Obispo Diocesano o alguna Conferencia Episcopal. Ayuden, por favor, a Carlita y a todas las “Carlitas” que en este momento están sufriendo en el Opus Dei.

Ojalá conociera yo la diócesis desde la que escribe Carlita. Ojalá pudiera mostrarle su carta al Sr. Obispo. Ojalá lea la carta de ella. Ojalá lea la mía.

Sr. Obispo, con toda la veneración y respeto que le debo,  le suplico que lea la carta de esta joven de 16 años de su diócesis que está sufriendo tanto en estos momentos. Lea cómo esta adolescente busca sinceramente la voluntad de Dios. Lea, Sr Obispo, cómo ella misma, inocente víctima de una consciente y culpable ocultación del derecho de la Iglesia, se autodefine como “numeraria”, cuando el Opus Dei y Usted saben que no puede ser numeraria ni comprometerse como tal en ningún aspecto, ni ascético ni de formación ni de entrega material antes de los 18 años. Sr. Obispo, se lo suplico con lágrimas en los ojos, intervenga por favor, agarre los estatutos de Opus Dei, a los que usted tiene acceso y hable con las superioras del Opus Dei que han presionado a esta niña y asegúrese de que vuelve la paz a su alma.

Sr. Obispo, Carlita es una de las almas mejor dispuestas de su diócesis. A sus 16 años está buscando con ansia la voluntad de Dios para ella. La Iglesia Católica prohibió, como Usted sabe, que se presione a ninguna adolescente para que se comprometa como numeraria. Sálvela  Sr. Obispo, porque yo me siento con total impotencia ante este terrible atropello.

Y para la directora del centro al que va Carlita. También con lágrimas en los ojos te pido por favor que tengas compasión de ella. Quien quiera que seas, directora de Carlita, te suplico también a ti con el mayor de mis respetos: coge el librito del Catecismo de la Obra que tienes bajo llave en el armario del consejo local, en el cuarto de dirección. Cógelo y vete al oratorio. De rodillas en el primer asiento del oratorio, lee el punto en el que dice que nadie puede ser numerario antes de los 18 años. Luego mira de frente al Sagrario y, si puedes, sin apartar la vista, dile a Dios que a pesar de lo que has leído y que ya conoces de memoria, vas a consentir que Carlita permanezca en la ignorancia, que siga sin saber que puede continuar felizmente viviendo su trato con Dios como lo que ella es, con lo único que ella puede ser por derecho: una supernumeraria. Mira a Cristo a los ojos y dile a Dios que vas a ocultarle la verdad a Carlita, que vas a dejar que Carlita siga sufriendo entre las dudas y la tristeza.  Mira a Jesús cara a cara y –si es que todavía puedes aguantarle la mirada- dile que a pesar de todo lo que sabes permitirás que Carlita pueda llegar a creer que ella traiciona a Dios, cuando tú y yo sabemos que no sólo no le traiciona sino que, por el contrario, lo ella desea es buscar Su voluntad. Mira a Jesucristo a la cara y dile todo eso, si puedes. Y notarás que empezarás a hacer oración de verdad, y que Dios te contestará diciéndote : “llama a Carlita hoy mismo; tranquilízala, muéstrale la verdad, enséñale incluso físicamente el catecismo para que la pobre se quede tranquila y pueda seguir actuando como cualquier supernumeraria, muéstrale personalmente tu cariño y amor y tu apoyo, dile que estarás a su lado. Muéstrale la Verdad, Muéstrale Amor. "Yo soy el Amor, yo soy la Verdad”.

Una vez más te lo suplico, directora de Carlita. No seas cómplice de esta mentira, no seas cómplice de esta injusticia y tú también recuperarás la paz personal con Dios y contigo misma. Te sentirás mucho mejor, al haber dicho la verdad y toda la verdad, al haber terminado con un sufrimiento inútil de un alma buena, al haber evitado que Carlita padezca por más tiempo y sufra -tal vez para siempre- daños irreparables en su alma.

¡Por favor, os lo suplico, no dejéis a Carlita así!

Terpsícore

El otro día un amigo mío que está bastante "como las cabras" me envió los siguientes chistes, y como me hicieron gracia los publico:

- Mamá, mamá, en el colegio me llaman opusina... ¿Tienes un momento?

Comentario: Es muy típico la frase: "Tienes un momento..." Cuando llegaba a mis oídos pensaba sin dudar: "correción fraterna me va a caer". Y acertaba casi siempre... Es una expresión muy diplomática, para darle importancia y seriedad a lo que se va a decir a continuación... De todas formas la corrección fraterna tiene entraña evangélica, y la verdad que en la Obra te decían las cosas cara a cara porque te querían ayudar. Luego compruebas que existen unas correciones fraternas absurdas: Llevar la camisa por fuera, Llevar zapatillas... En general todo lo que "desdice del cargo y posición que ocupo". En general todo lo que afecte al Tono Humano. Estoy de acuerdo con cuidar el tono humano (cada uno debe vestir de acuerdo a su edad)...  Lo que no estoy de acuerdo es que sea tema de correción fraterna... Y creo que Nuestro Señor que es muy bueno y lo ve todo, está por encima de esas "tiquismiquerías".

Me acuerdo de un Curso Anual en el que me cayeron cerca de 4 decenas de correciones fraternas... La mayoría por detalles sin importancia... Y cuando por trigésima quinta vez oyes: "Tienes un momento..." acabas quemadísimo.

- Mamá, mamá, en el colegio me llaman opusina. - Y, ¿tú que haces? - Les encomiendo...

Comentario: Cuando alguna persona no entiende a la Obra se le suele encomendar, para que tenga buen espíritu... Este chiste es de la típica niña que ha pitado con 14 y medio y va emocionada por la vida... Pero de todas maneras está bien porque las encomienda, reza por ellas... y quizá en un futuro consiga que vayan por el centro...

- Como se dice numeraria en chino: Sincolxon (sin colchón) Comentario: Las numerarias duermen sobre una tabla de madera, es una mortificación diaria, menos cuando van al curso anual... y hasta que cumplen los 40 años (creo)

Prelaturator

Hola Chisco

No caigas en el error de reducir esta página, donde se permite la libertad de expresión de los participantes, en un enfrentamiento personal entre los que son de la obra y los que dejaron de serlo, es decir: si los tontos son los que quedaron y se fueron los listos o al revés.

Aqui encontrarás muchos testimonios con un tema en común: la amarga vivencia que supone la crisis vocacional dentro del opus. Sólo cuando sales de la institución ves la actitud de contradicción e hipocresia que hay en la obra. No se si es satánica o no, pero te aseguro por experiencia personal, que una vez te has ido le importa un carajo si tienes techo donde vivir o de que vas comer. Creo que no es justo despues de dejarte una juventud, ilusiones y trabajo (y ..pasta) para sacar adelante a la institución. Ya eres mayorcito para entender que es de lo más corriente este tipo de crisis. Aparecen en todos los ambitos de compromiso entre dos partes, ya sea instituciones eclesiasticas o entre dos personas. Cuando el tema se circunscribe a la pareja existen normas civiles que permiten el reparto de deberes y derechos una vez ha cesado el vínculo matrimonial. En la mayoría de instituciones eclesiasticas la salida de un miembro es fenómeno corriente y considerado como algo habitual.... excepto en el opus. Y si no ¿a cuento de qué todo lo que se escribe aqui? La obra tiene que cambiar radicalmente el modo de entender la dimision de sus miembros, tanto en el aspecto pseudomoral de condenacion eterna como de dejar que una persona que ha permanecido en la obra 15 o 20 años se quede con una mano delante y otra detrás.

Otro tipo de aportaciones que recibe esta página (y que son muy interesantes) tienen que ver con la institución en sí. Se hacen reflexiones de los fines, cual es la realidad de la vinculación de los laicos, la terrible cuestión entre el secreto de la dirección espiritual (leer por favor el escrito de Antonio Esquivias), la dudosa moralidad de plantear una vocación a un adolescente.. etc... Creo Chisco que quien escribe este tipo de cosas es porque conoce bien a la obra desde dentro, y aunque te parezca increible, no de un año o dos, sino a lo mejor desde 15, 20 o más años. No los leas si crees en conciencia que te haran daño. Pero por favor, respeta a los autores tanto en su dimensión afectiva como intelectual y no hagas juicios de valor sin saber un poco más de esas personas. De la obra se han ido y se estan marchando personas de una gran valía humana e intelectual. No cometas el hipocrita error institucional de considerarlos como tontos, locos o enfermos.

Por eso creo que cuando dices que "me dais algo de pena" quien de verdad tendria que darte pena es la obra, porque este espectáculo lo ha generado la institución y su peculiar forma de ser.

Por último, no tengo ningún inconveniente en darte un abrazo. Tengo buenas amistades que son del opus: para mi lo importante son las personas y, por supuesto, el respeto mutuo a las creencias de cada cual. Pero me parece que cuando tus jefes se enteren que vas repartiendo carantoñas a la gente de opuslibros te va a caer un paquete de los buenos.

Pues eso, un abrazo

Labuhardilla

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