CORRESPONDENCIA

Domingo, 13 de Marzo de 2005

Pues se dice pronto, pero después de veinte años (veinte) esa chica (sí, le llamo "chica" porque no es cuarentona, ¿y qué?) aún tiene con frecuencia dificultades para dormir. Es una monada, una persona bien completa, inteligente, trabajadora, buena esposa, gran amiga y mejor madre. Que quién la pillara, vamos.

Aquella otra niñita se había despachado bien a gusto con ella, desde luego. De esto acaba de hacer doscientos cuarenta meses. Que te está faltando generosidad... que no te das cuenta de que le das la espalda a Dios... que fuera de Lo Nuestro serás una infeliz... que los hombres son todos unos aprovechados que solamente piensan en lo único....

Tras siete mil doscientos días (en España, a ojo de buen cubero, lo que se tarda en pagar una hipoteca corrientita) el eco inmundo de aquellas fanáticas soflamas todavía suena en el alma de ella. Todavía le hace dudar. Todavía le atormenta una necia sensación de culpabilidad cuando la intimidad más sublime la lleva de paseo por ese edén en que el cuerpo le canta al amor con fuego y suenan melodías de sabrosa entrega, de placer.

No es una chica con problemas, más bien al contrario. Es una mente equilibrada. Una vida ordenada, divertida, enamorada, repleta de idas y venidas.  Encontró hace años un faustísimo amor que la adora (sabe lo que es bueno). Nunca aceptó las palabras de aquella niñita tonta que cumplía su patético encargo proselitista. Siempre fue y es una magnífica cristiana llena de cualidades. Además, está como un queso.

Solamente le queda un enemigo dentro de sí: el escrúpulo torcedor y canalla que aquella otra niñita (hace ciento setenta mil horas, coño) supo inocularle. Y ese escrúpulo es aún capaz de privar a semejante persona de una parte de su merecidísimo descanso. Algo parecido a un shock (¿cómo se escribe shock?) que cuando se presenta acapara toda su atención, dispara toda su capacidad de autocrítica, agrede a todo su (inmenso, por cierto) sentido de la generosidad.

Lo lamenta cuando lo analiza, lo desecha cuando lo razona, lo rechaza mientras lo comparte. Pero no puede con ello en determinadas situaciones: ni en la turbada soledad del malquerido insomnio, ni en la dulcedumbre placentera del cuerpo extasiado por el amor.

Que Dios confunda a la niñita aquella. Que confunda a todos los niñitos y niñitas que continúan rifando por el mundo su castrada tómbola dañina, estúpida y egoista.

Y que nos perdone a quienes quizá sembramos durante una larga temporada la misma podredumbre.

Y ya metidos en gastos, que ilumine a quienes tienen la capacidad de Detectar, Analizar y Decidir al respecto. Que me he enterado que los hay muy listos y muy preparados.

Es que la he conocido hace unas semanas y no hay derecho. Coño.

Lappso.

 Querido Labuhardilla: Por lo que cuentas, intuyo dos cosas: que, estando en la Obra hiciste testamento y que no has hecho nuevo testamento. Las posibles consecuencias de tu actual situación serían (si fallecieras, claro está), las siguientes:

1º.- La eficacia del testamento ÚNICAMENTE DEPENDE DE UN HECHO: LA MUERTE DEL QUE LO OTORGA. NO DEPENDE DE OTRAS CUESTIONES, POR MUY “JUSTAS Y DIGNAS” QUE PUEDAN PARECERTE: El trato habido durante la vida, la lealtad de los herederos, la “simpatía” hacia los que designas herederos, el pensar que “ya no tienen interés en tu herencia”, etc... Por eso es un acto esencialmente REVOCABLE porque, en vida, puede cambiarse tantas veces como se quiera a fin de establecer, precisamente, LA ÚLTIMA VOLUNTAD, es decir, la que sustituye a la anterior que ya no será la última.

2º.- Tu última voluntad siempre deberá YA  regirse por testamento, puesto que ya no es posible morir “intestado”, es decir, en situación en la que es la Ley la que determina quienes serían tus herederos (en tu caso tus hijos). El testamento que tienes otorgado, sólo puede modificarse por OTRO TESTAMENTO en el que instituyes heredero a alguien de tu confianza (tu mujer, tus hijos, o ambos).

3º.- Además, el nuevo testamento debe ser otorgado con las mismas solemnidades que el anterior (notario, 2 testigos, escritura pública).

4º.- Al fallecer alguien, sus parientes más cercanos (cónyuge e hijos), solicitan el certificado de últimas voluntades al Ministerio de Justicia. Sin ese certificado no puede autorizarse acto alguno por parte del Notario. Tanto si es negativo (“murió sin otorgar testamento”), para tramitar lo que se conoce como DECLARACIÓN DE HEREDEROS, como, siendo positivo (“otorgó testamento ante el Notario D. XX el día 10 de marzo de 1995”) para proceder a la ACEPTACIÓN DE LA HERENCIA, en cuyo caso el Notario únicamente autorizará la aceptación A QUIENES APAREZCAN COMO HEREDEROS EN EL TESTAMENTO RELACIONADO EN EL CERTIFICADO DE ÚLTIMAS VOLUNTADES (en tu caso, la Obra, o alguna de sus sociedades satélites).

5º.- POR TANTO: Tus legitimarios (es decir, tus dos hijos), deberían ponerse en contacto con quien apareciera como heredero de tu testamento para “negociar” el pago de la legítima (2/3 de tu caudal hereditario), pudiendo incluso llegar a pleitear por ese derecho que la Ley les concede. Lo mismo sucedería con el usufructo que la Ley otorga a la viuda no separada judicialmente.

6º.- Las relaciones jurídicas que se establecen tras la muerte de una persona –lo sé por experiencia profesional- son frías, distantes y se ciñen a lo que dejó escrito el muerto, sin intentar desentrañar su auténtica voluntad, puesto que la Ley presupone que, por ejemplo en tu caso, dispusiste del tiempo suficiente para modificar una situación que ya no es ventajosa para ti ni para los tuyos.

Ten en cuenta que en todo lo relacionado con el testamento se da mucha más importancia a la FORMA (escritura pública, posterior revocación también solemne) que al ESPÍRITU o a la LEALTAD mostrada por quienes, al final, aparecen como herederos. Estoy de acuerdo que así deba ser puesto que se discutirían todos los testamentos del mundo. Sólo en casos muy tasados es posible revisar las últimas voluntades del muerto y anular su propio testamento (proximidad con la fecha de su muerte, circunstancias de su otorgamiento –arrancar la voluntad, ejercer coacción, etc-).

TE DIRÉ UNA COSA: SI FALLECIERAS Y ME PREGUNTARAN: “Tolorines ¿A quien prefieres  defender a la Obra o a los hijos de Labuhardilla?: SIN DUDA RESPONDERÍA, A LA OBRA.

            Labuhardilla. Ve al Notario y, sin darle mayores detalles, dile que quieres hacer testamento y él ya incluirá (porque así se hace siempre), la coletilla de “revoca cualquier testamento anterior que pudiera haber otorgado...”. Y una última cosa: no menosprecies una institución como el testamento como si no fuera contigo o no lo consideres necesario. En España se precisan únicamente 14 años cumplidos para otorgar testamento, sin duda haciéndose eco de la fragilidad e inestabilidad de la vida humana.

Un abrazo,

TOLORINES

Carbono14:

Mira, chico, yo estoy fuera, pero puedo verte desde dentro. Y te veo mal. Crees que con tus evasivas has ganado la partida y no se trata de eso.

Dime, ¿qué sentido tiene resistirse a los directores?¿Cómo puedes vivir recelando de tus propios hermanos? (No importa que sean todos o algunos -como dices que decías-, con que sea uno me basta para decirte yo también y a la cara que ese recelo es de mal espíritu). ¿Qué clase de clima de familia es ese en el que andas metido? Reticente ante los directores y recelante de tus hermanos... ¿A santo de qué has hecho tú exactamente la fidelidad? A una vida de entrega y obediencia no, obviamente. A una capillita que te has montado tú mismo. Tu director no debe prestarte mucha atención, porque esas cosas saltan a la vista, muchacho. Quizá sea que les importas poco. Puede que se estén limitando a esperar tu defección. Habrás oído hablar del borrico de noria ¿no?. Pues tú te has quitado las orejeras, amigo.

Tu situación dentro me escandaliza. Habla abiertamente con tu director de toda esta empanada mental que te has montado y, o bien te propones revisar tu actitud y vivir plena, sencilla y fielmente el espíritu de Casa, o vete pidiendo la dispensa. No veo que estés en condiciones de reformar nada si no te has despojado primero de todo ese lastre que acarreas de soberbia, reservas y actitudes calculadas. Y estoy seguro de que cuando te hayas enfrentado a tí mismo y te descubras tal cual eres, comprenderás que quizá hay que empezar por reformar tu interior, y estarás en condiciones de decidir por tí mismo qué rumbo tomas, si el de los directores -¿a qué resistir?- y el de alfombra de tus hermanos -¿a qué recelar?-, o el de la puerta. Te lo digo de corazón. Y hago votos por que te aclares.

Un saludo. Kaiser

Me ha gustado mucho el escrito de Isabel y me ha hecho pensar sobre algunas cosas que escribo ahora por si sirven.

En ocasiones hay quienes se sorprende por tanta gente lúcida que siguen como fieles de la prelatura aun despues de conocer algunos aspectos poco edificantes. Como Isabel también mi padre es fiel de la prelatura desde finales de los 80, cuando una hermana ya había dejado de ser de la obra, a la que siguió otra hermana despues de 15 años y yo finalmente que lo dejé despues de 27. Pero ahora no se me ocurriría decirle nada para que lo dejase pues es uno más de los miles de supernumerarios que son de la obra como en su época fueron de acción católica pero con la diferencia de que hay unos pesados que les piden más dinero... pero que me digan que viven igual entrega y exigencias o "vocación" que los numerarios... No se lo creen ni en el consejo en Roma. Cuantos años acercándose el 19 de marzo y aquellos que se habían ido de crucero gastando miles de euros en el viajecito y en lugar de animarles a seguir "fuera" se les perseguía para que renovaran. A veces era otro supernumerario el que les llamaba, alguno de esos héroes del silencio, que con muchos hijos no podía llevarlos a Fomento por lo caro que eran (por cierto colegios cada vez más elitistas para rechazar a los propios de la prelatura, pues la pela es la pela). O tantos que eran literalmente presionados... ese día. El resto del año, ya se sabía: algun encuentro, algun retiro... y eso bastaba.

Y esto es un aspecto poco tratado, pero pienso que es una realidad: hay una buena parte de la gente de la obra que viven unos aspectos y otros, muy pocos, se creen que son los únicos católicos de verdad, los últimos de Filipinas en este mundo que tan mal anda.

Y si hablamos de los numerarios nos podemos encontrar con otro dato: en una buena parte de los centros te encuentras gente que vive allí por lo comodo que es que te sirvan, lo bonito de los vips, y porque no saben donde ir... Te encuentras quienes tienen su despacho fuera, donde pueden ver la tv o dormir... o quienes en el propio centro se conectan habitualmente a la web, o incluso ven la tv,... viven una vida aparte dentro de la obra. Y aguantan. Son esos centros donde a veces llega el de la dl tan majo y joven, pero tan iluso y estúpido es sus planteamientos, al que sonríen y en el fondo desprecian. Tanta hipocresía!

A muchos de estos se les mantiene por sus relaciones, status, trabajos,... y nadie se plantea en serio con animarles a irse. Algunos de estos nos leen y lo dicen: pero no estamos tan mal....

Después están los que algunos como Satur describen tan bien: los superman, los que no han hecho profesionalmente nada en la vida salvo decidir sobre los demás y opinar sobre todo tipo de trabajos. Han vivido en delegaciones, centros... y no hay donde colocarles salvo de directores, estén cuerdos o no: lo importante es que sean dóciles y obedezcan.

Finalmente, otro tema: por quien pregunta sobre testamentos, si os tranquiliza os diré que no es habitual que saquen a relucir un testamento de quien ya no es fiel de la prela. Sería un bochorno pues podría irse contra la misma y si hay algo que odian es la mala prensa. Conozco un caso en Napoles que se llegó a rechazar una herencia de muchos millones e inmuebles, palacios... por no pleitear. De todas formas pienso que es muy bueno que todos tengamos testamento, al menos ológrafo, donde podemos anular el que en su día hicimos.

Otra cosa, para hablar otro día, serían las inexistentes propiedades de la prelatura y como todo está o pasa por un entramado muy bien organizado jurídicamente, doy fe, alrededor de la misma. La prelatura tiene a su nombre nichos en cementerios y algunas cosas que no ha podido rechazar a su nombre como la iglesia de San Miguel, parte de Torreciudad,... y poco más en España. Lo suficiente para poder decir que sí se hace cargo de su clero...

Rapelu

El escrito de Melqui (11/03) contiene dos indicaciones que me parecen muy correctas:

1) Defender que el contenido de 'opuslibros' se debe centrar en la realidad del Opus Dei y no servir para 'divagar' acerca de la Iglesia.

2) Cuando surjan posiciones agresivas en relación a la Iglesia, no dejar de contribuir para llegar a un esclarecimiento verdadero de los hechos (en este caso respecto de la 'historia de la esclavitud')

En lo que me concierne, he decidido continuar participando activamente en la web asumiendo como cierto que "No se trata de una web contra la Iglesia"! Como no siempre esto parece estar suficientemente claro, agradezco a Melqui el hecho de recordarlo.

Marypt

(Texto original en portugués...)

He leído con mucha ternura (y tristeza) el escrito de Emevé sobre el 19 de marzo y la generosidad. A quienes no sean de la obra, les cuento que en esta fecha, los miembros, además de renovar (o no) sus compromisos temporales con la institución, se reúnen en los centros para hacer “La lista de San José”. Cada uno escribe el nombre de 3 amigos por los que rezará y se mortificará (y coaccionará a través del proselitismo)  para que pidan la admisión en la obra. El siguiente 19 de marzo, se leerá en público la lista y se comprobará “si San José” ha hecho “el milagro” de que algunos de esos nombres escritos en la lista del año anterior, son ya nuevos miembros del Opus Dei.

A los que dicen que mentimos, a los padres con hijos en clubes de la obra, a los interesados en saber cómo se produce la crisis vocacional en el Opus y lo "sobrenatural" que es, les recomiendo la lectura de la meditación interna al respecto: “La víspera de San José” (del Tomo V de Meditaciones, páginas 227 a 234). Y al prelado del Opus Dei, también se la recomiendo para refrescarle la memoria:

Entrevista a D. Javier Echeverría, publicada en el diario 'La Repubblica', con motivo del Centenario del nacimiento de Josemaría Escrivá. Roma, Italia (10-I-2002). Recogido en Romana N° 34 • Enero - Junio 2002 • Pág. 99.

 

Pregunta: Durante mucho tiempo han llovido críticas de que se hace un proselitismo excesivo, también entre menores de edad, o de coacción psicológica para confesarse sólo con sacerdotes del Opus Dei.

 

Respuesta de D. Javier Echeverría, actual Presidente General del Opus Dei: "Francamente me parece que las críticas a las que alude, que por otra parte nunca se han demostrado, están ya superadas. En cuanto a la obligación de confesarse debo decirle que no responde a la verdad. Una disposición de este tipo sería contraria a la libertad que la Iglesia reconoce a todos los cristianos. Que después los fieles de la Prelatura prefieran confesarse con un sacerdote que les puede ayudar mejor porque vive su mismo espíritu, me parece del todo lógico y normal. Sin embargo, tienen siempre entera libertad para confesarse con cualquier sacerdote católico."

Al tema de la confesión sólo con sacerdotes de la obra, ya le recordamos al prelado –muy olvidadizo por lo que parece-, las palabras de Escrivá al respecto, que él como el resto de los miembros llevará a la oración con frecuencia pues se trata de otra meditación interna.

Volviendo al tema de “La lista de San José”, yo me voy a hacer una anti-lista o contra-lista, para contrarrestar. Voy a recordar a tres miembros de la obra (con otros tres de repuesto por si ya se han salido, que será lo más probable) y rezaré por ellos para que san José o quien corresponda les dé fuerzas para irse.  Patricia Velásquez , tú vas a ser la primera de mi lista ;-))

Saludos,

Compaq

Gracias por decir que de la lectura de nuestra web ha crecido su deseo de que “Dios me ayude pues a conocer mas profundamente la Obra para dar a conocer mas cada dia la invaluable y maravillosa labor realizada por San Jose Maria Escriva de Balaguer y que muchos de sus seguidores continuan realizando”, porque esa es exactamente mi meta.. que los que lean aquí, conozcan más profundamente la Opus Dei.

Y yo añado... Cuando la conozcas “más profundamente” vienes y nos dices qué te parece, a los que escribimos aquí que ya la conocimos...

Pero a pesar de eso, ruego a Dios que no te conceda el deseo, que te ahorre el conocerla como nosotros lo hemos hecho y que no padezcas lo que hemos padecido.... En otras palabras, que el buen Dios te mantenga en la ignorancia y que seas muy feliz chica, que de eso se trata la vida...

Gracias por tus oraciones, a nombre propio, claro,

Emevé

¡Cómo me ha alegrado leer tu correo (11/03), Patricia! ¿Ves? Eso es la libertad. Tú te has leído la página “porque te ha dado la gana” y su contenido no te ha convencido. Es más, has salido fortalecida en tu convicción de que el Opus Dei es algo positivo para ti. Aunque discrepo radicalmente de esa conclusión no seré yo el que te intente convencerte de lo contrario. Entre otras razones porque tú has tenido la oportunidad de contrastar: por un lado mamas enfervorecida en las ubres de su doctrina (que ya se encargan de infiltrarte en vena, qué me vas a contar) y por otro lees en opuslibros los centenares de testimonios de personas que en su día pasamos algunos o muchos años por las filas de la institución y que cuestionamos su sistema y sus métodos. Ahora eliges tú. Yo hubiera deseado poseer las dos caras de la moneda para que mi elección (de salir pitando, valga la paradoja) hubiera sido antes y con menos traumas. Saludos.

Jose

Soy Viky. He estado en la Obra desde el año 1969.  Nunca he dudado en irme de la Obra pero si tengo inquietudes que nadie me contesta, quisiera que algunos de ustedes me ayuden a resolver mis dudas ya que en Casa no lo hacen, un día te dicen una cosa y otro día otro. 

Por ejemplo pedí hacer la fidelidad, pues me considero una persona fiel y apostólica, en una palabra, que lleno los requicitos para ello.  Sin embargo  me han dado varias respuestas.  La última fué que para hacer la fidelidad era porque te ivan a nombrar para celadora, cosa que yo por motivos de salud no podría ser, al menos en actualmente. (opinión personal). Cuando lo pedí en esta última ocasión, hace 5 años si hubiera podido ser celadora por lo que a mi salud respecta. 

Anteriormente,cuando pedí ser celadora, (gozaba de buena salud) y se lo dije al sacerdote me dijo que eso era una presunción pues nadie debe pedir un encargo de esa naturaleza.  Yo la verdad lo hice con un gran afán de servir a mis hermanas, nunca como querer estar por encima de nadie.

Entonces yo pregunto a las/os que saben.  ¿Es cierto eso de que se me niegue el hacer la fidelidad porque no estoy en condiciones de ser celadora por mi salud?, o hay algo más de fondo.

En las Convivencias se nos dice que pocas supernumerarias son las que la hacen, que son personas que cumplen con las Normas, Costumbres, Medios de Formación, que viven la Corrección fraterna, que llevan mucho tiempo en Casa, etc.  y que insisten en pedir hacerla.  No me ha faltado más que el insitir pues sólo de vez en cuando lo he pedido.

Tengo otra duda.  En mi Región hasta hace muy poco supernumerarias hacen la Charla con otra supernumeraria.  ¿Esto fué así siempre? o es por falta de vocaciones?.  Aclaro que esto no lo he preguntado. 

Les agradezco a todos de antemano sus respuestas.

He estado leyendo sus libros, sus escritos y realmente me da mucha pena algunos casos y que hayan tenido esas experiencias tan malas.

Cuando yo pité ya tenía cuatro años de asistir a la labor de San Rafael.  Sabía todo, y vivía todo por lo que no  me costó nada el plan de vida, el apostolado, los medios de formación, etc. 

Lamento mucho que a algunos de ustedes no les hayan hablado claramente, obviamente eran muy jóvenes y si les explicaban lo de dormir en tabla, usar cilicio, etc. hubiesen salido corriendo antes y no después. Pienso que el error está en admitirlos como aspirantes a tan temprana edad.  Realmente no lo considero prudente para la generalidad de las personas.

Que Dios los guarde y les encomiendo.

Viky

Continúo siguiendo con inmenso interés y gratitud, todo lo que acontece en la página.

Me ha llamado la atención los supuestos miembros de la Obra que últimamente han participado. Y es porque yo sabía que tenían prohibido –por lo menos en Portugal-, acceder a nuestra página. En todo caso pienso que no deberiamos enredarnos en respuestas a esas personas: es evidente que sus intervenciones tienen que se publicadas pero, -desde mi punto de vista-, deberíamos hacerlos desistir por inación, no alimentando polémicas. También es evidente que no puede darse esta orientación so pena de incurrir en el modus operandi típico del opus y que todos deploramos.

En relación a lo que he leído de esos supuestos miembros del opus, todo me suena a falso, a postizo, permitiéndome, por tanto, dudar de la veracidad de su condición e identificar a esa gente como simples caballos de Troya. Me parece indudable que, a estas alturas, el opus ya ha dirigido a sus infiltrados hacia esta página. Tal vez no sean estos que últimamente han aparecido y si lo son, todavía no han descargado todo su arsenal. En cualquier caso, no me parecen merecedores de respuesta. Ya se pueden dar por satisfechos por el hecho de que sus intervenciones se publiquen, hecho que demuestra una clara benevolencia y pluralismo que la institución a la que dicen pertenecer, desconoce en absoluto.

Por último quiero decir que es un gran placer continuar leyendo las divertidas e interesantes participaciones de los ex y, hoy me permito destacar todo lo que ha escrito Jacinto Choza. Fue mi profesor en el bienio, en el 79 u 80, en un curso anual en Coimbra. De él recuerdo (además de los gigantescos puros), la más fabulosa charla sobre la pureza que oí durante mi permanencia en el opus, las deliciosas clases de filosofía y una tertulia pirata en la que, al contrario de lo que era habitual, habló del espíritu de la obra y no mitificó al Padre Escrivá, con relatos de sus putativos milagros.

Abrazos a todas. Hacia el frente es donde está el camino como bien sabemos.

Paulo Andrade Silva

(Texto original en portugués...)

Hola Patricia, 

dices que este sitio web ha aumentado tu deseo de conocer la obra y que no hemos conseguido el objetivo deseado. No quiero hablar en nombre de Opuslibros porque esto lo harán los responsables del sitio, si lo creyeran oportuno. 
  
Yo no deseo que la gente odie a la obra sino que sea libre y consciente en las propias elecciones. Vale decir que esté informada. Tú has leído lo que escribimos y has decidido que no se nos debe tener en cuenta: ¡requetebién! Para mí, lo importante es que tú hayas tenido la posibilidad de escuchar otra campana, además de la del Opus Dei. El resto es asunto tuyo. 
  
En cuanto al odio, me disgusta pero no estoy de acuerdo contigo. No contamos lo que ha sucedido por odio, sino porque la memoria es la única cosa que puede dar un sentido al tiempo pasado en la Obra. Poco importa, pues, el tono usado en los testimonios indiviuales: cada uno escribe como le parece. Lo que cuenta son los hechos. Somos ya tantos los que decimos las mismas cosas. ¿No te viene, por lo tanto, la duda que hay un fondo de verdad en lo que contamos? Si no te viene, paciencia: ¡te deseo, igualmente y de corazón, mucha suerte! 

Frida

Nota de la web: querida Frida, puedes hablar en nombre de Opuslibros cuando quieras. Es más, lo acabas de hacer. Gracias y auguri.

(El correo original en italiano...)

Para la encuesta de centros de estudios.

En Guatemala, en 1989 y 1990 eramos 18, las dos promociones, no recuerdo exactamente cuántas de cada año.

Espero te sirva.

Saludos a todos y todas.

Marigo

VÍSPERA DE SAN JOSÉ

448.

18 de marzo

VÍSPERA DE SAN JOSÉ

—La Costumbre de la Lista de San José.

—La vocación a la Obra es una gracia que el Señor quiere conceder a muchos.

—Tenemos obligación de hacer proselitismo.

ESTAMOS ya en la víspera de San José, Patrono de la Obra y de todos sus apostolados, a quien encomendamos de modo especial el proselitismo. Siguiendo una antigua tradición de familia, pondremos bajo su patrocinio a aquellas personas que dan mayores esperanzas de vocación a la Obra.

La Costumbre de la Lista de San José empezó antes de la guerra española de 1936. Nació con una gran naturalidad, como todas nuestras Normas y Costumbres: con la naturalidad con que el agua mana de una fuente. Necesitábamos vocaciones, y nada más lógico que acudir a la intercesión de Nuestro Padre y Señor San José. El era el cabeza de familia en el hogar de Nazaret; por eso es natural que le pidamos que aumente la nuestra, que seamos muchos, cada día más, en el Opus Dei: una familia numerosa.

Al principio, también yo ponía nombres, como todos; pero dejé de hacerlo cuando no era razonable que lo hiciera. Ahora me uno a las listas que hacen en todos los Centros de todas las Regiones. [De nuestro Padre. Tertulia, 19-III-1969]...

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