De la ficción a la realidad: de Dan Brown a Gareht Gore

aop en el exilio, 3/05/2024

Trabajaba en el gobierno de una región cuando llegó un aviso desde Roma anunciando con mucha anticipación la salida del Da Vinci Code. No tengo memoria fotográfica, pero decía algo así como que en los próximos meses saldrá una novela de ficción que usa elementos de la obra y de la iglesia, que no hay que asustarse, que será una ocasión para informar mejor sobre la obra y la iglesia. Creo que también especificaba que no se les enviara el aviso a los centros, sino que se fueran viendo formas de comunicarlo...

Si alguien tiene copia de ese aviso o se recuerda, sería interesante que compartiera una mejor versión de mi recuerdo, y así también poder juzgar mejor las evoluciones que presenciamos del Apostolado de la opinión pública (AOP). Tesis doctorales podrían salir de su estudio.

Por esos años 2005 y 2006 hubo una revolución en el AOP. Convivencias en otros países, cursos en Roma, España y New York. De repente se organizaron en las regiones cursos de vocería y manejo de crisis para informar sobre la obra. Ya saben, puras iniciativas de personas preocupadas por el mundo actual. Todos los numerarios y numerarias con supernumerarios y cooperadores selectos, y hasta de san Rafael encajadas, se les convocaban a esos cursos. En reuniones mixtas de numerarios y numerarias en la misma habitación acompañados por garantes de las buenas costumbres y comportamientos, se explicaban estrategias de comunicación y al final simulaba que un periodista te hacía una entrevista con preguntas difíciles en diferentes formatos y contextos (radio, tv, etc.). Las grababan y luego las reproducían a la vista de todas y todos para aprender buenas y malas prácticas comunicacionales. Te hacían sentir que tu vida en los próximos años sería dedicarte a comunicar sobre el opus dei con frases al estilo de “tranquila, con un poco más de práctica lo harás mejor”. Recuerdo que una numeraria en una entrevista real le preguntaron sobre el cilicio y dijo algo así como que ponerse el cilicio es más sencillo que ponerse los zapatos. Es en serio.

Cuando leí el tema del libro y la nota de prensa oficial del opus dei Sobre el libro “Opus” de Gareth Gore (Simon & Schuster), me recordé de todo lo que les cuento de la era del Da Vinci Code. Inmediatamente, los grupos de exmiembros de la obra en los que estoy enloquecieron con la nota. Ya todas compramos el libro en preventa. La conclusión de los mensajes cruzados en los grupos fueron las siguientes: la AOP la va a tener más difícil con la obra de Gareht Gore dado que los temas que trata se sustentan probablemente en investigaciones, documentos, datos contrastables, testimonios, etc.

La misma nota de prensa informa sobre las respuestas que la oficina de comunicación del opus dei dio a las preguntas del autor, y las facilidades de contactos de personas. A la vez manifiesta su línea editorial prejuzgando que el contenido son teorías conspirativas y los mensajes de la editorial puro marketing: “Sentimos que la publicidad difundida ahora por la editorial sea más propia de un libro de teorías conspirativas y especulaciones forzadas que de la investigación rigurosa que el autor pretendía llevar a cabo. Esperamos que sea el fruto de un error de marketing y no un reflejo del contenido del libro.” Es interesante que parece conceder un espacio, de que el contenido del libro proveerá datos ciertos e irrefutables. Prepárense.

De aprovechar la ocasión de informar sobre la obra con ocasión de la ficción de Dan Brown a hacerlo con ocasión de Gareth Gore tiene muchas diferencias. En la primera ocasión se vieron forzados a transparentar lo naturalísimo que eran algunos aspectos de la vida de los miembros de la obra, como usar el cilicio y las disciplinas, de hacer decenas de normas y prácticas de piedad, y vivir en centros como una familia más normal que normalísima. Me recuerdo de numerarios y numerarias que salieron en programas de tv mostrando sus cilicios como si fuera el accesorio más cool, y con fotos y videos de tertulias con puros hombres y cosas así.

Desconozco los contenidos del nuevo libro OPUS. Pero los subtítulos nos dan algunas ideas. Dinero oscuro (MONEY DARK), tráfico de personas (HUMAN TRAFFICKING), conspiración de la derecha (RIGH WING CONSPIRACY). También desconozco el tipo de datos contrastables y testimonios con los que basará la narrativa. Lo que sí es muy sencillo de prever, es que cada uno de esos datos y testimonios tienen puntos de vistas válidos e innegables. La AOP la va a tener bien difícil. No me imagino los nuevos cursos de vocería. Quizá la ofician de comunicación nos haga un spoiler del nuevo libro cuando lleve a cabo su anunciado plan de que en los próximos meses “pondremos a disposición de los lectores material relacionado con los temas tratados en nuestras conversaciones con el autor, para aportar hechos y datos reales y contrarrestar cualquier posible desinformación a que pudiera conducir el libro. Asimismo, incluiremos una serie de preguntas y respuestas sobre los temas que requieran alguna aclaración.” Y ahí estará la verdad verdadera. Quién va a dudarlo.

Decir que es normalísimo plantear una crisis vocacional a menores de edad pero que tienes que decir 7 veces que sí hasta que eres mayor de edad, que hacer promoción social en poblaciones vulnerables está muy lejos de conseguir mano de obra gratis, actuaciones generalizadas de miembros del opus dei que obedecen a sus directoras pero que sus decisiones son personales (jamás líneas corporativas); que las posibles degeneraciones en prácticas antiguas que ya no se hacen porque entendemos mejor los nuevos tiempos, etc.; que pedimos perdón por cualquier error que haya podido hacer sentir incómoda a alguna persona en casos contadísimos, y que no supimos de forma institucional y generalizada dar apoyo y soporte a esas situaciones, poquísimas, que en contadas situaciones específicas con sólo los dedos de una mano, pudieron sentirse heridas… Ya conocemos el discurso.

La van a tener difícil. El opus sigue corriendo la arruga. La realidad es real. Quizá una oportunidad para continuar ese proceso tímido de transparencia que a veces parece emerger en el opus. Que lo que hacen con sus esfuerzos de cristianizar no se diluya después por el empeño en opusdeizar a las personas.

Me alegra que sigan surgiendo los espacios y formatos para informar sobre los abusos de uso y usufructo de personas, sus vidas y sus bienes. El libro OPUS parece prometer. Así como Da Vince Code tuvo su película, quizá esta nueva obra motive docuseries en Netflix.  

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