Opus Dei, expertos en Gaslighting

Yomerita, 3/05/2024

El gaslighting (luz de gas), según algún diccionario de nuestro amigo Google, es una forma de manipulación psicológica en la cual el abusador intenta que la víctima cuestione su propia percepción, cordura o memoria.

Lo traigo a colación para que la dama que sale a dar explicaciones por parte del opus (al principio del testimonio de Raquel) sepa que lo que hace tiene un nombre, se llama gaslighting….

Me parece lamentable que dentro de la institución no se conformen con lo que han logrado en términos de: personas depresivas, suicidas, alejadas de Dios, con traumas en diferentes aspectos de sus vidas, etc; así como miles de personas externando su sentir al respecto de su paso por la institución buscando abrirles los ojos a otros. No, ahora resulta y resalta que, señores y señoras, no importa cuantos coincidamos en lo que nos pasó y que nos contemos por miles, ellos tienen otros datos y es lo único que vale.

Nosotros vivimos “esas cosas” al parecer en una realidad alterna, estuvimos en el opus de otra dimensión por lo que veo. ¡Hice un viaje por Tierra #4 por 15 años, conocí otros mundos alternos y me voy enterando!

¿Qué te pasó “x”?, tu problema es muy personal según esta dama, nada generalizable y sobre todo, y para rematar, no pasa, nunca ha pasado y nunca pasó.

¡El cinismo!

Es una pena que te sientas así, pero básicamente eso no ocurrió (más o menos sus palabras).

¡El descaro!

Digamos, señorita que presta su voz a la institución (y vive dentro de ella) que si fuera una sola persona, le compro su discurso, pero no, no es así.

Usted y sus jefes están recibiendo la oportunidad divina de reconocer que se han hecho las cosas mal a tantos niveles, que resulta vergonzoso. Pero nosotros ya cumplimos con hacerles ver que ésta era su oportunidad. No quisieron, la próxima vez que se enteren del desmadre infinito que causaron sus acciones será cuando se presenten ante Dios, y será de uno en uno y no tendrán donde esconderse.

Y considerando que para que sus confesiones semanales tengan validez ante Dios o les sirvan para algo además de palomear en sus agendas otra norma cumplida, me permito recordarles el catecismo básico donde dice que se requiere además de reconocer el pecado tener dolor por él y sobre todo propósito de enmienda. Y al parecer con este gaslighting que nos hacen cada que deciden abrir la boca, no tienen ninguno de esos elementos fundamentales de la confesión.

¿Sus datos son la única verdad verdadera? ¿Lo que ustedes digan que pasó o no pasó, no tiene nada que ver con lo que sentí yo o dejé de sentir? ¿Es “neta”? (como decimos coloquialmente en México).

¡Y cuando esta situación ya no es solo de una persona sino de un montón, hagan el favor de no insultar nuestra inteligencia! O, si no les importa insultarla, entonces, no hagan el ridículo de esa forma.

Comencé a oír su respuesta y para adentro me decía: “la audacia” “el descaro” “la desvergüenza”, “la desfachatez”… no pude ni terminar de escuchar. ¡Náuseas y jaqueca me provocaron!

Me queda claro que es difícil superar un trauma cuando el perpetrador del mismo sigue libre, y además lo sigue haciendo. Una numeraria conocida contestaba a los testimonios que se han presentado con estas palabras: “cada quien habla como le fue en la feria”. Yo interiormente me quedé con la cara desencajada, pues la tenía como una persona sensible y diferente al resto.

¡Pues claro que cada quien habla como le fue en la feria! ¡Por supuesto! Pero el punto aquí, lo que espero de alguien que se dice cerca de Dios, es: “qué dolor tan grande siento solo de pensar en lo que tuviste que pasar, aunque yo no lo he sentido en carne propia, te abrazo y lo siento, e intentaré que a mi alrededor nadie se sienta así”. ¿Será acaso taaaan difícil poner a funcionar las neuronas espejo?

Señorita vocera, una vez más y cada que usted emite un mensaje, los traumas se subrayan, es lo único que logra, dejar constancia en vídeo de que para todos ustedes la virtud de la caridad tiene un significado muy sombrío. Que la libertad para ustedes significa cualquier cosa menos lo que dice el diccionario, y sobre todo, que con ustedes, Jesús vino en balde, porque no entendieron ni la “o” por lo redondo, ni todo lo que dijo ni siquiera el resumen que hizo ya para dejar de batallar con las entendederas y las explicaderas: amarse los unos a los otros como yo los he amado.

Qué lamentable que no solo sean culpables de todos y cada uno de las actos de los que tantos nos hemos quejado, sino que sean incapaces de reconocerlo y pedir perdón. Se requiere un terremoto de magnitud 9 para que todo el esqueleto que sostiene ese edificio llamado opus Dei quede expuesto, o mejor, destruido, y comiencen otra vez, o lo dejen por la paz (opción que sería aplaudible).

Yomerita … la encobijada oficial.