Sobre la 'Vida cotidiana…' Para Xaverissimus.- Aquilina
Fecha Wednesday, 18 April 2007
Tema 070. Costumbres y Praxis


Querido, he leìdo tu intervenciòn sobre mì escrito que la web ha publicado en italiano y en español.

 

Pienso que, en larga medida, tu opiniòn es muy de compartir: especialmente en lo de « aburrido, excesivamente plano». Se habla metodicamente de inumerables detalles que todos conocimos.

 

Pero…, hay unos “pero”.

 

Ademàs del argumento que ya alegò Agustina (que aprovecho para agradecer), acerca de la importancia de dar informaciòn previa a padres y aspirantes miembros de la Prelatura y que no necesita de màs profundizaciòn, quiero alegar alguno màs...



El ensayo tiene un marcado corte historiografico. Giancarlo Rocca, que me pidiò escribirlo, quiso expresamente que este fuera el tono del escrito, pues en los estudios  historicos sòlo hay lugar para una reconstrucciòn lo màs posible rigurosa y fundamentada sobre documentos. Me gusta pensar que me lo pidiò a mì porque juzgaba que mi forma de escribir y de argumentar era idonea para esta tipologia de ensayo; por cierto yo accedì a su requerimiento porque encontraba este trabajo muy adecuado a mi forma de ser y a mi forma mentis. Coincido plenamente contigo que su lectura puede resultar aburrida, igual que la lectura de intervenciones y trabajos que argumentan de teologìa o de derecho canonico, pero no coincido cuando pasas del juicio de “aburrido” a el otro de “falta de interés” pués, como sabemos muy bien, existe de parte de la instituciòn toda una acciòn de falsificaciòn historica que al cabo del tiempo, cuando nosotros –los protagonistas de determinadas epocas del Opus Dei- ya habremos desaparecidos, impedirà que historicos imparciales puedan reconstruir la vida real que vivimos, y de consecuencia proporcionar juicios definitivos y fundamentados sobre la instituciòn.

 

Ya ahora me pasa a menudo de leer o de escuchar de parte de personas que permanecen en la instituciòn que determinadas constumbres y determinados criterios “ya no se viven de esta forma”. Desde esto, hasta la negaciòn de determinadas formas y estilos de vivir que nosotros experimentamos en primera persona, el paso puede ser muy corto. Y como todo el trabajo de reflexiòn de estos años en opuslibros acerca de nuestro paso por la obra nos ha conducido, entre otras cosas, a darnos cuenta de que uno de los aspectos màs patologicos de la instituciòn es aquel que lleva a predicar una realidad en sì positiva y condivisible, pero a practicar de forma totalmente opuesta, y que esta praxis genera en las personas desorientaciòn y malestar psiquico, yo tengo la ilusiòn de pensar que dejar constancia sobre lo que era la vida plana, cotidiana, en determinada epoca aùn muy cercana a la època fundacional, y cimentando este documento no tanto e juicios, o criticas que pueden variar de una experiencia a otra, de una persona a otra, de una situaciòn a otra, sino precisamente sobre la documentaciòn interna de la misma instituciòn, pueda en el futuro tener su importancia para que la historia llegue a hacer justicia del Opus Dei.

 

Ademàs, sin esperar un futuro màs lejano, ya desde ahora la practica de determinadas constumbres dentro de la obra estàn bastante controvertidas. Muy recientemente, con ocasiòn de la publicaciòn del ùltimo libro critico hacia la instituciòn aqui en Italia, el responsable de la prensa para la prelatura en Italia intervino en unas trasmisiones televisivas afirmando que, por ejemplo, la practica de la mortificaciòn corporal dentro del opus no es obligatoria para todos los miembros numerarios y agregados, sino màs bien es aconsejada en determinadas circunstancias y por temporadas circunscritas. Ahora creo que documentar que esta practica es practicamente universal cimentando esta afirmaciòn sobre documentos internos que prevén detalladamente dias, duraciòn y circustancias, puede ayudar a que la gente de fuera se haga una idea. Lo mismo vale para las practicas colegadas al correo, a las formas de vivir la pobreza, el trato con las familias de origen, etc.

 

Por lo que se refiere a la asepsis que denuncias, esta ha sido buscada y cuidada, como ya aludì anteriormente, precisamente como herramienta fundamental de una rigurosa reconstrucciòn historica. Precisamente en esto creo yo que se encuentra la fuerza de este documento: en que en un relato sin engreimiento y sin agresividad, sin amarguras ni reivindicaciones, pueda encontrase reflejada una realidad que al opus no le gustarìa que se conociera, por la simple razòn de que la vida que allì se refleja no es una vida atrayente de cristianos corrientes en medio del mundo.

Por ùltimo, unos cuantos que, sin haber nunca pertenecido a la prelatura, leyeron “La vida cotidiana”, me comentaron que experimentaron una sensaciòn de claustofobia  que bien se aplica, creo yo, a lo que me proponìa describir. A lo mejor para nosotros que la experimentamos a lo largo de años, es imposible volver a experimentar la mismas sensaciones fuertes de aburrimiento, de falta de sentido, de reiteraciòn sin esperanza que llegò a ser nuestra vida dentro del Opus Dei, pero creo que el estilo literario adoptado pueda servir a conseguir este objetivo para quien se encuentra fuera.

 

Por supuesto, no tengo ninguna dificultad en admitir que sòlo unos pocos, poquìsimos escritos con las mismas caracteristicas al de la “Vida cotidiana” pueden integrar una pagina como la de opuslibros, que tiene su valor en la dramaticidad y autenticidad de testimonios personales y sufridos, pero al mismo tiempo no quiero dejar de esperar de haber contribuido, con este escrito, a fundamentar la elaboraciòn critica sobre el opus dei.

 

Un saludo cariñoso para todos

 

Elena (Aquilina)







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