El seglar y la Iglesia (Jean Guitton).- IgnaciodeLoyola
Fecha Monday, 09 April 2007
Tema 090. Espiritualidad y ascética


El libro que quería recomendar es el siguiente: "El seglar y la Iglesia", del pensador francés Jean Guitton, publicado en Ediciones Cristiandad, Madrid, 1964. (Jean Guitton fue el primer seglar invitado como observador durante el Concilio Vaticano II).

Este libro lo leí, hace varios años, en su edición original francesa, algunas ideas básicas son las siguientes:

- Cristo reúne las tres funciones de "profeta", "sacerdote" y "rey", presentes en la historia del Antiguo Testamento, que se suelen dar por separado (en el cristiano, están presentes en su vocación bautismal). Estas tres funciones se suelen dar por separado,  están diferenciadas en los demás seres humanos. En la historia de la Iglesia, ha habido sacerdotes en los que estaba más presente la dimensión del "profeta", aunque ontológicamente están ordenados a la dimensión sacrificial de Cristo - * se podría pensar que en la actualidad, los teólogos de la liberación, tienen más desarrollado el lado "profeta", bastante ausente del tipo humano sacerdotal y seglar producido por el Opus Dei. Los seglares están llamados a vivir en su vida la dimensión "profética" de Cristo, en su encarnación en la vida cotidiana.

- Una espiritualidad de tipo seglar está aún por desarrollar, no lo ha sido aún plenamente (y lo tienen que hacer los propios seglares, en su propia vida, sin imposiciones artificiales). En los santos del pasado, existen anticipaciones del  tipo "laico", en la figura humana y el mensaje de santos como San Francisco de Asis y San Francisco de Sales. Existen modelos también como Santa Teresa de Lisieux; y yo añadiría personalmente, en la espiritualidad de los Ejercicios de San Ignacio de Loyola.

 - A diferencia del sacerdote y del religioso, el seglar no debe buscar "distinguirse" en cuanto a signos externos relacionados con el "hábito" (y seguramente se debería añadir, no sólo el hábito en cuanto a uniforme, sino "hábitos de vida" - éste ha sido el gran fracaso histórico del Opus Dei, que ha causado malestar y depresiones en mucha gente). El primer "oficio", la responsabilidad primera del seglar sería el trabajo (por comparación con la dimensión litúrgica, como "oficio" del sacerdote y del religioso). En la vida cotidiana sin embargo (ésta es reflexión mía), existen muchas más dimensiones, que sólo el trabajo. Están también los proyectos personales, y las relaciones con los demás. Creo que se entendería mucho más a fondo estas cuestiones, entiendo al ser humano ante todo, como "persona" (cosa que el Opus Dei, con toda certeza, no ha hecho).

*Personalmente, en la dimensión estrictamente antropológica, creo que se puede ir mucho más lejos que J. Guitton en estas reflexiones, que me parecen insuficientes. La filosofía española desarrollada durante el siglo XX, con sus perspectivas sobre la "vida humana" como realidad radical - Unamuno, Ortega y Gasset, Marías -, podría servir de herramienta de reflexión, en el desarrollo de una "antropología metafísica", para encontrar respuestas más completas a estas cuestiones.

- J. Guitton toma a menudo como referencia de pensamiento sobre la Iglesia, al cardenal J.H. Newman (lo considera como un nuevo 'San Agustín', por el uso que hizo de la noción de "desarrollo", aplicado a la historia de la Iglesia). El cardenal Newman recalcó la importancia de los laicos en la historia de la Iglesia (lo hizo en el siglo XIX, mucho antes de que se le ocurriera esta inspiración "genial" a Escrivá), incluso en asuntos dogmáticos. Por ejemplo, el dogma de la Inmaculada Concepción estaba desarrollado en el pueblo católico, mucho antes de que fuera promulgado como tal por los obispos.

Termino aquí estas reflexiones (a quien le interese, que se lea ese libro; sino, hay muchos más sobre ese tema).

Ésta es mi última intervención; me parece más sano ocuparme de otros asuntos en mi vida (el tema Opus Dei, deben examinarlo el Papa y los obispos, y seguro que lo harán). He hablado de todo esto con una amiga (que se lo ha pasado muy mal con esa institución), y tiene razón, que es mejor no dedicarle a esa institución una atención excesiva, que es lo que buscan, y no se merecen.

IgnaciodeLoyola

* Para quienes interese: comparad los libros "Camino" de Escrivá y el de los "Ejercicios espirituales" de Ignacio de Loyola, veréis que este último no consiste en consejos paternalistas, sino que abundan las escenas sacadas del Evangelio (en todo el proceso del mes de ejercicios), y la invitación a contemplarlas directamente por el propio ejercitante, en el discernimiento y ordenamiento de su propia vida. (Es uno de los motivos por los que S. Ignacio de Loyola será reconocido un día como Doctor de la Iglesia).









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