Mi testimonio sobre el Opus Dei.- Eva Sarmiento
Fecha Friday, 16 March 2007
Tema 010. Testimonios


Hola a todos:

Buscando información de la CUN en Madrid, habéis salido al paso. Como antigua alumna de un colegio de Fomento, me ha llamado la atención vuestra página y no he podido evitar una cierta curiosidad. Me alegra mucho ver la cara de felicidad auténtica que se os ve en las fotos.

No soy ni he sido miembro del Opus Dei, pero lo conozco un poco. Hija de supernumerarios (sinceros y directos) he recibido siempre mi formación y dirección espiritual de sacerdotes del Opus Dei. Aún hoy lo sigo haciendo, pero en iglesias abiertas al público donde entra la luz del sol radiante y todo el mundo escucha, si quiere, lo que allí se dice. Creo que los sacerdotes del  Opus Dei son inmejorables.

Se me ofreció ser super, numeraria y finalmente cooperadora. Nunca antes de los 17 (en mi caso). Lo de super me lo pensé, y cuando iba a pitar la directora del centro por el que iba me dijo que numeraria o nada. Así que nada.Se respetó mi decisión sin problema. Es fundamental ser firme y saber decir que NO.  Nunca me sentí cómoda en un centro (club) por esa amabilidad forzada y esa risita floja. Supongo que no era lo mío. Pero me acercaba de cuando en cuando por la gran formación espiritual que allí se daba. Hasta que dejé de ir por lo ya comentado y descubrí con agrado que en iglesias de Madrid que todos conoceréis se puede asistir, con total libertad y sin pasar lista, a medios de formación a los que una se había acostumbrado y que el espíritu y la vida de una necesita.

Me considero una privilegiada por haber ido al colegio que fui, Montealto. Lo recuerdo con cariño y emoción. Allí conocí a profesoras admirables, algunas numerarias, otras supernumerarias y otras nada, que luchaban todas juntas por hacer de nosotras mujeres de bandera con una gran autoestima. Nada de educación machista y una gran información completa y veraz respecto a TODO tipo de temas. Alguna profesora nos invitaba a algún club y si íbamos bien, y cuando dejamos de ir, también bien. La libertad en esas cuestiones era total y en nada influía en nuestra vida escolar. No teníamos un trato de favor cuando íbamos (que fueron no más de cinco veces) ni dejamos de tenerlo al abandonar ese tipo de "actividad extraescolar".

Tengo compañeras que fueron numerarias y que ya se han salido. Sonríen y afrontan la vida con optimismo. Creo que uno de los problemas de las vocaciones es que no dan toda la información al principio. Te van pidiendo más y más, y tal vez descubren que aquello en lo que han apostado su vida, sus años, su esfuerzo y su juventud no es como esperaban. La vocación no hay que forzarla. O se tiene o no se tiene. Viene del Cielo. Eso dicen, no?

A todos lo que habéis salido y que habéis dedicado muchos años, o unos pocos al Opus Dei, quiero deciros que no habéis perdido el tiempo. Seguro que habéis acercado a muchas almas, más de las que creéis, a Dios, y eso es impagable. Dios nos mira con amor y quiere que seamos felices. Nunca lo olvidéis. Antes y ahora.

Eva Sarmiento









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=9608