He enviado al Cardenal Secretario de Estado de la Sede Apostólica el trabajo de Oráculo sobre la dirección espiritual, haciéndolo mío y aportando mi testimonio personal de que la cosa, efectivamente, es así.
Preferí enviárselo al Secretario de Estado y no al Secretario de la Congregación para los Obispos, como ya han hecho muchos, para ver que pasa...
Saludos,
Alkaradura