Mi modesto aporte a la discusión de la ‘Inocencia de los directores’.- Emeve
Fecha Wednesday, 10 January 2007
Tema 040. Después de marcharse


Cuando se trata de escritos de Jacinto Choza yo me pongo nerviosa y no comento nada. A pesar de lo buenísimo que es y de que incluso en alguna oportunidad hemos intercambiado correos electrónicos, yo pienso en él como en el libro del curso que llevé en la Universidad y en los semestres del Centro de Estudios (hice dos porque todavía no había sitio para mí en el Centro de Formación que se abrió en Piura... no recuerdo los detalles). Siento mucho respeto y parece que algo de complejo de inferioridad porque no me atrevo a decir nada.

 

También me quedo muy corta cuando leo las opiniones de Agustina, a quien no visualizo como un libro, sino como una amiga. Al deberle (porque se lo debo a opuslibros) mi actual paz y felicidad, tengo la tendencia a pensar que todo el tiempo tiene razón. Sin embargo al ver el daño que la idolatría temprana hizo a la pobre personalidad de Escriba (hombre, a lo mejor le da por ponerse Agustina López de los Mozos y Muñoz y Alabastros y Condesa de Petra... jo!) me atrevo a decir que pareció muy duro ese escrito tuyo amiga, y quiero rescatar una respuesta que obtuviste de alguien a quien también respeto mucho, Elena (Aquilina). Hay dos párrafos que copio porque no los podría escribir mejor, y que traslucen lo que siento al respecto:

 

''condenar sin apelo las actuaciones, los hechos históricos que hemos vivido y comprobado en nuestra piel, trabajar activamente para que estas actuaciones ya no sean permitidas, y al mismo tiempo no juzgar nunca, según una exigencia moral basica e ineludible para todos nosotros, la parte más intima de la conciencia de cada uno, pues no podemos conocer a ciencia cierta en que situación interior se encuentra cada cual. '' (...)

''Pero, sobre todo, que más da? Es realmente importante decidir si algunos son o no culpables, y cuanto? No es mejor dejarlo a la conciencia de cada uno y a Dios, y nosotros, respetando las conciencias, a juzgar los hechos, las vivencias, actuar, como mejor sabemos, con nuestros testimonios, con nuestras profundizaciones, con nuestros estudios y trabajos para facilitar la toma de consciencia de todos, fuera y dentro del opus, y facilitar el camino de liberación interior de todos?''

 

Y quiero que siga resonando ese ''¿qué más da?'', porque no me interesa que sean culpables, inocentes, se hayan ganado el cielo, el infierno o el purgatorio... no va a depender de mi por más que me esfuerce. Lo que importa es lo que puedo hacer, lo que está en mis manos, y en mis manos está permitir a esas personas VER con claridad lo que hacen, facilitarles la oportunidad de abrir los ojos, de recapacitar, a lo mejor, de arrepentirse si de algo hay que arrepentirse y de pedir perdón, si algo hay que perdonarles (pongo por ejemplo el caso de Escriba). Y también advertir a quienes se acercan al opus de lo que les puede pasar, porque me pasó a mi, no a alguien que conozco, sino a mi misma.

 Está en mis manos también tener los brazos abiertos a todas y cada una de mis directoras y directores (sacerdotes numerarios), a todas y cada una de las numerarias que cruzaron mi camino, incluyendo a aquella que cruza la vereda para no chocarse conmigo y no tener que saludarme, a aquella que me encontró en opuslibros y que no me quiso decir nada más, a esa misma que no tuvo tiempo nunca para mí cuando lloraba por ayuda, a aquellas que no querían ''hacerse cargo'' de mi cuando iba por sus centros rogándoles una oreja y nada más, a aquellas que me saludaban sin conversar porque siempre están ocupadas o porque seguramente no saben conversar con una ''ex'', a aquellas que se aprovechan de su posición de docentes para hacerle ver a alguna ''ex'' que sin su ayuda no son nadie, a aquella que cree que lo que dice sale de la boca de Dios. A todas y todos, les puedo ofrecer de todo corazón que si llega el día en el que abran los ojos o se le abra el corazón y escuchen esa vocecita que les dice que algo anda mal, aquí estoy. Y lo demás, lo juzga Dios, no yo.

 Que se me entienda bien para no repetir, y para no contestar a nadie: no estoy rogándoles afecto ni a ellos ni a nadie, yo estoy plena, completa, feliz. Lo que hago es ofrecerles mi oreja, no porque se lo merezcan, porque no soy yo quien juzga eso, sino porque eso es lo que me manda mi Señor cuando dice "En verdad os digo que, cuando lo hicisteis con alguno de estos más pequeños, que son mis hermanos, conmigo lo hicisteis", porque los del opus, también son hijos de Dios, aunque algunos por su grado de corrupción, parezcan pequeñitos, muy pequeñitos.

 

Una cosa que no me gusta mucho es que lo que sucede en el chat se vuelva tema de esta web. No soy perfecta, ni pretendo serlo, así que lo digo como lo pienso. Son iniciativas diferentes, con personas diferentes a cargo y muchas personas que escriben en la web no van al chat y viceversa. Entonces, yo que soy como soy, levanto mi  mano, pido la palabra y sugiero que la próxima vez que tengan problemas chatísticos los resuelvan en ese mismo lugar o cara a cara (o en un chat personal/privado) con las personas interesadas. Claro que cada quien hace lo que le da la gana y dice lo que le da la gana. Pero yo también puedo opinar y ya opiné.

 

Finalmente, me ha gustado el escrito último de Daniel M. y en sus palabras : ''Si prevaleciera antes la persona que la Institución, quizás algunos nunca hubiéramos entrado o no hubiéramos seguido tanto tiempo en ella. Con lo que nos hubiéramos ahorrado algo de sufrimiento. Me pregunto porqué estuve tanto tiempo. Realmente, sé el porqué: trataba de perseverar en mi vocación personal. El problema fue que la confundí desde el principio con la “vocación al Opus Dei”. Gran parte de la responsabilidad de esta confusión fue de la Prelatura, por la falta de información y la muy precipitada captación”, puedo ver que no está tan lejos de finalmente darse cuenta que fue un número más, una víctima más, y su ''casi nada'' contra el opus es en realidad no estar de acuerdo con lo que nadie de esta web está de acuerdo: su manipulación de las personas, de las conciencias y de las vidas de quienes confían en ellos para terminar sin pedirlo siendo utilizados por una institución que realiza todo este daño utilizando el nombre de Dios y amparada por la Iglesia de cuya ''inocencia'' también se debería conversar. Porque sinceramente con lo demás estoy totalmente de acuerdo: vivir en casas lindas en barrios lindos, comer rico, tener fiestas A, B y C, y pasarlo regio en las actividades de san rafael... me volvería a apuntar si sólo fuera eso....

 

Saludos a todos.

Emevé









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=9136