Del dicho al hecho hay un trecho.- Motroton
Fecha Friday, 29 December 2006
Tema 100. Aspectos sociológicos


Tengo un grato e inolvidable recuerdo del Sacerdote Don Gerardo Gutiérrez (Panameño, alias Mi chinito) que pasó unos años por Valencia.

 

Hacia el año 1974 acudía al centro de agregados Alfambra (Gran Vía Marqués del Turia 54) y atendía a los socios y simpatizantes de la cosa.

 

Tenía un sentido común extraordinario y no podía entender el clericalismo (malo) del españolito medio. Quizá por ello decía numerosos tacos en las meditaciones y paladeaba la palabra gili…llaaaas, marcando las palabras con los labios.

 

En una convivencia en la EFA de Jacarilla, el día de excursión se fue con un agregado (le llamaré Paco) por la manga del mar menor. Se compraron un pollo asado para comer y se lo zamparon dentro del coche frente al mar en el paseo marítimo. A medida que se comían el pollo cada uno iba tirando los huesos por la respectiva ventanilla del coche.

Una vez acabado el gran manjar don Gerardo le dijo a Paco. Baja y recoge los huesos.

Paco (nada clerical) le contesto, bien yo recojo mis huesos y usted los suyos.

Muchachitooo, yo he tirado los huesos por la ventanilla a una papelera pero tu los has tirado al suelo, así que baja y recógelos.

 

Hablaba de poner a Cristo en la cumbre de todas las actividades humanas y de hacer apostolado de amistad y confidencia (nada de empujar a la gente para hablar con el cura y cerrar la puerta). De trabajar y de rezar.

 

Muchachitooo decía, si quieres comer paella no te pongas delante del Sagrario para pedir ¡Señor, yo soy bueno, quiero comer paellaaaaa! ¡ Gili…llaaaas!.

Trabaja, gana dinero, compra arroz, pollo, etc. y podrás comer paella.

 

Don Gerardo se fue de Valencia, de socios pasamos a fieles. De un piso medio, bien montado, pasamos a un centro de 3.000 metros cuadrados llamado Dardo. De lo personal a lo impersonal. Muchos cambiaron de trabajo y se fueron a obras corporativas, fomento, centros, en definitiva islas en medio del mundo (guetos). Del apostolado personal se pasó a la formación y desarrollo de clubes juveniles. De centros de formación y estudio a circos de feria. Qué fácil es a la gente de veinte años o más encandilar a los quinceañeros con actividades de circo, ONGS, gincamas y concursos.

 

¡Qué raro se me hizo comprar los estatutos de la institución a la que pertenecía en los quioscos con la revista Tiempo! ¿Había algo que ocultar?.

 

Me parece que una cosa es lo que se dice y otra lo que se hace. Hay un doble lenguaje, una doble moral en la cosa. Todo vale en su afán de globalización, un gobierno piramidal, férreo, absolutista, sin afectos ni concesiones.

 

Me gustaría que en la Web se hablara de un tema apasionante: Pobreza personal versus Pobreza institucional. Aquello de que se gasta lo que haga falta aunque se deba lo que se gasta.

 

Ahora bien si a un fiel le falta lo necesario, lo ofrece al Señor ya que él le recompensara en la eternidad. Así se sufre el clasismo, las injusticias y hasta las faltas de caridad.

 

Así surge gente como el pobre de la cuchara que es suya y no la deja a nadie. Apegados a sus prebendas y lo que consideran sus derechos por su encomiable perseverancia y obediencia.

Pobres de solemnidad en jaulas de oro cogidos por el bolsillo, la bragueta y la cabeza. Unos tristes Santos que no son más que unos Santos tristes.

 

Yo les digo: ¡Paciencia! Que la cosa es muy joven como institución de la Iglesia y cambiará lo que sea menester a vuecencias.

 

Feliz Año Nuevo y felicidades a los Santos Inocentes que se lo merecen.

 

Motroton









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