Leo a Vadovia donde especifica el desprecio sufrido al dejar la cosa por parte de sus miembros. Y me gustaría expresar que el desprecio es para quien se deja despreciar.

 

Una vez que se ha visto el engaño sufrido, la extorsión, el toreo, el grandísimo cuento que se traen con su santificación del trabajo personas que se quejan cuando se les hace barrer una vez por semana, y la trampa de una supuesta vocación, que repito una vez más NO EXISTE, ¿qué importa lo que digan, lo que piensen, lo que hagan? ¿qué se puede esperar de gente que vive en la mentira y alimenta esa mentira con cada gesto?

 

¿Qué afecto se puede esperar de gente que ha aplastado su conciencia y su corazón en beneficio de un sistema? ni para los que se van ni para los que se quedan.

 

Lamento lo que se ve tantas veces en esta web, tanto entre los que se han ido como entre los que se acercan a la secta, que nos conformemos con el simulacro de afecto. En el opus es lo que hay "simulacro".

 

La vida es para cada uno lo que queremos hacer con ella, y si cortas con el Opus, te alejas, te olvidas, asimilas la cruda realidad de que te engañaron, las cosas se ponen en su sitio. Por ello lo único que he lamentado después de irme es que alguna que otra vez me hayan salido al camino a saludar, como si no hubiera pasado nada. Claro que ha pasado, que he arruinado mi juventud y he perdido un trozo de vida precioso. Ahora que también los opus que se me han acercado una vez no lo vuelven a intentar una segunda.

 

Emeve, ni se te ocurra proyectar los pecados de la estructura opusiana en tí. Ellos aprovecharon la ingenuidad tuya y mía, el hecho de que hasta ahora no se había hablado claramente del opus dei, de "que no se había tirado de la manta" sin miedo y sin complejos como venimos haciendo. Por eso te pescaron y me pescaron. Tapan sus fechorías con "supuestas virtudes" , "Supuestas simpatías", "supuestos rezos", "supuesta humildad".

 

Dice Platón que el malo necesita aparentar ser bueno para hacer el mal, el bueno no necesita aparentar. Pues eso.

 

Por ello como ex miembro del opus dei no quiero formar parte de su mentira más, en plan pedirles coherencia ¿a una banda de mafiosos?  o en plan "solicitar ayuda espiritual": ¿A un cura enviado por ellos que tiene la receta de lo que te tiene que decir? ¡por favor...! ¿qué espiritualidad cabe donde hay tanta manipulación? ¿a qué llamamos espiritualidad?

 

Que nos pidan perdón me parece una burla, después de tamaña estafa ¿a dónde van con los perdones?  No necesitamos "que recen por nosotros", necesitamos un respeto.

 

Ana Azanza