Hola a todos....
Es la primera ocasión que entro a esta página, a la cual llegué tras leer los primeros capítulos del libro El Código Da Vinci de Dan Brown y la verdad esto me resulta super interesante, y por supuesto, no puedo reprimir las ganas de enviar este mensaje con mi humilde opinión, que no es la de un erudito del tema, ni la de alguien que haya tenido contacto con el Opus Dei, ni mucho menos, soy simplemente un ser humano con el privilegio de pensar y ello me permite tener la disposición para enterarme de las cosas que rodean nuestra existencia como seres humanos...
Pues bien, quiero decirles que para mí me resulta incomprensible que haya personas que sufran, que sean motivo de manipulación, que les laven el cerebro, que sean sometidas, que sean forzadas a determinada información o conducta; que les digan que esto se debe escuchar, ver, pensar o seguir, sin el más mínimo reproche u objección alguna, es decir, que sean formadas en tal o cual pensamiento, religión, obra, acción, secta, política, o condicionante humana, sin mayor rechazo.
Y repito, me resulta incomprensible esto, porque lo que sí comprendo es que haya personas malas, negativas, manipuladoras, fanáticas, etc, etc, porque esto me resulta normal, la maldad, es algo que siempre va a existir, entonces, la humanidad va a registrar siempre a seres que estarán de este lado de la balanza, es un equilibrio natural.
Entonces, me resulta difícil entender cómo es posible que las personas, igual que ocurrió hace miles de años, igual que ocurrió hace décadas con Hitler, igual que ha ocurrido en otros tiempos, todavía, en pleno siglo XXI, con tanta información disponible, con tantos ejemplos vividos y experiencias contadas, todavía perturben su propia vida siguiendo a tal religión, a tal santo, a tal cosa, y lo peor, que sacrifiquen su vida, la de su familia, en aras del producto que le venden, con el señuelo de que es la verdad de la vida, o el camino a Dios, o el camino a la luz, o el mesías que el mundo esperaba, o el demócrata que no había nacido, o tantas tonterías que se dicen para convencer a la gente.
Señores, la vida es una y es muy simple. No necesitamos complicarnosla. Desde que somos niños, tenemos uso de razón para saber discernir perfectamente el camino a seguir, no necesitamos que alguien con el título de lo que sea, sacerdote, político, genio, mesías, etc, venga a decirnos lo que debemos hacer. Ya basta de tanto fanatismo en el mundo.
Hagan lo que yo. A todos, porque debemos respetar las creencias de todos, los escucho, pero de ahí que me ubique en tal o cual religión o cosa que tenga que ver con acciones diseñadas por los hombres para creer en Dios, pues simplemente no. Tenemos el poder de pensar, si a tal persona, familiar, amigo o vecino, dice que él hace tal cosa o apoya económicamente tal culto o religión porqué cree en lo que dicen y hacen, pues ni modo, allá él, pero ya no es posible que las niñas y los niños que vienen al mundo sigan siendo manipulados por otros adultos, manipulados por otros y esos otros manipulados por otros y así hasta no sé dónde.
El concepto que cada quien tenga de la política de su país o de su religión, de su equipo de futbol o de su grupo de música favorito, es respetable, pero NADA, ABSOLUTAMENTE NADA, debe rayar en el fanatismo, existe historia, sí, historia que nos habla de los grandes pintores, de los grandes músicos, de los seres humanos que han proyectado su obra por los siglos de los siglos, como Jesuscristo, como Mahoma, como Buda, como Gandhi, como Pelé y Maradona, en el futbol, como en todas las actividades del mundo, todos tienen un lugar en la historia, por sus obras y sus acciones, pero hasta ahí.
Las generaciones actuales también tenemos grandes pensadores, artistas, músicos, deportistas, que también nos ofrecen su obra, pero hasta ahí. No tenemos nosotros más que hacer, sólo conocer sus obras y ya. Ya no quisiera conocer historias de personas que se mueren por alguien, que se suicidan por alguien, que se manifiestan por alguien, que dan su vida por tal o cual creencia.
No permitamos ninguna manipulación, NINGUNA; vayamos por la vida con este concepto: NO ME DEJARE MANIPULAR POR NADIE, y aquí incluyo todo, lo religioso, lo político, lo cultural, lo social, hagamos caso solo a nuestro pensamiento, podremos errar o triunfar, pero lo haremos bajo nuestra propia responsabilidad, nunca en la sombra o al amparo de tal creencia o tal política, si es necesario aprovecharnos de eso para realizar estudios, para tener un empleo o para lograr un patrimonio, pues hagamoslo pero siempre pensando que no tenemos que dar nada a cambio.
Pensemos que la realidad es una y es la que vemos con nuestros propios ojos. Que la vida va a ser siempre como nosotros la proyectemos, que nada nos va a ser gratis, que debemos trabajar para lograr lo que deseamos, que nadie nos puede prometer lo que él mismo no ha logrado y que todo lo que hagamos será resultado de nuestro propio esfuerzo.
Ojalá y este mensaje valga la pena. Basta con que alguien lo lea y será suficiente.
Gracias.
Baltazar
