En el mensaje que hoy he escrito para Margarita Valenzuela indicaba que hace años que no leía esta web. Pues bien, sólo quería añadir una cosa. De entre las muchas cosas que leí entonces, recuerdo el testimonio de una numeraria auxiliar (se llamaba algo así como luna, o amapola, no lo sé). Cuando lo leí me quedé de piedra. No tenía ni idea de esa realidad. Estuve varias noches sin dormir, porque me sentía en parte culpable (por colaborador) de ese sufrimiento.
Sólo eso.
Un abrazo, Ananaru.