No me he vuelto vidente. Dejé esa faceta cuando decidí abandonar el opus de nuestros amores, hace ya muchos años. Pero por lo que nos cuenta EscriBA (y otros) que está ocurriendo con los Legionarios de Cristo y con los Kikos, creo que el Vaticano corregirá al opus.

Quizás con alguna carta del estilo de la que le han enviado a los kikos, que para el caso del opus podría comenzar de la siguiente manera:

En los sucesivo el opus dei practicará el proselitismo de conformidad con las siguientes directrices:

1ª/  Toda persona a la que se vaya a plantear su posible vocación al opus dei deberá ser informada previamente, y de manera que le sea comprensible, de la totalidad de las normas jurídicas que regulan esa institución, tanto de las que la Iglesia ha establecido para ella como de las que ella se ha da dado a sí misma.

Al mismo tiempo se entregará al interesado una copia íntegra de las citadas normas jurídicas, en su lengua materna, y un resumen de los derechos y obligaciones de los aspirantes y de los miembros del opus dei, con mención expresa del significado real que la Iglesia da a los períodos de prueba, y del derecho a abandonar la institución en los casos y en la forma previstos jurídicamente.

En consecuencia, se expondrá con claridad que es el interesado el que debe discernir libremente, sin ningún tipo de coacción psicológica, si verdaderamente considera que tiene vocación al opus dei y si está dispuesto a intentar asumir sus normas y costumbres como forma de vida, o, en su caso, a continuar en el opus dei o a abandonar la institución, sin que ello tenga ninguna consecuencia de cara a la eternidad.

Se remarcará el hecho de que la Iglesia ha prohibido, por una parte, la mal llamada santa coacción (en especial cualquier tipo de amenaza relativa a la salvación o condenación eterna) y, por otra parte, la inaceptable práctica de la videncia de vocaciones ajenas.

Tanto la copia de la normativa jurídica como el resumen de derechos y obligaciones deberán contar con la aprobación de la Santa Sede.

También se informará al interesado de las costumbres del opus dei y se le entregará una lista de las mismas en la que se expliquen al menos sus características esenciales.

La mencionada lista de costumbres también deberá contar con la aprobación de la Santa Sede.

PD:  Me resulta impactante el anuncio que nos aporta Gusramca: El Código Da Vinci es ficción, el Opus Dei no lo es. Visite opuslibros...

Quizás podríamos publicar lo mismo en España.

José Antonio.