Hola, luckyluke, yo también te quiero.- Kaiser.
Fecha Monday, 03 April 2006
Tema 140. Sobre esta web


¡Yo, es que lo flipo con esta gente, vamos! ¡Que es feliz con su elección y los demás somos excepciones!

Me alegro de saberme excepcional, mira. O, mejor, me alegro de que él se alegre de que yo crea que soy excepcional. Porque, claro, para esta gente o se es excepcional por algo o se es una mierda.

Mira, luckyluke. Gracias por tu atención, muchacho. Gracias inifinitas te sean dadas por tus buenas intenciones, pero, vale ya, guapo. Vale.

Tú no te has enterado de las movidas para renovar por San José en un clima de entera libertad para obedecer.

-¿Movidas? Serán la excepción.

-Sí, cientos de excepciones. La excepción elevada a norma.

-Esa norma no la conozco. No viene en la hojita de normas.

-Añade una cuadrícula: cada día intentar una excepción.

-Lo consultaré.

-Empezamos mal.

Veo que tienes el verbo solidarizar a mano. No te limites a pronunciarlo para acallar tu conciencia. Tu solidaridad no es nada si no se hace carne. Y la carne no admite excepción. Es siempre alguien concreto. Alguien ya muerto tal vez. ¿Te tranquiliza saberlo excepción? Alguien que ha muerto por un dolor inútil... Si necesitas saberte feliz, tranquilízate clasificándolo como una excepción y que todo siga encajando en tu idílica existencia. Pero no pretendas abarcarlo todo para que nada se escape a tu necesidad de felicidad completa. Si tú admites que puedes seguir siendo feliz, no arrojes el verbo solidarizar desde la misma boca con la que escupes que estamos llenos de ira. Eso no te hará mejor. Y tampoco lo necesitas. 

Kaiser









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=7304