Novato en Opuslibros, experto en la Obra.- Chachoquio
Fecha Wednesday, 22 March 2006
Tema 030. Adolescentes y jóvenes


Escuchando la canción VIVO POR ELLA, de Andrea Bocceli y Marta Sánchez, (preciosa, la canción y la Sánchez) he recibido una llamada, como cuando me hice obrero, pero esta vez no era ni el jefe de obra (director espiritual) ni el capataz (mossén) ni un "hermano de obra", era un amigo que hacia tropocientos años que no veía ni sabía nada de él.

La llamada fue para decirme que en esta página, en libros silenciados hay un retablo de curiosidades de Satur jejeje, no suelo leer estos temas pues pierdo un webo de tiempo y parte del otro, pero leyendo me di cuenta que a Satur lo conocí cuando estudiaba, aprendí y me cagué en él cuando me suspendía.

Pero en fín no voy a hablar de Saturnino, pues ya lo hice en la universidad, al ver sus artículos sobre educación, que son bastante buenos. Decirte para que te suba la milirrubina  que las volvías a todas locas y a algunos también, con esa ternura e ideas claras. ohhh...

Escribo para presentarme, me llamo Chacho, tengo pocas primaveras, algunas verdes otras maduras y solo decir que iré escribiendo artículos, pues el libro del quijote comparado al libro de mi vida y sus anécdotas se queda en un capítulo.

Para empezar os explico la anécdota de la llamada. ¿Cuántas veces llama Dios? y ¿cuando cogemos el teléfono es el jefe de obra?? (A éste asunto me dedicaré en otro artículo) Pues bien, mis primeros pasitos en la obra fueron con casco por precaución. Un dia hablando con el capataz (mossén) me preguntó que si  había escuchado la llamada de Dios, yo le respondí que no. Entonces tras una pausa larguísima me dijo haz un rato de oración y vuelve. ¿Oración? y eso que é lo que é? Hablar con Dios me dijo. Claro con 14 añitos, yo me puse a hablar con Dios pero él no me hablaba; más bien, era un monólogo que seguramente le adormecía. Después de mis 15 minutos eternos, inacabables de oración voy a ver al mossén. Éste me pregunta que tal la oración? yo le respondo que mal y en wasa le digo que Dios no me junta, que esta ocupado con Fulanito. Acompañando estas palabras había una sonrisa de oreja  a oreja que ni miliki lo hacia como yo. La reacción del mossén fue ponerse rojo como un tomate y como un volcán en erupción dijo: "No te pego una ostia porque Dios me coge la mano". Mi rostro se convirtió en el padre del Fary el día que éste nació. El capataz se percató que se había pasado e intentó disculparse pero cuando pude salir de la habitación, corrí, corrí,... y no paré hasta la semana siguiente cuando me encontré al jefe de obra; que con sus maravillosas palabras y sus buenas maneras de político corrupto, me convenció para entrar en el Le Club sin casco de obra.

Continuará...

-¡Mamá! ¡Mamá!, ¿me ayudas a salir? Metí la cabeza donde no debía y necesito ayuda, ya que los de dentro no me ayudan.

- ¡Sí hijo! Esperaba tanto tiempo este momento...

 

 

Por Chacho.









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