Que bueno es ser normal.- Mexicano
Fecha Monday, 20 February 2006
Tema 010. Testimonios


Hola a tod@os:

 

Soy mexicano, del estado de Nuevo León, al norte del país. Tengo varios meses leyendo sus testimonios, y por fin me anime ha escribirles.

 

Fui agregado por 3 años, muy joven pite, a los 17, escribí la carta, pero como le ocurre a muchos, al día siguiente me arrepentí, al comentarle al director del centro mis dudas me recito el mismo “rollo” que se suele usar en estos casos: Son tentaciones demoniacas, es tu vocación, Dios te quiere aquí, etc.,  etc., etc. … y continué.

 

De inmediato empezó el aleccionamiento, por principio de cuentas mi  “amigo” (el que me invito) se convirtió en mi desconocido (Prohibido amistades particulares). Poco  a poco fui cayendo en el juego robótico: Normas, traer gente al centro, tertulias, convivencias y muchos etcéteras más. Cuando cumplí los 19 me dijeron lo de los votos para hacer oblación, y me avente a hacerlos. A los 6 meses ya estaba reventando, deje de hacer proselitismo, fui irregular en la asistencia de las meditaciones, confesión y normas. Para “salvarme” me dieron empleo en una de las obras corporativas que se supone no son del opus. Ahí, fue mi primer empleo, debo reconocer que trabaje muy a gusto y bien (dure 6 años). Decidí ya no seguir siendo agregado, pero, como no me animaba a romper la cadena, masoquista, quise terminar en “buen plan” y pedí que me dejaran ser cooperador, creo que fue el miedo a reventar la burbuja protectora y lanzarme de lleno al mundo. Aceptaron, incluso me comentaron que yo no tenía vocación, y seguí… después me arrepentiría.

 

Ya fuera de los compromisos opusimos, y aún dentro de ese empleo, me toco vivir muchos ejemplos de la rivalidad, envidias y formas de vivir la “caridad entre hermanos” Conocí tipos, especialmente supernumerarios y numerarios, (los agregados ya no los ví porque "era mejor que ya no me apareciera por el centro") que me sorprendía que estuvieran en una institución de la Iglesia, eran tan prepotentes que, confidencialmente algunos de sus hermanos en la obra se desahogaban conmigo, creo que yo les daba confianza porque era ex y así podían hablar libremente sin el problema de recibir después correcciones fraternas.

 

Total un día entró a trabajar un agregado mayor ¡de los primeros! Y se noto que no le caí bien, y fue el principio del fin en ese trabajo, que para mí era muy necesario por la crisis económica que había en el país, un día, contaré después la situación que se dio, me hablaron a la oficina del director  y: "Compadre hasta aquí llegaste", fue como un balde de agua fría, pero en fin fue el empujón que, creo que Dios me dio para salir de ese ambiente, que en realidad ya me estaba cansando. Me lancé al mundo, conseguí trabajo, y ahora estoy felizmente casado, 3 hermosos hijos, y decidí poner en práctica la letra de una canción que aprendí ahí.

 

ME GUSTA ANDAR Y NO VOLVER LA CARA ATRAS EN MI CAMINO

 

Como dato significativo, cuando entré a la obra había 17 agregados, cuando salí solo quedaban 2, claro ya los infieles habíamos sido sustituidos por carne fresca

 

Saludos a tod@s

Mexicano









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