Marketing hasta la sepultura

Ayer me enteré del trágico suceso acaecido a una numeraria de Bilbao que en octubre murió ahogada en una playa. Puse su nombre en el buscador google y así, por casualidad llegué a la sección “in Pace” del boletín “Romana”  http://es.romana.org

En esa página – como vosotros mismos podéis verificar- nos encontramos el titular: Fieles del Opus Dei fallecidos en el segundo semestre del año 2004.

A continuación, una lista de 12 nombres, cada uno seguido de un parrafito explicativo en el que se habla de la vida de esa persona o se alaba su entrega y sus virtudes.

A continuación viene un segundo pelotón ( donde dice "los demás fieles de la Prelatura fallecidos este semestre" )

 Y como podeis ver ahí no hay ni menciones ni distinciones ni explicaciones.

 Cualquiera se preguntaría inmediatamente por qué el opus tiene esta manera de presentar al público estas defunciones. ¿ qué es esto de poner “los demás”?

Una cosa me resulta evidente. No me parece que esta sea una forma correcta y educada de proceder de cara a las familias de sangre de estas personas. No creo que a los padres de esta numeraria ahogada les haga mucha gracia ver esa distinción de mal gusto que se ha hecho con el nombre de su hija y de sus “hermanos” que han corrido la misma suerte y han sido relegados al pelotón “los demás” .

¿Dónde han quedado las buenas maneras y la corrección de las que en el opus siempre se ha hecho gala? Yo como numerario me tuve que tragar muchas charlitas de esas en las que te educaban para guardar las buenas maneras y causar una buena impresión en sociedad.

Unos segundos de observación bastaran para percatarse de la razón por la que los responsables de Romana han presentado todos los fallecidos en dos pelotones: el de los 12 elegidos y el de “los demás”

Sí... estoy pensando que ... casi mejor me ahorro la explicación porque ya he escrito demasiado y porque os voy a dejar el trabajo  de descubrir el enigma.

(bueno..., os doy una pista:  una de las 12 personas elegidas Pidió la admisión como Supernumeraria el 17-V-1993. Desde joven su estado de salud fue delicado, y sus últimos diez años de vida los pasó hospitalizada. Ofreció con alegría su inmovilidad física, especialmente por el desarrollo de la labor apostólica del Opus Dei...

pero.... es que además , resulta que .... era japonesa.

 Pues sí. Si no me equivoco, por aquí van los tiros, la famosa “universalidad de la obra” , la cual creo que la descubrió un día el fundador cuando se estaba mirando el ombligo.

Y resulta patético – aunque ya no me soprende - que el opus hasta en estos detalles tan pequeños se sirva de sus miembros, incluso cuando éstos ya han fallecido, para beneficio de su propia imagen. 

Miguel L.

Nota de la web. Lala escribió sobre el triste desenlace de la numeraria a la que te refieres, a la que conocía y quería mucho.