Carta a un holograma. Para DBB.- Kaiser
Fecha Wednesday, 28 September 2005
Tema 140. Sobre esta web


Carta a un holograma.

Estimado DBB:

Te he leído ésto: “Hola Agustina, yo también voy a contestarte, sin obviar tu charla -como tú dices-. Faltas a la verdad cuando dices que no hay testimonios falsos en este web. No digo que la falsedad sea malintencionada o dirigida por las personas que están "moderando" el web. Pero basta leer algunos testimonios, y conocer la Obra, para saber que o mienten o la visión de la realidad está tan esperpénticamente deformada que convierten en falsedad sus testimonios.”

Mira, DBB, no sabes lo que me cuesta escribir bajo pseudónimo. Se me hace aún más difícil contestarle a tres tristes letras. Para hacerlo como quisiera, necesitaría tenerte delante. Necesito unas solapas que agarrar. Un aliento que encuentre mi aliento. Clavar mis ojos en tus ojos y esputar airado contra tus dientes.

He dicho en alguna ocasión aquí que este es un territorio sagrado. Pero tú a tu bola. No lo ves porque vas vendado. Las orejeras del borrico de noría (qué maravillosa imagen literaria y qué atrocidad para un mundo libre). Pero, atiende: soy yo el que te está estrujando el pescuezo. Humíllate. Acerca tu rostro al suelo. Hunde tus manos en tierra. Y huele. Es sangre lo que pisamos. Pálpito vital. Pulpa de coágulo. Borbotón que ahoga las gargantas. Es la materia con la que están labradas estas páginas.

Ahora, ven. Siéntate entre nosotros. Y calla. Escucha cómo destila el dolor entre infinitos murmullos. ¡No alces la voz! Y déjame escuchar también a mí, que he dado con él -el dolor- aquí contigo, porque «si un día el dolor llama a tu puerta no se la cierres ni se la atranques: ábresela de par en par, siéntalo en el sitial del huésped escogido, y sobre todo no grites ni te lamentes, porque tus gritos impedirían oír sus palabras, y el dolor siempre tiene algo que decirnos, siempre trae consigo un mensaje y una revelación» (“Consolación“, Nino Salvaneschi).

Déjate la venda aún, No te la quites ahora. Atiende. Es tu corazón el que brama. ¿Oyes lo que te dice?: ¡QUE NO ERES UN HOLOGRAMA!

Kaiser









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=5984