Grupos parroquiales ¿tabla de salvación para un ex?.- serpa
Fecha Wednesday, 10 August 2005
Tema 040. Después de marcharse


Aprovechando las horas libres que me conceden las vacaciones quiero explayarme un poco más de lo normal .

Al hilo de mi experiencia personal, que voy a seguir relatando a los amig@s de esta web, quiero plantear una posible salida a personas que al abandonar la Opus caen en una grave crisis existencial.

Creo que los grupos de jóvenes y adultos que funcionan en multitud de parroquias de España (Supongo que en la mayoría de los países de tradición católica) son una experiencia de fé perfectamente válida, y muchas veces claramente gratificante para personas religiosas. A pesar del claro descrédito que en la opus se da hacia otros sacerdotes y órdenes religiosas. Recuerdo claramente como me desaconsejaban el confesarme con sacerdotes del clero secular y órdenes religiosas varias.

"No van a entender las vivencias de una persona claramente comprometida con Cristo y la Iglesia" me decía el director de mi centro durante la charla semanal, "esos curas no son soldados de Cristo, más bien la retaguardia herida de su ejército, y por tanto no pueden ayudar a un Paladín", y yo, con mi mente adolescente, me sentía como el Capitán Trueno y el director "el Jabato" y creo que alguno de mis compañeros de pitaje era "Crispín" jejejejeje.


Pues que no, no, no y NO. La fe se puede vivir de mil maneras y las personas buenas que te ayudan también están en la "retaguardia"; y esos sí que entienden a la gente que sufre y lo pasa mal.

Recuerdo que cuando tenía 18 años, en plena crisis de identidad religiosa y personal, un amigo de la pandilla con la que empecé a salir me comentó que se iba a apuntar a un grupo de preparación al sacramento de la Confirmación en una parroquia de mi ciudad (por cierto, meses después, tras muchas charlas y alguna que otra caña resulta que era un ex agregado) y al poco, allí estábamos 5 o 6 amiguetes de la pandilla.


Durante dos años íbamos una vez por semana a unas charlas con animadores un poquito mayores que nosotros. Algunos de nosotros celebrábamos la eucaristía juntos o participando en un coro, acudíamos a convivencias en la semana Santa... Pero poquita cosa, sin agobios, sin obligaciones, haciendo lo que te pedía el corazón o la conciencia en ese momento.

Esta experiencia me sorprendió gratamente, y una de las cosas que más me agradó es que había chicas de mi edad la mayoría y normalitas, es decir, que yo sepa, ninguna de la opus. y encima, ¡se podía hablar con ellas sin caer en pecado mortal!, incluso con algunas te reías y aprendías. Con una de ellas trabé una especial amistad y hoy en día después de muchos años de novios y de aguantarme mucho, mucho, mucho, es mi mujer y vaya si me ayudó a salir del atolladero mental en el que estaba.


A los dos años nos confirmamos en una bonita ceremonia. La cosa no quedó allí, unos pocos seguimos formando parte de grupos de confirmación y algunos nos dedicamos a animar nuevos grupos de preparación a la Confirmación, formando a chavales en lo básico, con mucho diálogo y sin imponer nada, sin amenazas de Purgatorio e infierno, fomentando la amistad sana, la sinceridad, algún que otro valor, en fin, enseñándoles a ser personas.

En mi caso los grupos parroquiales los llevaban los Hermanos de La Salle (clero regular: formación) aunque los locales y los medios pertenecían a la parroquia (clero secular).

¿En que ayudó todo esto a un ex-nume jovencito? Intentaré sintetizar:

Un buen Cristiano, una buena persona o un santo (eso quería ser yo) lo puede llegar a ser perfectamente con los carmelitas descalzos, los dominicos, los jesuitas o como socio del Real Madrid o del clus de golf don Perillón.¡LA OPUS NO TIENE LA EXCLUSIVIDAD EN ESO! ni mucho menos.

Aunque parezca de perogrullo me costó entenderlo sudor y lágrimas, y muchos años el llegar a vivirlo, aunque lo de ser santo no creo que lo logre nunca. Pero, oye, yo no quiero convertirme en una figurilla de cera a la que vengan a rezar cuatro viejecitas beatas, bastantes santos tiene la Iglesia.

Para ser feliz en esta vida con ser persona basta y sobra. Ahora, el que se quiera asegurar un chalet en la otra vida... Observando como están las hipotecas para un pisito de 50 m por Madrid, habría que ser multi mega millonario para comprar ese chalet y ¿quién tiene ese dinero que le permita comprarlo y que le dure toda la eternidad?

Dios me libre, yo.., como de que no. Bastante me cuesta dar la mitad de lo que gano para pagarme un pisito en este "valle de lágrimas" y así hasta que me jubile. Por tener no tengo ni pa un acosado... (¡qué suerte la tuya Satur...! - Despedida. Retablo de curiosidades. Satur) .
¡Y que narices| en este valle de lágrimas también se pueden echar muchas risas y encontrarte a gente, a personas de verdad que en una crisis religiosa fuerte te ayuden y te digan mientras sonríen: "serpa TPA" (=tira palante). Quiero dedicar estas líneas al socio fundador del club del TPA el h. Salvador A., gran persona y excelente amigo, sabio y humilde. Y, cosas de la vida, cuando yo no quería ver a la opus ni en pintura, el me recitaba de memoria uno o dos puntos de Camino (más no los hubiera soportado), con una sonrisa cómplice, como diciéndome: "serpa, no lo tires todo por la borda, algún punto de ese libro valdrá pa algo. Esas lecciones magistrales no las recibí en la opus y personas como esas, yo, como que no las encontré.

Esos años en la parroquia me hicieron ver a Dios como un ser bondadoso y comprensivo y me olvidé definitivamente del dios justiciero del Antiguo Testamento, aquel que como te pases de la raya te tira un trueno desde lo más alto, y, si no, que se lo digan al santo Job.

Ese es Dios, creo yo modestamente, El que te ama, no el que te reserva una parcelita en el Infierno (ahí no pagas hipoteca, de gratis, que chollo). El que te ha creado porque te quiere y no te va a dejar tirado como a la basura; aunque uno no sea tan bueno como El, ni muchas veces tan siquiera como esas buenas personas que hay por estos mundos . Pero oye, -creo que a estas alturas ya nadie me estará leyedo por lo que sigo con mis elucubraciones de teología elemental-, muy cabroncete hay que ser en esta vida para que te caiga un rayo desde lo alto. Mucho, mucho, mucho, pero que muy malo como Dar Wather. Podría seguir, pero ya esta bien.

Un abrazo para tod@s y a seguir con esta página en la que se respira libertad y respeto a todas las opciones. Ole por vosotros Orejas.

Serpa










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