Sobre el perdón.- Cooper
Fecha Wednesday, 13 July 2005
Tema 040. Después de marcharse


Después de varios días sin correspondencia, va y me encuentro con una carta de Marco que despierta mis  neuronas. Perdón, habla de perdón y me pregunto que tal ando yo de eso.

 

Pues mira yo al OD como tal lo tengo perdonado, queda lejos, fue una aventura donde me puse a jugar con expertos que tenían todas las cartas marcadas, pero aprendí, me fortalecí y la cosa acabó bien para mí. Paso página y perdono. Lo comido por lo servido.

 

Sin embargo, creo que  eso no puede quedar así. En el proceso me enteré de cosas que están mal, vi. que se forzaban voluntades, vi coacción, vi explotación, vi tejemanejes bordeando la ética y la ley y todo eso envuelto en una capa de “hágase la voluntad de Dios”, según San Josemaría.

 

Me pregunto si frente a eso es suficiente decir, “que los demás hagan lo que he hecho yo y todo sea para bien”.

 

A mi  me subleva la situación y prefiero que la gente sepa donde va, que cartas se reparten dentro y como acaba la partida. Me sabe mal que se sigan desplumando pardillos que se acercan con el corazón en la mano.

 

Respecto a que hace mucho bien a muchas personas, no lo niego, pero eso también  se puede decir de la mafia y eso no le da inmunidad.

 

Se pueden perdonar los errores, pero no la contumacia en los mismos cuando la línea que se sigue con ellos siempre va en la misma dirección, el beneficio propio; eso si, disfrazado de la voluntad de Dios según San Josemaría.

 

Creo que perdono, pero creo que me quedaría mas a gusto si no hubiese ocultación.

 

Respecto a San Josemaría, pues me cuesta mucho, incluso con el titulo de Santo. (Aparte que hay quien tiene propensión a los títulos, vengan de donde vengan.) Le puedo perdonar los errores, pero no la contumacia, el decir que eran la voluntad de Dios, el imponer su voluntad a custodes, consiliarios , colegas y el sunsun corda. Siempre me he preguntado si nadie del círculo íntimo se daba cuenta de que el rollo de su familia iba contra todo lo conocido, de si el culto a su persona no provocaba tensiones, si  la teoría de la barca no les ofendía en su fuero intimo, si su propensión a colocarse en el lugar de Dios no les removía las entrañas. No se, yo recuerdo que el asunto de Torreciudad, su concepto, su inversión, el esfuerzo que se puso, me producía inquietud. En mi fuero más íntimo yo pensaba ¡Qué disparate! ¡Delirios de grandeza! ¿Entonces que pasaba más arriba? ¿No se enteraban? ¿No se atrevían? ¿Veían todo como la voluntad de Dios? Sus decisiones precipitadas, sus maniobras, sus gigantescos cabreos, sus cambios de rumbo….

 

¿Por cierto alguien hablaría de esto en su canonización? Porque si no, se hizo trampa y si se hizo trampa……..

 

Me cuesta pensar que es mi colega  y pienso que un sueño por muy grande que sea no vale mas que para los voluntarios que se unen a el. Una vez que para retenerlos te inventas la Barca, me parece una barbaridad.

 

Dos líneas para Grace. O quieres ayudar o no. Y si quieres ayudar, por fuerza dirás cosas atrevidas, ¿Con que derecho? Con el mismo de los que “ven” vocaciones en la Cosa y además porque te da la gana, no porque te lo digan.

 

A Ramírez  ni un comentario, va “sobrao”.

 

Con cariño

Cooper

 









Este artículo proviene de Opuslibros
http://www.opuslibros.org/nuevaweb

La dirección de esta noticia es:
http://www.opuslibros.org/nuevaweb/modules.php?name=News&file=article&sid=5323